LINK A LA PRIMERA PARTE: http://m.poringa.net/posts/relatos/4855729/Cuckold-consentido-Parte-1.html
Minutos más, minutos menos habían pasado cuando Leandro se despertó sentado en el inodoro tras un frustrado intento de paja debido a la borrachera que llevaba.
Confundía nuevamente realidad con sueños. Malos sueños por cierto. Horribles esos sueños en donde se garchan a tu esposa. Tan vívido había sido que estaba con la pija dura y con cierta culpa por exitarse con eso, así que abortó cualquier intento de autosatisfacción porque por ahí si estaba con suerte podría lograr concretar algo con su esposa, situación que hasta hace un rato atrás hubiese sido imposible si ni siquiera había podido manejar de regreso a casa.
Pero como habían vuelto si Noe también estaba muy borracha y no podría haber conducido?- se preguntaba Leandro.
Un flash atravesó su mente: Juan manejando, Noelia de acompañante y él tirado atrás.
Eso, seguramente eso había sido el disparador, el resto diurno que lo hizo tener aquella pesadilla.
Si claro! También recordó que estaban por irse de la fiesta y entre los 3 se reían mirando la abolladura ya arreglada que ella había ocasionado por chocar con Juan. Y que fue él mismo quien le dijo a Juan que conduzca...
Todo eso como disparador del sueño - pensaba Leandro - seguramente... pero que perturbador.
Muy íntimamente, muy para sus adentros Leandro se reconoció ligeramente exitado al ver a su mujer bailar con su ex y eso habría sido la chispa que detonó en su cabeza tan macabra pesadilla.
Un poco más aliviado, con las palpitaciones en descenso decidió retornar a su habitación.
Ufff cuanto hace que no bebía tanto, mañana voy a tener un día fatal - se reprochaba.
Al llegar a su cuarto empujó suavemente la puerta entreabierta, algunos rayos de luz del amanecer se filtraban por las hendijas de la persiana. En la cama no había nadie, inmediatamente escuchó a Noelia teniendo una arcada en el vestidor contiguo a la habitación.
Nooo tan borracha que le pifió al baño - pensó Leandro - voy a sacarla de ahí antes de que inunde todo de vómito.
Y la escena allí dentro era dantesca o mejor dicho caligulesca. Porque sí, claro que estaba Noelia. Y claro que estaba desnuda porque era su vestidor y habría ido allí a buscar ropa. Pero no. Estaba arrodillada frente al gran espejo, con el cabello recogido, sus dos manos masajeándose frenéticamente esas redondas tetas, su cara brillosa de saliva, sus ojos llorosos, su rimel corrido, su cabeza sostenida desde la nuca por las fuertes manos de Juan y su boca embestida hasta el fondo por la vigorosa pija de su ex novio que entraba y salía acariciada por los labios de ella. Mientras en el piso de parquet se había formado un pequeño charco debajo de su vagina que evidentemente estaba chorreando leche.
Noe embelesada por esa barra de carne no pareció notar la presencia de Leandro, pero Juan levemente giró su cabeza y haciendo contacto visual con el cornudo le dijo simplemente - Mirá.
Dos fuertes contracciones acompañados por la deglución de Noe y luego ya con la pija afuera de la boca un tercer y cuarto cañonazo dirigido hacia las tetas con sendos "plof" "plof" a medida que impactaron en ellos decretaron el final de este capítulo.
Viste? Estamos en la fiesta de la leche - concluyó Juan.
CONTINUARÁ
Minutos más, minutos menos habían pasado cuando Leandro se despertó sentado en el inodoro tras un frustrado intento de paja debido a la borrachera que llevaba.
Confundía nuevamente realidad con sueños. Malos sueños por cierto. Horribles esos sueños en donde se garchan a tu esposa. Tan vívido había sido que estaba con la pija dura y con cierta culpa por exitarse con eso, así que abortó cualquier intento de autosatisfacción porque por ahí si estaba con suerte podría lograr concretar algo con su esposa, situación que hasta hace un rato atrás hubiese sido imposible si ni siquiera había podido manejar de regreso a casa.
Pero como habían vuelto si Noe también estaba muy borracha y no podría haber conducido?- se preguntaba Leandro.
Un flash atravesó su mente: Juan manejando, Noelia de acompañante y él tirado atrás.
Eso, seguramente eso había sido el disparador, el resto diurno que lo hizo tener aquella pesadilla.
Si claro! También recordó que estaban por irse de la fiesta y entre los 3 se reían mirando la abolladura ya arreglada que ella había ocasionado por chocar con Juan. Y que fue él mismo quien le dijo a Juan que conduzca...
Todo eso como disparador del sueño - pensaba Leandro - seguramente... pero que perturbador.
Muy íntimamente, muy para sus adentros Leandro se reconoció ligeramente exitado al ver a su mujer bailar con su ex y eso habría sido la chispa que detonó en su cabeza tan macabra pesadilla.
Un poco más aliviado, con las palpitaciones en descenso decidió retornar a su habitación.
Ufff cuanto hace que no bebía tanto, mañana voy a tener un día fatal - se reprochaba.
Al llegar a su cuarto empujó suavemente la puerta entreabierta, algunos rayos de luz del amanecer se filtraban por las hendijas de la persiana. En la cama no había nadie, inmediatamente escuchó a Noelia teniendo una arcada en el vestidor contiguo a la habitación.
Nooo tan borracha que le pifió al baño - pensó Leandro - voy a sacarla de ahí antes de que inunde todo de vómito.
Y la escena allí dentro era dantesca o mejor dicho caligulesca. Porque sí, claro que estaba Noelia. Y claro que estaba desnuda porque era su vestidor y habría ido allí a buscar ropa. Pero no. Estaba arrodillada frente al gran espejo, con el cabello recogido, sus dos manos masajeándose frenéticamente esas redondas tetas, su cara brillosa de saliva, sus ojos llorosos, su rimel corrido, su cabeza sostenida desde la nuca por las fuertes manos de Juan y su boca embestida hasta el fondo por la vigorosa pija de su ex novio que entraba y salía acariciada por los labios de ella. Mientras en el piso de parquet se había formado un pequeño charco debajo de su vagina que evidentemente estaba chorreando leche.
Noe embelesada por esa barra de carne no pareció notar la presencia de Leandro, pero Juan levemente giró su cabeza y haciendo contacto visual con el cornudo le dijo simplemente - Mirá.
Dos fuertes contracciones acompañados por la deglución de Noe y luego ya con la pija afuera de la boca un tercer y cuarto cañonazo dirigido hacia las tetas con sendos "plof" "plof" a medida que impactaron en ellos decretaron el final de este capítulo.
Viste? Estamos en la fiesta de la leche - concluyó Juan.
CONTINUARÁ
5 comentarios - Cuckold consentido? Parte 2