Mi prima mi martirio Capítulo 13.2

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......continuacion

El viernes que salimosun poco antes de la uni, al llegar a casa nos sentamos a estudiar de inmediato,para después salir de “juerga”, estábamos en eso cuando los abuelos salieron ano sé qué, por lo que Fer se puso de pie, caminó hacia mí como una leona va acazar y se sentó en mis piernas… y yo como un león ante una cebra, la abrecé ycomencé a magrearla sin freno alguno, para luego meter mano en sus tetas, lasque con un poco de su ayuda comencé a amasar…. ¡Mmmm!, esas tetas preciosas,redondas, suaves y tersas, que me invitaban a que las comiera… comencé a chuparcon deleite uno de los pezones de mi amada cuando sentimos que la puerta seabría, mi corazón se paralizó, Fer se puso de pie como un resorte al momentoque entran los abuelos… Fer dando la espalda a la puerta de entrada se compusola blusa como pudo y aplastó el sujetador de alguna forma para que no se notaraque ya no estaba en una posición adecuada:

Abuelo: ¿En qué están niños?
Yo: En nada, solo estábamos peleando por la regla,dije indicando una que yo tenía encima de la mesa
Fer: ¿Y qué pasó con su paseo? Preguntó sentándosey cubriendo su prodigioso busto con la misma mesa
Oma: A tu abuelo se le olvidó la bufanda y hace unpoco de frio
Mi corazón volvió a latir normal cuando volvierona salir, asimismo Fer se mantuvo en su asiento estudiando como yo, puesdecidimos que ya nos acariciaríamos cuando saliésemos por la noche, solo de vezen cuando nos mirábamos y lanzábamos besos al aire, pero o destino, nuevamentelos abuelos regresaron cuando justo Fer me lanzaba un beso de esos al aire, elabuelo nos quedó mirando, yo quedé paralizado hasta que Oma intervino…

Abuelo: ¿¡Qué pasa!?
Oma: ¿Ustedes estudian o juegan?
Fer: Un poco de todo... respondió nerviosa
Yo. Fer se burla por que terminó de estudiar, dijeintentando explicar el gesto que vio el abuelo
Abuelo: ¿Y tú?
Yo. Solo me falta terminar unas líneas de mtrabajo y estaré para salir…
Oma: ¿Irán juntos?
Fer: ¡Sí claro!, dijo con voz aliviada.
Abuelo: Claudio cuida a tu prima, ¿entendido?
Yo: Si abuelo
Pasamos a buscar a Nora y fuimos al local habitualpara nuestros escasos fondos y que a Fer le gusta por haber karaoke. Ante minegativa de conducir, en el coche de Fer se fueron Nora y ella parloteando adelante… en realidad lo hice simplemente para no permitirles sus locuras de la tomadade manos.

Una vez en el lugar nos encontramos con Rorro yCoté que estaban con otra pareja, como también otros chicos de la facultad, alparecer todos querían olvidar la presión de la semana recién pasada… alprincipio todo iba bien… cantamos bebimos, comimos, bailamos y la verdad es queme lo estaba pasando de “lujo”, pero sucedió algo… un chico sacó a bailar aNora… eso me hizo hervir la sangre, ¡Nora era mía! (así lo sentí), por lo quele dije:

Yo: Ella está conmigo…
Sujeto: Entonces ¿¡qué tal tu preciosura? Dijorefiriéndose Fer.
Fer: Yo también estoy con él…
Sujeto: Vaya tipo con suerte… Bueno chicas ustedesse lo pierden, jejeje
El chico volvió a su grupo un poco decepcionado ybajo las puyas de sus otros camaradas, la verdad es que había sentido celos porque él se acercó a una de mis dos “Bellas Arpías”… sin dudas me estabacontagiando con la locura de ellas. Para colmo otro chico repitió unainvitación a bailar, esta vez primero a Fer y luego a Nora, ambas invitacionesme cayeron como un puntapié en mis partes nobles, pese a la negativa de laschicas, cosa que no pude disimular y tanto Nora como Fer lo notaron, ante locual me dijeron que fuéramos a otro lado.

Nora: Vamos a otro lado pardillito lindo
Fer: Sí corazón hay demasiada gente
Yo: Bueno vamos
Cuando íbamos saliendo me despedí de Rorro y deCoté, esta última al pasar por su lado me dijo

¿Te vas sin bailar conmigo?
Yo: En otra ocasión, estoy con mi novia
Coté: Jajaja, parece que con las dos, jajaja
Salimos rumbo al coche estacionado a un par decalles, en ese trayecto las dos se colgaron de mis brazos y se pegaron a mí, enese pequeño trayecto salió la siguiente conversación

Fer: Podemos ir a un lugar tranquilo pararegalonear a nuestro chico celoso
Nora: Sí debemos compensar esos celos, jajaja
Yo: ¿Celoso yo?
Fer: Sí, no puedes disimularlo, además eres unlibro abierto para mí, jajaja
Nora: Y para mí, jajaja
Fer: ¿Dónde nos llevarás?
Yo: No sé, la verdad… no se me ocurre.
Nora: Podríamos ir a un motel…
Fer: Sí buena idea…
Yo: Pero…
Nora: No sea tonto y si no tienes mucho dinero tecooperamos.
Fer: Considérate un chico con suerte, tienes dosmujeres que te ayudarán a pagar un cuarto donde las follaras
Yo: ¡Pero ¡qué dices mujer!
Nora: Lo que va a suceder ¿o no quieres?...conociéndote debes andar más que caliente, jajaja
No puedo negar que la oferta era más quetentadora… pero aún no me hacía a la extraña idea de Fer y Nora, pero eraminoría y ellas ganaron, fuimos a un motel cercano que encontramos en internet,afortunadamente entramos de inmediato. Cuando nos bajamos ellas se pararon antela puerta del cuarto y Fer me dijo:

¿No me entrarás en tus brazos?
Yo: ¡Eh!, sí claro…. La tomé en brazos la verdades que su solicitud me sorprendió
Nora: Y a mí también…
Yo: Sí claro, espera un poco
Entré a Fer con rapidez para no hacer esperar a miotra arpía, la verdad es que los 59 kilos de mi perfecta prima se notaron, labelleza y el músculo pesa pensé… luego tomé a Nora y la entré con la mismapremura que Fer, las dos al estar adentro comenzaron a mirar el cuarto como sifueran a comprar una casa, de pronto Fer nos dijo:

Miren que espejos más grandes
Nora: ¿Viste el del techo?
Fer: ¡Oh que grande!
Yo: ¡Jajaja!... ¿no sabías como son estos moteles?
Fer: Solo lo suponía, nunca había estado en uno pardillo.
En eso llamaron a teléfono de la habitaciónpidiéndonos lo que deseábamos de su menú, las chicas pidieron unas gaseosas yyo un jugo de frutas, la chica al teléfono no pudo evitar soltar una risita.Terminado esto y mientras las chicas continuaron con su inspección tocaron porla puerta de servicio trayéndonos lo solicitado y exigiendo el pago delservicio, ante lo cual, tal como habían prometido, hicimos una colecta ypagamos, nuevamente la chica que nos atendía soltó una risita y se marchó.

Miré a mis bellas arpías y sin más me decidí aactuar, llevando mi mano a Nora posándola en su pubis por sobre la falda, ellame sonrió maliciosamente… Fer nos miró sin decir nada, luego se la metí bajo lafalda subiéndola por sus piernas rozándole la tersa piel de los muslos hastallegar con mis dedos hasta la rajita del coño… mientras frotaba mi mano contrael monte de Venus de Nora… Fer se me acercó y me besó con pasión, jugó en elinterior de mi boca con su lengua, por lo que procedí a hacer lo mismo que habíahecho con Nora en su coñito, ella soltó un profundo gemido que me pareció másun estertor que nada… por la humedad al interior de los de los coños de mis dosArpías, podía estar seguro de que estaban tan caliente como yo, pero en eso Ferme dice:

Haznos el amor a las dos
Yo: Eso es lo que haré…
Nora: No queremos un trío pardillito lindo…
Fer: Sí, juntas, pero no revueltas, ¿entiende loque digo?
Yo: ¡Oh claro!
Las dos me miraban con pasión expectante mientrasyo continuaba acariciando sus coñitos… las acariciaba con delicadeza sintiendoel calor y humedad que emanaban, subí un poco más las manos y rozando lasbragas metí mis manos bajo ellas hasta alcanzar su coñito piel con piel, ambaslo tenían depilados… hundí mis dedos medio en su rajita explorando el interior.Casi como si actuase un imán, las dos se pegaron a mí y comenzaron abambolearse como si estuvieran copulando.

Yo: ¿Les gusta?
Las dos: …. Sí, mms ahh… asintieron
Fer comenzó a soltar su falda y sacarse su blusa,cosa que rápidamente imitó Nora, mientras yo sin parar, seguía acariciándolasen su monte de Venus. Ambas siguieron contoneándose mientras se liberaban desus lindos y finos sujetadores para luego restregar sus tetas en mis brazos ypecho.

Nora: ¡Ves Fer de lo que te perdías!… ¿disfrutasde cómo te toca?
Fer: Sí es muy bueno…
Mientras las dos conversaban y se miraban a losojos, las comencé a besar en el cuello alternadamente para luego decirles:

Es hora que liberen a la bestia, jejeje
Nora: No es una bestia, es un gatito regalón, jejeje
Fer: Yo diría que es un conejito, jejeje
Yo: Ya verán como el conejito se les meterá en lacueva, jejeje
Nora; eres un grosero, jajaja
Fer: Sí, pero estuvo buena, jajaja.
No pude evitar reírme de las ocurrencias de lasdos, la verdad es que eran divertidas incluso en cosas serias como el sexo, talvez era una buena forma de tomar las cosas de la vida, mientras pensaba en eso,entre las dos me soltaron el cinturón del jean y rápidamente soltaron al“conejito bestial”

Con un poco de ayuda de mis chicas dejé que susfaldas cayeran al suelo. Las tomé de sus precisos culos y las atraje hacia mí,ambas rápidamente se restregaban contra mis piernas y cadera… el acariciar esospreciosos culos me hizo pensar en que siendo tan diferentes las dos eran tanmaravillosamente atractivas, Nora una morena de bella y estilizada figura teníalos ojos azules y un cuerpo de “Victoria Secrets” que disfrazaba su fuerzapsicológica con su desplante sereno y amistoso. En cambio, Fer una rubia deojos verdes de un cuerpo atlético y voluptuoso irradiaba desplante ysensualidad.

Como pude hundí mi cabeza en las preciosa tetasque tenía a mi disposición mientras les metía mis pulgares en sus ortos y losíndices en sus coñitos, ambas estaban hirviendo y sus contoneos eran alucinantes,ya me parecía que solo deseaban ser poseías por mí… por lo que al no poderdesdoblarme solo se me ocurrió decirles:

Chicas me tenderé en la cama, una se sentará en miamiguito, la otra en mi cara…
Fer: ¿Qué?
Nora: Ay pardilla, a una le comerá el coño mientrasque a la otra la envergará
Fer: ¡Ah!... ¿Y quién primero?
Nora: Tú ensartada primero, jajaja
Fer: Bueno, acuéstate pardillo.
Tal como dije, me tendí en la cama acomodé laalmohada para tener una altura apropiada para comer el coñito de Nora, esta sesubió a la cama pero se sentó en mi cara como si fuera a mirar de frente a Fery metió sus pies bajo la almohada, luego por lo que pude sentir Fer se subió ytomando mi verga se la apuntó a su coñito y se fue ensartando con ellasuavemente, acto seguido, comencé a comerle el coño a Nora mientras con mismanos en su culo la acomodaba para no morir asfixiado. Pronto Fer me cabalgabaa su regalado gusto, pese a que no podía ver a mis chicas, si escuchaba eldiálogo entre ellas…

Nora: Te gusta la verga del pardillo
Fer: Me encanta… ¿Cómo te va con su lengua?
Nora: Como me verás muy bien…
Fer: Si tienes los pezones parados y cara deputita, jajaja.
Nora; Debe ser igual que la tuya zorrita, ademástus pezones no lo hacen nada de mal, ¿los puedo tocar?
Fer: Si me dejas tocar los tuyos…
Nora: Parecen garbanzos, jajaja
Fer: Igual que los tuyos…
Tenía mi boca cansada cuando noté que Nora comenzóa boquear, gemir apretando su coño contra mi cara, tanto que mi nariz quedocasi ensartada en su orto, la verdad que no era lo mejor del sexo, pero me lasbanqué y seguí torturando su hinchado clítoris con mi lengua hasta que secorrió en mi boca… lo sentí por su aumento de flujo de un sabor ocre que ya mecomenzaba a gustar. Nora se inclinó poniéndose casi en cuatro, cosa que mepermitió respirar y verlas a las dos por medio del espejo del techo, era casi unaobra de arte surrealista… Fer instintivamente se apoyó en los hombros de Noramientras aceleraba sus rebotes en mi pubis hasta que en medio de profundosgemidos anunció que se corría como una burra, para luego derrengarse sobre Noraquedando las dos sumidas en un extraño abrazo.

Como pude las hice que se tendieran a mi lado y meacariciaran la verga pues aún no me corría cuando Nora me dijo:

Métemela en el culo…
Fer: ¿La quieres en el culo?
Nora: Sí…
Fer: ¿Po qué?
Nora: Porque así demuestro que soy totalmente deél.
Nora sin repetir su petición se puso en cuatro ala orilla de la gran cama y me miró para que yo reaccionara, cosa que hice.Rápidamente saqué de mi billetera un condón extra lubricado y me lo puse, ellainmediatamente se inclinó y tomando los cachetes de su culito me ofreció suorto perfecto… Ante la atenta mirada de Fer me acerqué a ella por detrás, dejécaer saliva en su orto y le apoyé la punta en el agujerito, ella de solo sentirmi verga en el lugar gimió como gatita en celo. La fui hundiendo en el estrechocanal que se abría con lentitud ante la resistencia de sus paredes, Nora gemíay se quejaba casi en silencio, de pronto Fer dijo…

Va por la mitad Nora, ya llega al fondo
Nora: Ufff… sí lo siento Fer…
Fer: ¿Te duele?
Nora: Un poco al principio, luego mejora….
La hundí hasta el fondo y comencé a culear elmaravilloso orto de Nora, creo que nadie se imaginaría que Nora le gustaba serculeada, mi novia oficial era la chica más deseada y endiosada de la facultad,nadie pensaba que en la cama era tan entregada

Fer: Te llega al fondo… ¿te duele ahora?
Nora: ¡Mmm no pardilla!
Fer: ¡No sé cómo te cabe esa cosa!
Yo: No llames cosa al “conejito bestial”, jajaja
Fer: ¿Ahora lo llamas así?
Seguí con el mete saca del “conejito bestial”, devez en cuando dejaba de mirar el delicioso culo que estaba poseyendo y miraba aNora por medio de uno de los espejos, ella estaba totalmente entregada y con sucabeza hundida en la cama respirando agitadamente mientras con una mano sededeaba su clítoris hasta correrse por segunda vez, me dejó muy cerca de miorgasmo, pero en eso Fer dijo:

¡Me toca!
Fer se puso al lado de Nora imitando su pose, porlo que me salí de Nora y después de besar y acariciar sus nalgas enagradecimiento, hice lo mismo en las de Fer con la diferencia que de pasoensalivé su orto y le metí un dedo para que se fuera acostumbrando a lapenetración y no ocasionarle otro trauma… Fer no dijo nada y se dejó sin más,luego metí un segundo dedo ensalivado, lentamente Fer comenzó dedearse imitandoa Nora, ahora si lanzaba unos gemidos al aire, por lo que apreciaba no estabasufriendo o algo así por lo que apunté la cabeza de mi “conejito bestial” ycomencé a hundirle mi hombría en su orto, lo hice lento y pausado, ella gemíasilenciosamente y se quejaba un poco, pero aguantaba como la mejor, pienso queno quería quedar por debajo de Nora

Cuando creí que mi amada ya estaba bien, comencé acabalgarla como lo hice con Nora, la cual le acariciaba la cabeza y le dabapalabras de ánimo

Nora: Así es pardillita mía, al principio duele unpoco pero ya verás que te gustará
Fer: Mmm, sí, se suave pardillo, que tu “conejitobestial” es muy grande para mi cuevita
Yo: jajaja, sí mi amor, jajaja
Pronto entramos en sincronía y comencé a culear aFer con el mismo deseo y pasión que lo hice con Nora, la cabalgaba asido de sucintura y culo, lo que era una visión celestial, sinceramente era el culo deuna valkiria que recibía a mi amiguito. Pasamos un buen rato en eso hasta quemis continuos mete sacas desencadenaron mi corrida en su interior, ella apurósu dedeo en el clítoris hasta correrse con mi verga debilitándose en suinterior.

Nora: Guau, Fer, te portaste como una verdaderaputita de tu macho, eres lo máximo
Fer: ¿Tú crees?... pero me dolió un poco.
Nora: El sexo es así al principio, pero después esperfecto
Yo: ¿Te gustó corazón?
Fer: Sí, pero me tendrás que llevar en brazos acasa, no sé si pueda caminar, jajaja
Seguí con mis dos chicas en el motel por otra horamás, claro que follamos una vez más, después solo nos acariciamos, claro quefollar lo hicimos por separado, o sea una miraba y la otra actuaba, raro, peroasí fue. En otras palabras, primero fue con Nora y luego con Fer, la que ya alser follada por el coñito se comporta como una preciosa furcia. Según ellatiene un coñito totalmente adaptado a mí y que todos sus contornos estánmarcados a fuego.

Extenuados de tanta actividad nos volvimos a casa,primero dejamos a Nora que nos invitó a pasar a su casa, pero nos negamos lomás cariñosamente que pudimos para no ofenderla, tanto que Fer se quedó en elcoche mientras yo la acompañaba a su puerta. Luego volvimos a casa, donde Ferme dijo que debía cargarla para traspasar el umbral, pensé en negarme, pero almirar sus ojitos preciosos lo hice, terminado ese último gesto de cariño, ellase colgó de mi cuello y me besó con pasión hasta que del fondo del departamentoescuchamos la voz del abuelo preguntando si éramos nosotros.

¿Son ustedes niños?
Fer: Sí abuelo, hemos llegado.
Abuelo: Claudio, no me gusta que llegues tan tardecon Fernandita.
Yo: Perdón abuelo, pasamos a dejar a Nora y se noshizo tarde.
Abuelo: Ahhh, bien vayan a dormir que es muy tarde.
Cada uno fue a su cama sin fuerzas para a nadamás, serían casi las cuatro de la mañana cuando finalmente me dormí, soñé conFer y Nora, de eso estoy seguro, pues misteriosamente recordaba el sueño cuandodesperté a eso de las 10:30 horas.

El sábado fuimos a trotar por la costaneraacompañados por Nora que misteriosamente nos quiso acompañar, pese a que no esde trotar, ya que prefiere una cosa que se llama spinning o algo así, yo soy derespirar aire fresco, jejeje. Paramos un rato en una playa casi desierta,conversamos nos reímos de lo que habíamos vivido hacía pocas horas, la verdades que el estar con ellas era divertido, simple y “casi normal”

El domingo Nora nos invitó a su casa por la tardea ver una película a su casa en compañía de sus padres, ella se comportó comomi novia todo el tiempo, al igual que lo hacía frente a los otros.

Durante la semana siguiente fuimos a launiversidad como de costumbre, las oportunidades que tuvimos Fer y yo deregalonearnos, o hacer cualquier cosa para demostrar lo que realmente nosqueríamos siempre estaban limitadas por el que dirán, pese a que Nora nosayudaba en lo que podía e incluso nos llevaba a su casa a que pudiéramosdesatar todo nuestro afecto (Ella incluía)… pero no era mucho más, pues Noratambién estaba bajo el atento control de sus padres, porlo que no podía hacermucho, en especial después de que su padre puso cámaras de vigilancia en lacasa, aduciendo que habían ocurrido muchos robos en el edificio.

Ya el miércoles estaba que deliraba de deseos porFer o Nora, pero la situación no se daba, por otro lado, estábamos terminandoel ciclo de pruebas y trabajos en nuestras carreras y con eso no se juega odesatiende. De pronto supe que Fer tenía una hora libre que coincidía con miclase con don Casimiro Bellavista (apodo del profesor), por lo que a la hora dealmuerzo se lo comenté a mis chicas, claro que Nora nos miró con cara de pena ydijo:

Yo no puedo, tengo laboratorio a esa hora…
Fer: O sea somos tu y yo pardillo, jejeje… no tevoy a decir que lo lamento Nora, jajaja.
Nora: Suertuda, ya me tocará a mí, jajaja
Fer: Donde iremos pardillo…
Yo: No tenemos mucho tiempo o dinero por lo queiremos a mi escondite secreto.
Nora: ¡¡Al baño!!
Yo: Shito, que todos sabrán…
Nora: Uy perdón.
Fer: ¿¡Un baño!?... ¡me llevarás a un baño!
Nora: Tranquila, no es cualquier baño, no esperfecto, pero está limpio y lo pasarás bien confía en mí.
Fer: Okey, ¿a qué hora y donde nos juntamos?
Concertamos el punto de reunión con mi adoradaarpía y concurrimos cada uno a clase, hasta que llegó la hora señalada (parecetítulo de película, jajaja). Nos encontramos con Fer a que aún estaba algodubitativa en la cafetería, por lo que en el trayecto le expliqué donde era,como entraríamos y los detalles que antes había practicado con las otras chicasincluyendo Nora

De acuerdo a lo planeado Fer entró al baño dediscapacitados del tercer piso en el sector de los decanos un poco antes queyo, el pasillo estaba desierto, pues la mayoría de los decanos y profesores seencontraban dictando cátedra en alguna parte de la facultad. Luego caminé contodo desplante hacia el pasillo y entré después de mirar para no sersorprendido y entré, apenas ingresé una sonriente Fer se colgó a mi cuellobesándome, yo la correspondí, luego ella muy bajito me dijo:

No está mal el baño corazón, jejeje
Yo: Que bueno que te guste corazón…
Fer: No es que me guste, jejeje
Para no seguir en un diálogo que me parecíaestéril, me giré y cerré la puerta con seguro, casi continuamos con nuestrosuave morreo, pese a que la deseaba con intensidad, la tomé por su preciosoculo y la apreté contra mí, para sentirla pegada a mí, luego le solté elcinturón para sentir sus duros cachetes del culo en mi manos, acariciando eseportento de la naturaleza, ella solo emitió suaves gemidos de deseo, noté quevestía una delicada tanguita que se le metía entre sus cachetes… mi amada teníaun culo de “modelo de camionero” si saben a que me refiero, envidiado por todala universidad incluyendo a mujeres, jajaja.

Bajé sus pantalones hasta el suelo, saqué una desus piernas y me senté en el inodoro, ella entendió lo que pretendía y se sentóa horcajadas sobre mí, restregando su coñito oculto por la delicada tanguitacontra mi verga, la que yo ya había liberado, mi deseo me tenía delirando porestar en su interior, tanto que aún no había tocado sus tetas que son casi unfetiche para mí. Tomé el “filo dental” de su tanga tirándola para hacerla a unlado, luego metí mi mano para pajearle su clítoris con dos dedos, ella gimiócuando atrapé su monte de Venus y restregué su coño.

Fer: ¡Uhhmmm! Méteme el “conejito bestial” corazón
Yo: ¿Te acuerdas?
Fer: Nunca se me olvidará, jajaja
No dudé ni un segundo, palpé su coñito con miverga la que encontró el camino a su interior, el ir penetrándola casi me llevaal orgasmo, cosa que casi nunca me sucedía pues soy de un gran aguante, pero mideseo era incontenible, ella comenzó a moverse con pasión como si tuviese muchanecesidad de mí, por mientras mis manos recorrían su cuerpo liberando porcompleto sus deliciosas tetas.

Fer: ¡Cómelas pardillito!... son tuyas
Yo: ¡Sí Fer!, te las voy a comer y partir el coñito
Fer: ¡Mmm que bueno!, mientras no sea mi culito…que casi me dejaste inválida, jajaja
Yo: Eres una loca, jajaja Bueno hermosa abre bienlas piernas y no tocaré tu culito, jejeje.
El sentir sus paredes del caliente coñito cuandoabrazaban mi verga me llevaba al orgasmo casi como un primerizo, pero no estabaen condiciones de impedirlo, afortunadamente ella también estaba igual que yo yse movía como un terremoto gigantesco, sus gemidos fluían por cada estocada quepenetraba a mí amor, ¡mmm que delicia! Fer no se contenía en movimiento solotrataba de aguantar un poco sus gemidos para no matar al decanato de unsíncope, jajaja incluso me mordió mi hombro para no gritar mientras la poseía…afortunadamente no fue fuerte, así y todo me dolió pero permitió que aguantaraun poco más, ambos boqueábamos y gemíamos en susurros

Fer: ¡Me matas!, ¡No sabes cuánto te deseabapardillo!
Yo: Y tú a mí corazón
Fer: Me voy a correr corazón
Yo: Yo también
Comencé a darle desenfrenadamente, Fer reaccionómeneando su culo acompañando mis embestidas, me acariciaba la cabeza mientrasyo le comía sus tetas con fruición… ella de pronto las juntó y sin dejar demoverse hizo que le lamiera los por pezones que estaba como piedras de duros…Fer estaba convertida en una verdadera gata en celo… por lo que pese a suempeño soltaba pequeños gemidos o grititos al ser perforada con algo de rudezade mi parte… ahora nos disfrutábamos como verdaderos amantes.

Yo: Uff amor tienes un culo maravilloso… estáshecha para mi
Fer: Es para ti pardillo … pero hoy no, quierosalir caminando de aquí… Ahhh
Yo: Tienes razón, después no podría cargarte aclases, jajaja
Fer: Estoy que me corro…
Tomé a Fer del su portento de culo y la levantépara sentarla en el lavabo, ella se quejó que ya estaba por correrse, pero yano podía seguir sentado en el váter, pues me dolía el culo, pero sus protestasse acabaron ya que le seguí dando duro mientras estaba al borde del correrme,intenté no hacerlo por lo que varié la velocidad y recorrido de mi amiguito, sibien quería llenarle el coño de leche, no quería que fuera así de rápido. Fertomó mi cabeza y la clavó sus preciosas tetas y luego me dijo:

¡Ahh cómeme las tetas!, no pares.
Yo: Me encantas… pero… si sigo así me voy acoorrreer … ¡ahhh! …
Fer: Córrete pardillito mío, córrete…. ¡Ahhhh!
Yo: Me ¡coorroo!, dije ahogando el grito todo loque pude
Fer: ¡Ahh, sí!... ¡Así! ¡Ahh!
Nos corrimos casi en silencio en el interior delbendito baño del tercer piso, casi en silencio, pero felices de demostrarnosnuestro amor, además que fue un real alivio a mi energía acumulada.

Aún no nos recuperábamos cuando sentimos quegolpeaban la puerta, por lo que tapé la boca de mi amada Fer, ella puso ojos depánico, yo le señalaba que callara, cuando la persona que golpeaba la puertadijo

¡Claudio, se que estás ahí!... ábreme…. Si no meabres seguiré llamando hasta que lo hagas o venga un profesor con un conserje.
Fer: ¿Es Coté?
Yo: Parece que sí…
Coté: Ábreme, lo digo enserio, si me abres nopasará nada.
Fer; ¡Ábrele!
Yo: Pero…
Fer: ¿Tienes otra alternativa?
Yo: No…. ¡está bien Coté, dame un minuto!
Coté: Muy bien, apúrate.
Fer se compuso como pudo mientras yo hacía lomismo, nuestros corazones aún latían aceleradamente presas aún de la pasión ydel miedo al ser descubiertos… pero había sido Coté, podía manejarlo pensé…¿¡Cómo la maldita nos había descubierto!? …

Apenas pudimos la dejamos entrar, ella ingresó conuna cara triunfadora muy ufana que se transformó un poco al ver que la queestaba conmigo era Fer y no Nora, pese a que siempre sospechó de mi atracciónpor ella, luego nos dijo:

Yo: ¿Qué quieres Coté?
Coté: ¿¡Estás con tu prima en nuestro sitiosecreto!?
Yo: Es un baño y sí, ella está conmigo… ¿Por quéeste escándalo?
Coté: Escándalo es si los pillan.
Fer: Vamos Coté, ¿qué es lo que quieres?, no estásaquí como inspectora de moral.
Coté: Solo quería ver por quién me cambió elpardillo.
Fer: No vengas con esas, tú dejaste a Claudio yahora quieres volver para sentirte bien follada
Coté: No lo necesito para follar
Fer: Es cierto, pero nadie folla como Claudio, espor eso que le has asechado, di la verdad y tal vez puedas volver a follar conél.
Coté: ……… Bueno, me gustaría follar con él, laverdad es que dejó la vara un poco alta, ¡joder!
Yo: ¿Cómo supiste que estaba aquí?
Coté: No estuviste en la primera hora de donCasimiro Bellavista…
Fer: ¿Alguien se puede llamar así?
Coté: No, jajaja, es su apodo, jajaja, eresdemasiado crédula.
Yo: Coté, ¿entonces qué pretendes?
Coté: Que me folles… así no diré nada de esto…
Fer: Si lo dijeras nadie te creería…
Coté: Los tengo grabados, cuando le abriste aClaudio, no sale tu cara, pero el se ve muy claro, quieres que tu hombrecitosiga en la Uni….
Yo: ¿Harías eso contra mí?
Coté: La verdad es que no, pero igual me gustaríaque me follaras… incluso si ella quiere mirar lo puede hacer…
Fer: Te das cuenta de lo que dices, pareces unafurcia que le gusta ser mirada.
Coté: Y tu una incestuosa que folla en bañospúblicos…
Fer: Puedes follar con él, pero solo por el culo…
Coté: Acepto, mientras me la meta bien metida…
Yo: ¿Pero están locas?
Coté: Por tu verga…
Fer: Si la follas, dejará de ser un peligro, puesla otra alternativa sería matarla…
Yo: Creo que es más sensato follarla.
Coté: ¿Entonces es un trato?
Fer: Es un trato
Coté: ¿Te vas o te quedas?
Fer: Me quedo y grabaré como te parten el culo,jejeje
Coté: Bueno, no es problema, pero si grabas, estafollada no será la última.
Fer: Siempre que yo lo autorice y esté presente,zorra.
Si mi vida ya era extraña, ahora era inverosímil,que mi ex novia me extorsione para que la folle y mi actual novia lo acepte ymás encima se quede a mirar es de película porno…Podría decir que Coté estabadecidida y era como si un volcán que no había erupcionado en mucho tiempo y quede pronto hiciera una erupción de mucha energía acumulada, se bajó el jeansajustado que tenía puesto, se sacó los zapatos y una pierna del jean, se afirmódel lavabo y empinó su portento de culo diciéndome:

Claudito, ya puedes metérmela y tu si quieresgrabar como tu hombre me parte el culo hazlo
Nos quedamos mirándonos con Fer, ella sacó su móvily comenzó a grabar le extraña escena. Mi verga que pensé estaría sin vigor, seestiró como por encanto, el morbo que me daba el culearme a Coté “frente a lascámaras” era increíble y si la cámara era sostenida por Fer, era superlativo,miré a las dos a través del espejo del baño, las dos tenían cara de putas, perono lo quise mencionar.

Saqué jabón líquido del dispensador y lo puse enmis dedos ensalivados, no quería malograrme por meterla en un culo seco, pormás que fuese tentador dejar sin poder caminar a la furcia de Coté. Rápidamentecomencé a untarle el perfecto orto de Coté, en tanto Fer para obtener mejorestomas, a “la actriz” de su película le sacó casi a tirones las tetas de lablusa y sujetador, me sonrió pérfidamente mientras Coté recibía mis primerascaricias con mi glande en su culo, cuando creí que ya había sido suficientecomencé a meterle lentamente mi verga…

Coté: ¡Uff!... no recordaba que fuese tan grande,mmme estás partiendo el orto
Fer: Muy bien putita, así lo quisiste
Coté: Sí tu novio la tiene grande, jejeje
Mi calentura ya era tan alta como la de Coté… miscaricias en su culo se transformaron en apasionados agarrones y amasada decachetes, que mi ex novia parecía gustarle y agradecer con profundos suspiros ygemidos, Fer por su parte hacía acercamientos que enfocaban como iba penetrandolenta pero progresivamente a Coté.

Coté: Mme vuelves loca pardillo… párteme el culode una vez, ¡sí!, sigue así.
Yo: Si así lo quieres Coté… ¿Qué opinas Fer?
Fer: Déjala que no se pueda sentar por el resto dela tarde, por puta
Mi ex amada en algún momento se metió la mano enel coñito mientras le partía su orto y comenzó a moverse como solo ella podíahacerlo, de pronto me acordé como era capaz de moverse para levantar incluso aun muerto, mi calentura era superlativa le acariciaba el culo y le daba algunasnalgadas que Coté gustaba recibir desde que descubrió ese lado algo masoquistaque tiene, tanto que hasta Fer le dio un par.

Seguí dándole duro pese a lo incómodo le agarréuna de sus tetas, para apretarle un poco el pezón, ella gimió profundo, peroseguía con su movimiento cadencioso. De pronto me dijo:

Siéntate en el váter para que me mueva mejor…
Así lo hice sin sacarla la verga del culo, ella enhorcajadas mirando al espejo comenzó su movimiento endemoniado que hacía que miaguante comenzara a ceder, por lo que con una mano le acariciaba las tetas ycon la otra le torturaba el clítoris, Fer ahora nos grababa de frente y de vezen cuando le daba una cachetada en las tetas… siempre a mi amada Fer le salíafácil ser algo sádica… bueno por algo era una de mis bellas arpías..

No pasaron más de unos pocos minutos cuando Cotécomenzó a anunciar que se corría, por lo que aceleré el mete saca y comencé allenarle el culo de la poca leche que me quedaba, tanto ella como yo sentíamoslos espasmos del culo y mi verga en perfecta armonía, indudablemente Coté erauna maestra en el arte de culear. Ambos quedamos exhaustos, ella se echó haciaatrás sentándose sobre mí, mientras mi verga se iba achicando en su orto, penséque en ningún momento nos dimos besos o caricias, la verdad es que había sidosolo sexo y nada más, el silencio imperante solo se rompió cuando me dijo:

Me mataste pardillo, fue toda una pasada… Fer, metienes que mandar el video.
Fer: ¿Para qué lo quieres?
Coté: Para pajearme cuando no pueda contar con laasistencia de tu novio…
Fer: Si así lo quieres puta loca te lo envío deinmediato, pero si llega a tenerlo alguien más, el pacto queda sin efecto y nofollarás más con Claudio ¡capisci!
Yo: Pero Fer…
Fer: Si la puta de tu ex lo quiere, no tengoproblema…
Coté: Gracias, creo que debemos irnos a clases,luego terminará la hora con don Casimiro Bellavista…
Fer: Me lo tiene que mostrar, jajaja, no puedocreer el apodo, jajaja
Coté: No sé si podré “recuperarme de mis heridasde guerra”, jajaja.
Fer: ¿Te duele el culo?, eso te pasa por ser tanputita, jajaja
Coté: Sí, pero valió la pena, jajaja
Continuará en el último capítulo

0 comentarios - Mi prima mi martirio Capítulo 13.2