Trio familiar en la isla cap 12

Hola! les dejo el capi siguiente y no olviden comentar con sus opiniones, que es lo que mas me gusta leer jeje, saludos y besos en sus dos cabecitas

DANIELA

A duras penas me senté en el camastro. Me dolía todo el cuerpo, especialmente la cara y los brazos. Vi que estaba en un sitio oscuro, iluminado solamente por unas antorchas en las paredes. Una niña estaba conmigo, y sostenía un cuenco de barro. Me lo dio de beber. Era un líquido amargo que me recorrió todo el estómago, aunque me sirvió para despertar bien.

—Gracias.
Dijo algo en su idioma y salió corriendo. Poco después entró mi papá, acompañado del curandero de la aldea.
—Ah, hija ¿estás bien?
—Sí… creo —entonces recordé el miedo que había sentido, la desesperación y la adrenalina durante el ataque, y me eché a llorar. Abracé a papá. Él también me abrazó y sentí sus fuertes brazos contra mi cuerpo.
El curandero me examinó muy bien y sonrió, aprobador. Luego se fue y dejó que yo y papá nos quedáramos solos para platicar. Me preguntó qué había pasado con exactitud, y yo le conté sobre ese sujeto cuando saltó sobre mí e intentó violarme. Afortunadamente logré defenderme y no dejé que su polla me entrara por ninguno de mis agujeros. Papá oyó esto y enfureció. Juró que el maldito ya lo había pagado con su vida. Toda la aldea estaba indignada ante ella ataque hacia mí, y me brindaban su apoyo.
—Bueno, iré a decirle a Mara que estás bien.

—No, espera. Quédate un poco más —le rogué y le tomé de la mano. Papá se volvió a sentar y me abrazó. Yo le correspondí, y busqué sus labios para besarle apasionadamente. Él se sorprendió por mi atrevimiento, pero poco después se dejó querer. Su lengua y la mía se abrazaron deliciosamente, y sus manos me tocaron los senos por encima de la sábana.
En ese momento el dolor que sentía en mi corazón fue aplacado ante la sensación de seguridad. Jalé de él para que se acostara sobre mí mientras nos seguíamos besando y jugando con nuestras lenguas. Le arañé la espalda y luego metí las manos por debajo de sus pantalones.
—Dame de mamar… —le pedí con carita de ángel.
Él, sonriendo, se levantó y se abrió la cremallera. La polla saltó feliz, grande y erecta. Me arrodillé y la tomé delicadamente. Chupé su verga durante un rato, deleitándome con el tamaño y el sabor, lo caliente de la carne y lo dura que estaba. Ah… adoraba esa polla. La mamé a fondo, despacio. Pasé la lengua por sus huevos y seguí recorriendo con saliva todo el órgano.
Él empezó a jadear deliciosamente. Si alguien había intentado violarme, entonces necesitaría de alguien que limpiara mi cuerpo, y qué mejor persona que mi papito querido. Cuando hube envuelto su verga con saliva, me acosté y abrí mis piernas. También coloqué mis dedos a los costados de mi vagina y le rogué que me penetrara enseguida.

Con cuidado de no lastimarme, se acomodó. Dirigió el grueso de su miembro a mi estrecha raja, y la metió de un sólo movimiento. Un grito agudo y corto escapó de mis labios y él los sello con un beso de lengua. Luego, mordiendo mis tetas, empezó un rítmico vaivén. Yo estaba aferrada a él, los muslos alrededor de su torso. Notaba sus huevos chocando con mi coño mientras me enterraba todo. Mi clítoris gritaba de placer y mis jugos empapaban su rica polla.
La descarga de semen fue inmensa y placentera. Noté lo caliente llegándome hasta el útero. Papá se apresuró a sacar la polla y a recostarse a mi lado. Yo me subí sobre él. Aunque su pene estaba flácido, seguía siendo rico al tacto, así que me restregué sobre su miembro y le embarré mis pezones por toda la cara.
—Chupa mis tetitas —le rogué como una niña. Él asintió y las tomó entre sus manos para darles tremendas lamidas.
En ese momento entró Mara, y se detuvo al vernos. Yo, avergonzada, me dejé caer. Papá no se molestó en taparse.
—Ay, pero qué bien se la estaban pasando los dos —dijo ella. Estaba desnuda, por supuesto. Se había hecho un bonito tatuaje en la pierna izquierda, y vi que estaba muy bien bronceada y hermosa, con el pelo negro cayéndole por detrás de los hombros.
Me dieron ganas de abrazarla, así que lo hice. Me paré, desnuda y la abracé. Nuestras tetas se pincharon. Ella, sorprendida, me dio un beso en el cuello.
— Me tenías preocupada, Daniela.

—Gracias por todo. Pensé que no te volvería a ver.
—Yo y Tamir encontramos al cabrón que te hizo esto.
—Sí, el maldito amigo de Tamir fue.
—Ya le dieron su castigo —me miró y sonrió como una pilluela —. Anda, pero qué bien estabas montando verga jajaja.
—Ay… cállate.
—A papá ya se le paró otra vez.
Era cierto. Tenía tremenda erección y se masturbaba feliz y sonriente. Mara me miró.
—Anda, coge un poco, que yo estaré mirando.
Esa era una idea morbosa. El dolor de los golpes se me había pasado. Así pues, ante la mirada de Mara, me senté sobre papá y dejé que su pija se enterrara en mi concha. Mara aplaudió y se sentó con las piernas flexionadas a verme. Apoyándome en el pecho de papá, comencé a cabalgar delicioso, moviendo las caderas en círculo. Miré a mi hermana. Ella sonrió y comenzó a tocarse la vagina. Su clítoris estaba a la vista, delicioso como un botoncito. Yo me acaricié los pechos mientras compartíamos miradas lascivas.
—Ven —le dije y me aparté de papá —. Te… puedes ensartar un rato si quieres.
— ¡¿De verdad?!
—Sí, claro… es nuestro papá.

Feliz, mi hermanita no dejó un segundo fuera de lugar. Se apresuró, sonriente, y se sentó. Su lubricación era tal que la polla resbaló suavecita dentro de ella, que se mordió el labio inferior. Yo me reí mientras ella cabalgaba feliz y me uní a papá con sus besos. Podía notar como el cuerpo de papá se estremecía por los fuertes sentones de Mara, mientras se acariciaba los senos y se pellizcaba las puntitas.
—Qué alegría —dijo él —. Coger con mis dos hijas.
Las dos nos miramos y sonreímos. Sí… era alegre coger con ella. A Mara sí que le daba permiso de estar con papá. Porque con su ayuda habían atrapado al cabrón que intentó violarme. De repente la chica me caía muy bien, y despertó en mí mis deseos lésbicos.
—Túmbate —le pedí. Ella me miró, sonriente, y lo hizo. Se abrió de piernas y expuso su hermoso y pequeño clítoris para mí. Me apresuré a sentarme en sobre su rostro, de tal forma que ella se ocupó de lamerme el coño mientras papá, subiendo los pies de ella en sus hombros y tomándola de las caderas, le hundió al polla.

Noté cómo Mara quería gritar, pero los movimientos rítmicos de mis caderas no se lo permitían. Froté mis pliegues, descargué mis jugos sobre su boca y ella, abriendo mi vagina con sus dedos, hurgó con su lengua. Yo ya no aguantaba más. Quería correrme de una buena vez, así que igual me masturbé. Su lengua y mis dedos provocaron una descarga de jugos dentro de su boca. Un squirt al pie de la regla. Papá se sorprendió, con el ojo cuadrado al verme hacer semejante barbarie sexual. Tuve que apartarme para dejar que Mara respirara, y se limpió la boca mientras se reía.
Me tocaba a mí disfrutar. Me coloqué con un 69 sobre Mara. Mientras ella me lamía todo el culo, yo estaba ocupada en comerle la conchita, misma que estaba siendo penetrada por la polla de nuestro padre. Los tres estábamos fuera de sí, demasiado excitados como para hacer otra cosa.
Al final, papá descargó un amplio reguero de semen en mi cara y sobre la conchita de mi hermana. Yo me apresuré a lamerla y dejarla bien limpia. Me gustó el sabor que producía, el éxtasis morboso al haber hecho mi primer trío con mi papá y mi hermanastra. Terminamos de tener sexo en medio de sonrisas picaronas y miradas penetrantes y sabrosas.

Dos días después, yo ya me sentía muy bien como para seguir andando. Me estaba acostumbrando a la vida en la aldea y a las amables personas que se paseaban desnudas en ocasiones; felices y sin importarles nada del mundo exterior. Me fui a ver a Mara, que estaba con Nin, su supuesta cuñada de 14 años. Las dos tomando el sol en la orilla de la playa, mientras Tamir y su hermano estaban en el agua, pescando en una balsa. No muy lejos de ellas, meciéndose en una hamaca entre dos palmeras, estaba la hermosa Andra, hermana mayor y la que menos bien le caía Mara.
—¿Has oído? —me preguntó Nin. Las dos tenían el cuerpo aceitado y lucían un bonito bronceado. Yo me apresuré a quitarme la ropa y a tumbarme junto a ellas.
—¿Qué cosa?
—Vendrán más personas.

—¿Es cierto? —le pregunté a Mara mientras Nin, amable, me aceitaba las piernas y los pechos. Quería tener el mismo color de piel de ella.
—Sí —respondió mi hermana con algo de tristeza —. Bárbara dice que pronto vendrán a buscarla porque el tiempo se le ha terminado. Como perdió todas sus cosas, no le quedó más remedio que esperar un tiempo y ya mero se cumple.
—¿Tú no te quieres ir?
—No, porque me gusta este sitio.
—Nosotras te cuidaríamos bien —dijo Nin y miró con recelo a su hermana mayor. Sabía que la grande no pensaba igual.
—Ese es el problema. Tengo una vida —soltó mi hermana, abriendo y cerrando sus piernitas —. Pero aquí también quiero tener una vida.
—Tú sólo quieres coger — le dije y ella se sonrojó —. No te culpo. Los de aquí tienen pollas grandísimas. Debe ser genético.
—Sí, pero… —me di cuenta de que miraba a Tamir, que venía arrastrando el bote junto con su hermano. La gran polla del muchacho estaba erecta, seguramente al ver a mi hermana desnuda —. Creo que me quiero quedar con Tamir.
—¿De verdad? —preguntó Nin, emocionada.
—Sí. Y también con su hermano. Creo que podríamos tener una buena relación.
Miré a Nin para que me explicara.
—A los hombres… se les permite —decía lentamente, buscando las palabras en español —, compartir a la misma mujer en matrimonio.

—Pero… ¿eso será bueno? Es decir, tú hermano ¿es celoso?
—No —respondió la chica —. Mi hermano… propuso eso a Mara.
Miré a mi hermana con picardía.
—Anda, quieres tener dos esposos.
—Bueno, mira tremendas cosotas que traen entre las piernas y son muy buenos conmigo. Tamir es romántico. Su hermano es más serio.
Tamir y su hermano se acercó con tremenda erección. No sólo tenía una polla bonita, sino que su rostro tenía un hoyuelo y era muy guapo, casi exótico. Mara se apresuró a recibirlo con un beso en los labios mientras su traviesa mano bajaba hasta la verga de su novio y se la apretaba tan fuerte que él chilló. Nin y yo nos reímos, cómplices.

MARA.

Había terminado ya de mamarle la polla a Tamir y a su hermano Len. La descarga de los dos fue abundante, demasiada lechita para mí, y estaba satisfecha. Ya era de noche, así que ¿qué mejor momento para beber un poco antes de ir a acostarme? Me limpié la boca y les dejé dos besos en los labios a los hermanos, que se pusieron a susurrar cosas entre sí mientras se masajeaban la pija de tan tremenda chupada que les había dado.
—Ven —me dijo Nin, entrando de repente al cuarto de los chicos —. ¿Ya terminaste? Voy a hacerte un tatuaje.
—Ah, voy. Espera me quito esto.
—Tienes… ¿Cómo se dice? Semen, en la frente.
—Ah… gracias.

Después de despedirme de mis dos posibles esposos, fui al cuarto de las chicas, que Nin y Andra compartían conmigo. La hermana mayor estaba molesta, de nuevo, ceñuda mientras su mamá le dibujaba bonitas flores en los hermosos pechos. Le dirigí una sonrisa, y ella desvió la mirada. Me senté con las piernas flexionadas frente a ella. Nin, detrás de mí, empezó a pintarme la espalda.
—Entonces — dijo la mamá —¿Tú… te casarás?
—Pues… no lo sé. No es un tema del que quiera hablar ahora.
—Deberías quedarte —sugirió Nin, abrazándome por la espalda y pellizcando mis pezones traviesamente —. Quiero sobrinos.
—Pero no es sólo eso — le dije. Vi que la hermana mayor me estaba taladrando con los ojos. Me sonrojé y dejé de hablar.

Lo que sucedió más tarde fue un tremendo susto para mí. Dormía plácidamente, acostada junto a un montón de cojines de pluma. A mi lado, Nin se levantó.
—¿A dónde vas? —le pregunte, somnolienta.
—A ver a un hombre.
—¿A quién?
—Un chico de la aldea —fue lo que dijo. Se puso un vestidito en silencio y se fue.
Decidí dejarlo pasar y traté de dormir… pero entonces, una media hora después, algo en mí se encendió como un sexto sentido. Escuché un ruido y abrí los ojos. Cerca de mí había una sombra, una silueta de cabello largo que sostenía un puñal. Grité y por inercia me moví de mi cama justo cuando el arma bajaba y se clavaba en la almohada.

La madre de Tamir, el propio Tamir y Len, y hasta el papá, entraron de inmediato en el cuarto. Andra estaba allí, armada con esa filosa cuchilla y mirándome con ojos de odio profundo. Yo, desnuda, alcancé a cubrirme el pecho. Tenía lágrimas en los ojos por el terror y mi corazón daba vueltas como loco. Anin, la madre, regañó a su hija y le dio fuertes cachetadas. Tamir le quitó el cuchillo y el papá y Len la sacaron del cuarto.
Yo, aterrada todavía, caí de rodillas, pensando en lo cerca que había estado de morir.

****+

Jajja creo que está mas entendido qe no quieren a Mara en esa familia verdad?
saludos, gracias por leer, nos vemos la próxma semana!!

14 comentarios - Trio familiar en la isla cap 12

caritoydavid +1
Que super y ahora que pasara?? pillaran a Nin que se fue sin permiso, que van hacer con Andra. A la expectativa de mas
hammer30 +1
jaja muchas preguntas! pero todas se responderán, gracias por leer
4trujillo52 +1
Bueeenoo!! Al fin se dio el trio familiar, se juntaron las nenas y el padre!!!. En cuanto a Marca y su casi cuñada, que ocurre entre esos Hno!?. Jaja muy buen relato e intriga!!. Van puntos!!!.
hammer30
jaja si ya era hora de una buena sesión con papito ! pobre Mara, se la quieren ensartar de la forma equivocada!
gadielcomingsoon +1
Tiene buena trama y me calienta como loco. Seguí así vesos!
hammer30
Gracias!! me gusta verte seguido por acá jeje, saludos!!
gadielcomingsoon
@hammer30 te sigo casi desde el principio, asique me tenes fiel en tus relatos
Si-Nombre +1
Excelente relato va mejorando bastante, lastima que Andra tenga celos de Mara que es tan tierna, solo debe decirle que ya ha disfrutado del sexo de su hermano y así Mara lo comparte.... Gracias por compartir...
hammer30
jaja que Andra se coge al otro hermano, ups spoiler ajaja pero es que tambien ella tiene sus celos y mara pues es pura inocencia
vampidito +1
se pone mas interesante todavia
hammer30
jaja qe bueno que te esté gustando la historia!
CA20 +1
vaya vaya, que bien se lo está pasando Daniela, regresó con todo jajajaja, y a mara casi la peinan carrera al centro, casi nos dejan sin la loca de la historia. Linda continuación, gracias por compartir y un saludo desde Tiquicia!
hammer30
jajaj un poco mas y se iba a terminar la vida sexual de Mara,
Yosoy277 +1
Uuuufff tremendo, cuanto nos hacer esperar 😆 jaja
Muy bueno como siempre!
Dejo +10
hammer30 +1
jajaj no les hago esperar, es solo una semana!!
Yosoy277
@hammer30 Te la paso porque sos vos jaja
jorvac164 +1
ME PERDÍ EN LA TRAMA,PERO NO IMPORTA,LOS LEERÉ DE NUEVO,LO QUE COJEN ESTAS CHICAS ES INFERNAL! SALUDOS Y VAN 10 COMO SIEMPRE!!!!!!!!!!!!!!!!!!
hammer30
jhajaja cogen pero super bien!! pjala yo fuera asi XD
juans333 +1
diosa!!!!!! no doy mas...que lindo escribis 😍
hammer30
jaja gracias!! me gusta que les guste
jstronger +1
Se puso turbia la cosa.. Excelente ese trio en familia 😃
hammer30 +1
jaja sii es una bonita familia!
AquiLuis
Tremendoooo que hermoso por fin un trio con las nenaaasss, huuu y pobre mara, estara celosa la Andra..., mmm, ahi se va a armar algo lindo..., geniooo muy bueno
elcalvode
10+ DANIELA y la pija de SU SERVILLETA, no puedo pedir mas.