Tengo que ir a ver a mi tía

Despues de aquel grandioso día, me daba miedo ir a su casa. Pero quería más, tocar más, oler más. Tenía que ver cómo hacía, que día estaba sola.
Un día la vi en el mercado, la fui a saludar, todo muy normal, pero notaba una mirada diferente.
La acompañe un rato, pero todo normal. Después seguía con la intriga, me animé a ir a la casa de ella.
Averigüé que día estaba sola, así que fui. Era de mañana, andaba blusa de dormir, con short flojo, era magnífica. Se me quedó viendo y solo sonrió, la saludé normal y pregunte por los primos. No estaban, eso era lo que importaba.
A bueno, y tratando de crear conversación me le acerqué, y seguí creando conversación. Como vi que estaba acomodando cosas empecé a ayudarla cuando vi que se agachaba se le podían ver esos pechitos, quedé helado, que rico, seguía ayudando y seguía viendo la gloria, fui en el momento oportuno. No sabía que hacer, estaba ya exitado, en lo que estaba moviendo algo se vio frente al espejo y notó que eso era lo que yo estaba viendo. Entonces .e volvió a ver diciendo que si había visto. Yo haciéndome el loco pero no podía disimular el paquete. Pero seguimos normal solo que aveces ponía su mano sobre el pecho para que no se le salieran. En eso que paramos un toque dijo.
Le ha ido bien, primero me toca haciendo un masaje y ahora me estas viendo las tetas.
Quede más helado que nunca, exitado, y con el corazón a mil. Yo solo dije, ud está demasiado rica.
Si claro, nada que ver.
.... Sí, solo eso me salió.
Si claro, solo respondió
Se metio al baño y no supe que hacer más, me quedé pensando fui a la puerta y me quedé pensando más, hice a abrir, no tenía seguro, abrí lentamente. Estaba desnuda, buenas nalgas tiene. No pude más, me quite todo la ropa y entré.
Por dios, pero que hace. Pero estaba viendo hacia abajo.
Yo todo excitado solo me le acerque, la tomé de la cintura y la puse frente y la bese, me quitó.
No espere.
Los dos desnudos, frente a frente, seguí adelante, le agarre fuertemente las nalgas y empecé a besarla, besarle en cuello, decirle cosas al oído, que rica que eres, estoy a full.
Por un momento nos quedamos viendo a los ojos, y ya no hubo más espera, besos, toques, dedos, chupar, la llevé a la cama y la puse a mamar, verme desde ese ángulo ufff.
Que culo cuando estaba de cuatro, no sé cómo pero aguanté como los hombres, buen rato, para allá, para acá, gritos, gemidos, escucharla decir, que rico, tapándose la boca para tratar de no gritar, terminé encima de ella, viéndonos a los ojos, besándonos, y aún así. Queríamos seguir, era algo demasiado excitante.
Después de ese seguí yendo, tratando de ser sutil, y ese día era el mejor, no había nadie, podía ir entrar, y ya ella sabía. Hasta el día de hoy sigo yendo. Aunque me dice que ya no vaya más. Pero no puedo evitarlo. Fotos próximamente.

1 comentario - Tengo que ir a ver a mi tía