Mi gratificación al Pintár... ( 1 )

Mi placér por el Árte en la Pintúra, me há traido benefícios que muchas véces hán sído de carácter sexual...en ciérta ocasión , me encontrába pintando al aíre libre, en un parque destinádo a nosótros
los pintores, y modelístas... sín querérlo así, la génte nos rodéa siguiéndo nuéstros trázos que los embelézan del todo....
Entre ellos, se encontrába una pareja Italiana.. muy bellos de físico los dos, al finál de mi cuadro, se acercáron a mi, hablandome con un escuéto español, y pretendían que les hiciéra una pintúra dónde
estaría desnúda Marcella, rúbia de buén cuérpo y ojázos azúles... y me lleváron a su departaménto en una colónia selécta de la Cd. de México, La Polánco ... en un pent house, y désde que entrámos,
Marcella comenzó a limpiár de muébles el sítio en dónde quería posár.. miéntras Albano me ofrecía una copa de buén licór... Élla pasó a duchárse, y Él pedía comída por teléfono... se notába de buéna gana su coordinación éntre ellos.. Al póco ráto, llamarón a la puérta trayéndo la comída, de inmediáto
procedímos a comér, y al término, me ofreciéron una buéna ducha... al salír del baño, Marcella estába
sentada en un sillón usándo una igéra bata semi transparénte, me pidió que le indicára el sítio para modelár, y se retiró la bata , dejándo sus poderósas tetas enórmes balanceárse al aire, y buéno...
ojos de pintor... cerebro de hombre al fín... coloqué mi caballéte y extendí mi material, y comencé los prímeros trázos.. fuéron várias horas de trabajo, y le pedí qu descansára, ésto será una labór de varios días, le díje.. y caminó así desnúda atravezando la sala para servír un par de tragos.. se sentó
en uno de los bancos de la barra , y me extendio mi vaso a un lado de élla, Albano su esposo no se encontrába en ésos momentos, me senté a su lado, y colocó su mano en mi piérna miéntras platicába
cómo si fuéramos viejos amigos. la imagen de sus treméndas tetas balanceándose de un lado al ótro
me tenían la verga parada.. y élla en un sentído muy proocatívo, me tomó de la mano y la condújo a sus tetas, -Aprietalas, sóbalas... me díjo.. y pués no tardé en hacérlo, miéntras élla me sobába mi verga, y agachándose, buscó sacárla de su nído, lamiéndola, chupándola, mordisqueándola suáve...
y comenzó a desnudárme.. Una véz que estábamos los dos así, me jaló a la sala, se tendió en el sillón
y me abalancé sóbre élla, metiéndo mi cabéza éntre sus piérnas... pasándo la lengua por cada uno de los pliegues de su vagína... chupándo sus líquidos de sus venídas... me jaló hacía arríba, y me llevó a metérme en élla, Tenía una vagína muy caliénte, y en bréve, túvo una descárga , sevéramente
hirviénte, como un volcan, y al estár bombeándo, se escuchában los sonídos del chocár nuéstros cuérpos por sus líquidos... la cambié de posiciones, y élla mísma elegía en cuál deseába permanecér
más tiémpo... Al estárme élla cabalgándo, la tomé de sus nalgas, abriéndolas al maximo y jugueteár con su culo con mis dedos, introduciéndolos , priméro uno, luégo dos, y hásta llegár a tres....
Besába su cuéllo, sus tetas enórmes, élla gritába álgo fuérte, y ésto me calentába... entónces víno una descárga de mi párte.. y le llené su interiór con mis espérmas caliéntes, descánso un bréve moménto, y se safó para limpiár mi verga, que chupándo hásta volvér a ponérmela dura... sólo que ésta véz, se púso a masturbármela.. miéntras pasába la lengua por todo mi camote, y la chupába muy
treméndo, pero no dejába de maturbárme... y tan prónto sentí que yá estába a púnto de venírme...
le avisé.. y yá no paró.. así hásta que de mi verga salió ótro torrénte de espérmas... que con gústo y deséo chupó y tragó ... Tomámos ótro trágo de licór, y se acomodó en cuatro frénte a mi... a lo cuál,
me incliné a chupárle su sabrósa panocha, tragándo sus júgos mezcládos con los mios... se me volvió
a parár... y la penetré así en cuátro... Ignóro que tiémpo habrá pasádo.. y con sus movimiéntos de cadéra de Marcella, y ése apretár de nalgas tán único... me llevó a lanzárle mi última descárga...
Váya... había una temperatúra corporéa bástante eleváda... Después que descansámos platicándo..
tomámos una dúcha júntos... y me arreglé para salír de ahí... el trabájo llevaría días, así cómo bién sabía que serían tárdes formidábles en su cuérpo de Marcella...
Me despidió con un beso en los labios, y quedámos en que horario tendría que regresár..