Hola amig@s!! Como andan tanto tiempo? Perdón que los tuve medio abandonados, pero estuve por suerte con mucho laburo, y viajando bastante debido a reuniones y capacitaciones de la empresa donde laburo. Lo cual me trae esta nueva aventura que les paso a contar.
La empresa en la que laburo, tiene un par de sucursales en la ciudad, y obviamente, al ser una multinacional, posee en varias partes del país, oficinas y sucursales, yo venía haciendo varios viajes a Rosario, por distintas capacitaciones, y formaciones, y como siempre son los mismos grupos de trabajo, en dicho grupo, de al menos unas 10 personas, estaban Emiliano, de la sucursal de Formosa y Gabriela, de Córdoba, habíamos pegado buena onda, incluso en la fiesta de fin de año charlamos bastante, pero siempre, buena onda de “compañeros de laburo”. Hasta que una vez, nos tocó capacitación en Formosa, fuimos, hicimos los cursos y demás, y el jueves por la noche, obviamente le pedimos a Emiliano que nos lleve a conocer la ciudad, fuimos a un bar, por una zona llena de bares y restaurantes, cerca de la Av. 25 de mayo, muy linda, no conocía la ciudad. Fuimos Emiliano, obviamente, Gabriela, Sofia, Juan y yo. Tomamos algo, charlamos, de todo un poco, laburo, vida, etc, Juan y Sofia se fueron al hotel, creemos que a revolcarse juntos, y quedamos los 3, Gaby es una señora de unos 45 años, bien llevados, siempre muy bien arreglada, casada, con 2 hijos mayores.
De golpe, luego de que se fueran Juan y Sofia, lo primero que dijo Gaby, fue; cómo se van a dar estos no? Con Emiliano nos miramos, porque jamás, había rondado en las charlas el tema sexo. Pero bueno, ahí comenzó todo; yo largue la carcajada” jajaja, pensé que era el único que lo creía”
Gaby: “noooo, hace rato vienen dándose murra” con ese hermoso acento cordobés que le pone cantito a las frases.
Emiliano: “a pero que dormido que soy, jamás me había dado cuenta”
Yo: “si, y creo que Marisa y Jorge también, por eso no están acá”
Gaby: “sabes que me pareció lo mismo, la vez pasada en Rosario me pareció verla a ella entrar en su habitación, pero como Jorge le da a todo, no preste atención”
Yo: “a todo? a vos también te dio?” (En ese instante Emiliano me miro con los ojos abiertos, como si me estuviera desubicando con la pregunta)
Gaby: “noooo, él le da a todo, yo a casi todo” (Y mientras terminaba la frase, poso su mano sobre mi pierna)
Cabe destacar, que mi jefe, me había comentado de Gabriela, tenía fama de que le gustaba la pija más que a mí el chocolate, pero que pocos habían podido comprobarlo. Como yo no tenía nada que perder, y tratando siempre de desmitificar o no verdades, en nombre de la ciencia, avance, jajajaja.
Yo: “Ahh, mira vos, y yo soy casi todo? O Emiliano, podría ser casi todo?”
Gaby: “Vos seguro, ya te conozco, o te pensás que no se de tus aventuras en Rosario, sos bastante cochino, pero Emi, me parece que es tiernito”
Emiliano, se puso bordo, yo un poco también, pensé que mis chanchadas rosarinas, habían pasado desapercibidas, pero bueno, se ve que no. La charla siguió, obviamente en tono sexual, hasta que apure a Emiliano para que vayamos a un telo los 3.
Llegamos, entramos sin problemas 3 en una habitación, Emiliano se sentó en un sillón, mientras Gaby y yo comenzamos a trenzarnos en besos y manoseos, no tardó mucho en bajarme los pantalones y comenzar a chuparme la pija, miraba de reojo a Emi, que comenzaba a manosear su bulto por encima del pantalón que llevaba puesto, levante a Gaby del piso y le pedí que fuera generosa con Emi, se acercó al sillón, y comenzó a chupar su pija, ella en cuatro y solo con la tanga adornando el culo, así que me agache, corrí su tanga negra y le empecé a practicar sexo oral, mientras colaba un dedo en su concha y otro en su culo, llego rápido al primer orgasmo, mientras Emiliano ya le había dejado la leche en su boca, ( tenía razón Gaby que era un poco tiernito) Así que lo dejo, para que recupere fuerzas, mientras nos recostamos en la cama y comenzamos un furioso 69, pude sentir como acabó al menos 2 veces más, mientras que me chupaba la pija y alternaba con unos besos negros que me ponían más al palo aun. Nos acomodamos nuevamente sobre la cama y la puse en 4, me coloqué el forro, y me hundí fuertemente en su concha, entre gemido y gemido de placer Emiliano se acercó suavemente, hasta quedar su pija delante de la cara de Gaby, quien sin dudarlo comenzó a chupárselo de nuevo, haciendo que se parara nuevamente, “Ayyy, siiii chiquito!! Cogeme toda, y vos Emi, te la vas a bancar ahora? Mira que quiero 2 pijas adentro” (Si, era verdad, a Gaby le encantaba la pija, y se notaba) Emiliano se puso el forro, y le cedí mi lugar, me saque el forro, y le di mi pija a Gaby para que la saboree otro ratito, mientras Emiliano la cabalgaba fuertemente. Note que al menos volvió a acabar 2 veces más, porque su conchita ya chorreaba. Nos pidió que nos acomodemos de forma de poder hacer una doble penetración, en ese instante Emiliano, volvió a acabar, pero estaba tan caliente, que su pija siguió erecta.
Agarramos la caja de forros y solo quedaba 1, lo digo en voz alta, como para encontrar la solución al problema, y Gaby dice; “no se hagan problema que no estoy enferma y ya no puedo quedar embarazada, y ustedes son sanitos,” así que, así fue como le dimos a pelo, cosa que me encanta, Emiliano se recostó boca arriba, Gaby encima de él, colándose su pija en la concha, y a mí me quedo el culito, al cual le cole unos dedos para dilatarlo y entre con todo. “AYYYYYY, me duele, pero no paren” gritaba Gaby, mientras mi pija se enterraba hasta los huevos en su ojete, sentía como se friccionaban nuestras pijas adentro de ella, incluso sentí como acabo 2 veces con nuestras pijas adentro, sus piernas chorreaban, empapando la pelvis de Emi, cambiamos de lugar un par de veces, acabo tanto que llego un momento que nos pidió que terminemos, porque le temblaban las piernas, así que sacamos nuestras pijas de adentro suyo, se arrodillo adelante nuestro y nos pajeamos hasta llenarle la cara de leche, sobre todo yo, porque Emi con todo lo que había acabado casi no tenía nada. Se saboreó todo, nos dio un beso en la pija a cada uno y se fue al baño a limpiarse
Emiliano no podía creer aun lo que había pasado, estaba flasheado, yo feliz, porque ahora, con mis compañeros de curso, tenía un plus para ir a las capacitaciones, dicho sea de paso, volvimos a tener un encuentro en abril, en Santa Fe, y hablamos de hacer partícipe a Marisa, y quizás a Jorge, pero bueno, quedara para la capacitación de junio, de ser así, ya les contare que paso
Saludos y gracias por pasar…
La empresa en la que laburo, tiene un par de sucursales en la ciudad, y obviamente, al ser una multinacional, posee en varias partes del país, oficinas y sucursales, yo venía haciendo varios viajes a Rosario, por distintas capacitaciones, y formaciones, y como siempre son los mismos grupos de trabajo, en dicho grupo, de al menos unas 10 personas, estaban Emiliano, de la sucursal de Formosa y Gabriela, de Córdoba, habíamos pegado buena onda, incluso en la fiesta de fin de año charlamos bastante, pero siempre, buena onda de “compañeros de laburo”. Hasta que una vez, nos tocó capacitación en Formosa, fuimos, hicimos los cursos y demás, y el jueves por la noche, obviamente le pedimos a Emiliano que nos lleve a conocer la ciudad, fuimos a un bar, por una zona llena de bares y restaurantes, cerca de la Av. 25 de mayo, muy linda, no conocía la ciudad. Fuimos Emiliano, obviamente, Gabriela, Sofia, Juan y yo. Tomamos algo, charlamos, de todo un poco, laburo, vida, etc, Juan y Sofia se fueron al hotel, creemos que a revolcarse juntos, y quedamos los 3, Gaby es una señora de unos 45 años, bien llevados, siempre muy bien arreglada, casada, con 2 hijos mayores.
De golpe, luego de que se fueran Juan y Sofia, lo primero que dijo Gaby, fue; cómo se van a dar estos no? Con Emiliano nos miramos, porque jamás, había rondado en las charlas el tema sexo. Pero bueno, ahí comenzó todo; yo largue la carcajada” jajaja, pensé que era el único que lo creía”
Gaby: “noooo, hace rato vienen dándose murra” con ese hermoso acento cordobés que le pone cantito a las frases.
Emiliano: “a pero que dormido que soy, jamás me había dado cuenta”
Yo: “si, y creo que Marisa y Jorge también, por eso no están acá”
Gaby: “sabes que me pareció lo mismo, la vez pasada en Rosario me pareció verla a ella entrar en su habitación, pero como Jorge le da a todo, no preste atención”
Yo: “a todo? a vos también te dio?” (En ese instante Emiliano me miro con los ojos abiertos, como si me estuviera desubicando con la pregunta)
Gaby: “noooo, él le da a todo, yo a casi todo” (Y mientras terminaba la frase, poso su mano sobre mi pierna)
Cabe destacar, que mi jefe, me había comentado de Gabriela, tenía fama de que le gustaba la pija más que a mí el chocolate, pero que pocos habían podido comprobarlo. Como yo no tenía nada que perder, y tratando siempre de desmitificar o no verdades, en nombre de la ciencia, avance, jajajaja.
Yo: “Ahh, mira vos, y yo soy casi todo? O Emiliano, podría ser casi todo?”
Gaby: “Vos seguro, ya te conozco, o te pensás que no se de tus aventuras en Rosario, sos bastante cochino, pero Emi, me parece que es tiernito”
Emiliano, se puso bordo, yo un poco también, pensé que mis chanchadas rosarinas, habían pasado desapercibidas, pero bueno, se ve que no. La charla siguió, obviamente en tono sexual, hasta que apure a Emiliano para que vayamos a un telo los 3.
Llegamos, entramos sin problemas 3 en una habitación, Emiliano se sentó en un sillón, mientras Gaby y yo comenzamos a trenzarnos en besos y manoseos, no tardó mucho en bajarme los pantalones y comenzar a chuparme la pija, miraba de reojo a Emi, que comenzaba a manosear su bulto por encima del pantalón que llevaba puesto, levante a Gaby del piso y le pedí que fuera generosa con Emi, se acercó al sillón, y comenzó a chupar su pija, ella en cuatro y solo con la tanga adornando el culo, así que me agache, corrí su tanga negra y le empecé a practicar sexo oral, mientras colaba un dedo en su concha y otro en su culo, llego rápido al primer orgasmo, mientras Emiliano ya le había dejado la leche en su boca, ( tenía razón Gaby que era un poco tiernito) Así que lo dejo, para que recupere fuerzas, mientras nos recostamos en la cama y comenzamos un furioso 69, pude sentir como acabó al menos 2 veces más, mientras que me chupaba la pija y alternaba con unos besos negros que me ponían más al palo aun. Nos acomodamos nuevamente sobre la cama y la puse en 4, me coloqué el forro, y me hundí fuertemente en su concha, entre gemido y gemido de placer Emiliano se acercó suavemente, hasta quedar su pija delante de la cara de Gaby, quien sin dudarlo comenzó a chupárselo de nuevo, haciendo que se parara nuevamente, “Ayyy, siiii chiquito!! Cogeme toda, y vos Emi, te la vas a bancar ahora? Mira que quiero 2 pijas adentro” (Si, era verdad, a Gaby le encantaba la pija, y se notaba) Emiliano se puso el forro, y le cedí mi lugar, me saque el forro, y le di mi pija a Gaby para que la saboree otro ratito, mientras Emiliano la cabalgaba fuertemente. Note que al menos volvió a acabar 2 veces más, porque su conchita ya chorreaba. Nos pidió que nos acomodemos de forma de poder hacer una doble penetración, en ese instante Emiliano, volvió a acabar, pero estaba tan caliente, que su pija siguió erecta.
Agarramos la caja de forros y solo quedaba 1, lo digo en voz alta, como para encontrar la solución al problema, y Gaby dice; “no se hagan problema que no estoy enferma y ya no puedo quedar embarazada, y ustedes son sanitos,” así que, así fue como le dimos a pelo, cosa que me encanta, Emiliano se recostó boca arriba, Gaby encima de él, colándose su pija en la concha, y a mí me quedo el culito, al cual le cole unos dedos para dilatarlo y entre con todo. “AYYYYYY, me duele, pero no paren” gritaba Gaby, mientras mi pija se enterraba hasta los huevos en su ojete, sentía como se friccionaban nuestras pijas adentro de ella, incluso sentí como acabo 2 veces con nuestras pijas adentro, sus piernas chorreaban, empapando la pelvis de Emi, cambiamos de lugar un par de veces, acabo tanto que llego un momento que nos pidió que terminemos, porque le temblaban las piernas, así que sacamos nuestras pijas de adentro suyo, se arrodillo adelante nuestro y nos pajeamos hasta llenarle la cara de leche, sobre todo yo, porque Emi con todo lo que había acabado casi no tenía nada. Se saboreó todo, nos dio un beso en la pija a cada uno y se fue al baño a limpiarse
Emiliano no podía creer aun lo que había pasado, estaba flasheado, yo feliz, porque ahora, con mis compañeros de curso, tenía un plus para ir a las capacitaciones, dicho sea de paso, volvimos a tener un encuentro en abril, en Santa Fe, y hablamos de hacer partícipe a Marisa, y quizás a Jorge, pero bueno, quedara para la capacitación de junio, de ser así, ya les contare que paso
Saludos y gracias por pasar…
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