Me llamo Emanuel tengo 34. De colegiales. Me describo midiendo 1.72, peso 80. Ojos negros pelo negro.
Soy casado, creía q hetero. Pero con muchas fantasías.
Hace unos años x chat me calenté con un chico que era colombiano viviendo en Argentina. Nos vimos pero no paso a mayores y desde ese momento quede muy tocado. Me case hize mi vida, pero la pandemia y la convivencia hizo estragos en mi persona, me empezó de nuevo a despertar el bichito de probar con alguien. Luego de unas semanas metiéndome en chats gays, aclarando que no buscaba algo ya ya como muchos lo hacen. Encontré un pibe joven, 24 años, solo, que era activo, que era paciente, y me di cuenta desde el comienzo que me sabia manejar o mejor dicho que sabia dominar.
Hablando conociéndonos le dije que mi intension era ser pasivo. Pero tenia cero experiencia, que además tenia que ser por el medio día cuando me.podia escapar de mi trabajo, pero que no tenia lugar. Seguimos hablando. Hasta que un día me invito. No era lejos, unos 10 min en un taxi. La pandemia recien empezaba y no había tanta gente en la calle. Llego subimos a su casa, yo muy nervioso, me mira me dice q me relaje q acá no iba a pasar nada q no quisiera, pero yo iba a q pase todo. Nos empezamos a sacar la ropa, me empieza a tocar la piel, la cola, yo colorado, exaltado ya. Me besa, pero esos besos de lengua con mucha saliva, yo se lo respondo con más saliva, hacia años no besaba así a alguien. Mi pija se puso como una roca, ni mi mujer lo lograba.
Fueron más de 10 min de besos caricias, ya sentía su pija dura, le pido q me apoye que quería sentirla en mi cola, lo hace al comienzo con boxers los dos, le pido que se anime a mas, baja los dos y ahora piel a piel. Mi cara ya estaba roja, me sentía exitado. Nos vamos al sillón, ahora me tocaba a mi animarme a mas. El se sienta y yo en el suelo cerca de su pija. Mucho más grande que la mía, dura, joven, sin pelos, venosa, un mástil hermoso. La agarro con mis manos, empieza a masturbarlo, se siente calor, de apoco acerco mi cara, mi aliento en su cabeza, escucho en mis oídos el dale segui... acerco mis labios, un beso, saco un poco la lengua y la siento, no fue desagradable, sigo, uso más mi lengua, mis manos no paran, mi lengua va de acá para allá como un helado. Freno, la miro, se q la tengo que meter en mi boca, me cuesta, no entra como en las películas, de apoco abro mas, entra un poco, juego con mi lengua, la lleno de mi saliva, la saco la vuelvo a meter en mi boca, en un momento lo miro a los ojos y siento como me debora con la mirada, quiero metermela más a dentro pero mi boca no me lo permite, el solo mira...siempre duro, nose cuanto paso pero mi boca se cansaba, me levanta de la cara y me parte la boca...
Si gusta viene la segunda parte.
Soy casado, creía q hetero. Pero con muchas fantasías.
Hace unos años x chat me calenté con un chico que era colombiano viviendo en Argentina. Nos vimos pero no paso a mayores y desde ese momento quede muy tocado. Me case hize mi vida, pero la pandemia y la convivencia hizo estragos en mi persona, me empezó de nuevo a despertar el bichito de probar con alguien. Luego de unas semanas metiéndome en chats gays, aclarando que no buscaba algo ya ya como muchos lo hacen. Encontré un pibe joven, 24 años, solo, que era activo, que era paciente, y me di cuenta desde el comienzo que me sabia manejar o mejor dicho que sabia dominar.
Hablando conociéndonos le dije que mi intension era ser pasivo. Pero tenia cero experiencia, que además tenia que ser por el medio día cuando me.podia escapar de mi trabajo, pero que no tenia lugar. Seguimos hablando. Hasta que un día me invito. No era lejos, unos 10 min en un taxi. La pandemia recien empezaba y no había tanta gente en la calle. Llego subimos a su casa, yo muy nervioso, me mira me dice q me relaje q acá no iba a pasar nada q no quisiera, pero yo iba a q pase todo. Nos empezamos a sacar la ropa, me empieza a tocar la piel, la cola, yo colorado, exaltado ya. Me besa, pero esos besos de lengua con mucha saliva, yo se lo respondo con más saliva, hacia años no besaba así a alguien. Mi pija se puso como una roca, ni mi mujer lo lograba.
Fueron más de 10 min de besos caricias, ya sentía su pija dura, le pido q me apoye que quería sentirla en mi cola, lo hace al comienzo con boxers los dos, le pido que se anime a mas, baja los dos y ahora piel a piel. Mi cara ya estaba roja, me sentía exitado. Nos vamos al sillón, ahora me tocaba a mi animarme a mas. El se sienta y yo en el suelo cerca de su pija. Mucho más grande que la mía, dura, joven, sin pelos, venosa, un mástil hermoso. La agarro con mis manos, empieza a masturbarlo, se siente calor, de apoco acerco mi cara, mi aliento en su cabeza, escucho en mis oídos el dale segui... acerco mis labios, un beso, saco un poco la lengua y la siento, no fue desagradable, sigo, uso más mi lengua, mis manos no paran, mi lengua va de acá para allá como un helado. Freno, la miro, se q la tengo que meter en mi boca, me cuesta, no entra como en las películas, de apoco abro mas, entra un poco, juego con mi lengua, la lleno de mi saliva, la saco la vuelvo a meter en mi boca, en un momento lo miro a los ojos y siento como me debora con la mirada, quiero metermela más a dentro pero mi boca no me lo permite, el solo mira...siempre duro, nose cuanto paso pero mi boca se cansaba, me levanta de la cara y me parte la boca...
Si gusta viene la segunda parte.
2 comentarios - La pandemia me dio a probar cosas nuevas.