Las amiguitas de mi novia

Bueno soy Alex nuevamente, en esta ocasión les voy a contar una historia que toma lugar antes de que todo se fuera a la mierda. Como todos los años con la llegada de los calores, las fiestas se hacían mas frecuentes, y luego de tanto aburrimiento un día decidí salir con mi novia a una de las tantas fiestas que organizaban sus compañeras de la facultad. Entre nuestros circulos ya sabían de sobra que éramos una pareja abierta, pero aun así no dejaban de sorprenderse. Esa noche no iba a ser particularmente especial. Cuando llegamos me di cuenta que estaba lleno de chicas bastante mas chicas, de unos 19/20 años, particularmente no me llamaban la atención porque ya hacia bastante que solo buscaba chicas de como mínimo 26, así que a pesar de que eran bastante atractivas decidí disfrutar la noche tomando algunos tragos y buscando alguna charla interesante. Como me lo supuse, el centro de atención éramos nosotros, las preguntas iban y venían, pero por lo menos no duro toda la noche, cuando se cansaron de preguntar tanto, se comenzaron a dispersar y al fin pude estar en paz un rato. Mientras me divertía ver como un compañerito de mi novia la trataba de seducir, a medida que el alcohol fluía ella fue cediendo a la tentación del pendejo. Sin darme cuenta en cierto momento ya se habían ido bastantes pibas, y solo quedaban algunas en pareja, cada cual chamuyando por su lado, en cierta forma me calentaba mucho toda esa energía y calentura que rondaba el ambiente, por poco no estaban garchando en el medio del comedor. Sin darme cuenta empecé a fantasear un poco con lo que el pendejo le quería hacer a mi novia, en mi cabeza ya la veía a ella chupándole la pija hasta dejarlo seco. De repente Clara, una de las que mas conocía, se me acerco y me pregunto como estaba. Me sorprendió bastante verla esa noche, Clarita como le decía tenía 22, era muy linda pero siempre estaba vestida de una forma bastante rescatada, nunca mostrando nada espectacular, sin embargo esa noche estaba vestida con una pollera bastante cortita, y una blusa muy escotada, a decir verdad con lo que había bebido sumado a las ideas que e rondaban en la cabeza, pude sentir como se me ponía dura un poco. De repente ella corto la fantasía.
C: Alex, tendrás un cigarrillo?
A: Si si, quieres que compartamos uno, justo estaba por salir a fumar (en ese entonces no había drama con andar compartiendo cigarrillos ni vasos, extraño esas épocas)
Ambos encaminamos hacia el balcón, porque el aire estaba bastante viciado, pero apenas nos acercamos vimos a una parejita bastante caliente apretando zarpadamente, ella me miro y sonrió.
C: vamos a las escaleras que este lugar esta tomado...
Salió caminando hacia la escalera y la seguí instintivamente, yo realmente solo quería fumar jaja, a pesar de lo linda que estaba no iba intentar nada con ella. Cuando salimos afuera, prendí el pucho, le pegue una seca y se lo di a ella, no habrán pasado un minuto cuando ambos nos percatamos de que escuchábamos unos ruidos raros venir de la escalera mas abajo. Grande fue la sorpresa de ambos cuando allí vimos a mi novia con el pendejo, no solo que estaban apretando sino que la pija de el estaba al aire y la muy guacha lo estaba pajeando a la vez que el le había mandado una mano curiosa en la conchita, hipnotizados nos quedamos viendo la situación sin decir nada. Yo podía sentir como la erección crecía descontroladamente y sin darme cuenta me empecé a tocar disimuladamente por encima del pantalón tratando de aliviar un poco la situación, entonces fue que me di cuenta que Clarita, no estaba mirando la situación mi novia sino que me miraba el bulto, a la ve que se apretaba la pierna clavando sus uñas, fue entonces que me di cuenta que por la pierna le caía un hilo de fluido, su respiración era profunda y aspiraba el cigarrillo profundamente. De malvado que era, la toque para pedirle el cigarrillo, ella me miro a los ojos y se dio cuenta que la estaba mirando, asustada y avergonzada se limpio con la mano rápidamente, me dio el cigarrillo y me dijo que se tenia que marchar.
C: Ale, me voy ya...
A: Quieres que te acompañe...
C: pero como la vas a dejar sola a ella?
A: te parece que esta sola, jaja, de paso aprovecho y me voy a mi casa que no esta lejos. Después ellos se arreglaran.
Llamamos el ascensor, porque obviamente no nos íbamos a ir por las escaleras y subimos al diminuto ascensor, ella no me podía mirar a los ojos, así fue que llegamos a la calle sin decir una palabra. Seguidamente enfilamos para su casa, en el camino no hablo mucho, solo me hizo algunas preguntas. Sin embargo una cuadra antes de su casa respiro profundo y me dijo
C: Ale, no sentís nada cuando la ves así con otro pibe.
A: En realidad quieres que te cuente lo que siento cuando la veo así de.... 
C: así de putita? Si jaja
A: jajaja la verdad que me calienta mucho
Ella empezó a sonreír y me di cuenta como había cambiado el animo. Sin darnos cuenta estábamos en la puerta de su edificio ya. Así que sin mas atine a despedirme, le di un beso en el cachete que probablemente y de manera intencional duro mas de lo normal. Me tome mi tiempo y sentí ese perfume florado estaba usando.  Entonces le dije adiós y me pegue la vuelta. 
C: Eu, quieres subir a tomar un cafecito. 
Por dentro al oír eso me sentía que lo que vena planeando desde que la vi mirarme el bulto había dado resultado, ella sola me estaba invitando a su lugar. Me volví a voltear hacia ella y asentí con la cabeza. Ella abrió la puerta del edificio y yo la seguí hasta el ascensor. Cuando las puertas se cerraron, ella me miro a los ojos de otra manera y sonriendo me dijo que no tenia café. Sin dudarlo la tome de la cintura, la arrime a mi cuerpo y pude sentir un leve suspiro antes de comerle la boca, me detuve dos segundos y la mire a los ojos.
A: bueno no importa si no hay café, me voy a servir de vos.
La agarre del culo por debajo de la pollera y me la volví a apretar, podía sentir retorcerse en mis manos, a la vez que sentía su lengua desatada. Cuando el ascensor se detuvo, paramos un instante y nos fuimos directamente a su puerta, mientras ella buscaba la llave, yo intentaba despejar mi cabeza. Entre detrás de ella y cerré la puerta. Ella se encamino directamente a la habitación , se volteo y se sentó mirándome a los ojos. Yo me arrodille en frente de ella y la atraje con mis manos hasta la orilla de la cama, al hacer esto ella abrio de par en par sus piernas dejando ver una tanguita blanca, la cual estaba toda húmeda, sin dudarlo lleve mis manos por debajo de su falda y la baje hasta las rodillas, dejando al descubierto una conchita hermosa, toda depilada. La tentación era demasiado, así que sin mas demoras se la comencé a chupar descaradamente, estuve un rato ahí, probando de sus fluidos, a la vez que ella se recostó y comenzó a gemir , mientras me concentraba e su clítoris y aproveche a meterle un dedo, de repente pude sentir como esa concha empezaba a tener un orgasmo, sus músculos se contraían con fuerza sobre mis dedos a la vez que sus gemidos aumentaban en intensidad y profundidad.  Cuando hubo acabado, se distancie un poco y deje que se recuperara unos segundos, ella entonces se puso de pie, el sudor caía de su rostro y se perdía dentro de su blusa que estaba toda transparentada, permitiéndome ver sus pezones duros. Me hizo ponerme de pie y me beso zarpadamente sin importa que estuviera todo enchastrado. Mientras apretábamos me cambio de lugar y me tiro sobre la cama. Entonces se me subió encima y me comenzó a sacar el pantalón, hasta que mi pija quedo libre, la observo atentamente unos segundo y luego me la tomo con las manos y me empezó a pajear, no duro mucho hasta que su boca también estaba ahí. Me di cuenta que en un principio le costaba metérsela entera, pero con unos intentos llego a fondo. Luego de chuparla por unos minutos se paro nuevamente, se levanto la falda y se quito la tanga para estar mas cómoda, y se volvió a subir encima, esta vez apoyándome esa conchita sobre mi verga dura. Como si fuera en cámara lenta pude ver toda la secuencia de como mi pija se perdía adentro de ella, no solo que estaba toda mojada, sino que el calor que tenia se transmitía perfectamente a mi miembro que comenzaba a entrar y salir a su ritmo. Mientras me montaba podía ver su tetas saltar dentro de esa blusa, eran la cosa mas hermosa del mundo, hermosas y gigante, no pude evitar llevar una mano allí y arrancarle la blusa, liberando esas bellezas, entonces se hecho encima mío apoyándome sus tetas en mi cara, situación que aproveche para chuparle esos pezones duros. A ese punto ambos estábamos todos sudados, recubiertos por todo tipo de fluidos corporales que se puedan imaginar. Hacia rato que no sentía esa energía tan joven a la hora de coger. Entonces la retire de mi cuerpo, y la hice a un costado, la voltee, e hice que se pusiera en cuatro, donde la empecé a coger de nuevo, en cierto punto con una mano la tome de la nuca y empuje su cabeza contra el colchón, ahogando sus gemidos y empecé a darle con todo, estuve unos minutos así hasta que volví a sentir esas contracciones sobre mi pija esta vez. Aun no estaba listo para eyacular yo, sin embargo ella satisfecha se volvió a para, y esta vez fui yo quien me senté con la pija dura al pie de la cama, creí que la iba a chupar, pero lo que hizo a continuación fue por lejos mucho mejor. Me tomo la pija entre sus pechos y lubricando con algo de saliva y sudor me empezó a hacer tremenda turca, a su vez no me quitaba los ojos de encima lo que me desencadenó una eyaculación tan grande que llego hasta su boca, bañandole las tetas en leche, termino de limpiar su trabajo con su boquita y luego se me arrimo, no pude evitar chuparle el semen de las tetas, hasta que ambos quedamos tirados y exhaustos en la cama.
En eso suena el celular, era mi novia para decirme que se había ido a la casa del pibe este a garchar, que no la esperara. Seguidamente llego un audio de ella donde me decía, si habíamos disfrutado el show de la escalera. La hija de puta sabia bien lo que hacia, situación ante la cual no pude evitar comenzar a reír. Cuando volteo para contarle a Clarita, me doy cuenta que ella había caído presa del cansancio y se había quedado dormida. Me levante y busque el ultimo cigarrillo que tenia y salí al balcón el bolas a fumar, no me importaba nada ya, mientras terminaba el cigarro voltee a ver ese hermoso cuerpo desnudo en la cama, y de solo pensar en al cogida que le iba a pegar cuando nos despertáramos ya la tenia dura de nuevo, tire la colilla por el balcón, (apagada claro esta, soy un hijo de puta pero tampoco tanto) y me fui a recostar a su lado, apenas me tire, pude sentir el calor de su cuerpo abrazándome. Lentamente comencé a cerrar los ojos hasta quedar muerto.

4 comentarios - Las amiguitas de mi novia

CrossaA
Buenísimo!! Van ptos
Openmind78
Excelente relato. Me calentó mucho imaginarme en tu situación.