Un encuentro inesperado y de mucha adrenalina

Me llamo Alejandro tengo 27 años y esta es una historia que quiero compartir.

Hace unos meses me encontraba inscrito en una aplicación de para conocer gente de mi ciudad, despues con el pasar de los dias vi una chica de mi ciudad que me llamo la atención por suerte tuve la oportunidad de hablar con ella por la aplicacion unos dias conociendonos y asi, a los dias yo me encontraba trabajando en horas de la mañana en una planta a las afueras de manizales y tenia el fin de semana libre, era sabado y me escribio: hola alejo que mas, que estas haciendo? y le respondi que apenas salia de trabajar y iba para la casa a descansar un rato, y me dijo que haria mas tarde y le dije por ahora no tengo planes mas que descansar, y en esas aproveche y le dije que si saliamos esta noche, pues ya ven, no lo dudo y acepto salir conmigo ese mismo dia, me dijo: alejo dale me recojes a las 9 de la noche y le dije listo a esa hora paso por ti.

pensando yo ese dia para donde iba a llevarla a " charlar ese dia " recordé que a ella no le gustaban mucho los planes de baile ni discotecas y pensé voy a llevarla a un lugar mas tranquilo, esa noche habia buen clima y la lleve a un lugar un poco lejos de manizales donde se podria apreciar el cielo estrellado y habia buen ambiente, el lugar era muy ameno junto a unas fincas del sector donde la unica luz testiga era la hermosa luna en su máximo esplendor, yo iba en mi moto y la recogi a la hora indicada cerca donde vivia ella y finalmente nos conocimos, muy bonita ella de tes morena, bajita con unas tetas y un culo bien delicioso, tiene 33 años , un poco mayor que yo, vestia con un jean negro apretado ese dia con una blusa blanca y se le podia apreciar la figura por medio de la ropa, yo quede muy asombrado al verla por primera vez y me dije ufffff pero que buena estas, cuando nos vimos me recibio con un gran abrazo igual que yo, nos saludamos hablamos un rato y luego nos fuimos para el dicho lugar, antes de llegar pare en un establecimiento a comprar unas cervezas para llevar y compre unas golosinas y cigarros, ya estando alla en ese lugar tan tranqulo habia pasado un buen rato por ahi unas 2 horas despues de habernos conocido, charlado, habernos tomado algunas cervezas que tenia, escuchando musica, estabamos en mucha confianza y nos sentiamos bien, cuando en esas me pregunto que si podia darle un masaje en la espalda ya que habia trabajado duro esa semana y yo le dije "claro no hay problema" jejejeej. Acomode mi moto sobre el gato central para que la moto no se cayera ya que estabamos sentados de lado sobre ella ya que era lo unico en lo que habia que sentarnos en medio de la carretera destapada, comenze a darle masajes suaves en la espalda y hombros ya que se sentia muy tensionada debido al trabajo, ella lo disfrutaba movia la cabeza con suavidad de un lado hacia otro lentamente como si estuviera disfrutando del masaje me decia: alejo, que buenos masajes das, me siento tan relajada , casi no me siento tensionada le dije yo en tono de broma: que va helena no te creoo jajaja me sonroje un poco ya que lo dijo de una forma tan picara y directa, pero no lo niego tengo muy buenas manos para los masajes, dado el caso no me detuve y segui haciendole masajes un rato mas como si nada, ella estaba adelante de mi estabamos casi muy cerca del uno de otro ella dandome la espalda, me acerque un poco para que ella se diera cuenta que necesitaba acomodarme para seguir con el masaje cuando ella hizo lo mismo, se acomodo y se acerco tambien un poco hacia a mi, tanto que sus nalgas quedaron tan pegadas de mis piernas y mi verga y ya la situacion cambiaba por que mientras le daba yo masajes yo me excitaba, hasta que no pude mas y mi amigo de abajo empezo a notarse tanto era mi excitación que ni me di cuenta me había dado hasta que ella se acerco todavia mas hasta que se sento sobre mi, en ese momento ella ya se había dado cuenta pero no reclamo sino que disfrutaba ya que me miraba por ratos y volvia mirar al frente, mi respiracion se fue sintiendo mas fuerte igual la de ella, hasta que empece a darle masajes detrás de la espalda, se notaba que le gustaba como le pasaba mis manos entre la espalda y las nalgas, su respiracion era muy fuerte y tanto yo como ella no podia mas con la respiración ya que le respiraba subre su cuello y lo disfrutaba, luego me toco mi verga sobre mi jean de la nada y me dijo: alejo que bueno que nos conocimos la estoy pasando del putas y le dije: cierto hele yo tambien estoy contento de conocerla, la estamos pasando bien, dejemos hasta donde nos llevan nuestras acciones y me dijo: pues si alejo dale no hay problema la estoy pasando una chimba y hay que aprovechar esos momentos, detuvimos el masaje y ella me agarro mi mano y la llevo hasta su cuquita y me dijo: vea alejo como me tienes y claro estaba muy mojada, nos besamos un rato ella me quito el pantalon suavemente y agarro mi verga y se la metió a la boca, empezó con unos masajes suaves, pero debo decirlo nadie me la había chupado tan rico como ella y yo postrado sobre mi moto y ella casi arodillada chupando yo disfrutaba como hace mucho no lo hacia, tanta era mis ganas que le agarre del cabello para que me siguiera chupando otro rato mas. Luego de eso follamos sobre mi moto, quien dice que en la moto no se hacen bellezas y pues si estábamos tan excitados que no nos importo que hubieran fincas por los lados ni nada y follamos como debimos follar, suavecito duro, sexo oral, me gustaba agarrarla de la cintura y ponerle otra mano sobre las tetas asi me excitaba mas y ella lo disfrutaba tanto, hasta que paramos un rato a tomarnos otras cervezas que yo llevaba y seguimos con el segundo round, lo único fue que subimos un poco mas una montaña pequeña que había un potrero abandonado ya eran las pasadas las 12 de la noche demasiado y nos fuimos a follar allá, después de estar un rato alla en plena faena donde la luna era la única testiga de nuestros placeres lujuriosos salieron creo yo los dueños de la finca eran dos personas se veian a lo lejos corriendo con un par de linternas y gritaban que nos fuéramos de ahi ya que el potrero quedaba en un lugar privado pero demasiado lejos de la finca de los dueños, me excitaba mas y mas de que nos vieran follando ya que a ambos nos entro esa adrenalina ese delirio de persecucion de que nos pillaran culiando en el potrero, mientras llegaban los dueños de esos predios nosotros aprovechamos el poco tiempo que habia para escapar antes de que nos llamaran la atencion o nos llamaran a la policia.

Fue una sensación única que sentí ese mismo día jamas pensé que ese día fuera a follar de esa forma, a esa hora y con la adrenalina de que nos atraparan en pleno acto, como bien dicen para el sexo no hay lugar fecha ni hora, cuando menos uno se da cuenta, se dan las cosas, este fue mi relato espero les guste y sea de su agrado, saludos.

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