Todo empezó cuando un día quedé con ella, solo hablabamos por chat, así que un día fui a donde ella vivía, ella era perfecta, su cabello era largo un poco ondulado y color castaño oscuro con mechas rubias, ojos grandes y marrones, cada vez que me miraba sentía que me derretía y me enamoraba más de ella, una sonrisa perfecta con sus pequeños oyuelos que la hacían irresistible, tenía muchos piercing y pendientes en las orejas, y eso en una chica me pone a mil, además que tenía algún tatuaje, para ser exacto 2 no eran muy visibles pero bueno, me encantan las chicas con tatuajes.
Ella vivía sola, así que fuimos a su casa, después de cenar comenzamos a ver una película, mientras veíamos la película cuando tenía la ocasión acariciaba su piel despacito y eso a ella le encantaba, en un momento se estiró para agarrar algo, no recuerdo lo que era porque me rozó con sus tetas perfectas y en ese momento perdí la razón, no llebaba sujetador, estaban muy blanditas y tenía los pezones parados, se me puso muy dura, estabamos tapados con una manta, y creo que se daría cuenta porque de la manta sobresalía un enorme bulto, a partir de ese momento comencé a pensar maneras de volver a tocar esas tetas perfectas aunque fuese de manera accidental, de pronto ella me besó, y yo me excité mucho más, pero volvió a mirar la película, yo la besé a ella pero ella volvió a mirar la película, de pronto ella me agarró el pene, y se quedó bastante sorprendida, pero siguió mirando la película, empezó a mover la mano de arriba a abajo lentamente, haciendome una tremenda paja, yo comencé a acariciarle esas tetas perfectas, me acerqué a sus tetas y comencé a morderlas y lamerlas y a morder y chupar esos pezones, lentamente baje una mano hasta su vagina, comence a acariciarselo, tenía una vagina riquísima, tenía pelitos en la parte superior de su vagina, y eso a mi me pone muy cachondo, comenzo a gemir pero bajito, y a mojarse, de pronto se puso de pié frente a mi y apartó la manta, comenzó a chuparme el pene, ella dijo:
- Podré metermelo todo en la boca?
Ella lo intentó varias veces pero no podía meterselo todo, así que dejó de intentarlo y siguió chupandolo, yo estaba apunto de explotar, además ella mientras lo chupaba me miraba a los ojos y eso me ponía mucho más, me lamía el pene de arriba a abajo y volvía a meterselo en la boca, me chupaba el prepucio muy lentamente y pasaba la lengua y yo estaba apunto de explotar, yo la acariciaba y le tocaba esas tetas perfectas que desafiaban a la gravedad, siguió un rato hasta que le dije yo:
- Ahora me toca a mi.
Nos pusimos los dos de pie y ella se quitó el pantalón, tenía un culito precioso, era perfecto, se lo agarré la traje para mi y la besé, ese culo era tan blandito, me imaginé penetrandola a 4 patas pero eso irá después, la volteé y le comence a morder el culo y eso a ella le encantaba, se giró y se quitó el tanga y oh dios mío, ahí estaba esa vagina tan jugosa y cerradita apunto de abrirse como una flor, la acerqué a mi otra vez y volví a besarla, bajé lentamente y la besé en el cuello y le dí unos pequeños mordiscos, seguí bajando hasta sus tetas que volví a morder, lamer y chupar, y pasé la lengua alrededor de sus pezones y finalmente a sus pezones, seguí bajando lamiendo y disfrutando cada centimetro hasta llegar a su vagina y comence a lamerla y chuparla mientras la agarraba del culo, ella gemía y me agarraba de la cabeza y sus gemidos eran pura música para mis oidos, yo le dije:
- Ponte cómoda.
Se sentó en el sofá y se abrió de piernas, de ver eso yo seguía con el pene más duro que una roca, me agache y comencé a lamer su vagina, ella gemía con unos gritos que incluso dios de oirla se vendría encima, le introducia la lengua adentro, se lo lamía de arriba a abajo, le lamía el clítoris y lo chupaba como si fuese una almeja, me levanté y justo cuando iba a introducirle el pene me dijo:
- Espera!
Se levanto, me agarró la mano y fuimos al dormitorio.
Bueno chicos y chicas hasta aquí la primera parte, espero que os guste, yo me he puesto muy palote mientras iba contando la historia, pronto la segunda parte, gracias.
Ella vivía sola, así que fuimos a su casa, después de cenar comenzamos a ver una película, mientras veíamos la película cuando tenía la ocasión acariciaba su piel despacito y eso a ella le encantaba, en un momento se estiró para agarrar algo, no recuerdo lo que era porque me rozó con sus tetas perfectas y en ese momento perdí la razón, no llebaba sujetador, estaban muy blanditas y tenía los pezones parados, se me puso muy dura, estabamos tapados con una manta, y creo que se daría cuenta porque de la manta sobresalía un enorme bulto, a partir de ese momento comencé a pensar maneras de volver a tocar esas tetas perfectas aunque fuese de manera accidental, de pronto ella me besó, y yo me excité mucho más, pero volvió a mirar la película, yo la besé a ella pero ella volvió a mirar la película, de pronto ella me agarró el pene, y se quedó bastante sorprendida, pero siguió mirando la película, empezó a mover la mano de arriba a abajo lentamente, haciendome una tremenda paja, yo comencé a acariciarle esas tetas perfectas, me acerqué a sus tetas y comencé a morderlas y lamerlas y a morder y chupar esos pezones, lentamente baje una mano hasta su vagina, comence a acariciarselo, tenía una vagina riquísima, tenía pelitos en la parte superior de su vagina, y eso a mi me pone muy cachondo, comenzo a gemir pero bajito, y a mojarse, de pronto se puso de pié frente a mi y apartó la manta, comenzó a chuparme el pene, ella dijo:
- Podré metermelo todo en la boca?
Ella lo intentó varias veces pero no podía meterselo todo, así que dejó de intentarlo y siguió chupandolo, yo estaba apunto de explotar, además ella mientras lo chupaba me miraba a los ojos y eso me ponía mucho más, me lamía el pene de arriba a abajo y volvía a meterselo en la boca, me chupaba el prepucio muy lentamente y pasaba la lengua y yo estaba apunto de explotar, yo la acariciaba y le tocaba esas tetas perfectas que desafiaban a la gravedad, siguió un rato hasta que le dije yo:
- Ahora me toca a mi.
Nos pusimos los dos de pie y ella se quitó el pantalón, tenía un culito precioso, era perfecto, se lo agarré la traje para mi y la besé, ese culo era tan blandito, me imaginé penetrandola a 4 patas pero eso irá después, la volteé y le comence a morder el culo y eso a ella le encantaba, se giró y se quitó el tanga y oh dios mío, ahí estaba esa vagina tan jugosa y cerradita apunto de abrirse como una flor, la acerqué a mi otra vez y volví a besarla, bajé lentamente y la besé en el cuello y le dí unos pequeños mordiscos, seguí bajando hasta sus tetas que volví a morder, lamer y chupar, y pasé la lengua alrededor de sus pezones y finalmente a sus pezones, seguí bajando lamiendo y disfrutando cada centimetro hasta llegar a su vagina y comence a lamerla y chuparla mientras la agarraba del culo, ella gemía y me agarraba de la cabeza y sus gemidos eran pura música para mis oidos, yo le dije:
- Ponte cómoda.
Se sentó en el sofá y se abrió de piernas, de ver eso yo seguía con el pene más duro que una roca, me agache y comencé a lamer su vagina, ella gemía con unos gritos que incluso dios de oirla se vendría encima, le introducia la lengua adentro, se lo lamía de arriba a abajo, le lamía el clítoris y lo chupaba como si fuese una almeja, me levanté y justo cuando iba a introducirle el pene me dijo:
- Espera!
Se levanto, me agarró la mano y fuimos al dormitorio.
Bueno chicos y chicas hasta aquí la primera parte, espero que os guste, yo me he puesto muy palote mientras iba contando la historia, pronto la segunda parte, gracias.
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