Vida al Rojo vivo. Capitulo I.

Teniendo 26 años, podría decir que eh probado casi todo, sin embargo se que no es así, y me encuentro en una etapa de la vida en donde no es fácil llenarse, donde las dudas, ganas e ideas de algo mas surgen poco a poco, casi por inocencia, pero una inocencia perversa digamos.

Eh tenido varias novias, amantes, chicas con las que quizás solo trance y nada mas. Ahora estoy en pareja pero no estoy feliz y creo que ella tampoco aunque lo niega mucho. Pero en este tramo de mi vida, donde mi ansiedad o saciedad pasa por muchos lados, se suma el echo de que en mi relación actual no haya buena química en la cama, ni en ningún lugar, y encima lo hacemos con poca frecuencia.

Esto me llevo a buscar inconciente o concientemente otras atenciones, en juegos de Internet, charlas van y vienen, películas porno cortas y muchas cosas, y desde acá comienzo a redactar parte de mis historias, de todo lo que puede sucederte si tan solo pones mas atención y eres capaz de arriesgarte tan solo un poco.

Había comenzado a jugar un juego en línea, donde te haces amigo de mucha gente desconocida, como suele se hoy día, y ahí conocí muchas chicas, muchas de las cuales así como todo jugador nuevo o viejo, esta ahí para tapar necesidades, y buscan aventuras reales, de lo que siempre me percate además de que yo también estaba ahí por lo mismo. De todas había una en especial con la que habíamos tenido mas química, y llegamos rápido el llevarnos mas que bien con frases llenas de mimos y demás, y un día en tan solo dos semanas de conocernos solo hablando decidimos vernos, con la regla de que si no pasaba nada no habría porque acabarse la cosa, bien podríamos ser buenos amigos.

Llego el día lunes que quedamos en vernos, yo había visto una foto de ella en su Factbook, rubia y hermosa sonrisa, pero solo era una foto de cara, mas no tenia, solo una muy vieja donde estaba ella con su ex, rellenita pero voluptuosa bastante, eso la hacia muy atractiva y con muchas esperanzas para mi, enamorado no estaba, solo tenia ganas de pasarla bien y si se daba algo mas estaría mas que bien. Nos encontramos en una plaza, era época de invierno pero había un sol muy fuerte, ella estaba con una campera muy abrigada, estaba mas gordita de lo que la foto mostraba, pero era bonita y la verdad el encuentro era para pasarla bien y eso no quería decir que habría sexo para eso, pero si pasaba estaba bien igual. De ahí decidimos mejor ir a otro lado a pasear, buscamos una reserva natural que esta en la capital cerca de la costanera y nos metimos ahí, un inmenso parque natural, son podrías perderte si perdes los caminos marcados.

Nos sentamos en un banco que había ahí casi escondido pero no del todo, hablamos un buen rato, y en donde comenzas a hacerte el malo con ella jugando, así comienzan las indirectas y los enojos que terminan en abrazos. Así comenzó el primer beso, de tiempo acumulado queriendo descargarme esta necesidad de encima el beso fue muy apasionado y largo, y ella parecía estar de igual forma que yo, mis manos solas fueron metiéndose debajo de su camperon y buscaron sus pechos, grandes y turgentes, ella no se negó, mas bien seguía conmigo el beso, tenia ganas de hacerlo ahí pero había gente y aun no sabia que pensaba ella, pero mis manos fueron debajo de su remera volviendo por esos pechos grandes y hermosos, me había percatado antes que no usaba corpiño y eso me sorprendió por su firmeza, llegue a sus pezones y los acaricie y quería morderlos pero no podíamos, no aun… al apretarlos ella gimió suave con un dejo de placer, y su mano fue directa a mi entrepierna sobre el pantalón y comenzó a acariciarme así, ella dijo soltando mis labios…



Luna: quiero esto… YA…

Yo no dije mas nada, solo mire a los costados, porque como había dicho era mucho verde, y quien se salía del camino podía perderse, por eso mismo este lugar muchas veces y mas en las tardes suele usarse por algunas parejas para cumplir fantasías o simplemente porque no llegan a hacerlo en casa. Así que nos paramos y la lleve por el camino buscando donde meternos, y note un caminito en medio de los yuyos y árboles, y nos metimos rápido, te das cuenta por el pasto o yuyos acomodados que se uso muchas veces para coger sin ningún drama. Cuando estábamos por meternos ya mas escondidos vimos a tres personas muy entretenidas, pero eran un señor de unos 40 años aproximadamente y dos muchachos de entre 18 y 24 años. La rutina que tenían era muy sugestiva e hipnotizante para ver, el tipo mas grande estaba parado semi agachado, exponiendo su cola contra los muslos del que parecía mas grande de los dos jóvenes, este lo penetraba muy lentamente, y al sacarla se veía un pene largo, y cuando la sacaba y metía se escuchaba el gemido del señor sintiéndola, y el otro chico estaba arrodillado chapándole el pene al señor. No estábamos muy lejos de ellos pero no nos veían porque los arbustos nos tapaban, pero habíamos notado que el señor había acabado en la boca del chico, esto hizo que el mismo chico acabara mientras se masturbaba y el otro joven parecía estar en lo mismo dentro del señor. Ambos nos habíamos quedado observando todo y sin darme cuenta estaba teniendo una erección por eso.

Cuando la cosa se calmo Luna me tomo de la mano y me siguió llevando mas adentro de esa pequeña selva hasta que nos detuvimos, me beso de nuevo, metió sus manos debajo de mi camisa acariciando mis espalda, y yo hice lo mismo, de a ratos bajaba la mano por debajo de tu pantalones, tocando sus nalgas grandecitas, ambos estábamos extasiados y llenos de ganas de hacerlo, no dude mas y baje sus pantalones, se los quite, me arrodille, levante una se sus piernas y comencé a lamerle el clítoris, ella apoyada contra un árbol gemía sabiendo que ahí difícilmente alguien la escucharía. Metí mis dedos dentro de su vagina y otro dentro del ano, ella sin mas solo gemía con mas placer. Fui subiendo poco a poco y quitando todo lo que quedaba de ropa en su torso, llegando a sus pechos enormes, lamiéndolos con muchas, muchas ganas y mordiendo suave sus pezones, ella mientras desabrochaba mi pantalón, se movió y comenzó a besarme el torso y bajaba de a poco hacia mi ombligo y siguiendo esa misma línea comenzó a bajar el pantalón y con su lengua ya bajaba por mi pene, lo hacia lento hasta que la punta de su lengua llego a tocar el extremo de mi glande y así jugo unos segundos hasta que poco a poco se fue metiendo toda la cabeza dentro de su boca y lo chupo suave con sus labios otros segundos mas, luego fue poco a poco metiéndose todo en su boca, y volvía hacia atrás, y luego volvía de nuevo, lo disfrutaba tanto como yo, y lo hizo así constantemente unos minutos sin detenerse, lo hacia despacio pero sin parar y lo metía todo en su boca. Yo estaba muy excitado por todo que estaba por acabar, y quería acabar así, y pensaba bueno se enojara conmigo pero quiero acabar así; hace mucho no sentía agrandarse así mi pene al momento de eyacular, sentí acabar con mucha presión disparada, y esperaba el grito o enojo de ella, pero no, no se detuvo, si no que pareció gustarle mucho eso, sus manos presionaron mas mis glúteos y siguió mamando de la misma forma que lo estuvo haciendo sin sacar su boca de mi pene, mientras acababa escuchaba como intentaba tragar el semen, se escuchaba como tragaba con dificultad pero eso no la detenía, ella seguía y a mi me gustaba, y lo hizo unos 5 minutos mas, logro hacer que tenga una erección bien dura nuevamente, después de tanto abrió los ojos me miro saco mi pene de su boca y me dijo…



LUNA: te quiero adentro mío…



Pero surgió un miedo, un pequeño contratiempo…



YO: no tengo preservativos…



Ella solo sonrío me miro, me dio la espalda y apoyo sus manos en un árbol, dejando su cola apuntándome.



LUNA: háceme lo que quieras, como quieras, pero métemela por favor…



Para mi fueron ordenes, así que hice lo que quería, me acerque, tome mi pene bien duro con una mano y con la otra separe sus nalgas, dejando su ano descubierto, y con la cabeza de mi pene lo comencé a rosar suavemente, ya antes lo había dilatado por la excitación que tenia, mi pene estaba bien mojado, por lo que solo apoye mas fuerte e hice presión, el glande se iba haciendo espacio en el ano, ella solo gimió con algo de dolor, al mismo tiempo intentaba acomodarse mejor para que no le doliera, mi pene ya estaba por la mitad y ella me ponía un alto con su mano para que vaya mas despacio, hasta que por fin estuve completamente dentro de su culo, mis muslos se apoyaron por completo en sus nalgas, ella gemía como drogada del placer; con mis manos tome sus caderas y me pegue mas hacia ella, sin salirme, mi pene estaba todo dentro de ella y yo no me movía, quería sentirla así y que ella me sintiera todo dentro de ella, entonces solo me mecía sin salirme, solo me meneaba dentro y bien pegado, sus gemidos eran adorables y excitantes. Entonces comencé a moverme hacia fuera, casi sin lubricante se sentía como la sacaba de dentro de ella y ambos sentíamos ese rosar brusco pero que nos gustaba, y volvía hacia dentro de sus nalgas y volvía a sacarla lentamente, ya mas fácil por mi lubricación comencé a cogerla mas rápidamente, y los gemidos se intensificaron en ambos, tener esa imagen de cómo mi pene se adentraba entre sus nalgas y volvía a salir, luego abriéndolas para ver mejor como su ano se expandía para dejarme penetrarla y así lo hice todo el tiempo, luego ella subió una pierna en una rama, para así poder disfrutar mas la penetración, y en menos de 2 minutos ella comenzó a gemir con mucha fuerza y sentí como comenzó a acabar, sus músculos apretaban mas mi pene y hacia mas fuerza para penetrarla y parecía volverla mas loca.



LUNA: ya llegue mi amor, pero seguí por favor, seguí… así si… si… sii así…. Aaa…..



Había tenia tres orgasmos seguidos, y yo podía dárselos, ya había acabado antes y eso hacia que pudiera tener mucho hilo para seguir, pero en su tercer orgasmo no aguante mucho mas, y llegue con ella, dentro de ella, había acabado mucho dentro, y estuvimos así pegados un tiempo mas.



Nos volvimos a vestir y salimos del predio caminando como amigos. Ambos habíamos sacado todo lo que teníamos dentro, luego cada uno volvió a su vida sin el otro. Pero yo seguía con más ganas de más aventuras, y al mismo tiempo volvía a mi vida pero con una imagen que me impacto y me generaba curiosidad.

Esa misma noche, me fui al baño, encendí mi celular, y busque en Internet unos vídeos porno, mi curiosidad de ese día me hizo buscar algo más, así que en las búsquedas puse cosas como, hombres con hombres, sexo anal, oral, y así revise todas las búsquedas de hombres teniendo sexo.

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