Mi Doctor lo hizo.

Lo elegí, por pura casualidad en la nómina de la Medicina Prepaga.
Era muy buen mozo. La primera vez que lo vi me quitó el sosiego y, cada vez que pensaba en él, mi tanga comenzaba a humedecerse. Ni hablar de cuando me atendía en el consultorio.
Hasta que un día, Miguel mi marido, sin sospechar que el médico me turbaba, me dejó, como siempre, en la puerta del edificio y siguió viaje para encontrarse con unos amigos a cenar.
Yo tenía el último turno y tiempo libre, la asistente, que es compartida por tres profesionales, me indicó el número de consultorio:
-Espere en la salita. El doctor la va a llamar. – recogió sus cosas y se retiró.
Quedamos los dos solos en el local.
Yo tenía puesto un vestidito ligero, apenas arriba de la rodilla, sin corpiño y sandalias de taco alto.
-¡Laura XXXX, por favor pase!-escuché desde la puerta abierta.
Evidentemente no soy muy buena para disimular, la ganas de “comerle” el badajo al galeno. Cuando entré:
-Buenas tardes. Por favor cierre la puerta y acuéstese en la camilla- me dijo a rostro firme.
Cuarenta años, alto, robusto, de mucho hueso, cabello renegrido, lindos rasgos y un culo precioso.
Estaba sentado en su escritorio, y la camilla estaba orientada con el lado de los pies, hacia él, frente a sus ojos.
Fue sólo verlo, acostarme y comencé a fantasear las cosas que me dejaría hacer por él. La tanguita ya estaba mojada. Separé, un poco las piernas, dobladas levemente, en las rodillas. Él, aun sentado en el escritorio, tecleando en la computadora, lanzaba miradas “justo ahí”. Unas oleadas de calor me subían, desde la concha a la cara.
Él se levantó y se acercó a mí. Noté, con gusto, que ya estaba bastante hinchado en su entrepiernas.
Fijó la mirada en mis senos. Sin corpiño y excitada, mis pezones deben haberse visto bien marcados en la tela ligera del vestidito. Me los rozó, con la palma de la mano, en el trayecto de la misma para ir a “sentir” los latidos de mi corazón, debajo de la teta izquierda. Tuve una sensación de calor repentina, violenta acompañada de temblores, su verga cada vez abultaba más el pantalón del uniforme blanco de médico. Alargué la mano y se lo la toqué.
-No estaba equivocado, sos una cochinita, divina pero cochina- me dijo y metió mano bajo el vestidito y acarició mi vulva, a esa altura, inundada.
-Te tengo que sacar el vestido para …. revisarte mejor – murmuró entre dientes, me tiró de los brazos para sentarme y, sin ceremonia alguna, me quitó el vestidito.
De nuevo acostada, me acarició y sobó las tetas, de modo lascivo:
-¡Uhh suaves, gratas, al tacto! –
Me dio una buena chupada de pezones y lambetadas a las tetas, en sí:
-¡Ahh son dos delicias, majares para el paladar! -
-¡Veamos ahora que sabor tiene …. la cosa! – me quitó la tanguita y me acarició y manoseó la concha. Sin más rodeos, se abocó a pasar legua y labios todo a lo largo, de los labios externos, clítoris incluido:
-¡Está inmejorable por fuera. Ahora te voy a decir que tal sabe por dentro-
Introdujo uno, luego dos dedos y, mirándome a los ojos, se los llevó a la boca:
-¡Sabe y huele a gloria!-
-¡Estoy enloqueciendo de ganas!-Le dije en un susurro
Se quitó el ambo médico, bajó el bóxer y liberó la verga.
-Antes saboréala – me la ofreció a la altura de mi boca.
Estaba durísima, le di un besito y unas lambetadas. No me dejó chupársela, como era mi intención, ya que empujó la camilla hasta apoyarla contra la pared, me hizo sentar con las piernas hacia él, me las separó y, por finnnnn, me penetró y se movió maravillosamente dentro de mí. Acabé tres veces, la primera fue el orgasmo más tempranero de que tenga memoria. Hasta que me llenó de semen la cachucha.
No satisfecho con eso, se agachó y me lamió todos mis humores y apretó el clítoris con los labios de su boca.
Fue una cogida maravillosa. No cabía otra que reeditarla. Fueron varias las reediciones, corregidas y ampliadas, en hoteles transitorios.
Tengo un gran recuerdo del doctor. Aún me viene a la memoria el sabor de su verga en mi boca.


3 comentarios - Mi Doctor lo hizo.

charlespiere
Muy buen relato hiciste qm pusiera cachondo
kramalo +1
muy bueno...!! Cochina..!! jaja!! veni...haceme un pete...y te hago un tacto... gratis...jeje!!