Sexo Real y Delirante parte 1

Sexo Real y Delirante ( parte uno).



Esto le pasó a la cuñada de una amiga........( Por Ana de Peralta de Buenos Aires )....../

...Conocí a Ana por las redes sociales y cuando me contó esta historia me desespere por escribirla. Nos llevó meses de idas y vueltas hasta que tomo la forma que a ella le hubiese gustado contarla. 
No fue fácil por el dolor que le causaba , pero al final fue un acto de liberación para superar ciertos dolores del alma. Mucho de lo que van a leer en este relato esta basado en hechos reales y otras, podrían llegar a ser producto de la imaginación de una mujer desesperada por el sexo , o tal vez NO.
Todo queda a su criterio querido lector . Tomen fuerte sus ordenadores y prepárense para leer algo fuera de lo común. Gracias .
Si desean compartir sus secretos o confesiones les dejo mi e-mail:
Soniadoraescritora@gmail.com.

Gracias por leer y opinar.

Soniadora1962.
M. Grande.


Sexo con el Pombero:

" ..En un pueblito de la Formosa profunda vivía la karina , una joven y bella mujer de 24 años. De piel muy blanca , cabello negro y largo hasta la cintura. Sus ojos eran de color almendra , enmarcados por unas muy largas pestañas. Salió segunda en un concurso de belleza interprovincial por no saber usar zapatos con tacones. 
Por andar de muy pequeña por los campos y por subirse a las plantas nunca necesito de un calzado.

Madre de un nene de cinco y señora de Juan Carlos, maestro mayor de obra. Vivían humildemente en una casita de machimbre aislados del poblado.

Antes de las cinco de la mañana se levantaba para hacerle el mate a su esposo y lo acompañaba a la ruta para que tomará el colectivo, que lo llevaría a la nueva obra que lo había contratado. 

Eran muy felices. El techo y el pan no les faltaba.

Un día , como tantos, volviendo por un sendero de vegetación muy tupida, a su casa, se encontró con un enano, peludo y no tan feo, de aspecto inofensivo que jugaba con una ramita, mientras le silbava a las aves y estás les contestaban. Según la leyenda lo llamaban Pombero ("Karai Pyhare, en guarani). 

Este mito de la noche era de mirada dulce y portador de una gran timidez . Siguio a la Karina hasta la puerta de su casa como un perro Guardián.
Antes de que saliera el sol, desaparecío hasta el otro día y la rutina se empezó a repetír día tras día.
No todos lo pudíeron ver y cuando la Karina lo mencionaba se le reían en la cara. Pero como el Pombero todo lo ve , castigaba sin saña a los burlones que la ofendian.

Escondía ganados, rompía techos y secaba pozos de agua.

Muchos en el pueblo decían que la Karina tenía un pacto con el demonio, pero en realidad era una elegida de la naturaleza por permitir la ver tan formidable ser.

Los incrédulos dicen que usaban la leyenda como excusa para justificar auto-robos o infidelidades. 
Para la Karina todos se equivocaban aunque no tenía forma de demostrarlo.
Volviendo de dejar a su marido y con el crio en brazos , vio al enano metido en un zanjón. Se acercó para ayudarlo , pero este salió , sin problemas, por sus propios medios. Estaba desnudo , todo cubierto de pelos color rojizo y negro. De la entrepierna le colgaba un "pichón" que casi le llegaba a la rodilla y tenía un escroto grande como de un chancho reproductor. El pombero la miro con deseo y su miembro se le empezó a inflamar.
La Karina siguió caminando asia la casa y cuando llegó, acostó a su pequeño. Se asomo por la ventana y vio al "pombero" que se perdía entre los pastisales.
Ese mismo día , por la noche, se acostó con su marido para hacer el amor y no pudo dejar de pensar en la masculinidad del enano.
Durante el día empezó a masturbarse con pepinos y mandiocas y por la tarde- noche le exija a su marido una mayor atención. Soñaba con el duende y cada día lo deseaba más y más como mujer.
Un día que vino su suegra a visitarla , le pidió que cuidara de su hijo. Acompaño a su marido vestida con una falda y sin bombacha. Se colocó sus mejores sandalias plateadas que las ajusto a sus blancas pantorillas con unas largas correas de cuero.
A mitad de camino de su regreso, se acostó sobre las raíces de un "palo borracho". Levanto la pollera y espero con ansias al "pombero". Este atraído por los olores de una mujer en celo no tardó en llegar y sin emitir ningún sonido la penetró. 
La Karina sintió en profundidad de su anatomía los latidos del falo del enano . Acaricio los testículos aterciopelados del hombrecito que se movian con la velocidad de un perro. Las pelotas le revotaban en la vagina y el clítoris le había crecido como nunca. Los senos se hincharon como dos melones y los apretó contra el cuerpo peludo del enano . El "pombero" la levanto por el aire y la sacudía con la fuerza de diez hombres, sintió que la estaba atacando una bestia. La Karina era un mujer muy fuerte y se había críado domando animales, por dentro sabía que podría cansar al sujeto de la noche. Abrazo con sus piernas la cintura del "Pombero" y con sus dos manos agarro el firme "pichon" para evitar que le entre por completo. Era muy largo y tenía la forma de una punta de lanza. Aguantaba con valor los empujones del enano y
Pensaba en su hijito que la estaría esperando en la cama. Temía por su vida y lamento haber provocado la situación en la que se encontraba.
Cuando pudo desengancharse del miembro , se arrodilló y se lo metió en la boca con la intensión de hacerlo eyacular lo antes posible.
 Agarro el " pijon" con todas sus fuerzas y no soltaría hasta verlo flácido. 
Acostada sobre el barro chupaba sin parar la roja punta y con el empeine de su pie le frotaba el peludo escroto, sentía como subían y bajaban a punto de estallar.
A lo lejos se escuchaban los cantos de los gallos y los primeros rayos de sol se hacían ver por el horizonte. Señales que indicaban que el "Pombero" estaba por irse. 
Mientras la Karina divagaba en sus pensamientos, sintió en su boca que le derramaban chorros de semen . Su primera reacción fue el rechazo , pero al sentir un suave gusto a almíbar lo empezó a beber con placer. Era tanta la cantidad que hubiese llenado una tasa de sopa.
Al salir el sol , el ,"pombero" corrió hasta los arbustos y desapareció.

La falda de la Karina colgaba de una rama, sus sandalias se habían roto y su seno derecho se asomaba por su remera desgarrada.
Camino arrastrando las piernas hasta su casa, salto por una ventana para no ser vista por su suegra y se metió en la cama con su bebé . Su cuerpo aún olia a bestia del bosque.

Por un par de días se negó acompañar a su marido hasta la parada del colectivo. Aducía estar enferma y se quedaba en la cama.
En la tercera noche, mientras su marido dormía, el "pombero" se presentó a su lado con el falo duro. 
La Karina espió a su marido y lo escucho roncar. Con mucho cuidado bajo sus 
Sábanas , abrió las piernas y corrió su bombacha. El pequeño peludo le lamió la entrepierna y la lleno de saliva viscosa . 
Ella bajo una pierna de la cama y con la mano acomodó la mitad de su miembro dentro de la vagina. Se movía despacio para que la cama no rechinara. 
La eyaculación fue violenta y no menos dulce que cuando la bebió con sus labios. Dentro de su cuerpo sintió el movimiento de sus espermas como si fueran pequeños renacuajos.
El ,"pombero" salto por la ventana y la Karina se quedó relamiéndo el semen que le caída por la comisura de la vagina.

A la otra noche cerro bien la ventana y no lo dejo entrar. 
Al despertar por la mañana se enteró de una mala noticia . Su suegra , por la madrugada, la había venido a ver. Y cuando caminaba por el sendero falleció de un ataque cardíaco . 
De alguna manera la Karina asoció el hecho con el enano del bosque.

Velaron a la difunta en la capillita del pueblo. Se reunieron los hermanos y compañeros del trabajo del marido. La ceremonia fue sencillita y muy emotiva.
Ella no se despegó del feretro y no la dejaba de mirar en busca de alguna pista que confirmara su creencia. A simple vista el cuerpo de su suegra no tenía marcas y cuando nadie la miraba le levantó la pollera para verle la " rajita" . La tenía chiquitita y bien cerradita. Le corrió 
Unos pelitos blancos y le metió el dedo. No entro ni un centímetro y pudo comprobar que la vagina la tenía inmaculada.
Tal vez había muerto por el susto - pensó .

La Karina sintió un cosquilleo en el bajo vientre y desde su "chichi" empezo a emanar un aroma a bosque y miel.
Las mujeres la rechazaban, como si tuviera la marca del "Pombero" en la frente; y en cambio, los hombres la persiguieron con el libido bien alto.
La situación se estaba tornando muy incómoda y para evitar "papelones" se fue a caminar por los jardines de la capilla. Mi marido quedó con su hijo lamentándose de su mala suerte. 

Tres hombres la fueron a visitar y detrás de una planta los atendió. Dos cuñados y un amigo de la familia.
Después del entierro , los tres se fueron a su casa. 
La Karina se metió en el rústico baño y con una palangana se lavo el semen de los ocasionales amantes. 
Estando en la cocina , ya de noche, vio al "pombero" caminando por el patio, muy amigo de su perro. Cruza pitbull.

Esa noche volvió a dejar la ventana abierta y mientras su marido la bombeaba con desesperación , el enano del bosque la miraba con el " pichón" colgando desde el fondo de la habitación , como esperando su turno.
Por más que lo intentará, su esposo , no podía eyacular . Se le ablandaba el pene y se le resbalaba de la " chichi". Ella le agarro el tronco y se lo estranguló como cogote de gallina. Era tanta la presión que el glande se le inflamo como un tomate.
La Karina se lo succiono con fuerza para sacarle los jugos que la naturaleza le negaba dar.
Pero, no hubo caso. Se le había muerto el "pájaro" para siempre (Ni los mata sanos pudieron revivirlo).
Por la falta de sexualidad de su marido, la Karina , pelo un palo de mora y lo enfundo con tripa de ternera para autosatisfacerse. Lo escondía bajo la pileta de la cocina y lo utilizaba durante las siestas.. continua