Laurita rescatando al abuelo

- Hola se encuentra Gustavo? - Dijo una ronca voz en el teléfono
- No, está trabajando, quien habla? - contestó Laura
- Ah Laurita! Soy Armando del bar, tenemos que cerrar y tu abuelo está mamado de nuevo, podrá venir alguien a buscarlo? - Pidió con un tono más amigable el encargado del bar
- Bueno en un ratito estoy por ahí no se preocupe Armando - Se apuró a responder la joven

La pobre Laura estaba acostumbrada ya a que Gustavo, su padre, tuviera que rescatar al borracho de su abuelo Gerardo una y otra vez de ese viejo bar. Mientras manejaba y veía como algunos nubarrones amagaban con romper, recordaba que distinto era cuando de pequeña la llevaba a ese mismo a bar y ella se divertía con las estériles discusiones de los ancianos y mientras su abuelo jugaba a las cartas y se lucía. Ella corría entre las mesas. Sus trenzas rubias apenas se veían entre los manteles. Escuchaba las risas de su nono y siempre antes de irse le compraban una cajita de jugo que volvía tomando como buena nieta consentida.
Todo cambió cuando el viejo Gerardo enviudó, se volvió más recluido y solo iba al bar a beber hasta que no podía más. A discutir con quien se le cruzara y protestar por todo. Era el clásico viejo odioso y borracho.

Mientras estacionaba cerca del bar, sintió un fuerte trueno y una lluvia de grandes gotones se desató en el momento en el que tenía que bajar.
- Que suerte que tengo! - pensó la pobre Laurita que por ser verano no andaba con nada de abrigo. Todo lo contrario. estaba vestida a penas con unas sandalias, un short de jean y una remera blanca.
No podía esperar ya que el bar estaba por cerrar y si no se presentaba algún familiar Gerardo iba a pasar la noche en cana.
Se bajó corriendo entre la lluvia helada y llegó muy apurada. En el bar solo estaba el mozo, poniendo las sillas arriba de las mesas y Armando secando unos vasos.

- Mi abuelo Gerardo? - preguntó confundida Laura
- Ah hola Laurita, está por acá - le señalo el encargado mostrandole el final de la barra a su abuelo dormido en un banco.
Mientras caminaba hacia la barra, notó la mirada del mozo recorriendo su cuerpo curvilíneo y mojado. La figura de Laura era toda una tentación más con el cabello y la ropa empapados. Se sintió un poco expuesta y se acercó rápidamente a Armando que le daba más confianza.

- Ay que verguenza esto, siempre lo mismo nono - decía Laurita, empujando el hombro de su abuelo para tratar de despertarlo. Armando cruzó la barra y Lau supuso que la ayudaría a llevarlo hasta el auto.
- Que grande que estas Lauri, cuantos años tenes ya? - le dijo apoyando el codo en la barra
- eh 18 cumplí en enero - le respondió un poco timida por como se encontraba
- No seas tímida preciosa, si nos conocemos hace años, no te acordas de mi? - le dijo Armando mientras el mozo se acercaba también.
- Esta chica tiene que ser modelo, mira que figurita tiene - comentó el mesero morocho

Laura se trataba de cubrir los pechos con las manos ya que la remera blanca se le pegaba a la piel y hacía que se note cada detalle de esas pulposas curvas. Lo que no se daba cuenta era que con lo nerviosa que estaba, al apretar sus pechos solo los hacía ver mas grandes y apetecibles. Ninguno de los dos hombres disimulaba para nada la calentura que les provocaba esa tremenda mujer empapada y a su merced.

Los ojos verdes de Laura iban de un lado a otro muy alterada.
- Tranquila Lauri, por qué no te sacas esta ropita mojada mientras lo dejamos dormir un poco mas a tu nono - le dijo Armando mientras la apoyaba de atrás y le tocaba las piernas
- Mejor nos vamos con el abuelo y los dejamos cerrar- dijo ella mientras el mozo cerró el sándwich del lado de adelante tomándola de la cintura con cara de degenerado.
- Relajate bombón que de acá no te vas hasta que pare la lluvia - dijo Armando tras otro fuerte trueno. Sus manos se metieron debajo de las de Laura y apretaron fuertemente los grandes pechos de la rubia, El mozo la tomó del pelo y cuando la chica dio un pequeño grito por el dolor, el morocho abrió su boca y le metió la lengua hasta la garganta.

A partir de ahí el manoseo fue permanente y grosero. Desde el culo parado, las piernas firmes y contorneadas, o mismo entre sus piernas haciendo que se le escape algún inevitable quejido. En plena apoyada y manoseo, los dos la tomaban violentamente del pelo y la besaban obscenamente sin preguntar. La chica no tenía tiempo de esbozar una palabra, apenas y llegaba a exhalar y ya tenía otra lengua dentro de su boca.

Mientras sentía manos por todo su cuerpo y miraba de reojo como su abuelo yacía inmovil aún por el pedo que tenía sintió los sonidos de los dos cierres e inmediatamente Armando la tomó de los hombros y la empujó haciéndola ponerse en cunclillas. Quedó con la pija del viejo cantinero frente a su cara

- ay no eso no! - dijo ella con una tierna carita mirando hacia arriba con sus hermosos ojos verdes y hasta haciendo un leve puchero con sus carnosos labios.
Lejos de desanimarlo, tanto el pedido como ese gesto no hicieron más que excitar más al veterano que se mordió los labios y tomándola de la nuca le apoyó la verga en los labios. Ese solo contacto ya le provocó un tremendo placer.
El mozo que la tenía igual de dura se pajeaba y rozaba la mejilla de la piba que resistía estoica con la boca cerrada aguantando los constantes empujones de nuca de Armando.

En un momento esa presión aflojó y Laurita aprovechó para tratar de disuadirlos
- Esperen, escuchen... - comenzó pero en ese momento la verga de Armando atravesó sus labios y sus manos ya no soltaron su nuca. La metió hasta ahogarla y gozó cada centímetro que iba entrando en esa dulce boca. Veía esos preciosos ojos recriminándole y se calentaba mucho.

- Por qué no probas algo más grande? - le sugirió el mozo y a toda velocidad giró la cabeza de Laura y mientras ella tomaba aire y tosía metió su pija hasta la garganta de la sensual rubia. Era cierto que se trataba de algo más grande. Era gruesa y muy larga. Su delicada boca se exigía al máximo y en ese esfuerzo se escapaban chorros de saliva y líquidos preseminales que resbalaban por su pera.

Los dos se divertían de ver a la fina joven prostituida de esa manera.
- mmm si puta que rica boquita que tenes - le decía el mozo mientras entraba y salía a toda velocidad provocando algunas arcadas
- desde que cruzaste esa puerta con esa pinta de trola sabía que habías venido a buscar pijas putita - le dijo Armando que se divertía viendo como la joven trataba de tragar la larga verga que tenía en la boca.

Laura comenzó a colaborar principalmente porque esa segunda verga no le caía nada mal.
- aaahhh no sabes lo que hace con la lengua tu amiguita - suspiró el mozo. Soltó su cabeza y la dejó actuar sola. El movimiento lento pero intenso de Laura los calentó mucho y Armando también quiso probar.
Laurita se sacó la pija enorme del mozo y mirándolo con cara definitivamente gatuna comenzó a mamar la de su viejo conocido. Armando se sintió en el cielo al sentir con que calidad succionaban esos labios y los movimientos super eróticos que hacía la lengua sobre su verga.

Se pusieron uno de cada lado y dejaban que la caliente jovencita pasara de pija en pija haciéndolos delirar de placer con su boca. La sonrisa cómplice que ponía mientras alternaba y esas miradas de reojo vigilando al dormido abuelo los calentaban sobre manera.

Al verla tan entregada la acostaron sobre una mesa y comenzaron a desnudarla, la ropa voló por el aire y al verla totalmente desnuda Armando se avalanzó sobre las tetas de su deseada Laurita. Ella recibía gustosa las chupadas y lamidas desesperadas mientras miraba excitada al moreno como invitándolo a participar. Lo tomó de la camisa y le comió la boca de un beso mientras lo pajeaba suavemente. Armando se fue resbalando por su panza y se acomodó en su entrepierna.

- Mirá lo que es esto, es una obra de arte - exclamó mientras su cara desaparecía entre las piernas de la joven. Los gemidos de Laurira colmaron el ambiente apenas sintió las lengua de Armando penetrandola lentamente. La saboreaba y sentía como todo su hermoso cuerpito se estremecía.

El otro tipo viendo como se estaba poniendo la chica, hizo algo similar y se perdió entre sus redondas nalgas buscando con su lengua el apretado culito de Laura.
Mordiéndose los labios se entregó por completo a esos dos y gozaba de sus lenguas sumergidas en su interior. Ya no escondía para nada el placer y se sentía muy puta por todo lo que estaba ocurriendo. La lluvia en la calle era incesante así que sus suspiros y quejidos quedaban un poco ocultos por el ruido de la tormenta.

Esos deliciosos sonidos de placer no hicieron más que calentar más a los dos maduros que ya estaban extaciados con sus curvas y con su sabor. Armando bajó una silla de la primer mesa y se sentó ahí.Tomó de la cintura a la joven y con ayuda de su empleado la fue bajando sobre su verga haciéndola entrar lentamente para disfrutar cada centímetro que entraba en esa mojada y ajustada conchita. La rubia bajó hasta tenerla bien adentro y una vez ahí comenzó un movimiento intenso como buscando el orgasmo que cerrara todo.

Lejos del final que ella anticipaba su movimiento provocó mucho al mozo que se acomodó tras ella y apoyó su enorme pija en el estimulado culo de Laurita.
- No por ahí no! Es muy grande! - se desesperó en la negativa Laurita
- Shh vos callate la boca y mejor úsala para algo mejor - le dijo Armando. La tomó del pelo causándole un poco de dolor y le comió la boca de un beso.

Presionaba su cuerpo contra contra el suyo sintiendo esas enormes tetas sobre su belludo pecho y con la otra mano la mantenía apretada para que no se zafara del beso
El mozo finalmente cumplió con lo que había amagado tras un gesto de aprobación de su jefe y metió la inflamada cabeza de su verga en ese pequeño anito. Los ojos de Laura se abrieron mientras se oía un fuerte grito acallado por los obsenos besos de Armando
Con esa tranquilidad, el mozo fue entrando más y mas en ese culito.

A Armando lo calentaba mucho formar parte de una doble penetración a su edad. Nunca había vivido eso y que fuera con un caramelito de 18 años hacía que todo fuera más excitante. Sentía los intentos de gritos y algunos empujones instintivos por tratar de zafarse que hacía la dulce Laurita pero eso solo los calentaba más a ambos que fueron avanzando en la intensidad hasta llegar a un sexo fuerte y muy duro en concordancia con la actitud violenta de la chica.

Laura estaba roja como si toda su sangre se hubiera ido a su cara de la fuerza que hacía por gritar y veía como era inútil ya que su abuelo ebrio permanecía apoyado sobre la barra con la boca abierta durmiendo como si estuviera desmayado. Sentía que su culo era forzado al extremo como si se fuera a abrir más de lo posible y como la verga que entraba en su concha lo hacía tan rápido que no podría durar demasiado.

- mmm las pijas que te habrás comido Laurita! como te moves perra! - la acusaba Amando segundos antes de acabar
Dio un salto como expulsado de la silla y tomó a la hermosa rubia de la cabeza con ambas manos. Comenzó a dar retorcerse de placer al sentir esa lengua y lanzó toda la leche que tenía guardada para ella. No soltó su cabeza hasta que había liberado la última gota.
Gotas blancas se escurrían entre los labios de Laura.

Antes de que la soltara, la verga del mozo salió del presionado anito de la joven como un corcho destapando una botella, exigiendo el mismo trato. Solo que en este caso estaba tan caliente que no llego hasta la boca.
Varios tiros blancos impactaron por toda la cara de Laurita que atinó solo a cerrar los ojos y poner la mano a media distancia.

Los dos se quedaron contemplando el cuadro erótico que era esa carita repleta de semen por dentro y por fuera. El detalle de la lengua de Laurita juntando todo lo que había al rededor de su boca los convenció de que estaba satisfecha.

- Que rica leche chicos - les dijo con cara de gatita
- Rica sos vos preciosa - le dijo Armando mientras se vestía
- Volve cuando quieras, que acá ya sabes que tenes canilla libre - le dijo el mozo
La lluvia seguía igual de tempestiva pero Laurita se había asegurado ya que le cargaran al asqueroso borracho que tenía por abuelo.

Mientras se arreglaba en su pequeño espejito, los dos hombres cargaron uno de cada hombro a don Gerardo y lo llevaron bajo la lluvia hasta el auto de Laura. Con esa tormenta las calles estaban desiertas.
- Gracias chicos, así da gusto venir - los despidió con un beso al aire a cada uno, como dejándolos con ganas, mientras se iba corriendo al auto.

Con la helada lluvia Gerardo despertó con cara de confusión y algo de vergüenza por darse cuenta de que su nieta lo había sacado borracho del bar.
A penas subió al auto ella notó lo que pasaba
- Hola abu dormilón! - le dijo con una sonrisa que no se condecía con su situación.
Cuando dijo eso el aroma a semen que tenía en la boca sorprendió a Gerardo. El calor del desempañador se mezclaba con sus alientos, mas la humedad del ambiente generaba un clima de lo mas caliente. la ropa helada ya no se sentía así.

Gerardo suponiendo que era su imaginación o producto del alcohol, cerró sus ojos y entró en un sueño profundo como el anterior. Pero el ambiente caliente del auto hizo que pronto se despertara algo dentro de su pantalón. Algo que Laurita vio primero de reojo y luego con mucha atención. No pensó que a esa edad aún reaccionara tan bien
- Abu,,, Abu! Estas dormido? - lo probó sin dejar de mirar lo dura que se le había puesto la verga. Miró para todos lados y apagó el desempañador. Todos los vidrios del auto se nublaron otra vez.

Ante el silencio del abuelo, comenzó a acariciarlo por encima del fino pantalón de vestir. Sintió la vieja pija responder de inmediato a su mano. Una sonrisa picara se dibujó en la cara de Laura que se apuró a abrir el pantalón. Se inclinó sobre la falda del anciano y comenzó a hacerle una rica mamada. Se arrodilló en su asiento y su cabeza empezó a subir y bajar lentamente. Sentía esa verga venosa creciendo en su boca y solo pensaba en seguir succionando.

Gerardo sonreía entre sueños y disfrutaba de la experta e inquieta boca de su nieta sin saberlo. La muy zorra ya cabeceaba a un ritmo constante pero con el cuidado de no acelerarse demasiado y hacer que el nono acabara. Le gustaba demasiado ese morbo de chupársela a su propio abuelo sin que este se enterara
- Pero que haces Laurita?! - preguntó horrorizado al despertar y encontrarla con toda su verga en la boca. Gerardo estaba sorprendido pero no dejaba de ser hombre. En ningún momento hizo siquiera el ademan de quitarla y lejos de eso recorrió su escandaloso cuerpo con la mirada de una forma que nunca antes lo había hecho.

Laurita entendió que a pesar del susto inicial solo había un final posible para lo que había comenzado y se sentía dispuesta
- Tranquilo abu, vos relajate y disfrutá como hicieron tus amigos - le decía pajeandolo con una mano y reclinandole lentamente el asiento con la otra.
- Siempre fuiste la consentida del nono princesa, no se decirte que no - le dijo mientras la hermosa pendeja hacía desaparecer la inflamada pija entre sus labios. Gerardo esta vez tomo la nuca de la rubia y la guió con suaves empujones hacia abajo una y otra vez.

Mientras se corría el pelo a un costado la lamía como si fuera una golosina y mirándolo con esa cara tan tierna y esos enormes ojos verdes le dijo
- Siempre me das todos los gustos, ahora te toca a vos - Con esa frase se la volvió a comer mientras Gerardo levantaba las caderas para bajarse el pantalón y dejarlo caer sobre sus gastados mocasines. Veía ese sensual culo levantado en el asiento y comenzó a acariciarlo y apretarlo. Laura hizo una sonrisa cómplice al sentir las ásperas manos de su abuelo sobre sus carnosas nalgas.

Sentir esa piel tan suave y esa cola redonda en su mano lo calentó casi tanto como el mismo pete. Experimentar como se dejaba la trola de su nieta lo hacia sentir en el cielo.
- Si puta! como te gusta chupar pendeja! - le dijo y la comenzó a ahogar tomándola con fuerza de la nuca sin soltar esa cola que tanto lo calentaba.
Al notar lo entretenido que estaba con su espectacular orto y excitada por las caricias Lautita desabrochó el botón del shor como invitándolo a sacarlo. Gerardo entendió y comenzó a tironear liberando de a poco ese espectáculo para sus ojos, Al estar húmedo salió con tanga y todo dándole un baño de desnudes juvenil que ya había olvidado

Sus dedos recorrieron todo ese culo de todas las maneras posibles y se perdieron entre esas nalgas redondas y firmes hasta encontrar el pequeño anito. Se chupó el dedo mayor y lo acomodó dispuesto a entrar
- mmmm abu - le dijo nada más Laura
- Callate puta - le dijo empujando su cabeza para q tragara nuevamente
El dedo flaco, largo y caracterizado por las articulaciones muy marcadas, empezó a entrár en el apretado culo de Laurita que luchaba por adaptarse al intruso. Esa presión lo calentó mucho y sin darle tiempo lo metió casi por completo haciendo que libere un grito de dolor mezclado con placer

Atraído por esa excitante reacción fue por más y metió dos. Ahora los quejidos se multiplicaron y la nena motivada chupaba como loca. Los dedos y la mamada se fueron sincronizando y los gemidos de ambos también. Gerardo ya estaba tan excitado que la agarró y le comió la boca. Esa lengüita entró a toda velocidad y comenzó a masajear la lengua del abuelo. Los dedos seguían penetrandole el culo con fuerza. Ver la carita delicada de esa pibita gimiendo para él era un espectáculo único que quería mantener.

Gerardo tiro de la remera mojada de la nena haciendo que se la quite y bajó su corpiño liberando ese par de tetas grandes y de pezones rosados bien paraditos.
- Mira lo que es esto! - dijo excitado, antes de prenderse de uno de esos senos y deleitar su lengua con ellos. La voz de Laurita gozando entrecortada fue lo que terminó de convencer al septuagenario. Era ahora o nunca.

Empujó a la joven sobre el asiento. Se colocó detrás de ella y abriéndole las nalgas a mas no poder, le metió toda la pija de un saque. Causándole un fuerte grito. Sentir ese culito precioso al rededor de su verga fue mucho para Gerardo que perdió el control y comenzó a culearla frenéticamente. El auto se sacudía como una pandereta mezclándose con las voces de los dos que se fundían en gemidos y gritos de placer. Las nalgas de Laurita sonaban contra el rustico cuerpo de Gerardo que estaba empapado en sudor.

Lo miró por encima del hombro mordiéndose los labios con la cara roja y esa mirada lasciva fue la gota que rebalsó el vaso para el abuelo. Cerró los ojos y tras un fuerte sacudón llenó la cola de Laurita de semen. Laura sintió como su querido nono estallaba dentro de ella y como esa leche desbordaba entre sus piernas. El huracán de lujuria se calmó entonces poco antes de que la lluvia calmara también

- Nunca pensé que fueras tan puta preciosa - le confesó un Gerardo exhausto pero feliz
- Creo que voy a empezar a acompañarte al bar como cuando era chiquita abu - le dijo Laurita con una sonrisa de trola satisfecha. Consentida como siempre por su abuelito 

20 comentarios - Laurita rescatando al abuelo

clandestyna +2
Que lindo volver a leerte!
Mishiand69
gracias amor! siempre fiel a mis relatos ami
DomadorDeYeguas +1
¡¡ que relato mas caliente, me dejó la pija al palo !!
Mishiand69
gracias! es la idea bombón. besitos!
jona-maxi +1
Mmmmm me parece que laurita tiene muchosss de vos pendeja hermosaaa!!!
Mishiand69 +1
gracias amor jijiji como me conoces
elcuervo009 +1
Hermoso relato preciosa, y que gran corazon concintiendo al ABU, supongo vendran masexperiencias como esta no??? ahora de cómplice del abu jajajajajaja
y para nosotros mandanos alguna foto besos reina
Mishiand69 +1
gracias amor, si quieren puede seguir jiijii
elcuervo009 +1
@Mishiand69 EN LO QUE A MI RESPECTA SIIIIIIII SERIA BUENISIMO Y SI PODES ADJUNTA FOTOS TUYAS LINDA
Mishiand69
@elcuervo009 veré q puedo hacer jijiji
lordmaster01 +1
excelente relato nada como algo de suma calidad
Mishiand69 +1
gracias amor! besitos
Joaquincarbajal +1
mmm que putita... como me gusto!! como siempre andre!! muy caliente
Mishiand69 +1
gracias bombón! es la idea jiji
viciosomdq +1
Uffff... Flor de relato amiguita...!!! Tremendamente morboso y con una redacción excelente...
Le debo los porotos ...
Mishiand69 +1
gracias! con los halagos ya me basta pero si insistís jijiji
Diegodi35 +1
como mecalientan tus relatosssssssssss
Mishiand69
es la idea! besitos bombón!
Tiroloco63
alegria volver a leer tus relatos.. muy bueno mucho morbo..
Mishiand69 +1
@Tiroloco63 no me voy más ahora jijiji
Tiroloco63 +1
@Mishiand69 es una linda noticia
Mishiand69 +1
@Tiroloco63 😃
exiliado39 +1
tremendo me dejaste la pija a mil nena +4
exiliado39 +1
@Mishiand69 ja te vas en amage vos acá te estaré esperando como siempre
Mishiand69 +1
@exiliado39 tal vez si, tal vez no
exiliado39
@Mishiand69 jaja sólo amages,tanto miedo me tenés jijijiji
Tiroloco63 +1
Te debía los puntos... Muy merecidos
Mishiand69 +1
gracias amor! siempre tan cumplidor él
Tiroloco63 +1
@Mishiand69 cuando se merece se merece...
Mishiand69 +1
@Tiroloco63 mejor así jijiji
sorelestat +1
buenesimo
Mishiand69
gracias amor! otro fiel seguidor de mis relatos, besitos
plaza2015 +1
que venga Laurita a bs as!!! ya y vos la podes acompñar harian un muy buen equipooo
Mishiand69 +1
que travieso jugueton. parece que queres armar una linda fiestita
Morboso29 +1
Que buen relato ¿donde queda ese bar? alguien que me invite
Mishiand69 +1
gracias bombon!
MrHyde10 +1
Muy bueno!!! me voy con la chota dura.. eh!! bien!
Mishiand69
que bueno es la idea, gracias!
SOL22XXX +1
Quieroooooo un abuelo asiii
Prometo chupar y cojer mucho
megak_0
pregunta nomas:¿es de violencia este relato? me parecio un poco y me salte al final a preguntar,pero de onda nomas,es que generalmente,los relatos asi no lo leo mucho.
Mishiand69
hay que leerlo todo para juzgar, tiene sus cositas