Unos manguerazos calientan todo mas

Aprovechando que su marido estaba de viaje por una despedida de soltero, Elena había decidido que fuéramos a su pueblo unos cuantos amigos a hacer una fiestecilla calentita. Fuimos a una parcelita que allí tiene su padre. Allí estábamos, Mónica, hermana de Elena, su marido Edu, Tamara, Pili, Fran, Miguel M, Constan, mi novia Rakety, Elena y yo.
Al llegar a la parcela hicimos una barbacoa y tomamos unas copas, hasta que se empezó a hacer de noche y todo se fue calentando. Yo estaba bailando con Tamara y Pili, besándonos y metiéndonos mano. Ambas iban con unas camisetas blancas que, sin ser ajustadas, resaltaban sus pechos y unos vaqueros muy ajustados, Pili normales y Tamara grises. La camiseta de Pili además llevaba un dibujo ochentero en el centro.
Oímos un grito y al mirar era Mónica, a la cual, su marido, estaba mojando entera con una manguera. Esta llevaba un vestido de manga corta, hasta medio muslo, de pequeñas rayas horizontales blancas y azules. Debido al agua, este estaba superajustado, marcando sus tetazas y el encaje y aro del sujetador que llevaba. Mi novia y Elena que estaban a su lado, salieron corriendo hacia la espalda de Edu, para no ser mojadas. Mi novia iba con un peto de tela, de cuadros blancos y negros y una camiseta blanca ajustada marcando sus tetazas. Elena una camiseta beis, sin mangas, con estampado de flores pequeñas amarillas y la zona de los hombros, transparentes. También un mini pantalón beis de tela, atado con un cordón.
Miki, Constan y Fran se fueron a rodear a Mónica, importándoles poco que Edu los empaparan, y comenzaron a meterla bien mano. Tamara y Pili me prohibieron acercarme. Pili me agarro el paquete y me dijo que si me movía me lo arrancaba. La sonreí y la di un buen besazo. Tamara me beso el cuello poniéndome bien caliente. Mis manos agarraron sus culazos.
De repente fuimos nosotros tres los que recibimos el manguerazo poniéndonos bien empapados. Elena era la que nos estaba empapando, mientras se reía. Mi novia estaba de rodillas mamándosela a Edu. A Mónica la habían quitado ya el vestido y estaba con un sujetador de triangulo y un tanga, blancos, empapados, por donde se la transparentaba todo. Sus gordos pezones estaban siendo devorados por Fran y Miki, mientras Constan la besaba el coño.
A Tamara y Pili se le ajustaron mucho sus camisetas y se les transparentaban los sujetadores. El de Pili era blanco, de aro, con encaje y el de Tamara negro de aro. Acaricié sus tetazas y comencé a pasar mi cara por ellas. Elena apago la manguera y se nos acercó, Se arrodillo, me desabrocho el pantalón y comenzó a comerme la polla. Yo quité las camisetas a Pili y Tamara y seguí con mi cabeza entre ellas, lamiendo y besando sus canalillos, mientras las acariciaba y apretaba las tetas. De vez en cuando me besaba con ellas.
Pili se separó de nosotros y me bese con Tamara, mientras seguía acariciando sus tetas. Pili volvió con un cubo de agua que tiro por encima a Elena, mientras le decía que no podía estar tan seca. Empapadísima, Pili la hizo levantarse y su camiseta y pantalón se le transparentaban completamente al ser de tela finísima. Se veía bien claro el sujetador blanco de aro y el tanga blanco de hilo que llevaba. Tamara se arrodillo para continuar la mamada de Elena, y Pili y yo comenzamos a besarnos con Elena. Acaricie sus pechitos, mientras Pili la quitaba el pantalón. Pili se arrodillo y la comió el coño, mientras Elena y yo nos besábamos. Elena se quitó la camiseta y el sujetador y comenzó a pellizcarse sus gorditos, morenos y empapados pezones, mientras me pedía que se los comiera. Comencé a hacerlo y esta apretaba sus pechitos con sus manos para ofrecerme mejor los pezones. No tarde mucho en mordérselos haciendo que sus gemidos no fueran solo por la comida de coño de Pili.
Edu nos dijo de acercarnos a ellos. Todas las mujeres se arrodillaron y nosotros nos pusimos frente a ellas para que comenzaran a mamárnoslas. La primera que me la comió fue Mónica y luego íbamos cambiando para que todas nos las comieran. Tras dos pasadas por todas las bocas, Edu nos dijo que nos volviéramos a retirar, pero a ellas no las dejo levantarse. Cogió la manguera y volvió a rociarlas a todas, empapándolas nuevamente. Cuando cerro el grifo, nos volvimos a acercar a ellas y cada uno cogimos a una. Miki agarro a Mónica y se fueron a una tumbona, Fran y Rakety se fueron contra la pared de la casa, Edu levanto a Elena y la comió los pechitos allí mismo. Tamara junto a Constan y Pili y yo, nos fuimos hacia la mesa.
Eran las únicas aun con los pantalones puestos, y las acariciamos los culos con ellos, mientras nos besábamos y acariciábamos sus pechos. Apoyé a Pili en la mesa y comencé a acariciar su coño aun tapado. Desabroché el pantalón y metí mi mano dentro de él y del tanga y comencé a masturbarla. Pili comenzó a gemir, mientras metía mi cabeza entre sus tetazas, disfrutando de su canalillo. Constan arrodillo a Tamara y esta se la comía.
Me arrodille y quite el pantalón a Pili, dejándola con un tanga blanco, de hilo y encaje como el sujetador. Di un par de mordiscos a su coño, con el tanga tapándolo, antes de apartarlo y comérselo. Mis manos agarraron su culazo y ella apretaba mi cabeza con sus manos. Pili me pidió que la follara y me levante. Me puse un condón, mientras esta se sentaba en el borde de la mesa. Me puse entre sus piernas, volví a apartar el tanga y comencé a follarla suave, con mis manos agarrando sus muslos y besándonos. Pili se quitó el sujetador y comencé a acariciar sus tetazas mojaditas, antes de bajar la cabeza y devorárselas.
Constan me pidió cambiar y así hicimos. Este se puso un condón y comenzó a follar a Pili, mientras yo me coloqué junto a Tamara y la hice levantarse. La coloque mirando la mesa y apoya sus manos en ella. La quite el pantalón y esta llevaba un precioso culotte negro de encaje. Me arrodille y la bese y acaricie el culo con el puesto. Mientras besaba sus glúteos, comencé a bajarla el culotte. Metí mi cabeza entre sus piernas y la lamí su coñito jugoso, mientras acariciaba y pellizcaba sus glúteos. Me levanté, metí mi polla en su coño y empezamos a follar. Pase mis manos adelante y agarre sus pechos. Saque sus tetas de él y las acaricie, pellizcando sus morenos pezones.
Cambié de agujero y comencé a follarla el culo. Me eche sobre su espalda, echándola contra la mesa y, con mi mano, aplaste su cabeza contra ella, comenzando a follarla más duro. La gire de nuevo, la quite del todo el culotte, levante una de sus piernas, y la apoye en la mesa. Metí mi polla en su coño, de nuevo, y volvimos a follar. Con la otra mano, acariciaba sus pechos y pellizcaba fuerte sus pezones.
Constan y yo nos volvimos a cambiar. Cogí a Pili y la tumbé en la mesa. Coloqué sus piernas contra mi pecho y comencé a follarla el culo. La embestía fuerte y sus tetazas se movían maravillosamente. Constan follo el culo también duro a Tamara.
Ambos estábamos ya para corrernos y estas se arrodillaron. Nos quitaron los condones y nos las comieron. Pili, la acabo metiendo entre sus tetazas, haciéndome una deliciosa cubana. Constan se acercó a Pili y la metió en su boca, mamándosela, mientras seguía con la cubana. Tamara se me acerco a mí y con sus gorditos labios besaba mi glande y con su lengua lo lamia.
Constan se corrió y Pili trago todo. Esta continuo con la cubana, hasta que me corrí, sin avisar, soltando todo en la preciosa cara de Tamara y las tetas de Pili. Esta se dedicó a limpiar bien la polla de Constan, mientras Tamara lo hizo con la mía.

Tamara y Pili se fueron al baño a limpiarse y nosotros nos fuimos a la zona de la mesa donde estaba la bebida para ponernos unas copas. Allí estaban Fran, Miki y Rakety tomando también algo. Edu seguía follando a Elena en la tumbona que antes estaban Miki y Mónica. Esta se había metido a una piscina desmontable que tenían.
Al poco, Mónica me llamo y me pidió que la llevara una copa. Me acerqué con una copa para cada uno, y al darle la suya y entrar, pude ver que esta llevaba puesto otra vez la lencería, transparentándose maravillosamente todo. Tras un brindis y un trago, nos empezamos a besar. Solo parábamos de besarnos para dar algún trago. Cuando esta termino la copa, la dejo en una mesita que había al lado de la piscina y metió su mano bajo el agua para empezar a masturbarme. Una de mis manos acariciaba sus tetazas con el sujetador, pero acabo bajando para meterse en su tanga y masturbarla también. Mi cabeza también fue bajando, besándola, hasta llegar a sus tetazas. Las besé y mordí, sobre todo esos pezones gordos transparentados.
Cuando puso mi polla bien dura, me levanté y comencé a golpear su cara con esta. Mónica la agarro y comenzó a comérmela a una alta velocidad. Con sus manos jugaba con mis huevos. Mónica metió mi polla entre sus tetazas, sin quitarse el sujetador, y me hizo una cubana. Mientras me masturbaba así, me lamia el glande. De vez en cuando la sacaba para pasar mi glande por sus pezones duros.
Me puse un condón y me senté de nuevo. Mónica se quitó el tanga y lo tiro fuera de la piscina. Se sentó de rodillas sobre mí y metió mi polla en su coño, comenzando a follar en círculos. Nos besábamos y mis manos agarraban sus tetazas. Las acabe sacando del sujetador y se las devoré, como si llevara días sin comer. Cada vez nos movíamos más rápido, de lo cachondos que estábamos. Rakety y Edu se metieron también a follar en la piscina, como si estuviéramos haciendo un intercambio de parejas. Fuera, el resto, también estaban follando en la mesa.
Mónica, se metió mi polla en el culo y ahora se movía en saltitos. Yo pellizcaba sus pezones, mientras nos besábamos y la mordía el cuello. La coloqué de rodillas mirando el bordillo y me puse detrás de ella. Primero la follé el coño, bien duro, con sus tetazas fuertemente agarradas y luego hice lo propio con su culo. Cuando me iba a correr, metí mi polla bien dentro de su culo y lo moví en círculos, con sus tetas tan apretadas, que esta soltó un grito de dolor.
Me corrí dentro de su culo. Saqué la polla, me puse de pie y Mónica se sentó. Me quito el condón y me limpio con su lengua mi polla. Nos quedamos sentados en el agua besándonos y metiéndonos mano, mientras el resto seguía follando.

Cuando los demás fueron terminando, salimos de la piscina para tomar una última copa, antes de vestirnos, con ropa aun mojada, e irnos a la casa de Elena, allí en el pueblo, que estaba cerca de la parcela. De camino a la casa, Tamara me agarro del brazo y me dijo que ella quería dormir conmigo. No me pude negar y la di un besazo y un azote.
Miki, Elena, Edu y Pili, se metieron en la habitación de matrimonio, Rakety junto a Fran en otra habitación, Mónica y Miki en otra y Tamara y yo en la última. En cuanto cerramos la puerta, Tamara me cogió y mientras me besaba, me llevo a la cama donde me hizo sentarme. Ella se quedó en lencería y sentó de rodillas sobre mí. Nos besamos, mientras agarre su culo, y lo aprete fuerte notando la suave tela de su culotte.
Tamara se quitó el sujetador y comencé a acariciar sus pechos, mientras nos besábamos mas profundamente. Tamara agarro mi cabeza y la llevo a sus pechos, los cuales comí. Mis manos volvieron a su culo y lo apretaba fuerte, al igual que chupaba sus pechos, sobre todo esos pezones gordos.
De repente Tamara me pidió que la tratara duro y mal. La miré, la sonreí y la di una torta. Volví a comerla los pechos, pero ahora mordiéndoselos, sobre todo los pezones, estirándoselos hasta que ella gritaba y me pedía que lo soltara. Tamara tenia cara de dolor y placer y me dio un fuerte besazo, apretándome fuerte la cabeza. Yo la mordí varias veces los labios durante el beso.
La agarre fuerte de las piernas y nos levantamos en vilo. Nos besamos, mientras la azotaba el culo y la cara. Nos giramos y la senté en el borde de la cama. Me desnudé y la hice agacharse lo necesario para comenzar a golpear su cara con mi polla. Comencé a pasarla por su boca, sintiendo sus gorditos labios. Fui apretando más en ella, hasta que la abrió y comencé a follarla la boca. Tamara puso sus manos en mi culo y lo acaricio, mientras tenia arcadas y la caía babas que no era capaz de tragar. Saqué mi polla durísima y llena de sus babas y volví a golpear su cara con ella.
Coloque a Tamara a gatas en la cama y me arrodille en el suelo. Azote y mordí sus glúteos, semitapados por el culotte. Lo aparte lo necesario para meter mi mano entre sus piernas y comenzar a masturbarla, con golpes duros. Con la otra mano la seguía azotando fuerte y de vez en cuando algún mordisco volvía a caerla. Agarre fuerte la tela del culotte, metí los dedos por el encaje y tiré fuerte hasta romperlo y hacer un agujero grande. Me puse un condón, metí mi polla por el agujero y comencé a follarla duro el culo. Tras un par de azotes fuertes, me eche sobre su espalda. Con una mano pellizcaba sus pechos y con la otra tapaba fuerte su boca y nariz, dificultándola respirar. La comencé a apretar la cabeza contra el colchón y Tamara tuvo que girarla como pudo, pues tampoco la dejaba respirar bien.
La coloqué de rodillas y me puse también así, detrás de ella. Seguí follándola el culo, mientras nos besábamos. Con una mano la comencé a masturbar y con la otra apretaba su cuello. Cambie mi polla a su coño y comenzamos a follar a buena velocidad. Pase mis manos por debajo sus brazos y agarre sus tetas, pellizcando sus pezones. También la mordía el cuello y los labios.
La tumbe boca arriba y coloque sus piernas contra mi pecho. Follamos a buena velocidad y poco a poco fue inclinándome sobre ella, apretando sus piernas contra su pecho. Cuando me llegó la mano, volví a apretarla del cuello. No pare de follarla hasta que me corrí dentro de su coño. Entonces me tumbe en la cama, me quite el condón y la ordene colocarse sobre mí, para hacer un 69. Tamara me limpiaba bien la polla y yo la comí el coño hasta que se corrió en mi boca. Durante ese rato, no pare de azotar y pellizcar su culo.
Tras un rato de besos y caricias acabamos dormidos.

Cuando me desperté por la mañana, decidí no molestar a Tamara pues sabía que, con los mellizos, en su casa poco duerme. Sali de la habitación y me fui al baño. Allí me encontré a mi novia follando con Constan dentro de la ducha. Mientras orinaba, me dijeron que Elena aun dormía y que el resto ya se habían ido.
Fui a la habitación a buscar a Elena, pero allí no estaba ya. Volví a buscarla y la encontré en la cocina preparando café. Solo llevaba un tanguita gris y me acerque por su espalda, arrimando bien mi polla a su culo. La cogí de la cintura y la di los buenos días, mientras la besaba el cuello. Elena se giro y nos dimos un buen morreo, mientras esta agarro mi polla y comenzó a meneármela. Me pregunto si me apetecía una tostada y la conteste que primero me apetecía más comer otras cosas. Agaché la cabeza y di un par de lametones a sus carnosos pezones. Abrí la nevera y saqué un tomate. Lo partí y comencé a pasar cada mitad por los pechitos de esta, dejándoselos bien untados. Volví a comérselos y mi mano se metió por su tanga, masturbándola. Cuando sus pechos quedaron limpios de tomate, me arrodillé, la aparte el tanga y comencé a comerla el coño. Elena gemía y apretaba mi cabeza contra ella, metiendo así mi lengua más dentro.
Cuando sonó la cafetera, me levante, nos echamos unos vasos de café y nos fuimos al salón. Dejamos los cafés enfriando en la mesa y nos tumbamos en el sofá haciendo un 69. Los carnosos labios de Elena me la pusieron durísima muy rápido. Elena me puso un condón y se sentó sobre mí, cabalgando como una loca. Estire mis manos, volviendo a jugar con sus pezones, que tanto me gustan. La hice inclinarse sobre mí, para poder volver a comérselos.
Cuando esta se corrió, se cambio la polla de agujero y la metió en su culo. Siguió moviéndose como una loca y yo cada vez la comía más fuerte los pezones, sorbiéndolos y estirándolos bastante. La coloqué a gatas en el sofá, aparte su tanga y seguí follándola el culo, bien fuerte. Tiraba de la goma del tanga fuerte y la soltaba, para que la golpeara. Cada poco, también la caían unos azotes.
Cuando iba a correrme me senté y me quité el condón. Elena se coloco a gatas y volvió a comerme la polla. Esta me hizo una mamada a gran velocidad que me hizo correr rápido. Solté un buen chorro de semen que la provoco una pequeña arcada al no poder tragarla toda. Cogí el café de Elena y cuando paro de tragar, eche un poco del semen que aun me quedaba en él. Esta se rio y, tras acabar de tragar y limpiar el semen de mi polla, se tomó el café con semen.

Nos tomamos tranquilos el café y cuando terminamos nos fuimos al otro baño de la casa a ducharnos juntos. Durante el baño, nos besamos y metimos mano. Al volver al salón allí estaban desayunando Rakety y Constan. Al rato, despertamos a Tamara pues debíamos volver ya para casa.

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