Una excusa, una locura.

La vida de putita de Don Carlos siguio, pero en su normalidad. Siempre a la tarde, a la hora de la leche, salia a "jugar" y en realidad iba a darle mi cola a un veterano para que me coja, todo sin que mama sepa. Pero algo paso, y mi culito de trola no lo iba a desaprovechar.
Se organizo en la casa de Martin un torneo nocturno de Sega, donde toda la noche del domingo se iba a viciar y despues todos ibamos a la escuela, sin dormir obvio. Estaba mas que invitado, y si bien Toto no iba a estar, se que Martin o mis primos iban a querer usar mis nalgas. Pedi permiso, arme la mochila y mi culito enfilo a esa casa, pero con otra idea: poder coger con mi "novio" bajo el manto de la noche. Lo hable con Carlos previamente y acepto gustoso.
Ya en la casa, los pibes se ilusionaron de tener una trola esa noche. Manoseos y apoyadas, y comentarios guarangos hacia mi culo no faltaron, pero tuve que mentirles. Les dije que iba un rato enfrente, que cuando volvia me dejaba culear si ellos no decian nada. Aceptaron gustosos con sus penes erectos.
Pasadas las 00, fui a lo de mi novio. Se alegro de verme y me dijo: "Anda a cambiarte, en la pieza te deje algo". Sobre la cama me dejo el atuendo que iba a usar con el. Esa noche podia ser la mas trola del barrio, no habia tiempo para pensar, sino me iba a acorbardar, era una locura lo que hacia. Y lo que hice.
Camisita blanca, cortita, con cuello azul con detalles en blanco. Una "pollera" a tablas en el mismo azul, que dejaba mas de 3/4 de mi culo al aire. Portaligas negro, medias blancas y una tanga haciendo juego, tambien blanca, con un corazon brillante en la parte de atras, que quedaba justo cuando mi raya terminaba de comer tela. Clips de pelo que tenian moñitos. Era muy sexy todo, me sentia muy puta.
Volvi al living, mi macho sentado en pelotas en el sillon me esperaba. Si pija estaba semi parada. "Mejor de lo que me imagine, putita" me dijo. Ahi nomas me agache y a comer pito. "Hoy te preño toda, hoy te llevas a mi hijo adentro" me dijo ni bien engulli su pene. Ese primer pete nocturno, y vestida tan trola, me hizo sentir en las nubes, era feliz mamando al viejo. Me atragante, lagrimas brotaban, arcadas se escuchaban. Su mano marcaba el ritmo. Estaba desesperada, su pija estaba mojada mal. Le chupe las bolas con unas ganas, bolas bien llenas de leche, las bolas de mi macho.
Me agarro del pelo, "vamos a la pieza" dijo recuperandose. Entramos y solita me puse en 4, me corrio la tanga y me comio el ogete. Mis ojos se ponian blancos y gemia bien fuerte. Mi culo dilato enseguida, y el se acosto, con su falo mirando al cielo, en clara referencia en donde debia sentarme. Me acomode dandole la vista de mi culo y por un momento, pude ver desde su ventana, como se iluminaba la casa de Martin. Seguro el torneo estaba a full, y se cagaban de risa. Ahi tenia que estar yo, jodiendo con pibes de mi edad, pero no, estaba vestido de putita, sentado en una verga, y mintiendole a todo el mundo para poder ser asi de trola. Pero mi culo era de puta, y contra eso no se puede hacer nada. Mas fuerte cabalgue al viejo. Apretujaba mi cola, la abria violentamente y la cerraba igual para ver mejor como su poronga se perdia en mi cola de nena. La cama chillaba, los gemidos se mezclaban y el choque de mis carnes con su pito sonaba bien fuerte. Un grito ahogado, me agarro bien firme de la cadera, enterrandome en su pija, que casi me entran hasta sus huevos. El palpitar de esa poronga fue brutal. Sentia cada espasmo, y cada chorro de leche adentro de mi culito, que recibia mientras, en un acto reflejo de putita, me acariciaba mi pancita. Me quede sentada hasta que la pija se salio sola de mi ano. Y me derrumbe a un lado de la cama, podia descansar un rato, no era como en las tardes que debia irme enseguida, hoy no.
No se cuanto me dormi. Pero algo duro en mi cola me saco del sueño. Entre dormido no sabia si todo era real o fantasia. Pero un glande baboso se refregaba en mi cara, y ahi entendi. El viejo me metia una botella de vino en el orto, mientras me frotaba la verga flacida y mojada en la cara. Otra vez me senti reina de las trolas y disfrute. Disfrute esa botella como me sodomizaba y disfrute de esa verga que tenia que poner dura. Ya se iba poniendo dura, cuando Carlos se corrio y puso la botella en el suelo. "Sentate y comeme la pija" fue su orden. Y con una maestria que hasta a mi me sorprendio, me levante, me agarre de su cadera y sin manos me ensarte esa botella en el agujero, y de ahi lo empeze a petear. Era nuevo para mi tener los dos agujeros llenos, pero mi boca y mi cola se movian solas. En mis labios sentia el buen sabor de una hermosa pija, y en mis nalgas, el vidrio tomo temperatura, la leche de mi interior lo lubrico, y asi era mas facil disfrutar de algo duro, de imaginar otra poronga. Mi macho me re cago a vergazos la cara, pero no golpecitos, me pegaba bien duro. "Te gusta putita eh"... "Siii me encanta"...
Mientras su verga sonaba contra mi carita, yo atinaba a abrir la boca, intentando atrapar ese pedazo de carne y mi culo ya hacia tope en la botella, pero lo seguia moviendo y forzando a mas.
"Plaff...plaff" sonaban los pijazos, con una verga ya tan dura como la botella. Me levanto gentilmente, me acomodo en el borde de la cama. Separe las piernas, quebre cintura, sacando bien el orto. Podia sentirlo tocarse, admirando la imagen. Quiza pensando, en que momento este vecinito, que heredo la cola de su mama, grande, blanca y lampiña, termino aca, vestido de colegiala, entangado y en 4, esperando pija. Pero no era momento para eso, era momento de romper un culo. Y asi lo hizo.
Me embistio, que apenas pude aguantar. Pero mis caderas ya estaban aprendiendo a lidiar con machos. Comenzo una violenta lucha, el empujaba con la verga, y yo con el culo, ambos en direcciones opuestas. Pero el macho gano, me sometio. Termine hundido en el colchon, con un animal irreconocible que me reventaba con un "mete saca" sin piedad alguna. Me mordia, pegaba, tiraba del pelo, todo sin sacar la verga. No se si los vergazos me afectaban, pero yo sentia su amor, y mas me entregaba. Mas le pedia, y el mas me daba.
No se que tiempo paso, ya no sentia nada, mi tanga estaba en algun lugar entre mi cadera y las rodillas. Un lado del portaligas se solto. La pollera la tenia en el ombligo. Mi cola que ingreso a esa casa bien cerrada, termino siendo una concha de luchona, super abierta y super mojada. Intentaba apretar el culo y no podia, mi hombre hizo un buen trabajo.
-"Ahi te va, trolita, toma tu bebito"
Y otra descarga rebalso mi culo. El sueño me cayo otra vez. Un sonido me levanto de golpe, era el timbre, ya se estaba haciendo de dia. Los dos saltamos de la cama asustados. Miramos por la ventana, y era Toto, con mi mochila en su mano.
-"Que hace este pibe aca?" Dijo confundido mi macho.
-"Trajo mi mochila, tengo que ir a la escuela, seguro la reconocio y los chicos le dijeron que estaba aca"....
-"Ahhh ya veo... Espera aca".
Don Carlos se pone un short y atiende.
-"Como estas pibe, justo iba a tomar la leche, veni pasa"
Toto apenas pudo decir "Hola". Entro timidamente.
-"Seguime, aca esta tu amigo" y ambos entraron a la pieza, la cara de mi ex al verme asi fue epica. Y yo parecia una trola reventada. No podia creerlo.
-"Jamas te agradeci, por esta hembra" dijo dandome una nalgada. "Sin vos no la hubiera conocido, ahora es mi puta, te lo debo a vos" decia con orgullo.
-" Asi que ahora le doy la leche, y listo pueden irse"...
-"Bueno, espero afuera"... Dijo Toto.
-"No no, vos mira..." Pelo la pija, se sento en la cama y yo me fui gateando a chuparle la pija, quedando en 4 patas apuntando mi culo roto a mi ex. Comenze a gemir mientras mamaba.
-"Viste lo que es pibe! Toda la noche asi estuvo"
-" Solta esa mochila, ponete comodo y dale pija, yo te dejo, en agradecimiento".
Y asi iba a terminar mi noche, con mi novio y mi ex juntos para darme pito. Toto ni lerdo ni perezoso me mando la pija en el culo de una, fiel a su estilo. Cada embestida hacia que me trague la pija de mi macho. Armamos una perfecta armonia. Mi culo/concha gozaba la pija de mi ex, mientras yo buscaba la mema.
-"Dale bebe, que se te hace tarde para la escuelita". Me dijo Carlos
-"Ujuummm" pude decir con su poronga en la boca.
Toto me daba mas fuerte, y los gemidos de los machos se escuchaban mas. Empece a cabecear violentamente y Carlos me agarro de los pelos y me dio mi desayuno. Toto al ver la escena acelero la cogida y en el momento que yo tomaba la leche, el saco el pito de mi culo y acabo afuera, bañandome las nalgas y la espalda con su semen.
-"Listo bebe, ya tomaste la leche, vos llevatela a la escuela y cuidala". Le dijo a Toto. Bien llena, me vesti como pude y fuimos al cole. Con la cola bien abierta y sin dormir, algo interesante iba a pasar alla tmb, pero eso lo dejamos para otro relato.
Besos en la puntita.

1 comentario - Una excusa, una locura.

Holanenas2 +1
Me gusta la historia segui asi