Una historia más ... De Calchaquí...

Ser patoba del boliche tenía sus ventajas. Y una de ellas es poder romperle el culo a una jovencita altiva en el guardarropa mientras grita al ritmo de la música máquina.
Sigo narrándoles otra historia que me ocurrio antes de renunciar a mi trabajo.
Las chicas de mi alcanse no me satisfacían, Si no era un defecto era otro. O muy villerita, o muy chetita, O les veía las tetas caídas, o su cuerpo no era lo firme que deseaba, o les veía cosas que antes ni me hubiera percatado.
Claramente me había hecho adicto a las flaquitas y pendejitas y lo estaba pasando realmente mal.
En la entrada del boliche, intentaba ganarme la simpatía de las chicas, pero sin ningún resultado en absoluto. Incluso a veces me ponía duro con las que parecían más boludas y no las dejaba entrar, a ver si colaba alguna y me proponía algo. Pero totalmente al contrario, me veían como un portero forro, que no dejaba pasar a nadie.
Y así transcurrían los días, y yo cada vez más quemado y babeando al ver la ropa y los cuerpos de las niñas que cada noche desfilaban delante mío.
Una de las que más me ponía era Romina.
era una de las chicas que se sacaban un dinero durante el verano paseando por la avenida y locales en Solano, joven y hermosa, flaquita con todo bien puesto, un manjar, iba superandome ampliamente, con el tema de entradas, un culo vendía más que lo que yo conseguia en meses, regalando tarjetas con descuento, o bien creando grupos de amigos en las redes sociales donde hacían una “lista” para entrar con descuento.
Así, cuanta más gente accedía al boliche enviadas por esas nenas hermosas, más dinero percibían al final del fin de semana la chicas tenían buena plata por mover bien el culo.
Y por supuesto, Romina era de las que más dinero sacaba de todo eso.
Romina era una chica de Avellaneda, pelo largo y ojos azules que nada más verla te recordaba a las fotos de pendejas en ropa interior de las publicidades.
Siempre iba increíblemente pintada, con un top negro de encaje que apenas disimulaba sus pequeñas pero firmes tetas y unas botas. Lo que más resaltaba de Romina era el culazo que gastaba, ya que al ir siempre en tacones de auténtico zorrón, siempre lo presentaba duro y empinado. El culo en sí era para caerte para atrás, pero con las botas, que solía llevar y los tacones, ya era para mirarla y hacerte varias noches seguidas varias pajas a su salud.
Yo literalmente babeaba cuando se acercaba a los listados a ver cuanta gente había entrado con su lista de entradas y hacía sus calculitos para ver la gita que se iba a llevar con tan sólo mover el culo, sonreír, y convencer a grupos enteros de chicos.
Y lo mejor, ella ni entraba a veces, aunque les prometía que la verían dentro. Ella se limitaba a hacer clientes que esperaban después verla dentro y pasarse sólo por la disco a la entrada a ver cómo le había ido la noche.
Yo, medio balbuceando me atreví una noche a invitarle a una copa... y ella ni se dignó en contestarme, básicamente como si oyera llover.
La verdad es que esa preciosidad sólo iba a tener un defecto ese verano, y es que el que apuntaba sus clientes al listado … era yo. 
Así que empecé a apuntarle menos a Romina, y a apuntarle más a Natalia (Natalia era otra ms gordita, y menos sexi, pero se decía que era un demonio en la cama, una chica rubia de pelo largo tonta no, lo siguiente. Y con una boca muy grande que parecía que te iba a comer al hablarte).
Y los resultados fueron espectaculares, no sólo Romina empezó a caer en picado en el ranking particular que llevaban entre ellas (cosa que hirió bastante su orgullo), sino que la más tonta y odiada Natalia se ponía como la más popular del grupo y con su boca de buzón no paraba de pavonearse y decir que ella había empezado a currárselo que era una genia, y que ya tenía bastantes conocidos, podía enviar gente al boliche cuando quisiera, y la gente que quisiera. (una bocazas, ya que era yo el que pasaba la mayoría de clientes de Romina a apuntarlos en la cuenta de Natalia).
Romina empezó a sospechar, porque me comentaba (ahora sí que me hablaba, lo que tiene el interés) que era extraño que había mandado grupos enteros de chicos, como 20 o 30, que los había visto entrar y que sin embargo aparecían en su cuenta sólo anotados 6 o 7 personas.
Yo disfrutando le decía que tenía mucho trabajo, y que me limitaba que tenía que seguir, y que dejara de molestar que interrumpía la cola. (Cuando lo que realmente hacía es que al verla allí grupos de pibes se pararan y entraran disparados al boliche).
Así pasaron varios días, Romina cambió su sonrisa eterna por una mirada triste, no le cuadraban los números y decidió dirigirse a Machado, Machado era un patoba viejo, de cómo 20 años allí, para el yo no era patova yo era portero, comodín, era el pibito nuevo que entró por banana (un patoba medio feo, medio forro, muy forro, con el que ella tenía confianza), y fue a preguntarle qué pasaba.
Machado, que era un tipo bastante callado (a la vez que apuesto, ya que tenía al contrario que yo a todas las putitas locas), vino a preguntarme por el tema.
Que tal pibe (todos me llamaban el hijo del Jefe, supongo que por la edad porque allí todos éramos iguales), la nena esa me dice que le estás anotando, menos a ella ¿es verdad?
Yo dudaba de contarle o no mi acción, pero Machado callado resultó ser un zorro viejo y al instante me dijo:
A mi me chupa un huevo lo que hagas, pero hazlo bien que no nos perjudique, esa pendeja nos trae muchos clientes y de los que más consumen. Te he visto como la miras, vos ya te la cojiste.
Me desarmó con sus palabras.
 Sí, Machado estoy loco no me la puedo cojer, ando loco con esa piba... La nena está tremenda, los jefes de la cojian cada vez que venia la gana.
Se quedó pensativo sonriendo, era imposible saber lo que ese puto de Machado con cara de viejo pervertido queria...
Déjamelo a mí, mañana te la cojes en el guardarropa.
Yo esa noche me hice dos pajas en el baño, no me creía que aquello fuera a hacer posible que le diera carne en barra a esa diosa ...
 (con el tiempo me di cuenta de que machado era así, directo y te controlaba con sus ojos claros), cerró el trato con Romina.
Machado, nada más ver esa tarde a Romina, la apartó para él y le dijo lo siguiente:
Romina, ven para acá que te quiero comentar una cosa.
-Sí, claro decime
- He descubierto que nuestro amigo te pone muchos menos clientes y se los pasa a Natalia.
- Qué hijo de puta, ya me lo estaba pensando, ¿qué hacemos, que ago?
- Hacemos nada, haces tú. Yo no me juego el puesto, menos por puterios. Sé que lo hace porque Natalia se dejó cojer por el orto por el.
- La muy puta, y va de lista que sólo hace clientes para el boliche, y le anotan los míos, por qué le entrego el orto, la concha de su madre, qué broca hija de mil puta. ¿Qué ago...?
- Ya sabes cómo va esto, no eres una nena tonta, le entregas el orto y listo, tú que estás más buena, y te apunta durante un tiempo los de Natalia y vuelve todo a ser como antes.
- Qué fuerte Machado pero, yo soy virgen del culo. Yo eso no voy a hacerlo.
- Pues nena, pon el culo ese que meneas que pareces tonta, total ese tonto te va acabar en 5 minutos o en 2 minutos, si lo haces bien, ya verás. -Y no me molestes más, si aceptas me lo decis que te lo arreglo, y sino aire entra a caminar, que estoy perdiendo el tiempo.
-Y claro, yo todo eso no sabía que estaba ocurriendo, y claro, Romina después de pensar sus opciones y pensando que con cinco minutos salvaba el culo (bueno, no lo salvaba, más bien lo ponía para salvar la situación), le dijo que sí a machado y él nada más verme, se me acerca y me dice:
- Oye que la putita acepta, Si vas a romperle el culo con amor, Por favor y si necesitas ayuda avísame, desde que me enteré que andaba garchando con los dueños, me tiene caliente mal y toma esto que quiero que la partas mal, por zorra altanera, por puta y dudaba si era el día de los inocentes, no me lo creía.
- ¿Cómo has quedado con ella?
- Viene a las 3:00 que la gente ya está en pedo y te la garchas en el guardarropa, habla con Susana (la chica del guardarropa) que no haya problemas. 
Yo no articulaba palabra,. Me quedé allí plantado y miré el reloj, las 22:00, en cinco horas lo rompía el culo a la putita más buena que hubiera visto en mi vida. Era consciente que algo malo iba a pasar, porque aquello no podía ser realidad.
Alrededor de las 23:15 vi estaba hermosa, estaba convenciendo a un grupo de chicos cerca del boliche a que pasaran con sus entradas. Estaba ligeramente inclinada hacia el que parecía el líder y con carita de no haber roto un plato en su vida les intentaba convencer
- Sí, pasen que está lleno de chicas. 
Y efectivamente el que parecía el líder del grupo en vez de mirarle a la cara (y mira que era hermosa) le miraba las tetas, ella estaba ligeramente inclinada.
-si están todas como vos, entramos ya.
El resto, la rodeaba y sin ningún miramiento le miraban fascinados el culo mientras comentaban.
- Maaadre mía que buena está, yo quiero una novia como esta.
- Que culo tiene por Dios, me va a dar un infarto.
Y así, se baboseaban. Hasta que entraron.
Yo la miraba y no me lo creía, en breve la iba a tener en esa posición, pero yo detrás y dándole verga con cariño (que ya para entonces estaba dura como una piedra) . Me relamía y tocaba la vaselina, y pensaba, sin llegar a creerme que fuera verdad lo que me había dicho que ocurriría a las 3:00.
Con esos tacones de putita hermosa debería ser igual de alta que yo. Pero eso sí, mi espalda hacía cuatro de la de ella, uno al lado del otro pareceríamos el tigre y el cervatillo. Yo lo pensaba y no daba crédito, sólo debía esperar y ver qué pasaba.
El tiempo pasó lentamente, y la pensaba, matar, le iba a arruinar, el orto, la quería, partir en 2 no se cómo iba a aser, y recordé que uno de los colegas Patobas, anda con viagra, ensima, y me arrime a pedirle, un par para romperselo como corresponde, me tomé una a las 2 de la mañana, volví a verla un par de veces y ella ni dirigió la mirada hacia donde estábamos, empecé a creer que todo era una broma de machado, y que en ese momento estaría riéndose de lo inocente que era pero sin darme cuenta se hicieron las tres y machado que en toda la noche no había hecho mención al tema se me acercó y me dijo:
- Ahí la tienes, ponela nene.
Ella se me acercó y como quien viene a la consulta del dentista me dijo:
- Hola que tal, donde vamos. Tengo prisa.
El símil con la consulta del dentista era perfecto, pues aunque hacía esfuerzos por que se le viera indiferente, la muy puta estaba bastante nerviosa y cuando normalmente sonreía y llevaba ella la situación, ahora miraba tímidamente hacía abajo y hablaba con voz entre bajita y cortada. Yo creo que estaba lo que se dice muerta de miedo.
- Seguime. (le dije como el que ni se ha percatado de quién es, lo buena que está, y para lo que había venido).
Ella me seguía de cerca, me imaginé que estaría mirando mi espalda de gimnasio e imaginándose que iban a ser cinco minutos bastante largos y posiblemente dolorosos pues el trato que había aceptado es que le iba a taladrar el culo sin miramientos hasta acabar adentro de él.
Nos metimos en el cuarto de detrás del guardarropa.y poniéndome los dedos en la mano en señal de silencio le indiqué a la chica del guardarropa que iba a tener que estar calladita.
Susana, la empleada del guardarropa, no iba a ser problema. Sabíamos perfectamente los de la puerta que estaría callada como una tumba. Me habían comentado que alguna vez le habían encontrado con algún chico dentro dándose matraca, y aunque desconocíamos si les cobraba o no pues estaba bastante buena, no nos importaba en lo más mínimo. Ella nos dejaba descansar a escondidas allí, por una salida trasera que tenía el guardarropas, y nosotros no nos entrometíamos en sus asuntos, fueran cuales fueran.
Llegamos por lo tanto a la pequeña habitación donde había perchas, chaquetas finas colgadas y una pequeña mesa con algunas cosas varias que aparté hacia la esquina.
- Bueno, estás hermosa (como si no lo supiera de sobras y no me hubiera hecho más de 50 pajas a su salud).
- Sí,bueno, dijo tajante. (Claramente no quería conversación, quería garchar e irse.
Yo sabía que andaba haciendo, chanchadas, en el boliche, con alguno de los dueños, pero no sabía tanto.
- ¿Te ha dicho machado mis condiciones?
- Sí, no te preocupes, yo pongo el culo y tú me anotas mis clientes y los de Natalia.
- Exacto, me sabe mal haber tenido que putearte pero es que ibas muy de sobradita. Quiero que salgas beneficiada de ésta, así que el trato nos debe interesar a los dos, tú decides.
- ¿cómo me pongo?
- Arrodíllate sobre tus tacos y empieza a chuparme la pija, que la tengo a estallar (no era cuestión de ponerse romántico, ahora era cuestión de tratarla como toda una putita ).
- Lo siento pero, el trato era que me dabas por culo.
- Me la ensalivas un poco y todos ganamos.
Yo me relamía pensando en ahogarla con mi verga pero se la veía muy decidida a no chupar, no iba a permitirlo además la tenía tan dura por el Viagra, y si se la asercaba al orto me iba a acabar al toque.

- Bueno, bueno, no me la chupas, no cojes, y no te la tragas, no hay trato, me quedo con Natalia, chau chau.
¿Me imagine que era por el culo nada, más, ?
- Bien, bien, un trato es un trato. Pero tenés que saber, que si no me ensalibado la pija, la vamos a hacer re larga y te va a doler, como loca, ponete a pensar, me ases un pete, te acabo en la boca, ya me sacas un lechazo, y me la dejas flácida, para que no te entre re dura por el culo.
Tienes razón. (Salvo que te voy a romper bien cuando te la meta, de eso estoy totalmente seguro, )
Me baje el pantalón, y estaba dura como una roca, era un cascote la putita miraba, me dice esta gorda, y yo le digo no gorda va a estar, cuando me la chupes.
Se agachó y empeso a chuparme la pija, era una experta, Petera, empeso con amor, y se la empeso a meter hasta el fondo, me estaba haciendo dos cortitos y un largo, dos cortitos y un largo, era toda una genia, y sin que se de cuenta me mande la otra pastilla, que la tenía en el bolsillo, la quería matar, esa noche, y lo iba a hacer, perfectamente, yo quería romperle el culo, hasta no verle el agujero del orto bien reventado no se lo iba a dejar, además era una forma de vengarme de todos los que le tenían, bronca, era muy altanera engreída, y muchos en el boliche no la pasaban, yo iba a vengarme por todos.
Me empeso a chupar la pija, como si fuera el fin del mundo...
Parece que quería hacerme acabar rápido, yo no aguante, y estaba por acabar, la agarre del pelo y empese a hacer que me coma la pija, como yo quisiera, a su ritmo iba a acabar, muy pronto, la empese a hacer , atragantar por qué no podía más, la atragante, mal, se la metí hasta la campanilla, y la mantenía, y otra vez, la dejaba respirar, y otra vez hasta el fondo, fue el mejor pete del mundo, tenía todos los ojos llorosos, el rimel le corría por toda la mejilla, estaba hermosa era una puta con clase, y le dije sacate la remera que te acabo en las tetas mientras la seguía jalando del pelo la muy puta me dice no quiero toda la lechita en la boca, estoy re caliente, para no tragarme todo lo que tengas.
No termino de decir esto que se la metí hasta bien al fondo creo que mí pija estaba a Punto de reventar, y allá detrás empese a eyacular, fue hermoso, la piba se atragantó, mal pero no quería dejar de tragar leche, tosiendo y todo sujeto mí pija, y abrió la boca puso se cabeza mirando, al techo y yo acabé, como medio litro de leche, tenía toda la boca llena, empeso a hacerme la paja, mientras se hacía gárgaras, mostrándome, lo puta que era,b se tragaba la leche de a dosis, y yo estaba que estallaba...fue hermoso.
- termino de tragar, y me dice estabas conteniendo todo para mí papi, está riquísima.
 apoyo los codos en la mesa y se bajó todito, y me dice haber que sabes hacer, mi amor.
Me sentí te virgen, está piba sabía lo que quería, y me estaba desafiando, hija de puta, me tenía te caliente... 
- Mientras me cojes puedes entretenerte repitiendo mi puta sos una puta, toma toma toma puta. Mientras me rómpes toda , sería todo un detalle...
- se bajó los pantalones hasta los tobillos y me dio la espalda.
Yo no estaba en mí, las botas a duras penas bajaron de lo ceñidos que estaban a aquel culo. Le costó dos o tres tirones fuertes sacarlos y aparecieron unas tangas negras que también se bajó. Aquel movimiento parecía como si fuera a mear al baño y me puse caliente total. En vez de agacharse a mear en un inodoro se me ponía de espaldas y me daba el culo para que comenzara mi perversión. Además con el culo se me empinaba como diciéndome… te espero, saca la pija y reventame bebe. Como ven… Nivel divino.
Inmediatamente empecé a manosear los cachetes y meterle la lengua en todo el agujero, su culo era tal y como me lo imaginaba. PERFECTO. Dos cachetes iguales en forma de manzanita, muy duros y con dos agujeritos marcados en su cadera, una cinturita muy muy estrecha y visto su culo desde arriba, como un final de corazón perfectamente contorneado. Y ya al ver mi verga entrando y saliendo, iba a ser una imagen para inmortalizar.
Yo aproveché para sacar el celu y sacar algunas fotos, aquello debía ser mi día de suerte. Ni en el mejor de mis sueños ...

El culo era demasiado chiquito, allí no iba a caber la verga, si ya se lo habían echo se lo isieron mal, por qué estaba muy estrecho, ni de broma, por mucho lameteo y saliva que meta. En esos momentos la punta de mí verga estaba gigante, sería unas diez veces su agujerito del culo y con pinta de ganar cada vez más grosor mi verga esplotaba, su culo lo iba a dejar a la miseria.
Saqué un lubricante y solté un buen chorro en su culo, que resbaló hacia abajo mojándole la tanga y las botas. Ella estaba quieta, ajena a todo y me imagino que esperando que pasara el tiempo y yo acabará. Parecía que le era igual tener la ropa empapada de lo que debería ser lubricante y total, sabía que se iba para casa con el culo lleno de leche, así que formaba parte del pack “putita enculada” el lubricante que en aquellos momentos resbalaba piernas abajo y ponía su culo reluciente reluciente y pegajoso.
Le introduje un dedo y empecé a hacer movimientos circulares. 
Y me reconoce que solo en otras 4 o 5 ocasiones le había echo el orto.
Al introducirlo, al instante gimió y protestó:
- mmmmm si, que grande la tienes, que hermoso dolor.
Yo le dije y fui sincero.
- Putita mía, es sólo un dedo. Como bien dijiste antes un trato es un trato, y no voy a meterte un dedo, voy a romperte por la mitad pero con la verga, que es más que un dedo, ya te aviso. Y dicho esto empecé a juntar un segundo dedo al ya introducido y separarlos poco a poco para ensanchar un agujero que se resistía terriblemente a darse de sí.
Ella jadeaba, resoplaba, se quejaba, y se arqueaba más y mas…
- Ayyyyyyy, me dueleeeee. Me dijo,esto duele, métemela ya puto de mierda, haceme sentir mujer haceme putita. 
-Madre mía que nena está  
-¿me vas a abrir el culo para metermela o qué?.
- Yo no lo veo que te entre, zorrita. Pero si quieres que te la meta allá voy. Total si no entra empujo ya lubricado está. Comienza el espectáculo, relájate y disfruta mí amor.
Ya tocaba, el culo en forma de manzanita ., dos dedos habían entrado, y ahora tocó echar más lubricante en mi verga,Total no había que escatimar en lubricante, sino asegurar la enculada.
Puse el capullo rojo a punto de reventar de la sangre que le llegaba apuntando a su culo y empujé. Con tanta lubricación que más o menos blandito entró, pero el tronco de la verga que parecía la macana de un policía de duro que estaba, entrar entraba pero la iba a estar ,rompiendo en dos, pues parecía que la rompía y en cualquier momento la partía por la mitad. Agggggghhhh, decía duele mucho sácala. No cabe, de verdad que no cabe, me voy a desmayar de dolor. Duele mucho.
- Es que no te relajas, quieres que te rompan el culo y luego todo son quejas. Haber empeza a chupar más y sacame más leche haber si se hablanda, y saca culito diciéndome métela entera, aún falta..
Pegó la cara contra la mesa y su rostro era un poema de sufrimiento, aguantaba el dolor como una campeona mientras era penetrada, contra la mesa con una verga que en comparación con su culo parecía la de un elefante. Además, su posición era perfecta para darme placer, al no haberse quitado las botas, su culo permanecía elevado y encarado para que yo le taladrara bien con mi rabo. Y como al no quitarse los pantalones tenía las piernas juntas, la estrechez del culo y la presión sobre mi pija era máxima. Eso sí… a ella aquello iba a dolerle un poquito.
Cuando finalmente entró, y vi que resoplaba pero como que haceptaba, , comencé el mete saca viendo como una polla talla XL taladraba a un culito duro talla XS.
En uno de las embestidas, , escupió un poco se saliva con Algo de leche que me calentó mal.
 Desconozco si lo escupió para no tragárselo con las estocadas, o se le salió de las embestidas que le daba.La agarraba fuerte de ambos cachetes con las dos manos y me relamía viendo mi verga entrar y salir de su culo. Y cuando veía asomar la cabeza de nuevo para adentro hasta que el culo engullía mi polla hasta los huevos. La niña cuando se la metía profundo apretaba el culo de dolor y mi placer era mayor aún. Si el culo era estrechito, cuando lo apretaba era como si una aspiradora estrujara mi pija para no dejarla salir.
Afortunadamente la lubricación era perfecta, y yo dejaba caer saliva que desprendía de lo que estaba babeando con el espectáculo o bien estrujaba el bote de lubricante para que aquello resbalara perfecto,Así, apretándole el culo con ambas manos y dándole duro hasta el fondo, si no me hubiera hecho el pete maravilloso, ya me hubiera acabado, así que estaba contento con mi suerte, y encima la tenía durísima, y comense a sentir, como me empeso a latir el corazón, por el Viagra, estaba que esplotaba, estaba re caliente, y tenía la verga durísima, yo creo que la estaba partiendo, mal, pero empese a bombear como loco, no me importaba nada, de nada, solo escuchaba la música, que sonaba a lo lejos y los gritos de mí putita, que cada ves eran más y más fuertes.
Pese a que hubiera continuado así hasta dejarle el lechazo en el culo,y mis manos apretando los cachetes, y viaje va viaje viene contra la mesa. Me di cuenta de que no quería acabar, así que pasé a recorrerle la cintura con las manos y seguir dándole pero más suave.
La visión ahora era perfecta, su cintura era más pequeña que el arco de mis manos, donde me tocaba perfectamente los pulgares y los índices al tenerla así agarradita. Y tenerla agrrada por la cintura me permitió apartarla un poco de la mesa y darle más duro nuevamente. La apartaba ligeramente de la mesa alzándola en peso por la cintura y le sacaba la verga una y otra vez, y luego la ensartaba con fuerza hasta el fondo del culo chocándola bruscamente contra la mesa. Visto desde fuera parecería yo un gorila enculando a una nenita como Simona la del 13 la pendeja linda. aquello era vicio en estado puro. Y fue visto desde fuera, porque en un momento vi la cabeza de la chica del guardarropa cogiendo alguna chaqueta y poniéndome cara rara abriendo mucho los ojos como pensando… nene la vas a matar.
Y así estábamos, las embestidas lanzaban un continuo PAM PAM PAM, y la putita comenzo unos continuos AHHHH AHHHH AHHHH, pero como sonaba la música máquina del boliche parecía que íbamos a coro. De hecho, durante unos minutos estuve dándole al ritmo de la música, haciendo sus pausas y su rápidos mientras le cantaba a la oreja.
-Nooo pares sigue, sigue, nooo pares sigue sigue. Que esta fiesta no termine!!!.
La chica ya gritaba como una histérica, en un continuo Aaaahhhhhh y vi inteligente acercarle una chaqueta para que la mordiera, cosa que hizo inmediatamente. Ahora daba todavía más morbo, la música a todo lo que es, yo dejando caer todo mi peso en cada clavada por el culo, y la nena soltando ahora un continuo MMMMmmmmm.
Mi verga iba a estallar dentro de su culo, aquello no podía estar más estrecho, placentero y lubricado. Era un mete saca terrible y constante, sin piedad. El placer recorría cada centímetro de mi pene, y el culo de la tonta estaba siendo penetrado a lo película porno.
En ese momento la saqué para mirarle el culo, lo veía rojo pese a la penumbra y bastante más abierto, y aproveché para lanzarle un buen escupitajo dentro.
- ¿Ya acabaste ? (dijo casi sin respiración, al notar lo mojado del escupitajo).
- No, pequeña, ahora viene lo mejor, viene el capítulo final y verás cómo te relleno el culo de crema como si fuera un pastelito.
- A mierda, acaba ya. No siento ni las piernas ni el culo, me duele todo nunca me dieron tan duro.
Y antes de dejarle acabar la frase, ya se la había metido de nuevo con chillido incluido que la chica del guardarropa debió escuchar porque asomó la cabeza supongo que para ver si la había matado.
Yo le guiñé el ojo y le hice ok con ambas manos indicándole que me lo estaba pasando de 10 y que ella siguiera a lo suyo. Ella con cara de… tú sabrás, volvió a correr las chaquetas e irse para su mostrador.
Ya en cada embestida, mi verga amenazaba con acabar, yo ni daba más ya no tenía fuerzas, en las piernas, y me alludaba con las manos para metérsela, hasta el fondo, era hermosa mí putita, pero más hermoso, era como le estaba quedando el culo. así que tenía que distraerme y empecé a darle conversación acorde a la fantástica enculada que le estaba dando.
- ¿Qué putita? ¿Contenta del trato? Desde aquí tengo una visión perfecta de como mi verga te parte por la mitad.
- En vez de , hola cómo estás , me vas a decir, ¿hola, quieres perforarme el culo otra vez?, se te va a caer la baba”. Que ya te digo que se me cae.
La otra seguía mordiendo una chaqueta y no pasaba del :
-Mmmmmmmmmm, Ahhhhhhhhhh.
-  Yo creo que al levantarte te va a costar andar, me estoy poniendo morado. Quien me iba a decir que tenías un culo tan cerradito y que ibas a ser tan buena tragando verga.
- me estás rompiendo toda , acaba ya. (dijo dejando de morder la chaqueta).
- Ya, pero es que no quiero te quiero seguir cojiendo toda la madrugada. Estoy en modo pervertido y si no me das un trato más no acabo nunca,(divinos dos viegras que me permitían mantener el constate mete saca brutal sin acabar).
La enganché del pelo con una mano mientras con la otra le abría con dos dedos la rajita del culo para ver mejor la sodomización y empecé un ritmo más rápido de mete-saca, o más bien de rompe culo-rompe culo.
- Hola cielo, ¿qué tal se siente siendo atravesada por tu patova favorito? Te va a saber a gloria cada ves que me veas. 
La putita me dice que trato decime por favor y acaba ya hijo puta, debió pensar que nunca iba a acabar era la mejor manera de que obtuviera su revancha, otra vez y , entró a contestarme sin esfuerzos, decime que querés decimelo ya, empezó a contestarme.
-Cabrón, que hijo de puta acaba aaaaaaaaaa ya.
- Quiero otra secion igual, y acabo ya.
-Bueno si pero acaba yaaaaa
 ¿Te gusta que te taladren el culo?
- Siiiiii, me encanta, Tú eres el más pervertido, de todos los hdp ¿Pero cómo se pide putita? Por favor, señor relléname de leche ya.
- Rellename de leche yaaaaaaaaahhhhh, gritaba de dolor.
Yo tiraba del pelo y empujaba con la verga, que debería entrarle hasta media espalda, y empecé sin querer a soltar leche como si fuera una manguera a presión.
-  Así,putita, que rico ese culazo y que ganas tenía de rompértelo que tenía muchas muchas.
- Rellenita de leche para casa, que no se diga que no te cuidamos en el boliche, a, todo amor y atenciones.
Me aparté resoplando y vi como del agujero del culo resbalaba leche hacia abajo, que se juntaba con el lubricante. La verdad que iba a estar un poco pegajosa de camino a casa.
La putita seguía contra la mesa, agotada y dolorida. Yo le hubiera echado otro polvo, pero estaba exhausto y posiblemente no iba a permitírmelo, así que me subí los pantalones y me fui a mi puesto no me echaran más en falta.
Unos minutos más tarde, salió del guardarropa con los pantalones subidos y andaba raro, como rengeando, así como si le hubieran roto mucho el culo (lo parecía, que coincidencia) y miré a machador por si ponía cara de reproche.
Pero vi una sonrisa de oreja a oreja y me dijo:
- (Te has portado como un campeón.).
Al pasar por nuestro lado, dijo:
- hoy te has salido, la que más gente ha pasado, te vas a llevar una plata estamos muy contentos contigo.
A dudas penas avanzaba, y apretaba los dientes como diciendo “me han roto enterita”. Pero un trato era un trato, y lo han de cumplir ambas partes, así habíamos quedado y así fue.
Lo mejor, cuando acabó el turno Susana, la chica del guardarropas, y me dice con una amplia sonrisa:
-Como he disfrutado oyéndola gritar, menuda puta resultó, tan altiva y mala gente que era. Si me llamas la hubiera cacheteado yo sin problemas, o metido una percha por el culo, que asquito le tengo. (claramente eso se avisa antes, pensé yo).
La putita, sigio trabajando, además le poníamos la mayoría de los de Natalia, que no se enteraba de nada y decía que ahora tenía menos porque pasaba de emplearse a fondo (tonta, tonta la pobre), y a mí me apeteció pasar un rato similar (vamos, volver a romperle el culo a la chiquilla aquella), pero no quería ir solo y lo invite a machado.

Pero eso es otra historia...

3 comentarios - Una historia más ... De Calchaquí...

gust7387
Muy buen relato que bien la pasaban jajaja
xibot
Alta putita resultó ser Romina, muy buen relato amigo!!!+10