Los Juegos con mi madre c/imágenes

Los Juegos con mi madre c/imágenes
Desde un primer momento supe, estaba convencido que, mi madre, sentía algo especial por mi, algo mas que el cariño, el amor de una mamá por su crío.
Los cuidados que me profesaba, el demostrativo desempeño en el ejercicio de su delicada y dedicada tarea. Configuraba para mi, que yo podía esperar de ella todo, y que ella estaba dispuesta a entregarlo todo por y para atender mis deseos más caprichosos.
Así que conforme a la edad que iba cumpliendo, mis pretensiones iban variando.
Mis antojos se tornaron mas al apetito sexual en ciernes, que con ansiedad y desasosiego surgían.

madre
Aquello fue tocar el cielo con las manos, la gloria, mi madre aceptaba con devoción los cambios, sin inmutarse, sin un comentario ni opinión, como algo más, algo habitual del crecimiento y desarrollo de su benjamín.
No puedo ni quiero excusarne y fingir diciendo que no sabía lo que hacía, al igual que ella, no pretendíamos nada, sabíamos lo que hacíamos.
En el horario que no estaba mi padre, ya que se encontraba trabajando, yo permanecía siempre desnudo. Mi padre alguna vez me encontró así, y se disgustó mucho, me trató como una especie de obsceno y deshonesto fauno. Lo cual yo nunca interpreté.

incesto
Al cabo de un largo tiempo, de jugar los juegos con mi madre, comencé a aburrirme. Y en su defecto ella, parecía estar pendiente de estos, ansiarlos con inquietud y conjoga. Giraba alrededor mío con agónica ansiedad, preocupada y temerosa a mis rechazos, que ultimamente se producían en forma reiterada. Así que, en un momento de lucidez, de los pocos que tengo, analicé la situación, y comprendí, que ella también como yo, se merecía obtener lo que necesitaba.
Ahora bien, para seguir siendo honesto, lo que necesitaba según mi apreciación personal, que debo decir, muchas veces no era lo que esperaban los demás.

familia
Es así que, invité a la hora de la siesta, a algunos amigos, conocidos y ex compañeros del colegio, para halagar y complacer a mi mamá.
Yo quería que sacíen su sed y su apetito genital, sin embargo, no la vi muy entusiasmada cuando se encontró con mi sorpresa para con ella.
De verdad quería gratificarla por tantas alegrías que me daba, además de resarciren una mínima parte de todo lo que ella estaba dispuesta a hacer por mi.
Pensé que era saldar y solucionar mi poco deseo carnal.
Aunque ella se la veía nerviosa, era seguramente lógica su respuesta hacia la inesperada sorpresa. Desprevenida entró desnuda al comedor diario y se consternó ante la presencia de todos esos jóvenes cuasi desconocidos para ella. Rapidamente quiso cubrir su cuerpo malvistiéndose con algunas prendas que había de casualidad en el comedor.

hijo
La tranquilicé, le ordené que se relajara, la penetré y cuando sentí su humedad en mi verga la entregué a la barra de amigos.
Ella obedeció, pareció entenderlo ya que no se resistió, pero, su rostro no mostraba la misma fascinación como conmigo en la intimidad, sino todo lo contrario, había un ríctus similar a estupor o desconcierto, una especie de resignada confusión que observé en su mirada.
Para continuar con la sinceridad del relato de los hechos, debo confesar, que tampoco les resultó sencillo a mis conocidos. No lograban, no conseguían mantener la erección de sus penes.

Los Juegos con mi madre c/imágenes
Mi madre continuaba con su mirada fija en mi, como explicándome con sus ojos, que no estaba dando resultado mi regalo.
Por lo menos esa, era mi impresión de aquél momento, ese intercambio de opiniones en lo visual, se vio interrumpido cuando uno de los camaradas amantes, consiguió una buena erección, le quitó a mi madre las prendas que la malataviaban, la inclinó acostándola en un sofa y la penetró desde atrás.
madre
Mi madre sintió la irrupción del miembro viril de mi compinche, tanto que entrecerró sus ojos interrumpiendo nuestro diálogo óptico ocular.
Eso fue como un quiebre de la situación, la que hasta yo me había dado cuenta que se tornaba conflictiva. Me estaba empezando a molestar como se producían los sucesos en ese acontecimiento.
Las circunstancias comenzaron a encaminarse a partir de allí, a pesar de que mi madre reestableció la comunicación oftálmica conmigo, no la veía feliz, ni dichosa, que a todas luces era lo que yo buscaba, satisfacerla.

incesto
Aunque todo tomó más ritmo, y los contertulios se iban animando y la poseían, la poca actitud de mi madre boicoteaba el momento.
¡Dale mami, ponele onda! Exclamé serio con el entrecejo fruncido
Mi madre lo aceptó y se predispuso de otra manera, se hizo por primera vez presente en el lugar, además de con su cuerpo con su espíritu.
Agachó la cabeza y se empeñó en agradar a su hijo una vez más.

familia
Mi mamá pensó, en el hecho, que ya está consumado, además se llevaba a cabo en su lugar, entonces debía cumplirlo y terminarlo de manera magistral, para beneplácito de su Dios, su hijo, que se había convertido en una especie de fiolo, de proxeneta de su cuerpo, de su alma, de su persona.
Un hedonista, como un swinger con amplio criterio, que cree que incorporando a otros en sus relaciones sexuales mejora el vínculo de la pareja en lo sexual, pero sin implicación emocional.
Sin embargo, esto que estaba aconteciendo, era un tipo particular de orgía, en la que una mujer (en este caso mi madre) mantenía relaciones sexuales con tres o más hombres por turnos o al mismo tiempo; esto podía llegar a incluir un número indefinido de participantes.

hijo
Mi madre esperaba, que yo su hijo, pudiera descubrir rápidamente que no soportaría mi persona con los celos que me inspiraba el verla a ella, mi progenitora y pareja, con otras personas. Más que esperarlo lo deseaba, rogaba que así fuera, ya que ella sólo quería hacerlo conmigo.
Sin embargo, no sucedió, me encantó ver a mi mamá como la cojían mis conocidos y como estos me agradecían la buena onda, y mi cero egoísmo para compartirla.

Los Juegos con mi madre c/imágenes
Por supuesto, mi mamá lo aceptó y hasta creo que con el tiempo le gustó, adquirió el hábito y la costumbre de soler hacer algo, en este caso, cojer para mi, su hijo.
Su primogénito siempre logro lo que quisiera con ella, estaba domesticada, dominada y sometida por su hijo, inculcándole determinadas ideas o creencias, aleccionándola sobre la manera de actuar o comportarse, una absoluta pecadora, cometiendo cualquier falta por y para él.

madre
Esa siesta fue la primera de muchas aventuras sexuales que se produjeron en mi casa natal, poco a poco iré contándolas. Como mi madre por sobreprotegerme aceptaba a mis conocidos y todos los juegos, para que yo no anduviera en la calle, con todos los depravados y peligros que existen allá afuera.
incesto

49 comentarios - Los Juegos con mi madre c/imágenes

gasbang
excelente !!! una genia la viejita
maf80
´puedo ser tu amigo ajaj
grancucon
¡¡¡¡ Que buen trabajo....Magnificas Imágenes....Excelente relato....De lujo...Felicitaciones y gracias por compartirlo...!!!!!
AmandaLeona17
Estoy cansada de mi marido.Busco aventura, con una buena polla.
Paso fotos mia desnuda. Y con mi hijo
Caffrey07 -1
Mami te gustaria ser la mujer del post?
AmandaLeona17
@Caffrey07 sii lo desearia
Tylus99
Podemos hablar en privado? yo igual quiero con mi mama y acabo de encontrar algo interesante
Si quieres te enseño mi post
MejisimiosPobres
amigo, es falsa la historia o verdadera? y sos vos o son imagenes sacadas de internet?
MejisimiosPobres
tenes el video de esa porno? pasala
jorgehindami
https://www.xvideos.com/video30032153/profesora_se_deja_manosear_y_violar_por_sus_alumnos_pornomixcasero.com