La Prima Tatiana.

Tatiana, fue la primera mujer con lazos familiares con la que tuve sexo. Todo sucedió estando de vacaciones en un tiempo compartido en la ciudad de Acapulco ya que mi familia tenía la costumbre de pasar la navidad lejos del frio de nuestra ciudad. Tatiana, a mi parecer es la prima más atractiva de la familia, ya que por sus venas corre una mezcla de sangre Mexicana y Alemana.
Con 29 años y 1.70 de estatura, piel blanca, cara ovalada y larga, unos ojos color verde esmeralda que con solo mirarlos te hechizan, nariz respingada y delgada, una boca que cualquiera quisiera comerse a besos, cabello color rojizo muy largo casi hasta la cintura, un par de senos medianos bien formados y en su lugar, un cintura que envidiaría cualquier modelo de la actualidad, un trasero firme y voluptuoso el cual pone duro cualquier pene, unas piernas largas y delgadas y como toque final muchas pecas en la cara.
En aquellas vacaciones Tatiana, iba acompañada de su flamante nuevo esposo, Andrés un tipo bastante gordo pero eso si con muchísimo dinero. La madre de Tatiana, murió cuando ella penas era una niña, por lo que mi madre se convirtió en su mama postiza. Lo que origino que entre nosotros hubiera una relación casi de hermanos.
Una mañana como cualquier otra me desperté temprano y Salí a correr un poco, al regresar mire a Tatiana sentada en una silla para sol junto a la alberca, fumando y con cara de molestia. Así que me acerque y pregunte.
- Prima, estas trompuda o quieres beso?-dije-
- Mmm… estoy trompudisima…-respondió-
- Y eso? Paso algo? Te hizo algo Andrés?...-pregunte con tono molesto-
- Jajaja, calma pequeño… es lo que no me hace… lo que me molesta-dijo con voz de insatisfacción-
- Uyy… problemas en el paraíso… ni hablar temas de adultos. Mejor me voy y te dejo pensar.-dije, levantándome de la silla de al lado-
Ese día los demás salieron a la playa, yo me quede en casa para remojarme en la alberca hasta quedar como ciruela pasa. Mi familia salió como a eso de las 9:00 a.m. yo baje a la alberca media hora después, nade un poco y me sumergí otro rato más. Hasta que el ruido de la puerta eléctrica me interrumpió.
Tome mi toalla y me dispuse a ver quién osaba interrumpir mi día, para mi sorpresa era Tatiana y Andrés, quienes se besaban frenéticamente dentro del auto. De pronto las manos de Andrés tomaron los perfectos senos de Tatiana, agazapado como tigre detrás de unos arbustos contemplaba aquella escena verdaderamente caliente. Tatiana sin dejar de besar a su marido, estiro la mano y tanteando intentaba abrir la puerta del auto.
Al ver aquello por mi cabeza pasaron ideas perversas, por un lado salir y dejar que terminaran su acto sexual a solas, mientras que el lado perverso dijo que me ocultara y disfrutara del show. Me había puesto muy caliente ver como las manos de Andrés, amasaban los perfectos senos de Tatiana, así que me escabullí y entre a casa antes que ellos subí las escaleras y me encerré en el armario de la habitación de ellos, aquellos armarios tenían la puertas plegables con pequeñas tablillas, lo que me permitía tener total visión de la habitación.
Después de unos momentos de incertidumbre, el sonido de los besos se hacía cada vez más sonoro y cercano, yo frotaba mi pene con cada gemido que escuchaba.
De pronto mire que Andrés entraba por la puerta de la habitación estirando las manos, dando unos pasos hacia atrás entro el bello cuerpo de Tatiana, para ese momento totalmente desnuda, sus perfectos senos ni se movían con cada paso que daba, su cara llena de lujuria, su pubis cubierto de vellos rojizos y sus piernas delgadas y suculentas.
Los dos fueron caminando hacia atrás sin dejar de tocarse y besarse, la atmósfera era sumamente erótica, las manos de Andrés no se detenían ni un minuto, mientras que las de Tatiana amasaban el bulto de su marido. Llegaron hasta el tocador y Andrés dio vuelta sentándose sobre el borde del mismo, Tatiana soltó su boca y lentamente bajo hasta su bulto. Dejo caer algunos besos sobre él y lentamente lo despojo de las bermudas y ropa interior que traía su marido, la herramienta del amigo Andrés quedo al descubierto siendo esta una pija algo pequeña pero bastante gorda, muy parecida a él.
Tatiana, comenzó a frotarla con la mano y dejaba pequeños besos en su glande. Andrés se retorcía del placer y tomaba a Tatiana de la nunca como queriendo que se comiera su salchichón. No tardo mucho para que eso sucediera, mi prima se tragó de un bocado todo el pene de su marido para después meterlo y sacarlo de su boca.
- Gug, gug, gug, gug… mmm!!... te gusta gordito?...-Decía Tatiana, sacando el pene de su marido de su boca-
- Aja… me encanta bebe… sigue no te detengas…-pedía Andrés-
Mi prima Tatiana, siguió comiéndole el pene a su marido por unos minutos más, Andrés con cada mamada que le propinaba la boca de Tatiana se retorcía y se aferraba al tocador, yo estaba en estado frenético por aquella escena y bajando mi traje de baño me pegaba unos buenos jalones.
En un momento Andrés tomo de la cabeza a Tatiana y le hundió todo el pene en la boca. Mi prima se tomó de sus muslos y trataba de zafarse, pero los gordos brazos de su marido no la dejaron. Andrés comenzó a sacudirse y soltó un gemido fuerte y sonoro…
- Oooooooo!!..... mamacita….
Después de unos segundos mi prima logro zafarse y con cara de enojo se levantó empujando a su marido contra el espejo, se dirigió al baño y su garganta lanzo un grito de furia.
- Aaaaaaaaaaaaaaa!!... otra vez…. Ya ni la chingas gordo… -dijo Tatiana, enfurecida-
Andrés no decía nada, solo se limitó a subir sus bermudas y quedarse sentado sobre el tocador, hay me di cuenta de lo que pasaba entre ellos, el amigo Andrés era eyaculador precoz.
Tatiana siguió propinándole improperios, mientras lloraba encerrada en el baño. Después de unos minutos Andrés salió de la habitación y el motor del auto se encendió.
Hasta ese momento Tatiana salió del cuarto de baño y sentándose en la cama siguió llorando desconsolada solo cubierta con una toalla. En ese momento quería salir y poseerla y demostrarle que no todos los hombres eyaculábamos tan rápido, pero algo me detuvo. Seguí oculto por unos minutos más, los mismos que tardo mi prima en relajarse y salir de la habitación, momento que aproveche para salir del escondite y dirigirme a mi habitación.
Dejando pasar unos minutos y no escuchando ningún ruido decidí bajar las escaleras y ver como estaba mi prima.
Baje despacio y la mire sentada fumando en la orilla de la alberca, enredada en la toalla blanca con la que salió del baño. Me acerque y abrí la puerta corrediza. Al escuchar aquel sonido Tatiana volteo la cara y me miro con asombro.
- Primo… estabas aquí… hay por dios nos escuchaste?-dijo Tatiana, apenada-
- Aja… pero no pasa nada Tati, trato de comprender las cosas.-respondí, respirando hondo sin dejar de mirar sus hermosas piernas-
- Ven fabo, abrázame por favor…-dijo Tatiana-
Sin pensarlo ni un segundo me acerque más a ella, sentándome a un lado la rodee con mi brazo y la jale hacia mi hombro.
- Tranquila Tati, respira… deja que el enojo salga.-dije-
Tatiana se comenzó a relajar y se acomodó sobre mi pecho. Respiro hondo y dijo.
- Hay primo, yo pensé que mi vida sería muy feliz, pero creo que me equivoque.
Mi mano comenzó a pasar por su espalda, al sentir eso Tatiana dio un ligero brinco y dijo.
- Primo… me vas a poner cachonda… deja las manos tranquilas, por favor.
- Jajajaja, y que… que podría pasar…-dije con cierto desparpajo-
Tatiana me miro de reojo y sonriendo replico.
- Estas viendo la tempestad y tú no te incas, primo…
La tome de los hombros y separándola un poco de mi respondí.
- y porque no… estaría chingon no?....-dije con intenciones maliciosas-
- chamaco caliente saquete de aquí…-respondió Tatiana-
Me levante y me zambullí en la alberca, nade hasta la otra orilla y Salí del agua, sin secarme gota laguna me dirigí dentro de la casa. Tatiana no dejaba de mirarme mientras hacia aquel recorrido, pero ahora su mirada era diferente. Tal vez producto de la lujuria y deseo de que alguien la tomara y le diera lo que tanto estaba buscando. Subí a mi habitación y tome unas bermudas, Salí de nuevo y entre al baño me di una larga y relajante ducha. Al terminar me puse solo las bermudas y Salí hacia mi habitación de nuevo, al entrar por la puerta lo que vi no lo podía creer mi prima Tatiana estaba sentada en el borde de la cama con las piernas cruzadas y apoyada sobre una de sus manos. Ella me miro y dijo.
- Lo que dijiste en la alberca era en serio primo?... me quieres coger?-dijo Tatiana-
Trague saliva y respondí sin más.
- Tú quieres hacerlo, Tati?... a mí me encantaría hacerlo contigo y demostrarte que no todos terminamos tan rápido…-respondí-
Tatiana, abrió grandes los ojos y respondió.
- Y como sabes que mi marido es precoz?...
- Nos espiaste?... cabroncito…
No me quedo más remedio que decir la verdad.
- Aja, vi todo desde tu armario…-dije acercándome a ella-
- Eres un cabron, primo… y a demás no sé si esto sea correcto somos familia y soy mucho mayor que tu…-dijo Tatiana-
- Nunca desee a nadie que tuviera algún lazo familiar conmigo, pero eso cambio después de verte desnuda, prima…-dije con voz segura-
Tatiana, se levantó de la cama y me tomo de las mejillas, diciendo.
- Pues entonces, este será nuestro secreto y jamás diremos nada a nadie… me lo prometes?
- Si, lo prometo-respondí-
Su boca se fundió con la mía en un beso cargado de deseo y lujuria, sus manos acariciaban mi pecho desnudo mientras que las mía la despojaban de la toalla que envolvía su hermoso cuerpo.
Sin perder tiempo mis manos tomaron sus senos perfectos, amasándolos con suavidad. Mientras sus manos bajaban hasta mi abdomen y desabotonaban mi bermuda, mis dedos tomaron sus pezones y su garganta dejaba escapar ligeros gemidos de placer, por fin sus dedos lograron desabrochar mi bermuda y la dejaron caer al suelo. Una de sus manos tanteando llego hasta mi pene medio flácido y con gran pericia comenzó a mastúrbame suavemente. Sus labios dejaron los míos, para ir bajando lento por mi cuello y pecho; deteniéndose en mis tetillas para chuparlas un poco, siguió bajando por mi abdomen. Por un momento sentí que se dedicaría a chuparme el pene pero no fue así, volvió a subir lento mientras su mano se encargaba de poner a tono mi pene.
Tatiana, llego de nuevo hasta mi boca, sentí como su respiración aumentaba y los jadeos eran más constantes.
- Primo… esto es excitante… el riesgo, la aventura… me encanta.-decía Tatiana-
Una de mis manos soltó su seno y bajo despacio hasta su velludo pubis, palpándolo hasta encontrar su clítoris, le dedique unos minutos y con cada roce de mis dedos, Tatiana se estremecía y dejaba escapar pujidos de placer.
- Ummm!!... ummm!!... primito… que rico… papi… así me gusta… ummm!!... ummm!!...
Deje su clítoris por un momento y mis dedos pasaron por lo largo de su vagina, sintiendo su humedad y calor.
- Tati… estas buenísima… prima…-dije llevado por la lujuria-
- Tú crees… mmm!!... pues soy tuya por hoy… así que hazme lo que quieras primo…-respondió Tatiana llevada por el deseo-
Mis manos dejaron por un momento su seno y vagina y se dirigieron a sus buenas nalgas, palmeándolas suavemente.
- Zazz!!... ammm!!... primito… eres todo un rufián….-dijo Tatiana al sentir la nalgada-
- Te gusta eso prima, te gusta que te traten mal o bien?-pregunte-
- No… mejor trátame como si fuera la mujer que amas…-respondió-
Sin soltarla de las nalgas, caminamos hasta llegar a la orilla de la cama y suavemente la recosté en ella. Quedando en posición de misionero, lentamente fui bajando por su cuello y senos besándolos y acariciándolos con ternura, seguí bajando pasando por su abdomen y su ombligo, hasta que me topé con sus abundantes vellos rojizos del pubis, suavemente bese su monte Venus y llegue hasta su clítoris chupándolo un poco.
- Aaa!!... mmm… primo… así sigue… mmm… uyyy!!... que rico… -decía Tatiana-
Seguí mi camino hasta que mi lengua se hundió en su sexo chorreante de líquidos femeninos, lamí toda su concha, adentrando de vez en cuando mi lengua en su vagina, Tatiana se retorcía del placer y me tomaba de los cabellos, con las piernas levantadas.
- Primitoooo!!... que rica lengua… no te detengas… no pares… -decía entre gemidos mi prima-
Los chupetes en sus labios vaginales eran sonoros y con cada uno de ellos Tatiana se estremecía y arqueaba su espalda. De pronto sus dos manos me tomaron de los cabellos y clavaron mi cara en su vagina.
- Yaaa!!... ya… déjame chuparte el pito, primo…-dijo Tatiana-
Sus manos me soltaron y pude por fin respirar, los dos tardamos unos segundos en recuperar el aliento y ella se puso de pie sobre la cama, haciéndome señas de que subiera con ella. Subí a la cama, como me lo pedía; su boca volvió a tomar la mía y su lengua se paseaba por mi cuello y orejas, bajando hasta mi pecho, lo que provocó que diera unos pasos hacia atrás y quedara recargado sobre la pared, con las rodillas un poco flexionadas. Tatiana doblo sus piernas y dejándose caer de rodillas sobre el colchón tomo mi pene ya duro como piedra, al mirarlo levanto la miranda diciendo.
- No… no tienes la circuncisión, primo?...
- No… hay algún problema?-respondí-
- Ninguno. Niño… vamos a probar un pito con gorrita a ver a que sabe…-respondió mi prima metiéndose mi pene en la boca-
En ese momento supe porque Andrés se sujetaba del tocador cuando Tatiana le chupaba el pene, mi prima mamaba como una diosa, su lengua giraba alrededor de mi pene sin sacarlo de su boca, mientras su mano frotaba mis bolas suavemente. De repente dejo de mover la lengua y retrayéndola un poco se metió todo mi pene hasta que sus labios tocaron mi bajo pubis.
- Oooo!!... prima…. Que bien chupas el pito….-dije-
Mis manos la tomaron de la cabeza, provocando que mi pene se enterrara más en su boca, después de unos segundos; Tatiana lanzo la cabeza hacia atrás y saco todo mi pene de su boca, mi amigo estaba cubierto de saliva la cual repartió rápidamente mi prima con su mano en todo mi pene. Volvió a meterse mi pene a la boca propinándome unas mamadas de lujo. Yo la sujetaba con fuerza de los cabello sintiendo como me comía el pene.
- Prima… que rico chupas, ahora entiendo porque tu marido termina tan rápido.-dije-
Tatiana saco mi pene de su boca y respondió con voz imperativa.
- Pues no vayas a terminar todavía, primo aún falta que me des un poco de carne en la cola…
Gimiendo y pujando producto del placer que su boca me daba, entre cerré los ojos para disfrutar de los dulces labios de mi prima.
- Gug, gug, gug, gug, gug, gug, gug….aaaa!!... primo… te gusta mi boca…?-pregunto mi prima-
- Aja… me encanta primita…-respondí-
- Gug, gug, gug, gug, gug, gug, gug….aaaa!!... es mi imaginación o se te esta poniendo más dura…?-pregunto de nuevo-
- Mmm… no se… es que mamas tan rico…-dije-
- Gug, gug, gug, gug, gug, gug, gug….aaaa!!... gug, gug, gug, gug, gug, gug, gug….aaaa!!...
Así siguió por unos minutos más, hasta que saco mi pene de su boca cubierto de saliva y metiendo la punta de su lengua debajo de mi prepucio, la giro hasta recorrer todo mi glande; yo me estremecí y me recargue totalmente en la pared, ella me miro y volvió a hacerlo. Una vez que su lengua se apartó de mi glande ella se desplomo en la cama diciendo.
- Primo, tienes condones…?
- Noo!!... –respondí-
- Bueno solo prométeme que no terminaras dentro de mi ok…-dijo Tatiana-
- Ok… prometido-respondí-
- Ahora si ven y métesela a tu prima, chamaco caliente… como nadie se ha metido jamás…-dijo Tatiana levantando y abriendo las piernas.-
Aquella imagen era increíble su vagina rosada estaba a mi merced, sin pensarlo ni un segundo me puse de rodillas y suavemente coloque mi pene en su vagina, ella lo tomo con la mano y lo dirigió hasta la entrada y dijo.
- Mételo todo… primo… ya…por favor…
Deje caer mi peso sobre ella y mi pene se hundió hasta que mis bolas chocaron con sus nalgas.
- Aaaaa!!.... primitooooo…!! Que rico!!... déjalo ahí un poquito…. No te muevas.-dijo Tatiana-
Espere a que su vagina se amoldara a mi pene y lentamente comencé a sacarlo de dentro de ella, para volver a meterlo hasta el fondo, Tatiana se arqueaba con cada penetración que le daba, diciendo.
- Cabron… quien diría que el niño que vi crecer como mi hermanito me estaría cogiendo tan rico… dame más pito… no pares…
Comencé a subir la intensidad de las penetraciones, nuestras respiraciones aumentaban y los gemidos y pujidos también.
- Aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, primo… así… así… cógeme bien dame lo que el puto de mi marido no me da…-decía Tatiana-
- Te gusta mi pito, prima?...-dije-
- Aja… me encanta tu pito… métemelo más… dame más… aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!...-decía y gemía Tatiana-
Nuestros sudores se mezclaban y pequeñas gotas del mío caían sobre sus perfectos senos, que se agitaban con cada empujón que mi pelvis le propinaba. Las manos de Tatiana me sujetaban del pecho y de las nalgas, mientras que mi boca se saciaba de sus hermosos senos cubiertos de sudor.
- Aaayy!!... primo que rico me coges, quien te viera con cara de que no matas ni una mosca…-dijo mi prima-
- Te mato las que quieras, prima…-dije-
- Pues mátame de placer niño… dame más pito… pero ahora de lado…-dijo Tatiana, sugiriendo cambiar la posición.-
Saque mi pene de su vagina y ella rodo un poco hasta colocarse de lado, me coloque sobre su costado y volví a penetrarla despacio, su boca dejo escapar un gemido largo y profundo con cada centímetro que mi pene se clavaba en su vagina. Seguí bombeándola duramente mientras mi mano amasaba sus senos, para después tomar su nalga, dejando ligeras palmas sobre ella. Después de unos minutos de estar clavándole el pene en aquella posición Tatiana me tomo de la mano y la llevo hasta su pecho apretándola fuertemente, sus nalgas se apretaron más y su vagina se contrajo, su cara se llenó de satisfacción y su boca pronuncio estas palabras.
- No te detengas primo, no dejes de darme pito, no importa que grite o te arañe…
Seguí dándole violentas penetraciones y en un momento llego el orgasmo. Su mano soltó la mía y sus uñas se clavaron en mi muslo, lo que provoco que mi pene se hundiera hasta el fondo de su vagina, sus líquidos se derramaron; baje la intensidad del mete saca un poco, pero como ella lo pidió no deje de cogérmela ni un minuto. Su cuerpo se estremecía producto de los espasmos que el orgasmo le provocaba, después de unos minutos los espasmos terminaron; deje mi pene dentro de ella y volteo un poco la cara, para dejarme ver su rostro lleno de placer y satisfacción.
- Primo… que rico coges… nunca tuve el deseo de coger con nadie de la familia. Pero que rico lo meneas… niño cabron…-dijo Tatiana dejando un suave beso en mis labios-
- Prima, tú también coges increíble y mamas aún mejor… -respondí-
- Ahora te toca a ti… ok… nada más recuerda no termines dentro ok…-dijo Tatiana sacándose mi pene de su vagina, y levantándose sobre la cama-
- Recuéstate niño, quiero montarme en tu pito… no vayas a terminar aun porque quiero que me cojas de perrito ok…-dijo Tatiana estando de pie frente a mí-
Me recosté sobre la cama y ella se ubicó encima de mí, comenzó a doblar sus rodillas mientras que yo sostenía mi pene para introducirlo en su vagina, su vagina llego hasta mi amigo y de un solo golpe se lo trago completo.
- Aaaammm!!... entro todo…-dijo Tatiana-
Tatiana tomo un almohada y me la coloco en el cuello y espalda, mis manos la tomaron de las nalgas y suavemente comenzó el sube y baja, sus senos se sacudían con cadencia, mi boca hambrienta tomo sus pezones y los succionaba suavemente.
- Ommm!!... nene… que rico sigue chupándome las lolitas…-decía Tatiana-
Tatiana me tomo de las manos dejándome a su merced, mientras los sentones cada vez eran más fuertes.
- Pa, pa, pa, pa, pa, pa, pa…así prima así sigue así…-decía yo-
- Te gusta primito… te gusta que me siente en tu pito?-preguntaba Tatiana-
- Aja… se siente rico, como te comes mi pito Tati…-respondí-
Su vagina húmeda y caliente se tragaba mi pene con cada sentón que ella se propinaba, yo la sujete con una mano en la nalga y una en un seno, mientras veía como su vagina se enterraba mi pene.
- Prima, prima… que bien coges…-dije llevado por el deseo-
- Cogemos riquísimo primo… muévete un poquito para que me des más placer…-dijo Tatiana-
Comencé a levantar y mover mi cadera con cada sentón que ella se daba, así estuvimos por varios minutos hasta que ella se volvió a tensar toda y dejándose caer sobre mí dijo.
- Nooo!!... ya me vine de nuevo…. Pfff… primo que buena cogida me estas metiendo… ya vas a cavar… o no?
- Ya quieres que acabe?...-respondí-
- No… todavía no me falta que me cojas de perrito…-dijo Tatiana-
Saque mi pene de su vagina y ella rápidamente se colocó en posición Doggy, poniéndome detrás de ella la penetre de un solo empujón, Tatiana gimió profundamente, mientras que yo le bombeaba la vagina fuertemente.
- Pa, pa, pa, pa, pa, pa, pa, pa, pa… asi primo así… dame duro… dame hasta que te vengas…-decía Tatiana-
Mis manos la tomaron de las caderas y mi pene se encajaba en su vagina, lentamente fui soltando sus caderas y bajando la intensidad de las penetraciones, ahora mis manos acariciaban sus nalgas, subiendo por su espalda hasta llegar a sus hombros; me sujete de ellos y la penetre hasta el fondo.
- Aaaaaa!!.... niño… que buena cogida me estás dando… sigue…-decía entre gemidos Tatiana-
Sin soltar sus hombros la comencé a penetrar violentamente, para después soltar una de mis manos y tomarla de la cadera, sin dejar de cogérmela fuertemente. De pronto mi pene salió por completo de su vagina y se acercó a su ano, lo que provoco que Tatiana Saltara y dijera.
- Nooo!!... por ahí nooooo!!...
Volví a meterle mi pene en su vagina y seguí bombeándola con todas mis fuerzas. Mi amigo comenzó a ponerse más duro y las palpitaciones eran ya una señal de que aquello estaba por explotar.
- Tati, donde quieres que me venga…?-dije-
- Glaséame las nalgas, primito aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!, aa!!…-respondió entre gemidos-
Deje de cogérmela hasta que mi pene no pudo aguantar más y sacándolo de dentro de ella deje mi carga en todas sus nalgas.
- Aaaaa!!... prima…. Aaaaaa!!... que buena estas…. Quiero cogerte siempre-dije llevado por la lujuria-
Tatiana pegaba sus nalgas a mis muslos sintiendo como mi semen se regaba por todo su trasero, mientras su boca chupaba sus pezones. Deje de expulsar semen al fin y ella lo unto por todo su trasero con las manos. Se dio vuelta y me jalo hacia ella. Nos quedamos ahí sin decir nada por unos minutos. Una vez que recuperamos el aliento nos dirigimos al baño para ducharnos y ahí volvimos a coger. Terminando ese rico encuentro en la regadera ella se fue a su habitación y se quedó profundamente dormida y yo Salí a caminar un poco, porque de haberme quedado ahí me la hubiera seguido cogiendo hasta desfallecer.
Al regresar a casa mire que Andrés ya estaba en casa, entre y los mire en la sala abrazados y mirando televisión, Tatiana me miro y me guiño el ojo. 4 meses después ella dejo a Andrés y viajo a Alemania.
Y así fue como tuve mi primer encuentro sexual con alguien de mi propia familia.

Fin…

3 comentarios - La Prima Tatiana.