Luego de la aventura, en mi trabajo me cojen...

Después de todo lo sucedido la semana pasada, comencé a notar distinta a la gente que trabaja en mi piso, compañeros ya que pertenecemos al mismo sector, solo que distintas oficinas, pero en si, todos nos conocemos y hemos salido a comer en alguna oportunidad para festejar algo. Sus miradas eran raras, para conmigo, lo que me hacia pensar, que algo sabían, eso me daba miedo, sorpresa, nadie decía nada, solo me miraban, lo raro es que no me miraban mal, solo me miraban como pensando, pero no señalando, eso me confundía un poco, sin embargo no dejaba de ponerme nervioso, comencé a prestar atención a todo, hasta escuche conversación privadas entre ellos, algunas sin querer otras no. Una por ejemplo era una conversación de mujeres, que hablaban de lo que paso, mas que nada con Marta mi compañera, lo sabían todo, pero no hablaban indignadas, mas parecía que hablaban de cómo seria… agarrarme y hacerme de todo, me sorprendió mucho me reí sin querer y salí corriendo de ahí. Luego pase por la oficina del jefe, que le preguntaba a un encargado si sabía lo que paso con el vigilante, lo que me llamo la atención es que no me llamaron para retarme, y las ordenes fueron que dejara todo tal cual, y encima que mandara a llamar solo al vigilante. Todo era extraño, y me generaba algún morbo pensar que todos querían lo mismo.

Para comenzar a contar expliquemos algo, en mi piso hay aproximadamente unas 30 personas, entre empleados, compañeros y jefes, todos los hombres no superan los 35 años de edad, mientras que las mujeres están entre los 22 y 65 años de edad.


Al otro día de toda esta locura, lo que mas note, fue lo bien vestidas que iban todas las mujeres, y lo bien que me saludaban… mis compañeros y jefes me saludaban bien también y haciendo bromas, ninguna sobre lo que hice la semana pasada… todo me parecía raro… me dirigí a mi oficina, tranquilo como siempre, estaba Adriana, la otra compañera de mi Ofic., unos 64 años, rubia, estatura media, cederás anchas, culo grande, pero redondito, le gustaba ir al gimnasio, siempre fue muy tímida por así decirlo, porque toda su vida fue reservada, es muy recatada, recién se puso de novio a los 54 y se caso, una persona particular. Ella era quien me dio la plata por siempre ayudarla con cosas de la PC. Cuando me senté note que ella se paro de su asiento y me dice…

Adriana: yo te di plata por tus favores, se que Marta te pago distinto, y siento que no esta bien el dinero que te di, que es poco Juan, así que te pagare con creces…

Entonces se arrodillo frente mío, giro mi asiento, saco el cinto, bajo el cierre del pantalón, metió la mano debajo del boxer y saco la pija hacia fuera, yo no sabia que hacer, todo me agarro desprevenido, ella solo tomo la pija y se la metió en la boca, comenzó a chuparla con suavidad, fue tan rápido que no estaba parada aun, pero cuando comenzó a chupar, esa suavidad comenzó a calentarme, a gustarme, y comenzó a pararse. Cuando estaba toda dura, ella subía y chupaba solo la cabeza, y con una mano me pajeaba y con la otra acariciaba mis huevos, que bien que lo hacia, luego comenzó a meterse todo en la boca, las maduritas tienen de bueno que dan todo por el todo cuando tienen sexo, subía hasta arriba, dejado la cabeza de mi pija en su boca, y bajaba todo de nuevo, comiéndome la pija entera, y subía de nuevo con la cabeza dentro, y bajaba todo hasta chocar contra mi pelvis… no podía moverme del placer, cuando sentía mucho éxtasis y calor, todo junto la agarre del cabello y fui llevándole yo el ritmo de cómo subía y bajaba, ella no se resistía, entonces mi pija empezó a hincharse, ella se dio cuenta y lo hacia un poco mas rápido, yo con mi mano la llevaba también, con las ganas de acabar no le solté el cabello y encima la debe con mi pija toda dentro de la boca, hasta la garganta, y comencé a moverme yo, prácticamente le estaba cogiendo la garganta, ella no se movía para nada, se dejaba, sus labios no se despegaban del tronco de mi pija, y comencé a bombear la leche, escuchaba como se atragantaba, pero seguía chupando, tremendo lo que me hizo… se levanto, sonrío, a penas se limpio un poquito de semen del labio, ya que todo lo trago y dijo..

Adriana: que rico Juan, bueno espero haberte pagado bien aunque sea una parte de todo lo que me ayudas.
Yo: emm… creo que si…
Adriana: sabes que soy una mojigata, que no disfrute con novios ni nada, hay una cosa que jamás me anime a probar pero que ahora me gustaría aprender… mi culito jamás fue penetrado por una pija.

Me quede aun mas asombrado, ella era siempre muy formal, muy educada, escucharla decir eso, haber visto lo que hizo, no tenia palabras que decir… solo me senté a trabajar con un alivio tremendo, ya que me habían dado una mamada increíble, luego me fui con ganas de ir al gimnasio, así que me dirigí ahí, el mismo esta dentro del edificio donde trabajo… luego de haber echo un poco de ejercicio al mismo tiempo que pensaba todo lo que paso, me calenté de nuevo, y como que quería volver rápido arriba para cumplirle el favor a Adriana, una señora mayor, un culo grande, me sentía morboso pero caliente.

Busque mi toalla y ojotas para ir al vestuario y darme una ducha, entonces ahí lo que veo, me impresiono… uno de mis jefes, seguramente tendría unos 33 años, casi tan alto como yo, cuerpo fornido, no músculo sobresalientes pero macizo. Estaba parado bajo la ducha, apoyado contra una pared, haciéndose una paja y con un consolador verde transparente mintiéndoselo en el culo… me quede mirándolo un rato, y me calentaba, mi pija se empezó a endurecer, entonces solo termine de quitarme la ropa que me quedaba y decidí ayudar, me arrodille, le quite las manos y se la chupe, el se sorprendió…

Francisco: Juan??? Que vas a hacer???? Aaaa que bueno… lo mismo que al Vigilante???
Yo: shhhh… mmmm

Comencé a chupar, intentando hacer lo mismo que me hicieron a mi hace una hora atrás, chupársela con ganas, con una mano le seguí ayudando con el consolador, sentía esos jugos que salían de esa cabeza grande, el gemia mucho y me pregunto…

Francisco: puedo cogerte Juan??? Si??? Aaaammm aaaaaa… jamás estuve con un hombre, pero desde que supe todo lo que hiciste fantasee mucho y estoy probando de a poc… aaaammmm

No le respondí, yo estaba muy caliente, solo me pare y me puse contra la pared, el me vio, se acerco y empezó a meterla despacio, sentí la cabecita, luego sentí que entro, y luego comenzó a meter el largo de la pija de a poco, me dolía, pero la experiencia con el vigilante ya me había preparado, y sabia que si dolía, después venia el placer… y así fue, sentí mucho placer, uno de mis jefes me estaba cogiendo, era su primera vez con un hombre, sintió distinto y la excitación lo desenfreno, me daba rápido sin parar, comencé a tocarme, y el cuando se dio cuenta que aun tenia el consolador metido en su culo, se comenzó a coger con una mano, mientras me cogía a mi. Estaba muy caliente, la nueva experiencia y deseos, y como se sentía todo, tan así que no tardo mucho en llegarme dentro, yo no llegaba a sentir tanto pajeándome, a penas acabo, se lavo rápido y salio como huyendo, la primera vez siempre sentís algo raro y te vas como desilusionado con vos mismo. Yo también me desilusione un poco, porque me gustaba como me daba, pero me dejo a medias, así que decidí darme una ducha fría a ver si se me pasaba la calentura.
Subí a mi piso, y seguía con mucha calentura, entonces volví a recordar lo que Adriana me dijo, no me importaba nada, ella me dio el visto bueno y yo estaba muy al palo. Entonces entre en la oficina, cerré la puerta, ella con sus anteojos para leer de cerca sentada frente a la PC, solo alzo la vista para sonreírme, yo le sonreí con calentura en mis ojos. Me puse delante de su PC, ella solo veía como me quitaba el pantalón y sacaba mi miembro, sintió mi mano en su cabeza que la llevaba a chupar mi pija. Lo hacia tan bien como antes, la hubiera dejado que me hiciera acabar así, pero quería darle en el culo, ya tenia la idea fijada.

Yo: párate Adri… voy a cobrar mi otra parte de mis trabajos…
Adriana: por fin…

Ella sonrío de felicidad, como una señora de su edad que le dan un chisme, así de feliz estaba, se bajo los pantalones beige que tenia sin pensarlo mucho, tenia una bombacha de esas grandes que usa la gente mayor, pero media transparente en una parte, dejaba ver esa raya grande, ella no se lo quito, solo lo corrió de lado con su mano, con la otra abría esa raja, dejando ver ese ano rosadito, medio marroncito, estaba muy excitado, solo apoye la cabeza de mi pija e hice presión…

Adriana: ayyyy me dolió, que bruto… no, no creo que quiera, salí por favor…
Yo: no, ya me tenes acá, ahora aguanta un poco y te va a gustar…
Adriana: no déjame por favor…

Con su voz de señora me pidió que no siguiera, pero no pude, tenia que darle en el culo. Cuando metí la cabeza ella solo gimió con un mezcla de dolor, quiso empujarme, pero no lo logro, entonces solo empuje con mas fuerzas yo y se la metí toda adentro.

Adriana: AAAAYYYYY…. Que haces Juan??? Ay me duele mucho sácala aaaa

Yo solo sentí placer al sentir que entro toda, un culo grande, suave, redondo por el gimnasio. Cuando la saque y la metí de nuevo ella gimió, respirando profundamente…

Adriana: ahora se siente mejor… aaaaiiishhhh

Sus gemidos fueron mas suaves, eso quería decir que ya lo disfrutaba… estaba muy caliente, no aguante las ansias y solo la cogí sin parar, la metía y la sacaba rápido, ella solo gemía como tragándose los quejidos de placer, así no nos escuchaban… ella solo se dejaba sin moverse mas que poder arquearse un poco, y con una mano abrir mas su culo así sentir mas… cuando se giro a mirarme, me dijo…

Adriana: no puedo mas, me vengo… aaAAAAAAA

No aguante, esa reacción me contagio, y bombee toda la leche dentro de ese culo… luego fui sacándola despacio, nos vestimos como pudimos y ella salio primero al baño para poder limpiarse, yo no sabia si salir, este día, me daba la impresión de que no acabaría aun, siendo que recién eran las 10 y 30 de la mañana, parecían horas… el día parecía que no terminaría todavía, me daba miedo salir de mi oficina.

Volví a mi oficina luego de haber salido al baño asustado, sin saber que esperar, cuando logre entrar me sentí seguro nuevamente… pero sin hacerse esperar mas, el teléfono sonó, mi jefe, el jefe de la división…

Jefe: Juan, ya mismo a mi Oficina…

Todavía mi día no termino….

6 comentarios - Luego de la aventura, en mi trabajo me cojen...

kramalo +1
mmmm... muy caliente tu relato..... conta que te hizo ahora tu jefecito...jeje....van puntos.
troletti
Me pusiste al palo mal!!!!
supermachosex
No me gusto nada, jo me cae el sexo entrd hombres, pero al que le gusta le gusta, t dejo pts por tu esfuerzo de relator.