Aventuras de un fetichista ;)

Hola a todos en este relato les cuento un poco sobre mis gustos por el olor femenino y los grandes traseros.
Todo comienza en mi adolescencia mi nombre es Tony cerca de mi casa había una tienda en donde la dueña era doña Rosi ella de unos 38 años, blanca, pelirroja, caderona y un gran trasero que la verdad no me atrevería a decir que era lo mejor de ella, ya que su rostro blanco y muy juvenil hacían juego perfecto con ese voluptuoso cuerpo de mujer ,por lo que comenzó a llamarme la atención.
Comúnmente ella vestía pants o leggings muy ajustados en colores vivos marcando su ropa interior por el tamaño de su culo por lo que jamas pasaba desapercibida ante la vista de los hombres que volteaban a ver ese par de grandes nalgas que se movían de un lado a otro por la calle .
Ella era muy accesible así que tratarla fue muy fácil y comencé a frecuentar su local muy a menudo . A tal grado que me trataba bastante bien y me tenia mucha confianza.
Un día en especial por la confianza que ya me tenia me solicito ayuda pues tenia problemas con su computadora así que me pase a su casa comense a revisar su compu en lo que de repente ella me dice:
- tony tengo una comida con mis amigas no hay problema si te dejo aqui solo y me meto a bañar, cuando termines el problema solo cierra bien ok.
- de acuerdo no hay problema
En ese momento que se metió a bañar me inundo una lujuria muy grande por verla desnuda así que muy temblorosa y lentamente me acerque a donde estaba el baño, mi corazon casi se me salía del pecho.
En la puerta del baño me percato de que dejo su ropa sucia en el suelo asi que casi como por reflejo esculco entre su pants y me encuentro con una tanguita de amarres a los lados de color rosa muy sexy, acto seguido tremenda ereccion tengo que de inmediato comienzo a oler su tanga y a masturbarme ya sin estar consiente de que ella esta del otro lado de la puerta.
El olor que tenia era delicioso a mujer por lo que no dejo de aspirar fuertemente.La combinación del morbo y peligro por que estaba haciendo me tenian como en el cielo ya que tenia una erección monumental y nunca habia sentido mi pene tan duro, el pacer era muy grande.
Mientras huelo esa tanga me imagino su tremendo trasero asi que recorro la tanga hacia donde estuvo su culito el olor era mas delicioso que en la parte de su vagina, ya como un loco tomo su pants y comienzo a olerlo de la parte del trasero ya no aguanto mas y tengo tremendo orgasmo y me vengo en sus pants.
Las piernas me temblaban mucho jamas había sentido tanto placer y morbo por el peligro de hacer algo tan atrevido.
Pero no quedo satisfecho y quedo muy caliente así que me dispongo a espiar a Rosi pero mala suerte la puerta esta cerrada con seguro.
Así que ese día me tuve que aguantar
-Ya viste que problema es, me interrogo rosi
-No veras necesito limpiar por completo tu maquina
-Ok tarda lo que necesites me dijo rosi
Quien en seguida se encerró en su cuarto y comenzó a vestirse, ese día salió muy sexy con unos jeans súper ajustados que marcaban todo ese señor trasero y una chamarra de piel .Me quede solo seguía muy caliente así que me dirigí hacia la habitación de rosi y comense como loco a buscar en sus cajones y encontré un gran tesoro.
Tangas y calzones muy sexys habia mas de 20 prendas de varios colores por lo que comense a escoger cual me gustaba mas y me decidí por una de color azul con amarres a los lados.La idea de el culote de rosi en esa diminuta prenda me puso a full, por lo que me desnude y me pasaba frenéticamente la prenda por mi pene que ya estaba super durísimo y muy caliente.
No tarde mucho en acabar.
Acomode todo de nuevo esperando que rosi no se diera cuenta , solucione el problema y me fui muy contento y satisfecho.
Saludos a todos los que comparten el gusto por el olor de la ropa intima femenina y los culos de gran tamaño.

1 comentario - Aventuras de un fetichista ;)

RalphMacchio30
Amigo tu relato está muy bueno, he tenido la fortuna de masturbame con la ropa de varias mujeres, de unas prima, una tía, de la mamá de amigo, de unas vecinas y la verdad es mi punto débil, gracias por compartir tu relato.