Desde hace aproximadamente 6 meses soy felizmente cornudo y me encanta.
Somos una pareja de 23 años (ella) y yo de 25 años. A mediados del año 2020, comencé a incursionar en el mundo cuckold, mis pajas eran imaginarme a mi novia en 4 con un macho metiéndosela en el culo, llenándola de leche.
Un día de diciembre, mientras me chupaba la pija, le comenté sobre cuckold, ella ni sabía que era, así que le expliqué.
Flor - No me atrevería cogerme a otro y menos delante tuyo.
Yo - Quiero verte siendo la puta de otro hombre.
Flor – Ni loca.
Bueno, todo quedo así y se hablaba de tanto en tanto, pero eran solo comentarios. Yo seguía imaginándomela que se la cogían y la bañaban en leche.
En febrero de este año 2021, después de tenerla en cuatro y haberle acabado en el culo, le dije.
Yo – Que hermoso culo bebe, me imagino que todos en el trabajo se deben hacer pajas pensando que te lo parten.
Ella entro a trabajar en un Hospital como seguridad, siempre va con un pantalón de vestir ajustado, igual que la camisa (uniforme). Se rio, a mi comentario.
Yo – ¿Que paso?
Flor – Mi jefe de Seguridad, esta re-fuerte. Tiene 49 años, está casado y 2 hijos.
Yo – Le sacaste todos los datos (le sonreí).
Se rio nuevamente, no sé si por vergüenza o por calentura.
Flor – Ayer me llamo para que vea la sala de cámaras, mostrarme cómo funcionaba todo y presentarse. Mientras subía abrí algunos botones de mi camisa, así se me veían mas mis tetas (se rio). Hablamos del trabajo, se presentó, me presente. No paraba de mirarme las tetas, me pareció que estaba hipnotizado y cada vez que podía me inclinaba para que me las vea más (se volvió a reír nuevamente).
Yo no podía más, tenía la pija durísima nuevamente, me cuesta levantarla luego de acabar, pero ya estaba nuevamente más dura que de costumbre.
Yo – Así me gusta, que seas bien putita (sonrió).
Flor – Se me cayo un papel y me incliné a levantarlo, lo vi por el reflejo de un monitor apagado, que me miraba el culo, creo que, si no me levantaba, me cogía con ropa (largo una carcajada). Me comento que esa sala y dos habitaciones del Hospital, son las únicas que no tienen ninguna cámara. Me dijo que si quería podía ir el jueves (cuando hay menos pacientes), 1 hora antes de irme, así podía mostrarme como se manejan las cámaras.
Yo – ¿Le dijiste que sí?, me imagino
Flor – le dije que vería. Amor, con la cara que veía mis tetas y culo, quiere cogerme.
Yo – ¡Claro amor!, tenes un culo hermoso, unos cuantos quieren cogerte.
Flor – ¿Seguís queriendo ser cornudo? (se puso colorada).
Yo - Siiiiiii bebe. Mírame la pija como la tengo.
Le agarre la cabeza y le cogí fuertemente la boca, no aguantaba más, pensaba que un macho se la iba a coger y le llene la boca de leche.
El miércoles, fui a comprarle lencería de encaje, medias y un perfume. Le dije que no era para que lo estrene conmigo.
El jueves, ¡el día! Me calentó muchísimo verla arreglarse para otro hombre, la pija la tenia a mil y los pensamientos más, ella noto mi erección. Se acerco mientras se pintaba y me floto la pija.
Flor – mmmmm, ¿es porque estoy así o porque sabes que hoy vas a ser cornudo?.
Yo – Cuando vuelvas quiero todo con lujos de detalle.
Flor – Si amor.
Todo el día estuve pensando y cuando llegaron las 6 de la tarde, una hora antes de irse, no podía más, sentía que mi pija estaba por estallar.
Apenas llego a casa, me dio un beso en la boca y tenía un gusto saladito.
Flor – Bueno amor, sos legalmente CORNUDO. Después te cuento, me voy a bañar porque me acabo en el culo.
Yo – deja que yo te limpio, bebe.
La di vuelta y le bajé el pantalón, le comencé a lamer el culo y sentía que me lengua entraba sin problemas, cuando normalmente me cuesta un poco. Aún tenía rastros de semen, no sé porque, pero me trague todo y me gustó muchísimo. La escuchaba gemir y cada segundo me calentaba más.
Yo – Cométame todo, putita.
Flor – Subí tipo 6:10, porque fui al vestuario a arreglarme un poquito. Estaba muy arreglado, creo que me estaba esperando (sonrío).
Carlos – Hola Flor, estas hermosa, sentate acá que te muestro como manejar las cámaras.
Flor – Gracias (sonreí).
Se paro detrás mío, pero el respaldo de la silla no permitió que me apoyara. Se inclino sobre mi (estoy segura que me miraba las tetas) y agarro una palanquita que movía la cámara. Suavemente me rozaba la teta, así que me di vuelta para hacerle una pregunta y le apoyé mis tetas en su brazo.
Flor – ¿Todas las cámaras pueden moverse?
Se me paro al lado de la silla, me señalo las cámaras que son fijas y sentía como me apoyaba la pija a mi brazo que estaba en el apoya brazos. La sentía dura. Seguía hablando, no sé de qué (porque no podía pensar en otra cosa que no sea su pija), y me apoyaba cada vez mas fuerte la pija en el brazo.
Lo miré a la cara y luego a su pija y le dije:
Flor – Algo quiere salir a tomar aire.
Carlos – Si, vamos a dejar que salga.
Se abrió el cinturón y pantalón, dejando al aire libre su pija. Era enorme, bien gruesa y se le podían ver las venas en los costados.
Carlos – Quiere saludarte, ¿no le vas a dar un besito?
Se la agarre, le corrí la pielcita para atrás, dejando la punta al aire libre y le di un besito, después otro y otro. Mientras le chupaba la pija, se comenzó a sacar toda la ropa.
Carlos – Sácate la ropa bebe, así no la ensuciamos y tu novio no se da cuenta.
Cuando ambos estábamos desnudos, se sentó en una silla y me agarro del pelo, llevándome la cara a su pija, me trato de meter toda la pija en la boca, pero no me entraba. Le chupe hasta los huevos. Me agarro nuevamente de los pelos, levantándome.
Carlos – Párate puta, sentate acá que quiero clavártela en la concha.
Me tomo de la cintura y me acerco a él, mientras me daba besos en las tetas, me comenzó a empujar así su pija, lentamente me sentaba porque dolía un poco. Sentía que explotaba, cuando la sentí toda adentro, comencé a galoparlo, mientras me metía dedos por el culo y me mordía los pezones.
Tuve muchísimos orgasmos, perdí la cuenta. En un momento dado, nuevamente me agarra del pelo (creo que le encanta) y me susurra al oído.
Carlos – Ahora sos mi puta, nadie lo debe saber.
Flor – Si papi, soy tu putita.
Carlos – Ahora en cuatro que quiero llenarte el culo de leche.
Pensé que nunca me lo pediría (largo una carcajada). Me puse en cuatro y le dije.
Flor – Despacio que nunca tuve una pija tan grande en el culo y no quiero que mi novio se entere que un macho me coge.
Carlos – Tranquila puta, te voy a coger bien despacito.
Me puso un montón de saliva en el culo y se escupió la pija. Sentí como su pija buscaba mi ano y me susurro en el oído.
Carlos – Ahora vas a saber que hacen los machos con sus putas.
Yo en este momento, ya me estaba haciendo una paja y no daba más, así que acabe y salpique toda la mesa.
Flor – Amor, ¿ya acabaste?, falta.
Ella seguía. Sentí como me abría las nalgas y como su pija empujaba para entrar. Entraba despacito, me ardía muchísimo, pero no quería que pare, entraba un poquito y salía, a cada ratito ponía mas saliva. En un momento dado.
Carlos – Bien puta, te entro toda. Sos mi propiedad!!!
Salía y entraba, primero despacio después tomo impulso, hasta que me agarro del pelo y me comenzó a meter y sacarla fuertemente del culo. Acabe justo cuando me comenzó a llenar el culo de leche, la senti latir dentro de mi culo y como me llenaba de leche.
Carlos – Sos perfecta puta.
Apenas me la saco del culo, me di vuelta y se la comencé a chupar para limpiarle cada gotita de semen. Me limpie un poco y nos cambiamos.
Carlos – Gracias putita, me encanto. Nunca acabe tanta leche, bebe. Estos encuentros van a seguir, putita. Nadie tiene que saber de esto.
Flor – Eso espero, papito.
Me dio un fuerte beso en la boca y me fui.
Yo – ¿Te gusto, ser putita de otro hombre?
Flor – Si amor, me encanto, gracias!. Jamás hubiera pensado que era así. ¿Puedo seguir cogiendo con él?
Yo – Si, amor, con quien quieras. Siempre avísame antes, así te espero con una linda chupada de concha.
Así de tanto en tanto me envía un whatsapp, diciéndome que va a cámaras para aprender a manejarlas bien. Tuvo unos encuentros con médicos, pero eso son para otro momento.
Comenten, que Flor también lee.
Somos una pareja de 23 años (ella) y yo de 25 años. A mediados del año 2020, comencé a incursionar en el mundo cuckold, mis pajas eran imaginarme a mi novia en 4 con un macho metiéndosela en el culo, llenándola de leche.
Un día de diciembre, mientras me chupaba la pija, le comenté sobre cuckold, ella ni sabía que era, así que le expliqué.
Flor - No me atrevería cogerme a otro y menos delante tuyo.
Yo - Quiero verte siendo la puta de otro hombre.
Flor – Ni loca.
Bueno, todo quedo así y se hablaba de tanto en tanto, pero eran solo comentarios. Yo seguía imaginándomela que se la cogían y la bañaban en leche.
En febrero de este año 2021, después de tenerla en cuatro y haberle acabado en el culo, le dije.
Yo – Que hermoso culo bebe, me imagino que todos en el trabajo se deben hacer pajas pensando que te lo parten.
Ella entro a trabajar en un Hospital como seguridad, siempre va con un pantalón de vestir ajustado, igual que la camisa (uniforme). Se rio, a mi comentario.
Yo – ¿Que paso?
Flor – Mi jefe de Seguridad, esta re-fuerte. Tiene 49 años, está casado y 2 hijos.
Yo – Le sacaste todos los datos (le sonreí).
Se rio nuevamente, no sé si por vergüenza o por calentura.
Flor – Ayer me llamo para que vea la sala de cámaras, mostrarme cómo funcionaba todo y presentarse. Mientras subía abrí algunos botones de mi camisa, así se me veían mas mis tetas (se rio). Hablamos del trabajo, se presentó, me presente. No paraba de mirarme las tetas, me pareció que estaba hipnotizado y cada vez que podía me inclinaba para que me las vea más (se volvió a reír nuevamente).
Yo no podía más, tenía la pija durísima nuevamente, me cuesta levantarla luego de acabar, pero ya estaba nuevamente más dura que de costumbre.
Yo – Así me gusta, que seas bien putita (sonrió).
Flor – Se me cayo un papel y me incliné a levantarlo, lo vi por el reflejo de un monitor apagado, que me miraba el culo, creo que, si no me levantaba, me cogía con ropa (largo una carcajada). Me comento que esa sala y dos habitaciones del Hospital, son las únicas que no tienen ninguna cámara. Me dijo que si quería podía ir el jueves (cuando hay menos pacientes), 1 hora antes de irme, así podía mostrarme como se manejan las cámaras.
Yo – ¿Le dijiste que sí?, me imagino
Flor – le dije que vería. Amor, con la cara que veía mis tetas y culo, quiere cogerme.
Yo – ¡Claro amor!, tenes un culo hermoso, unos cuantos quieren cogerte.
Flor – ¿Seguís queriendo ser cornudo? (se puso colorada).
Yo - Siiiiiii bebe. Mírame la pija como la tengo.
Le agarre la cabeza y le cogí fuertemente la boca, no aguantaba más, pensaba que un macho se la iba a coger y le llene la boca de leche.
El miércoles, fui a comprarle lencería de encaje, medias y un perfume. Le dije que no era para que lo estrene conmigo.
El jueves, ¡el día! Me calentó muchísimo verla arreglarse para otro hombre, la pija la tenia a mil y los pensamientos más, ella noto mi erección. Se acerco mientras se pintaba y me floto la pija.
Flor – mmmmm, ¿es porque estoy así o porque sabes que hoy vas a ser cornudo?.
Yo – Cuando vuelvas quiero todo con lujos de detalle.
Flor – Si amor.
Todo el día estuve pensando y cuando llegaron las 6 de la tarde, una hora antes de irse, no podía más, sentía que mi pija estaba por estallar.
Apenas llego a casa, me dio un beso en la boca y tenía un gusto saladito.
Flor – Bueno amor, sos legalmente CORNUDO. Después te cuento, me voy a bañar porque me acabo en el culo.
Yo – deja que yo te limpio, bebe.
La di vuelta y le bajé el pantalón, le comencé a lamer el culo y sentía que me lengua entraba sin problemas, cuando normalmente me cuesta un poco. Aún tenía rastros de semen, no sé porque, pero me trague todo y me gustó muchísimo. La escuchaba gemir y cada segundo me calentaba más.
Yo – Cométame todo, putita.
Flor – Subí tipo 6:10, porque fui al vestuario a arreglarme un poquito. Estaba muy arreglado, creo que me estaba esperando (sonrío).
Carlos – Hola Flor, estas hermosa, sentate acá que te muestro como manejar las cámaras.
Flor – Gracias (sonreí).
Se paro detrás mío, pero el respaldo de la silla no permitió que me apoyara. Se inclino sobre mi (estoy segura que me miraba las tetas) y agarro una palanquita que movía la cámara. Suavemente me rozaba la teta, así que me di vuelta para hacerle una pregunta y le apoyé mis tetas en su brazo.
Flor – ¿Todas las cámaras pueden moverse?
Se me paro al lado de la silla, me señalo las cámaras que son fijas y sentía como me apoyaba la pija a mi brazo que estaba en el apoya brazos. La sentía dura. Seguía hablando, no sé de qué (porque no podía pensar en otra cosa que no sea su pija), y me apoyaba cada vez mas fuerte la pija en el brazo.
Lo miré a la cara y luego a su pija y le dije:
Flor – Algo quiere salir a tomar aire.
Carlos – Si, vamos a dejar que salga.
Se abrió el cinturón y pantalón, dejando al aire libre su pija. Era enorme, bien gruesa y se le podían ver las venas en los costados.
Carlos – Quiere saludarte, ¿no le vas a dar un besito?
Se la agarre, le corrí la pielcita para atrás, dejando la punta al aire libre y le di un besito, después otro y otro. Mientras le chupaba la pija, se comenzó a sacar toda la ropa.
Carlos – Sácate la ropa bebe, así no la ensuciamos y tu novio no se da cuenta.
Cuando ambos estábamos desnudos, se sentó en una silla y me agarro del pelo, llevándome la cara a su pija, me trato de meter toda la pija en la boca, pero no me entraba. Le chupe hasta los huevos. Me agarro nuevamente de los pelos, levantándome.
Carlos – Párate puta, sentate acá que quiero clavártela en la concha.
Me tomo de la cintura y me acerco a él, mientras me daba besos en las tetas, me comenzó a empujar así su pija, lentamente me sentaba porque dolía un poco. Sentía que explotaba, cuando la sentí toda adentro, comencé a galoparlo, mientras me metía dedos por el culo y me mordía los pezones.
Tuve muchísimos orgasmos, perdí la cuenta. En un momento dado, nuevamente me agarra del pelo (creo que le encanta) y me susurra al oído.
Carlos – Ahora sos mi puta, nadie lo debe saber.
Flor – Si papi, soy tu putita.
Carlos – Ahora en cuatro que quiero llenarte el culo de leche.
Pensé que nunca me lo pediría (largo una carcajada). Me puse en cuatro y le dije.
Flor – Despacio que nunca tuve una pija tan grande en el culo y no quiero que mi novio se entere que un macho me coge.
Carlos – Tranquila puta, te voy a coger bien despacito.
Me puso un montón de saliva en el culo y se escupió la pija. Sentí como su pija buscaba mi ano y me susurro en el oído.
Carlos – Ahora vas a saber que hacen los machos con sus putas.
Yo en este momento, ya me estaba haciendo una paja y no daba más, así que acabe y salpique toda la mesa.
Flor – Amor, ¿ya acabaste?, falta.
Ella seguía. Sentí como me abría las nalgas y como su pija empujaba para entrar. Entraba despacito, me ardía muchísimo, pero no quería que pare, entraba un poquito y salía, a cada ratito ponía mas saliva. En un momento dado.
Carlos – Bien puta, te entro toda. Sos mi propiedad!!!
Salía y entraba, primero despacio después tomo impulso, hasta que me agarro del pelo y me comenzó a meter y sacarla fuertemente del culo. Acabe justo cuando me comenzó a llenar el culo de leche, la senti latir dentro de mi culo y como me llenaba de leche.
Carlos – Sos perfecta puta.
Apenas me la saco del culo, me di vuelta y se la comencé a chupar para limpiarle cada gotita de semen. Me limpie un poco y nos cambiamos.
Carlos – Gracias putita, me encanto. Nunca acabe tanta leche, bebe. Estos encuentros van a seguir, putita. Nadie tiene que saber de esto.
Flor – Eso espero, papito.
Me dio un fuerte beso en la boca y me fui.
Yo – ¿Te gusto, ser putita de otro hombre?
Flor – Si amor, me encanto, gracias!. Jamás hubiera pensado que era así. ¿Puedo seguir cogiendo con él?
Yo – Si, amor, con quien quieras. Siempre avísame antes, así te espero con una linda chupada de concha.
Así de tanto en tanto me envía un whatsapp, diciéndome que va a cámaras para aprender a manejarlas bien. Tuvo unos encuentros con médicos, pero eso son para otro momento.
Comenten, que Flor también lee.
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