La conocia desde colegiala. Infidelidad masculina.

Lo próximo sucedió al comienzo de diciembre de hace dos años. Tenia 34 años, y mi esposa e hijas habían viajado a Buenos Aires, en donde yo las encontraba al día siguiente de esa noche. Soy de Villa La Angostura.
Ese día, junto a un amigo de la infancia, estábamos cenando y boludeando en la compu y de golpe, en el msn, veo un “hola” inquietante. Era Lore, una vieja amiga del fin de mi adolescencia y cuando empecé la facultad. Preciosa. Con actitud desinhibida cuando había algo que le gustaba. “Hola”.
Yo la había visto por primera vez cuando iba a la secundaria, era amiga de mi hermana y vivía al lado de una panadería . Ella usaba un uniforme del colegio privado, de esos que tienen la pollerita escocesa roja. La usaba corta y no fueron pocas las veces que le dedique una. Desde ahí, a esta fecha, pasaron 15 años, y mantenía intacta su imagen en mi estructura psíquica.
A los 22 tuvimos algún que otro encuentro, de esos que uno decide la misma noche.
Algo para describirla: Te pega unos besos que es imposible no querer algo más. Tiene unas piernas hermosas con formas femeninas muy definidas y perfectamente depiladas y cuidadas, unos tetas que no te olvidas, ya q son grandes y paradas, y son de esas que nacen casi en la espalda. Un culo precioso y unos pies tipo Marilyn, finitos y con pedicure siempre; en fin, una mujer que se cuida, que tiene con qué, y que sabe destilar glamour. Sabe aprovechar sus formas poniéndose prendas que la realzan y hacen notar en donde esté.
Volviendo a la velada que nos ocupa, la invité a cenar a casa junto a mi amigo. Comimos y nos estimulamos con sustancias que no valen la pena mencionar, pero nos pusimos como moto los 3. Ya en el postre, nos pasábamos frutillas con la boca y ella me chupaba el dedo de una manera que se me erizaba la piel. En un momento, nuestro amigo fue invitado a retirarse ya que la cosas no daba para mas: TENIAMOS QUE COGER.
Ella estaba con un vestidito corto que le marcaba sus impresionantes teas y el culo con una tanga chiquitita que me partía la cabeza. Nos fuimos a mi habitación y ya la agarré del culo levantándole la ropa a lo que respondió hundiendo aún más su lengua en mi boca. Que calentura por Dios.
Pusimos una porno, a la que no le dimos pelota, y yo me acordé que tenía un anillo de esos que vibran y que son de silicona para ponerse en la pija. Pero no me la puse de una, lo agarre con la boca, y comencé a chuparle la concha rosa y chiquita, a lo que respondió con gemidos y arqueos rítimicos. Aguantamos todo lo que pudimos, inclusive más de lo usual hasta que en un momento ella me grita:”COGEME, COGEME, COGEME AHORA”. Les juro que fue como si encendieran una pileta de nafta en mi cabeza. Nunca tuve tal calentura en mi vida, y de hecho, ahora que me acordé debo parar de escribir para dedicarle una.
Cogimos de todas formas posibles sin acabar. Fue una noche inolvidable, intensa. “Te gusta? Que queres que te haga?” Fue su pregunta. “quiero que me cojas por la boca”, sin ninguna duda respondí rápido. Se acerco a mi cara, arriba mio y la hice acabar agarrándola de su culo, mientras intentaba tocar su ano, moviéndose como una loca arriba de un toro de rodeo.
Se hizo de día y seguíamos cogiendo. Cansados y transpirados.
La llevé a su casa y de ahí me fui a trabajar.
Cada tanto, debo admitir que aún cogiendo con mi esposa, esos días que uno está cansado y se hace largo, pienso y recuerdo esa noche y acabo como un camello. Mi amiga Lore, para siempre en lo más alto de la lujuria y erotismo. Lo juro.

3 comentarios - La conocia desde colegiala. Infidelidad masculina.

fl22lf
como me calento el relato
Tiroloco63
Muyyy bueno... felicitaciones, gracias por compartirlo
kramalo
muy bueno....!! a ver... donde la encuentro....? jeje.... compartiendoooo. a comerlaaaa....jaja!! es de va. la angostura ella..? van puntos...