Malena 2

Escucharla decir eso fue todo lo que necesitaba paraprecipitar el clímax. Así fue que se relajó, y avisándole se dejó ir.  Con el glande apoyado en la lengua de Male,empezó a lanzar un chorro tras otro de semen, contó por lo menos 6 latigazos,hasta sentir un escalofrío. Ese escalofrío no era sino el resultado de unrelajo posterior a un cumulo de sensaciones, de deseos acumulados, excitación,nervios, ansiedad, por unos segundos perdió la noción del tiempo.
Todo esto no pasó desapercibido para ella, que se sentíaorgullosa de lo que había logrado, saber que podía causar eso en un hombre laexcitaba sobremanera. Cuando vio que Mateo volvía en sí mismo y la miraba sacola lengua mostrándole su propio fruto antes de pasar tragarlo mirándolo concara picara, divertida y lujuriosa, sobre todo.


Qué manera de romper el hielo esa primera experiencia entreellos, una conexión y soltura que parecía ensayada. Si bien desde el comienzosintieron que todo se iba dando naturalmente, el llegar al clímax termina derelajar a cualquier persona.


Luego de pasar por el baño para sanitizarse (un pequeño tocque tiene Mateo de mantener su pene y genitales siempre limpios, ni bien acabael acto) le pidió a Male que fuera preparando la habitación y la cama enparticular para recibir un masaje. Se lo debía, tanto había hablado de lo buenoque es en dar masajes y lo que disfruta hacerlos, que es lo mínimo que podíahacer para devolver el placer que le había brindado ella.
Obviamente Malena gustosa aceptó y no solo eso sino le dijo que tenia un aceiteespecial para la ocasión y velas aromáticas para crear el ambiente propicio.

Mientras Male ponía una manta sobre la cama para evitar que el aceite manchara,Mateo comenzó a ubicar y encender las velas mientras pensaba con que músicaacompañar el momento.
Le pidió a Male que se fuera acostando desnuda sobre lacama, eligió el disco La Dulzura de Cultura Profética, y en particular lacanción Ilegal para empezar, bajo las luces y agarro el frasquito de aceite. Elaroma a vainilla que desprendían las velas sumado al aceite de coco generabauna sensación sensitiva altamente estimulante.

Desparramo un hilo de aceite desde el cuello hasta la cintura suavemente,dándole siempre un manto de paz y tranquilidad al momento. Con sus hábilesmanos empezó a desparramarlo por toda la espalda para primero darle énfasis alos hombros y cuello haciendo un poco de presión con los pulgares en loslugares que más tensión sentía. Male comenzaba a sentir un relajo que realmentenecesitaba ayudándola a olvidarse las preocupaciones diarias, y su cuerpo seiba predisponiendo cada vez más para sensación placenteras.
Mateo con sus manos tanto con la palma como con el reverso hacía movimientospor toda la espalda variando velocidades, intensidad y fuerza en los mismos.

Luego de un rato de entretenerse en la espalda fue bajando lentamente hacia lacola. Se ayudo de un poco más de aceite para dedicarle ahora la atención a esaparte. La cola de Male era importante, carnosa, redonda, ideal para podermasajear y eso Mateo lo agradecía y disfrutaba cada agarre cada apriete, se ibacalentando cada vez más mientras una nueva erección iba ganando lugar.
Todavía evitaba las zonas genitales, y fue dando paso a las piernas, cara internaexterna, muslos, pies, y a medida que subía cada vez pasaba más cerca de lavagina.
Male estaba totalmente encendida ya, casi rogando que esas caricias llegaran aesa zona, entre el aceite, la música, los aromas y las caricias, sintió quehacia rato no llegaba a ese nivel de calentura por lo que fue abriendo laspiernas para facilitar las caricias.
Mateo lo notaba por lo que con sus pulgares a medida q subíaya acariciaba los labios vaginales mientras le daba besos en la espalda. Fuebajando con los besos hasta llegar a la vagina donde luego de unos besos suavesdonde noto que estaba totalmente lubricada, se situó x detrás, pidiendo quelevante las caderas para facilitar la labor, para sorpresa de Male, le acercoel glande a sus labios que se abrieron casi abrazándolo y sola fue echándosepara atrás dejándose penetrar.

El agradeció el movimiento y sintió un calor que lo quemaba, entonces lapenetro hasta el fondo muy suavemente, con su verga ancha completamentehinchada. Male hace rato no sentía tan rico y se lo hizo saber con un intensogemido.

Luego de un par de movimientos suaves que seguían acompañados de besos en laespalda, empezó a subir la intensidad, apretando fuertemente las nalgasmientras la penetraba, para luego con una mano sujetarla del pelo y frenarse.Entonces Male totalmente deseosa empezó a guiar los movimientos hacia atrás ydelante queriendo sentirlo completamente.

Luego de unos minutos, quiso tomar el control de la situación por lo quesaliéndose hizo a Mateo acostarse boca arriba, soltase el pelo mirándolo conuna cara lujuriosa y guiando con un mano su verga a la vagina fue sentándosehasta tenerla completamente dentro.

Estaba llena y sentía bien apretado, una vez que se acostumbró y sintió lista,empezó a subir y bajar mientras apoyaba sus dos manos en el pecho de Mateo.Este estaba casi en estado de trance, viendo como Male cual amazona salvajeempezaba a saltar sobre su verga y dominar completamente la situación. “Pordios Male, me estas volviendo loco, que bien te movés” le dijo. Ellamordiéndose los labios le contesto “¿Te gusta? Esto recién empiezo bebe” paraacto seguido apoyándose pecho con pecho se dejaba ahora penetrar por unoshábiles movimientos pélvicos de Mateo.

Luego de un ratito ya estaban los dos próximos al orgasmo mientras se besabancon lengua de manera casi lasciva. “Dale Male haceme acabar” Esas palabras lasobrecalentaron por lo que incrementando los movimientos y sintiendo espasmosen su vagina dejó venir al orgasmo que apretando aún más la verga de Mateotambién lo motivo a acabar en un intenso y caudaloso orgasmo que la lleno porcompleto, al punto que al despegarse caían gotas de semen que resbalaron porsus piernas. Quedaron abrazados unos segundos donde el tiempo se detuvo. lo queparecieron minutos, horas, aunque fue un leve momento de tomar aire, recuperarla respiración y latidos normales, para despegarse.

Momento en el que sorpresivamente y como apresurado Mateo pidió ir al baño.Male quedo sorprendida y pensativa de que podría haber pasado para tan extrañocomportamiento.

Estando en el baño, imágenes le pasaron por la cabeza y le hicieron sentir queno estaba bien lo que estaba pasando. Le hizo replantearse lo bien que la habíapasado y la dedicación que le había metido a semejante polvo, porque hace ratoque no se lo dedicaba a su novia. Fue como un baldazo de agua fría a lasituación, de repente se le fue completamente el erotismo y las ganas, sesintió mal y así se lo hizo saber a Male cuando salió del baño.
Ella, aunque no podría creer lo que estaba pasando, sobretodo después de semejante conexión, no quiso propiciar una situación incómodapor lo que adoptó una postura totalmente comprensiva, pese a que por dentro aunhervía de ganas de continuar la noche.
Por otro lado lo que sentía por dentro también era tranquilidad, hace rato no teníasemejante orgasmo y sabía que se había dado una conexión más que interesante,por lo que no tenía duda que se repetiría.

En fin sin dilatar más la situación, Male lo motivo a irse sin problemas, yluego de cambiarse ambos lo acompaño hasta la puerta donde Mateo disculpándosela saludó con un expeditivo beso en los labios para luego desaparecer por lasescaleras, totalmente culposo pensativo y avergonzado por la situación.

2 comentarios - Malena 2

garcheskikpo +1
valio la pena tanta espera jaja.

supongo que Male tendrá que buscar por otro lado ya que con lo que le pasó a Mateo en la última parte da indicios de que nunca mais je.

van puntos