Capítulo 13 Mi prima, Mara 3

Bueno, acá dejo el capítulo 13.

Voy a pensar si subo el 14...

Aún no está terminado, pero ya que terminé la carrera, lo voy a intentar terminar rápido.

Acuérdense que los que subí, están sujetos a algunas modificaciones para el libro final.

Saludos y comenten más, che...




CAPÍTULO XIII


Había pasado tiempo.
Me sorprendí al verla. Cómo no podía hacer otra cosa, me acerqué.
Me saludó con la mejor, pero me di cuenta de que algo insegura de hacerlo estaba.
Tenía el pelo más corto, tipo carré.
YO: ¡Hola! ¿Qué haces?
Qué pregunta boluda. ¿Qué va a hacer en un supermercado?
Estaba colorada, como nerviosa.
FER: Acá, comprando… jeje
YO: Claro, que boludo…
Fue una sensación extraña… Yo estaba enojado ¿cómo no? Pero a pesar de que ella fue un gran artífice de todo, no fue la única responsable.
Al menos no sentía bronca. Porque por más que ella haya contribuido (y bastante), la decisión de hacerlo fue nuestra.
Claro que cuando la veía, recordaba todo de nuevo.
Esa era la cagada.
YO: ¿Cómo andas?
FER: Bien, bien ¿y vos?.- Me preguntó con cara de “sé lo que te pasó después de cortar con Mara”.
YO: Bien, mejor… ¿Y Martín?
Comenzamos a caminar, yo tenía muchas cosas por comprar y ella me seguía.
FER: Bien, en el auto… Vago jaja
YO: Jaja
FER: Na, pobre, se siente mal…
A mi no se me ocurrían muchas cosas para decirle, pero notaba su buena onda.
FER: Yo te iba a escribir después de lo que te paso… Pero no sabía si querías hablar conmigo…
YO: ¿Por? Sé que Martín me escribió varias veces, disculpame con él, pero no podía contestarle…
FER: Y… Ya sabes… Sí, olvidate, él entendió eso.- Me miraba como nerviosa
YO: Na… Todo bien. Somos grandes y responsables de lo que hacemos.
Me miró con sorpresa. No se esperaba esa reacción.
FER: Sí, pero me siento responsable por lo que pasó…
YO: Pasó y punto… No hay con qué darle…
Iba cargando cosas al chango.
FER: Quizá si no…- La interrumpí.
YO: En ese momento, todos queríamos hacer lo mismo… Que hubo cosas que se fueron a la mierda, es cierto… Pero la realidad es que pasó porque quisimos…
FER: Bueno porque me quedé mal, aunque no lo creas. Seéque soy bastante especial en ciertos puntos, pero me dolió lo que pasó…
Me reí.
YO: ¿Qué puntos?
FER: En lo que refiere al sexo, no tengo límites… Y lo que pasó con ustedes…- Se ruborizó.
YO: No te preocupes...
FER: Igual le pregunté a Mara por vos… Para ver cómo andabas de salud, eh…- Hizo levantando una ceja.
YO: Menos mal, porque no te perdí el aprecio… aún…
FER: Ay, sos un divino… Me haces sentir peor.- Exclamó con buena onda.
Me reí. Mentiría si no la creí responsable, porque en parte, lo era. Pero tampoco debía usarla como chivo expiatorio a ella sola.
FER: ¿Y qué onda con Mar?
YO: Y… Ya te va a contar ella… No quisiera hablarte sin que ella te cuente primero, viste…
FER: No, lógico… Además no me concierne jeje
YO: No, pero no lo digo por eso… Sino que prefiero que sepas las cosas por ella…
FER: Sé que me va a matar si te lo digo, pero ella está destruída por lo que pasó. No sabes lo que te extraña…
Pensé que seguro no estaba al tanto de que la había visto la noche anterior.
Miré para el costado.
FER: No me dio letra ni nada, eh… Pero conociéndolos a los dos, te lo tengo que decir, perdón…
YO: No, está bien… Lo único que te voy a decir es que vengo hablando con ella…
Se quedó.
FER: ¿Ah sí?
YO: Sí…
Le sorprendió.
FER: No sé si sabías pero Gabi y Brai se separaron…
Me tuve que hacer el boludo, sabía eso.
YO: Ah, mirá…
FER: Sí, pobre… Yo sabía igual de antes…
YO: ¿Ah sí?
FER: Sí, es una larga historia, pero ese finde, fue el último que lo vimos… Cada tanto me escribe jeje
YO: ¿Posta?
FER: Si, me hace cagar de risa… Dice que por más que no esté más con Gabi, si hay joda se prende igual
YO: Jaja qué chabón…
FER: Creo que ella tampoco tendría problema jaja
Que cosa rara…
Me resultaba increíble lo que decía.
YO: Vos decís…
FER: Naaa… Y bueno, pregunta por todos…
Me preguntaba si Martín sabía que hablaba. Pero de seguro sí. No sería nada extraño con estos dos.
YO: ¿De nosotros?
FER: See otro día te cuento…
YO: ¿Y ustedes?
FER: ¿Qué?
YO: ¿Siguen haciendo cosas locas? jajaja
Se empezó a reír.
Medio chango cargado tenía ya.
FER: No, no, con las chicas no jaja
Qué mina…
FER: Pero bueno, ya nos conoces a Martín y a mí… Nunca nos quedamos en el molde.- Y me guiñó el ojo.
Uff…
¿Por qué no me sorprendía? Je.
YO: ¿Ah no?
FER: No, venimos a full jaja mejor ni te digo…
YO: Jaja
FER: Si, hasta…- Se detuvo
YO: ¿Qué? jaja
FER: No, mejor dejalo ahí…- Expresó toda colorada.
La miré como diciendo “¿qué onda?”.
YO: Te pusiste roja… Debe ser heavy…
FER: Jaja callate…
YO: No me imagino que será…
FER: Digamos que… Ay, no… Soy una pajera….- Se agarraba la cabeza.
YO: Ya está, largalo jaja
Íbamos hacia las cajas.
FER: Me picó un bichito…- Exclamó violeta. Yo no entendía nada.
¿Qué me quería decir?
La miraba intrigado.
FER: Con chicas…- Dijo totalmente avergonzada.
¿Cómo?
Mierda…
YO: Me jodes…
FER: No… Posta. No con mi amigas, eh… No.
Quedé incrédulo. Totalmente.
YO: ¿Te pinto la bi?
FER: Sí jaja… A ver, no miro mujeres por la calle… Pero me gusta estar con chicas últimamente...
Si dijera que no se me paró la verga al escucharla, sería mentira.
Por supuesto que quería alejarme de todo eso. Dejarlo atrás.
Pero esa confesión me hizo flashear. En verdad no paraba nunca esa mujer.
YO: No te puedo creer jaja.- Le dije asombrado.
FER: No sé me agarró, pero ese finde que, bueno… Vino una chica que no conoces… Se quedó con nosotros unos días… Me la pasé chupandole la concha.- Me dijo bajito.
Ufff.
Me hizo abrir los ojos como dos fititos.
Casi me atraganto con mi saliva.
¡Qué piba! No cambia más, pensé.
FER: ¡Perdón, me voy al carajo! jaja
YO: No, no jaja… Está bien…- No podía creer lo que me había dicho.
FER: Es una etapa, ya se me va a pasar… La pi... no se compara con nada.-
Posta que me hizo reir.
Se iba a la mierda.
Creo que me lo decía porque me tenía confianza. De lo contrario, no lo saca ni a palos.
YO: Jajajaja te pasas…
FER: Jaja ¡desastre! Soy una desubicada
YO: Jaja naa… Todo bien…
Como Fernanda tenía pocas cosas, podía ir a la caja de autoservicio.
YO: Andá tranqui, tenes pocos productos, no te vas a comer toda esta cola...
FER: Jaja bueno dale, si no me va a matar Martín… Tenes una linda fila, eh jaja
YO: Seee…
FER: Bueno, me dio gusto verte… ¡Portate bien!.- Me dijo haciendo ojitos.
Lo tomé como algo referido a Mara. Que no la haga sufrir o algo así.
Lo dijo con onda.
YO: Jaja ¡saludos a Martín!
FER: Dale, le mando… ¡Cuidate, nene!
Se dio para irse.
Pero enseguida se volteó.
FER: Perdón, posta…
La miré extrañado.
FER: No tendría que haber insistido tanto… Yo creí que… Si los pinchaba un poco iban a ser como nosotros… Pero me equivoqué…
Me quedé mirándola.
YO: Ya pasó…
FER: No, después me di cuenta de la macana… No son como nosotros…- Expresó haciendo una mueca.
No quería alargar más la conversación.
YO: Olvidate…
Sonrió y se fue caminando.
Más allá de que pareció sincero lo que dijo, creo que era un poco tarde ya ¿no?
En fin… Mejor que ni pensara…
No la miré de pajero ni nada por el estilo, pero se notaba que estaba haciendo mucho ejercicio.
Tenía las gambas que le explotaban.
Llevaba una pollerita de jean blanca que dejaba ver como se le movía cada cachete de la cola.
“Algunas personas nunca cambian” pensé.
No me disgustó encontrarla. Si tenía algo bueno Fernanda, era que siempre era honesta.
Podría gustarte o no su forma de ser, pero no te vendía algo que no era.
Lo que sí me llamaba poderosamente la atención, era cómo podían llevar esa vida con tanta normalidad. Por un momento creí entenderlos, pero el tiempo me demostró que no era así.
No conocía nada de ese mundo…
Bueno, ahora podía decir que sí…

Una vez que conseguí todo lo que necesitaba, volví para mi casa.
Justo en la puerta, me lo encontré a mi hermano Mike, que venía llegando.
¡Qué oportuno!
Tenía varias cosas para bajar, je. No me venía nada mal una mano extra.
MIK: ¡So’ vo’ perro!.- Me dijo haciéndose el plaga y en alusión a que vivía solo.
Me cagué de risa.
YO: Jaja y ya era tiempo…
MIK: Ahora sí no te tengo que fumar paseando en calzones por la casa…
YO: Jajaja
MIK: ¡Hijo de puta! No podía invitar a nadie por miedo a que pasaras así.- Se rió.
YO: ¿Posta? jaja
MIK: Desde esa última vez, sí.
Una vez había llevado unos compañeros de colegio a casa, para hacer un trabajo.
Eran unos pibes y unas chicas.
Yo acostumbraba a salir del baño en bóxer. Si no se horrorizaba mi hermana, cuando vivía ahí ¿quién otro lo iba a hacer? Y ese día no me acordé de que había gente.
Al pasar por la puerta de su habitación, todos sus compañeros me vieron pasar en calzones.
Pobre, le hice pasar una vergüenza…
YO: ¿Y qué andas haciendo por acá? ¿Me extrañas?
MIK: Sí, pero no vengo por eso jajaja
Pendejo…
Lo leí en sus ojos.
YO: ¿Queres el auto, no? jaja
MIK: ¿Lo vas a usar?
YO: No, llevalo…
MIK: ¿Sí?
YO: See… ¿Pero cómo se llama la chica? ¿o el chico? jaja
Se cagó de risa.
MIK: Denise…
YO: No me manches los asientos…
MIK: Jaja gracias, dogo…
YO: ¿Dogo? ¿Así hablan ahora, Rey?.- Le dije en tono irónico
Nos cagamos de risa un rato.
Yo no pensaba salir. Mucho menos con el auto. Y como ya había hecho una compra grande, no lo iba a necesitar para más nada.
Además, Michael lo requería por una buena razón. Y él, siempre que podía, me lo lavaba.
No podía decirle que no.
Se quedó en casa hasta que terminó un partido de la Bundesliga.
Sí. Competencia más aburrida que esa, no hay…
Pero dado su fanatismo por Marco Reus, me lo tuve que fumar, je.
Agarré el celu para escribirle a Mara. Ella iba a venir hoy y no le había mandado mensajes en toda la tarde.
“Hola 🙂” le puse.
A los pocos minutos me respondió.
MAR: Hola 🤗
MAR: Qué hacías?
YO: Nada! Recién se fue Mike
YO: Me afanó el auto jaja
MAR: Ah sí? Jeje
YO: Sí, justo volvía de abastecerme de comida y él llegaba…
YO: Ahora sí te puedo recibir decentemente jaja
MAR: Jaja bueno!
MAR: Como no me escribiste más, pensé que te habías olvidado
YO: No, obvio que no… Cómo me voy a olvidar?
MAR: Bueno ☺️
MAR: A qué hora voy?
YO: A la hora que quieras 😁
YO: Te iría a buscar pero estoy a pata jaja
MAR: No jaja. Si tengo nuestro auto 😆
Aún le decía “nuestro” a pesar de que había renunciado a la mitad que me correspondía.
YO: Bueno, dale!
YO: Te espero mientras acomodo un poco 😊
MAR: Ok
MAR: Me cambio y voy!
YO: Dale!!
Solté el teléfono y me puse a acomodar un poco.
Esta vez, sí tenía cosas para ofrecer y/o cocinarle.
Otra vez iba a venir a casa…
A decir verdad, quería verla. Y después de lo ocurrido por la mañana, me había quedado con ganas de más…
No era normal, al menos en el último tiempo, tener ese apetito por ella. De esa manera, debía aprovechar la ocasión y no dejarla pasar.
Todo a contrarreloj hice.
Ordené y me bañé.
Y justo cuando salía del baño, me llamó Mara por teléfono.
Casi en bolas, la atendí.
YO: ¡Hola!
MAR: ¡Hola, gor! ¡Estoy a dos cuadras!
YO: ¡Dale, hermosa! Justo salía del baño
MAR: Ah por eso no contestabas jaja
YO: ¡Sí, ya te abro!
MAR: ¡Dale! Besitos
YO: ¡Dale!
Siempre pensé que por teléfono, yo no era demasiado expresivo.
Muchas veces me habían dicho lo cortante que sonaba, pero no era con mala intención. Simplemente, no me gustaba demasiado hablar por ese medio, je.
Agarré una remera y un short de fútbol, así nomás, para proceder a abrirle la puerta.
Después me cambiaría…
Enseguida el frente de la casa se iluminó por las luces del auto que subía a la vereda.
Abrí la puerta para recibirla.
Allí estaba otra vez, Mara.
Lucía el pelo lacio a un costado. Le quedaba muy lindo así.
Lo que me sorprendió un poco, fue que no se vino demasiado producida.
O sea, no lo necesitaba para verse fatal, pero siempre se arreglaba bastante y, más, cuando salíamos juntos.
Tenía una pollera de jean, negra, con una blusa abotonada blanca.
También, la abrigaba una camperita negra, ajustada y a la cintura. Aunque la llevaba abierta.
Bajó sonriendo, pero no como lo hizo esa mañana cuando desayunamos.
Decidí no darle demasiada importancia.
YO: ¡Hola!.- Le dije sonriendo
MAR: Hola… Te saqué del baño jaja
Yo aún tenía el pelo mojado.
Me dio un pico para saludarme.
No fue muy largo, es más, fue algo simple, pero me gustó mucho la forma en que puso los labios.
Como un simple beso era capaz de despertar al traicionero de abajo.
YO: Jaja ¡No, todo bien! Pasá…
Entramos.
Ya lucía todo un poco más presentable que el día anterior.
Tenía donde sentarse cómodamente sin contar con la presencia de ropa tirada, je.
YO: ¿Te sirvo algo?.- Le pregunté antes de irme a cambiar.
MAR: No, no. Todavía no…
Se sacó la campera.
La maniobra fue tal, que me dejó pasmado.
Con el movimiento hacia adelante que hizo, sus tetas resaltaron de tal manera, que parecía que se les iba a salir de la remera.
Uf…
Apenas si podían con esos dos globos los pobres botones de la blusa.
A través de la delgada tela de la prenda, se notaba el relieve del corpiño que llevaba debajo.
Me quedé mirándola.
Ella sonrió apenas.
Sentí unas ganas tremendas de volarle la ropa y comérselas.
Era como una erupción volcánica que me venía de golpe.
No sé por qué me excitaba tan rápido…
Para colmo, Mara me miraba con esa cara tímida que no me ayudaba demasiado.
Me hacía perder aún más los frenos inhibitorios.
Lo único que me salió fue irme sobre ella a comerle la boca.
“Ummm” se oyó cuando chocaron nuestros labios.
Fue involuntario e intempestivo.
Como si una fuerza gravitatoria me llevara hacia ella. Hacia su piel.
MAR: Amm…
La tomé del rostro, de su mejilla y fuertemente la besé en la boca.
Ella, ruborizada y con los ojos cerrados, se dejó.
Ni siquiera tuve tiempo de cambiarme. No pude contener esas ganas que cargaba de estar con ella.
Encima estaba deliciosa. El sabor de su boca, me elevó aún más.
De reflejo, subí la mano desde su cintura hasta sus pechos, los cuales agarré con toda la palma.
MAR: Haa…- Expresó suspirando en mi oído.
La besé en las mejillas, el cuello. Luego volví a su boca. No podía parar.
MAR: Gor… haaa…
YO: Estás hermosa… No puedo parar de besarte.- Le dije bastante alterado.
En ese punto, ya tenía mi verga completamente erecta y dura, apoyada contra su pancita.
Cada vez que ella se movía friccionando la ropa, me hacía suspirar.
“chuiik chuk” se escuchaba en el living de la casa.
La tomé de la cintura nuevamente y la hice sentar conmigo en los sillones.
Ya no me importaba la ropa, ni nada. Quería satisfacer ese deseo imparable de su cuerpo.
Le metí la mano por debajo de la pollera, acariciando toda su voluptuosa y firme cola.
Sentía una punzada en el miembro, que me pedía, imploraba, que lo sacara afuera.
Ella no estaba cebada. Al menos no como yo. Y parecía querer resistirse por momentos.
Pero no lo terminaba haciendo y suspiraba profundo. Incluso dentro de mi boca.
Llevé mi mano desde su cola, hasta la parte de adelante. Me fascinaba recorrer cada tramo de su piel.
Y cuando llegué a su pubis me detuvo.
MAR: Aaah… Pará, gor… aaa.-
Pero no dejaba de abrazarme y besarme.
No sé qué me ocurría, pero hacía muchísimo tiempo que no me sentía así.
De manera que tampoco podía hacer demasiado por relajarme.
Sus besos eran tan ricos, que mi excitación no paraba de subir.
Ella tenía una manera particular de mandar lengua en los besos. Te asesinaba.
Cada movimiento de su lengua, era como una fuerza neumática que me levantaba más y más.
De reflejo y calentura, saqué mi verga afuera del short.
Lucía rígida, venosa y cabezona.
YO: No aguanto más, Mara… Mirá como estoy…
Ella vio mi maniobra.
Se quedó.
YO: Está así por vos…-
Tenía unas ganas terribles de que se la metiera en la boca. Que la lamiera toda…
Ella tenía una mano en mi cara y me miraba.
YO: ¿La queres?.- Le volví a insistir.
Estaba recontra caliente.
MAR: Cómo estamos…- Se limitó a decir
Llevó su mano hacia ahí.
Cerré los ojos.
Me la agarró sutilmente por el tronco.
Volé…
A esta altura, el corazón me latía muy fuerte.
Me subió y bajó la piel un poco.
Uff…
Me hizo gozarlo. Mucho.
YO: Hermosa…
MAR: ¿Qué? haa…- Le comí el cuello.
YO: Está con ganas de vos, parece…- Le dije al oído. Claramente, tirándole otra indirecta para que me la chupara.
Al oírme, me mordió el cuello y me tiró contra el respaldo.
Cruzó su pierna sobre mí y se corrió un poco la tanga, con la pollera puesta.
La miré.
No era lo que le había pedido, pero no estaba mal, tampoco.
Cerró sus ojos y tomó mi verga por el tronco y se la empezó a enterrar.
No… Lo que fue eso.
Se la metió de una.
Me encantó sentirla tan apretada, devorandose mi miembro así.
MAR: Aaaaww…- Expresó con los ojos cerrados y frunciendo el ceño. No me pareció un grito de placer...
Apoyó sus brazos sobre mí y empezó a cabalgar.
YO: Ahhh… dios…
La agarré de la cola, por debajo de la pollera.
“Plaf plaf plaf” se oía.
Le dolía, efectivamente. Lo notaba por sus gestos.
Gemía con claros signos de malestar.
Pero seguía haciéndolo rápido.
Si bien me estaba haciendo delirar, me resultó un poco extraño que lo hiciera de esa forma.
Como “sin cuidado”, a lo bruto.
YO: ¿Te duele hermosa? Paramos…
MAR: No, no… aaaa…
Bajó y me besó en la boca, pero con muchas ganas.
Recuerdo como me succionó el labio. Hasta a mí me generó un poco de dolor.
“Ummmm mmmm aaaa” gritó.
Me quedé helado.
¿Se encontraba bien?
Ahí la detuve, agarrada de la cintura.
YO: ¡Ei! ¿Qué pasa, Mar?.- Le dije preocupado.
Hizo gesto con la cara de “no, nada”, pero era claro que sí le pasaba.
YO: Decime… Estaba todo bien hasta recién…
MAR: ¿Vos crees que estaba todo bien?.- Dijo con una sonrisita.
Me dejó perplejo su respuesta.
Evidentemente algo le molestó.
Me quedé mirándola. Su cara transmitía algo de tristeza.
YO: ¿Qué pasó, hermosa? ¿Hice algo que te molestó?
MAR: ¿Solo para esto queres verme?.- Dijo con la voz temblorosa.
Abrí los ojos como un sapo.
YO: ¿Cómo?
MAR: ¿Solo para coger me queres?
Lentamente se levantó de encima de mí.
Puso un gesto de molestia al sacarse mi verga de adentro.
Era claro que la situación se había ido hacia otro lado, totalmente distinto al que venía dirigiéndose.
YO: No… ¿Por qué decís eso?
Se sentó a mi lado con una gran cara de decepción. Ni mirarme quería.
Me guardé el miembro dentro del short.
YO: Eii…
Levantó su mirada, visiblemente apenada.
MAR: Si va a ser así, no quiero que nos veamos…
YO: ¿Por qué? ¿Qué es lo que te molestó?
MAR: Hoy cuando me fui, esperaba que me escribieras algo después de haber estado juntos… No sé, nada profundo… Pero que al menos me mandaras un mensaje.
Me quedé mirándola, sin saber qué decirle.
MAR: Después me escribís para que venga, cuando pensé que ya ni me ibas a hablar y todo así, vacío, como si fuera un trámite… Yo sé que la situación entre nosotros no es la misma que antes, pero siempre fuiste cariñoso conmigo, hasta cuando éramos solo primos. Me decías cosas lindas por mensaje o estando juntos… Ahora te siento re frío… Tenes ganas de que cojamos y nada más...
Su voz se fue conmoviendo cada vez más.
Tenía razón en lo que decía. No le había dado bola en todo el día, a pesar de que habíamos estado juntos después de mucho tiempo.
YO: Tenes razón… No me di cuenta. ¡Perdoname!
MAR: Está bien, hice mal en venir…- Miraba con desgano al suelo.
YO: No… Me dejé llevar por las ganas que tenía de estar con vos. Te juro que no me di cuenta que estaba siendo tan superficial.- Le toqué la mejilla con la mano.
MAR: Ese es el problema… Nunca me hubieras tratado así antes…
Cada cosa que me decía, me era imposible responderle. Me dejaba sin palabras.
Pero la realidad era que yo no le mentía. No estaba consciente del trato que le estaba dando.
YO: Perdón… Soy un boludo. Te juro que no fue mi intención. Es más, compré cosas para recibirte de forma decente, para que hagamos de comer…- Intentaba hacerle entender que nunca quise verla como un objeto.
MAR: Quizá sea mejor que lo dejemos para otro día…
Uf…
¡La cagué! Pero la cagué feo.
Le veía el rostro, tan apagado y me quería morir.
YO: Mara, es cierto lo que decís… Me puse medio “mono” recién, pero la realidad es que es lo que me salió. Me lo provocaste vos y te mentiría si te dijese que estos días no te pensé…
Me miró.
Yo la miré como diciendo “es posta”.
MAR: No quiero que me veas como un pedazo de carne…
YO: Sabes que no es así… Pero bueno, después de tanto tiempo, es normal que me ponga así, que me vuelva un poco simio…- Intentaba hacerla reír. Me había ido al carajo…
MAR: Puede ser lo que decís, te conozco. Pero también es cierto que hace tiempo que no me tratas con amor. Y sé que es difícil, dadas las circunstancias, pero no me gusta…
¿Cómo responder a eso?
Yo era abogado y no era capaz de generar un argumento que pudiera replicar lo que ella pensaba.
Tampoco merecía que le mintiera.
YO: Lo importante es que estoy acá, con vos…- Le contesté dando a entender que semanas atrás, hubiera sido totalmente imposible.
MAR: Estás y no estás…- Expresó suspirando.
Sus ojos transmitían una sinceridad inmensa.
Yo quería decirle que cuando la miraba, deseaba decirle esas cosas que siempre le decía. Pero después de un rato, en el que me sumergía en su mundo, algo no me dejaba estar pleno con ella.
Revivía momentos de las semanas anteriores… Me imaginaba a Sabrina diciéndome “Te amo”... La veía a Mara cogiendo con Franco, con Brian… Simplemente, no podía.
Ella con solo mirarme me entendía perfectamente.
Sabía que tenía eso torturándome.
Nos miramos unos instantes, ambos con frustración.
MAR: Otro día nos vemos, mejor… ¿Está bien?
YO: No quiero que te vayas… Menos así…
MAR: Vos no tenes la culpa. Y estar así, con estas cosas en medio de nosotros, no da. Es incómodo.
Qué cagada. Qué gran cagada…
YO: Yo no te voy a obligar a que te quedes… Pero una vez más, te pido perdón. Te juro que estoy dando lo mejor que tengo, lo mejor que me sale.- Le dije mirándola a los ojos.
Se le pusieron un poco brillosos los de ella. Miraba para otro lado.
YO: Pero si te queres quedar, hablamos, te cocino algo rico.- Le hice un mimo en la pierna.
Parecía que iba a llorar en cualquier momento.
No quería verla así.
Hizo una mueca de costado.
MAR: Mejor me voy, Johnny… Tampoco quiero estar así, con este ánimo…
La miré con tristeza.
Para que quisiera irse, debiera sentirse muy mal.
Y ahora sí, me quería matar. Era mi culpa.
YO: Bueno… Otro día, entonces…
Inmediatamente, se levantó del sillón.
Se la veía muy apenada.
Sentí bronca por la situación.
YO: ¿Cómo estás de ahí? ¿te duele?.- Le pregunté por el sexo brusco que tuvimos unos instantes antes.
MAR: No, no… Todo bien. Vos no te olvides de tu medicación.
La miré y ella también a mí.
Nos dijimos de todo con la mirada.
Tenía algo en el fondo de mi alma que quería abrazarla y decirle que se quedara.
Pero juro por lo más sagrado que no podía hacerlo. En verdad no podía.
Se agarró la campera.
El ambiente se puso gris de repente.
MAR: Bueno… Me voy.-
Lo pensé otra vez.
¿Qué hago? ¿La abrazo? ¿Le digo que no quiero que se vaya?
Ella estaba ahí parada.
Tenía que hacerlo.
¿Qué importaba lo que pasó? Ahora estaba ahí conmigo. No debía dejarla ir.
Algo dentro de mí quería salir.
Podía sentir como intentaba escarbar entre las rocas.
Ella seguía mirándome.
Pero una vez más, esas fuerzas extrañas vinieron para castigarme.
Esas imágenes…
Una y otra vez me mostraban a Mara estando con Franco, con Brian, hasta con Martín.
No pude decirle nada.
MAR: ¿Me abrís?.- Me dijo finalmente.
Suspiré profundo. Como pocas veces lo hice.
Ella lo percibió. Sabía que tenía demonios con los que luchar.
Fui hasta la puerta con ella.
Una situación de mierda. Totalmente fría, oscura.
Se iba…
YO: Avisame cuando llegas…
MAR: ¡Dale!.- Se limitó a decir
YO: Perdón…- Le dije tragando saliva y apenado.
MAR: Está bien.- Dijo poniendo una mueca.
Luego me saludó.
Me dio un muy pequeño beso en la boca. Como un piquito.
Obviamente no me decía que estaba todo bien. Lo percibí más como un “no te preocupes”.
Pero su rostro indicaba todo lo contrario.
Probablemente, esa sería la última vez que ella intentaba buscarme.
Salió y se subió al auto.
Me quedé parado en la reja. Totalmente desganado.
Como cuando estás sin fuerzas.
No sé cuánto estuve parado ahí después de que se fue.
No podía moverme. Me sentía como el orto.
Últimamente no me salía nada de nada. Todo mal.
A los 10 minutos recién entré.
Me tiré en el sillón, mirando el techo. Fijo.
El silencio que me acompañaba era ensordecedor.
Para colmo, me encontraba totalmente solo ahora.
¿Por qué no le dije nada?
¿Por qué no solo podía olvidarlo y seguir?
¿Acaso Sabrina seguía ocupando ese lugar inamovible en mi cabeza?
Peor me sentía ahora. Cada vez que recordaba como Sabrina me había, simplemente, expulsado de su vida, me rompía el corazón.
Pero no era tanto lo que había pasado con ella. No me parecía que fuera solo eso.
Lo que más me torturaba, fue lo que pasó en esos fines de semana.
Sí, extrañaba a Sabrina. Mucho. Pero la culpa que me carcomía el cerebro, era a causa de permitir que pasara todo lo que pasó.
Tanto con ella, como con Mara.
Cómo pude ser tan débil…
Mara me mandó un mensaje.
MAR: Llegué! Besitos!.-
Solamente eso me puso. Estaba dolida. Era claro.
Me jodió un toque que me escribiera tan fría.
Ahora entendía lo que ella había sentido todo ese tiempo.
Es una mierda…
Le contesté “Perdón… No te merecías eso. Te quiero”.
Tampoco quería generarle un conflicto en la cabeza.
Quizá el tiempo nos ayudaba. O a ella.
No me respondió el mensaje.
Y si no fui capaz de detenerla antes de que se fuera, no tenía sentido que la cargoseara por mensajes.
Debía dejarla tranquila.
Qué noche de mierda…
No me imaginaba que iba a terminar así.
Y la realidad era que tampoco había terminado. Estaba lejos de hacerlo.
Me quedé en el sillón.
En un momento, medio que me dormí, pero estaba consciente.
Sentí como si se me reiniciara el sistema.
Una vez más, mi cuerpo empezó a entumecerse. No podía moverme bien.
Tenía la cabeza apoyada en el respaldo, observando hacia arriba.
“Otra vez” pensé.
Al menos ya sabía de qué se trataba.
Intenté respirar profundo, pero mi ritmo cardíaco se aceleró nuevamente.
Se me cerraban los ojos.
Veía como si el cuarto cambiara de forma.
Como si me encontrara en otro lado.
Estaba todo en mi cabeza, lo sabía. Pero aún así, no podía componerme.
Sentía una fatiga impresionante. Quería dormirme ahí.
De repente, todo cambió.
Me encontraba en un baño. Uno que conocía muy bien.
Sí, era el de la casa de Fernanda.

12 comentarios - Capítulo 13 Mi prima, Mara 3

Lucarose00
No me podes dejar así, espero que lo del final sea un sueño nada más!!

Consulta no terminaste el capitulo 14 o no terminaste el libro?
Corredor_1718
Tremendo capítulo el de hoy. Creo que Jona se la hizo demasiado fácil a Fernanda, si bien todos sabían lo que hacían (bueno, casi...), ella se portó como una guacha, hizo todo lo posible para emputecer a Mara con el pijudo, y filmarlo para que tarde o temprano Jona lo termine viendo. Por eso, demasiada risita y cachondeo con Fer para mi gusto. Con un "hola" y "chau" con cara de poker hubiera sido suficiente....en fin, no me cierra y se puede malinterpretar su actitud.
Y con sus demonios con Mara....no probó con terapia? Ya va siendo hora creo......
Felicitaciones al autor por terminar la carrera!!!! En horabuena👏👏
Nemocabezon
Tremendoooo!!! Es como dije capitulo anterior, Jonas tiene q ir a un sicólogo, por su bien y el de la relación con mara..
Nemocabezon +2
La cábala de la selección sigue su camino... Vamos Argentina🇦🇷🇦🇷!!! Que desde el puño de @hiphop911 y este el mejor relato de esta página estamos en camino a no parar hasta la final..!!!💪💪👏👏👏👏👏👏👏
Romads32
Capítulo y sexo en la selección 💕
KenayTp +1
Todavía no lo leí. Primero quiero agradecerte por haberlo subido antes del partido. Vamos que seguimos!!! Esperamos el otro antes del sábado. Genio. Ahora si a leerlo
emmaq
Muy buen capitulo. Aunq otra vez jonas siendo un pasivo de mierda. Ahora Mara se hace la ofendida y jonas tiene q ir tras ella. Cualquiera. Ella todavia no admitio todas las cagadas q hizo. Si no admite sus errores el perdon de mara fue falso.
emmaq
y la diferencia con sabrina es que mara introdujo a sabrina en la vida de jonas e hizo q se la garchara. Despues de haberle sido infiel a jonas con ella.
emmaq
la otra diferencia es q Jonas nunca organizo nada para verse con sabrina. La q organizaba todo y estaba emocionada con ello era mara. A tal punto de ocultarle todo a jonas. A tal punto q queria garchar sin forro pero q el no se entere. Por eso cuando entro a la pieza no dejo q franco saque el amigo porque sino jonas iba a ver q lo hacia sin forro. Ademas q esta la teoria de q esta re embarazada de franco.
trafilus
Lo que no termino de entender es que pretendes que haga o diga ella. Ya le reconoció q se fue a la mierda con lo que hizo. Queres que le reconozca en la cara que quería que le haga la cola? Lo de sin forro? Me parece que eso ya no suma en la relación. Tienen q dejarlo atrás y ver para adelante. Ya admitió culpas, de que sirven los detalles, mas que para nosotros que somos lectores de su relación?
trafilus +1
De los mejores capitulos de la serie. El corte menos diez que le hizo Mara, que lo dejo tecleando. Porque la realidad es que ella siente lo que el le da. Pero el no se da cuenta de lo que esta haciendo, o al menos cree que lo esconde bien y ella no se da cuenta. Pero aca abrimos otra puerta. Ya no es él el que maneja los tiempo, ahora ella también se le va a plantar.
Veremos de que va esto de estar en el baño de Fernanda. Estara reviviendo la escena de Mara y Franco? sera una situación del presente? Espero ansioso.

Slds, y abrazo
MrBC13 +2
Próximamente, Capítulo 14. "Recuerdos de Vietnam".
Exploradorgaby
Felicitaciones por la tarea desarrollada en tu escritura. Esperando el libro y los capitulos que necesitamos para salir campeones.
Gracias.......
garcheskikpo
no si te digo que el tipo trae suerte jaja, la selección y hip hop un solo corazón 🤣🤣

aunque fue más un capítulo para "cumplir" espero que en el libro haya algo más groso, muy tibio estuvo todo, incluso desde el encabezado, como fiel oyente y presidente del fan clú' te dejo puntos.

si el sabado antes del partido vs los "canguros" largas el capítulo borracho (14) espero sea largo y con mucha acción (todo como en el baño de nanda) 😄😆
VIDENTE1979
Se me hizo corto,la verdad que la charla de Fernanda y Jonas me supo a poco, esperaba no se,más profundidad,al menos pude entender porque Fernanda hacía lo que hacía y Jonas la cago bien feo,con sus indecisiones y sus mambos, que quiere con Mara?