La ex de mi amigo

El dia que conoci a Carla, en casa de mi amigo, me encantò. Es la típica turrita fiestera que cuando està en pareja se hace la señora pero cuando està soltera no deja títere con cabeza.
En ese momento Carla y rodrigo apenas empezaban a salir, una relacion postergada por la diferencia de edad y las dificultades que eso conlleva. Aunque estaba claro que ella nunca dio importancia a ese tema como si lo habia hecho èl, teniendo en cuenta que al dialogar me di cuenta que ya contaba con varias carreras a pesar de sus escasos 20 años.
Ahora bien, por ser la novia de mi amigo siempre contuve las ganas de chamuyacharmela como a cualquier otra minita, puesto que allà por el 2018 sentia un respeto y una lealtad hacia Rodrigo que hoy, por cosas que ha hecho, no siento.
No fue sino hasta noviembre de 2020, momento en que atravesaban su cuarta o quinta separaciòn debido a los celos inagotables de èl, que ella por primera vez me dejò entrever que estaba interesada en mi. Un dia volviendo de trabajar nos cruzamos en la calle y propuse acompañarla unas cuadras ya que nuestro barrio es un poco peligroso. Palabras van palabras vienen, me tira unos palos y me hice el bolu porque sabia que era cuestion de tiempo para que volvieran. Aunque si decidi pedirle el número para mantener un contacto màs fluido, a lo cual ella correspondiò.
Paralelamente a la confianza que se iba gestando entre Carla y yo, mi amistad con Rodrigo se iba desgastando a causa de su conducta de drogadicto que lo llevaba a creer que yo era una especie de cajero automático. Esto y una serie de cosas que no vienen mucho al caso, condujeron a que comience a tirarle uno que otro lance a este bomboncito que ya miraba con otros ojos. O mejor dicho que empezaba a contemplar la posibilidad de buitrear a mi amigo.
Un dia volvieron como era de esperar, y como era de esperar tambien duraron lo que un pedo en la canasta. La diferencia entre esta y todas las otras veces es que ella tuvo la iniciativa, por lo que deduje que esta vez era especial, que podria ser definitivo y me dije: es ahora o nunca. Asi que decidi cortar con esas esporadicas conversaciones y esperar que ella le de un indicio de estar interesada. Y asi fue, a las pocas semanas llegò el dia de mi cumpleaños y me saludò por whatsapp. Mensaje va, mensaje viene la cosa empezò a tomar temperatura y dos dias mas tarde estabamos coordinando para ir al telo.
Yo tengo mujer y mi amigo vive en el barrio, Carla barrio de por medio. Pero no me importò nada, las ganas que le tenia eran tal que llegò el sabado y la pasè a buscar a seis cuadras de la casa y nos fuimos directo al telo. En el camino la hice pelar tetas y chuparme bien la pija, no hablabamos. Solo se iba dando. Llegamos al telo y entramos.
Antes de seguir voy a dar una breve descripcion de Carla: gordibuena, tetas grandes y bastante firmes, metro sesenta, cintura bien marcada y un ojete con esas nalgas grandes y macizas que invitan a cachetear todo el dia. La conchita bien depilada y para mi sorpresa bastante estrecha.
Lo primero que hice fue hundirme en su entrepierna y comerle esa conchita divina, le meti la lengua y la calentura era increible. Le chupe la concha hasta que acabò y se mojò como una yegua, esos fluidos estaban riquisimos. Despues la hice chuparme la pija otro buen rato y le ordenè que se ponga en cuatro y como putita obediente lo hizo sin chistar. Le empecè a chupar el ojete y la volvi a calentar bien, cuando apoyè la cabeza de la pija en la entrada de su culo quiso protestar pero fue inutil, notè que a pesar de su aparente rechazo, su ano se relajaba y preparaba para recibir carne. Asi que la empecè a meter de a poco, metia un pico y dejaba que se acostumbre aunque no hacia mucha falta. La garchè por el ojete unos quince minutos hasta que tuvo otro orgasmo y casi me hace acabar a mi tambien pero me contuve.
Despues la llevè a una de esas camillas que suele haber en los telos y la acostè boca arriba para poder apreciar el espectaculo. La tuve bombeando con toda las ganas durante unos cuarenta minutos y sinceramente perdi la cuenta de los orgasmos que tuvo, cuando ya no aguantè màs le larguè toda la leche adentro. Sentí que nunca habia eyaculado tanto semen y fue hermoso.
Al dia siguiente dejè de escribirle y responderle los mensajes. Siento que ya me saquè las ganas de esa putita

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