Completa Panda-monio - Elastigirl x Ming Lee

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Pasaron cuarenta años y ella nunca envejeció. La goma en su ADN se negó a dejar que sus arrugas aparecieran siquiera. Balancear sus brazos constantemente extendidos sobre vigas de soporte de metal la hacía temblar cuando miraba hacia abajo. No había gente debajo, solo puntos oscuros que vagamente se movían donde querían. Jadeos fríos flotaban en el aire. Sus manos se extendieron decenas de metros más allá de su cintura y sintió metal sin vida ante ella. Una vez que se detuvo en el jumbotron cercano, un silencio se apoderó de su cuerpo. Había pasado demasiado tiempo desde que retomó su papel de superhéroe que la perspectiva de permanecer a cientos de pies en el aire hizo que el mundo diera vueltas. Exhaló por la nariz mientras saltaba de nuevo. Para otros, podría haber sido conocida como la súper mamá Helen Parr. Esta noche eligió convertirse en Elastigirl por última vez.



Un flequillo corto y marrón cayó ante sus pestañas al llegar al segundo nivel de la arena. Se apartó el cabello y se ajustó la máscara elástica que tenía delante de los ojos. Filas de gradas se extendían hasta una plataforma ahora derruida rodeada de cortinas rotas y piezas de metal deformadas. El tono azul oscuro de la noche canadiense cayó sobre la región de Ontario, contrastando con el ajustado traje gris claro de Elastigirl. Gritos dispersos resonaron abajo, traicionando el tranquilo cielo sin estrellas que cubría toda la ciudad. Y todo se convirtió en poco más que ruido para Elastigirl. Se agarró al balcón manteniéndola firme con la cara seria. Porque en el centro de la tormenta se encontraba su objetivo de sesenta metros de altura, pisando fuerte por toda la arena y agarrando a quien pudiera con sus sucias y enmarañadas patas.



Cuando Elastigirl escuchó la noticia por primera vez, contuvo la risa. Los robots gigantes parecían más cercanos a la realidad en comparación con un colosal panda rojo suelto en un concierto de una banda de chicos. Apretó los dientes solo para escapar con un grito ahogado cuando vio imágenes en vivo de la bestia, en vivo para que todo el mundo pudiera ver. La boca de Elastigirl se aflojó. Los detalles blancos en las mejillas y el hocico del panda complementaban las hileras de dientes irregulares. Un único rizo de cabello descansaba sobre su cabeza. El fuego ardía en sus ojos, bailando sobre los retorcidos restos de la arena. Sin embargo, son sus rugidos, por encima de todo, los que hicieron palpitar el pecho de Elastigirl. Incluso mientras aspiraba aire por la nariz para calmar los nervios que se retorcían en sus entrañas, esos feroces gritos detrás de ella nunca dejaban de enviar temblores por su columna.



“¡¿DÓNDE ESTÁ MI MEI MEI?!” El monstruo bramó. "¿¡¿DONDE ESTA ELLA?!?"



El panda rojo, a quien las fuentes de Elastigirl identificaron como el dueño local de un antiguo templo/tienda de regalos llamado Ming Lee, estiró la cabeza y blandió sus garras. Golpeó la parte superior de las gradas del ring y dejó hileras de cortes donde una vez estuvieron los asientos. Los bocadillos y los dulces mancharon sus nudillos mientras golpeaba a la multitud que ya comenzaba a correr hacia las escaleras. Elastigirl, por su parte, rodeó con su brazo a seis personas cercanas y las guió dentro de las paredes interiores que las rodeaban. Pequeños jadeos escaparon de sus labios mientras fruncía el ceño. Al mirar detrás de su hombro, se quedó sin aliento cuando Ming Lee le dio la espalda. De todos los terrores que Elastigirl podría haber enfrentado esta noche, una compañera madre era el último que hubiera deseado soportar.



"Dios mío, ¿eres Elastigirl?" alguien cuestionó. "No te he visto en-"



Presionando un dedo contra su boca, Elastigirl hizo un gesto de silencio antes de regresar a las ruinas. “Sí, soy esa Elastigirl. Pero seré un panqueque si no te llevo a un lugar seguro. ¡Ahora síganme!



Escondiéndose detrás de montículos de escombros del doble de su altura, Elastigirl estiró la cabeza y examinó el área. Se quedó boquiabierto cuanto más se extendía. El amplio terreno frente a Ming Lee dio paso a un estacionamiento con huellas de pies profundamente impresas en el lugar donde la banda habría tocado. Los ojos de Elastigirl la llevaron de regreso a Ming, todavía mirando de reojo a los civiles a su paso. Su trasero apuntó a Elastigirl; Cola levantada hacia arriba, presentando el trasero de forma cuadrada de Ming a los sobrevivientes. Un gemido audible escapó de uno de sus labios mientras Elastigirl avanzaba poco a poco más allá de su cobertura. El crudo aroma del olor corporal que impregnaba el cuerpo de Ming Lee dejó lágrimas brillando en sus mejillas.



"Debería haber una escalera a nuestra izquierda que conduzca al exterior". susurró Elastigirl. “¿Todos listos para hacer swing?”



Otro asistente al concierto, uno cuyas pupilas lechosas se encogieron al ver temblar las caderas de Ming Lee, abrazó el cuerpo de Elastigirl. A su vez, ella frunció el ceño y los apartó. Simplemente la agarraron con más fuerza.



"¡De ninguna manera de ninguna manera! Soy muy joven para morir. Ni siquiera tuve la oportunidad de sentir de cerca a mis preciosos hijos”. ellos gimieron.



Mientras el fan ciego acunaba a Elastigirl contra ellos mismos, un gruñido bajo y retumbante resonó más allá de las destartaladas paredes del concierto. En ese momento, todos se apiñaron con la propia Elastigirl mirando detrás de su hombro. La respiración se estabilizó mientras arrastraba a los supervivientes hacia ella. Ese ruido profundo no podría haber sido Ming gruñéndoles. Elastigirl escuchó nuevamente y descubrió un bajo pesado similar al que escuchó antes. Uno que sonó directamente gutural en comparación con los gritos animales que escuchó antes de su llegada.



Las maldiciones se detuvieron en la boca de Elastigirl mientras dichos gemidos gemían por tercera vez. El grupo se dirigió de puntillas hacia las escaleras mientras Ming Lee se mordía el labio. Sus orejas puntiagudas se movieron ligeramente. Una gran sombra cayó sobre el grupo a medida que avanzaban. Cualquier punto de luz de luna que brillara sobre ellos desapareció cuando llegaron al corredor. Y mientras Elastigirl sentía náuseas ante el olor a basura fermentada, vio exactamente por qué.



Paredes de pelaje color rubí se alinearon entre la sección central de donde ella y los demás estaban en la arena. Elastigirl tragó saliva ante lo que parecía ser una astilla de algo rosado que se flexionaba entre las capas de cabello. Se apretó momentáneamente, dejando su garganta completamente seca al verlo. La temperatura se disparó cuando estiró un brazo hacia un poste telefónico cercano afuera. Ella simplemente gritó una orden a aquellos que la sujetaban mientras saltaba por el hueco:



“¡¡Cúbrete la nariz!!”



PPPPPPPRRRRRRRRROOOOOOOOOOOOMMMMMMMMMMBBBBBBBTTTTTT!!!!



Durante los siguientes veinte segundos, una explosión ensordecedora sacudió los alrededores y a los que vivían en los alrededores. Los pulsos de Elastigirl sonaron febrilmente cuando enganchó sus piernas alrededor del poste. Contuvo la respiración durante el descenso, levantando los bíceps esporádicamente hasta que el suelo la atrajo. Cuando su otro brazo se desenroscó de los que rescató, mantuvo la boca cerrada. Las fuertes ráfagas que escuchó no cesaron, ni el aire se aclaró. Como mínimo, Elastigirl podía descansar sabiendo que no había tocado el trasero.



Los supervivientes que Elastigirl salvó olfatearon su entorno antes de que ellos también se encogieran y se estremecieran ante el olor. Algunos escondieron la nariz bajo el cuello de la camisa, otros se taparon la boca con las palmas de las manos. Retrocedieron mientras sus extremidades chisporroteaban con Elastigirl tapando sus fosas nasales. A pesar de estar afuera por la noche, todos se quejaron por el aumento de temperatura causado por el pedo de Ming Lee. Manchó el lote donde solía estar Elastigirl, creando un regusto desagradable que se perdía en el cielo. Qué tan lejos habría sido arrojada si se hubiera quedado atrás fue un pensamiento que le hizo temblar el estómago.



“¡¡Eeeeee!! ¿Qué diablos comió ella? gimió un superviviente.



Otro asomó la nariz por el cuello e hizo una mueca. "Huele como algo que comería en Harryhausen's".



"Oh, ¿todavía están pateando?" El primer asistente se volvió hacia el otro, sin darse cuenta de que otra sombra gigantesca caía sobre ellos. "Pensé que los bombardearon hace uno o dos años".



“No, probablemente estés pensando en Lassetires. Probablemente se lo merecían. He oído que el tipo que dirige ese lugar es un canalla.



Mientras el grupo charlaba entre ellos, solo Elastigirl observó con horror cómo la mirada carmesí de Ming Lee empapaba a los que estaban a sus pies. Los dedos se tensaron en las caderas de Ming antes de apretarse los puños. Sin embargo, en lugar de golpear lo poco que quedaba del anillo, levantó una pierna sobre él y aplastó decenas de pies cuadrados de piedra y acero bajo su talón. El suelo tembló ante el impacto de Ming Lee. Todo el color en los rostros de los asistentes desapareció. Se pusieron de pie de un salto cuando el mundo se estableció en su lugar. Elastigirl simplemente se mantuvo firme y entrecerró los ojos, inspeccionando las proezas del panda a su paso.



Los monstruos no eran nada nuevo para ella después de años de proteger a la gente. El tamaño y la estatura significaban poco si Elastigirl podía balancearse a través de edificios para alcanzar cualquier parte del cuerpo montañoso de un gigante que quisiera. Sin embargo, fue la forma en que Ming se movió lo que la hizo moverse de lado a lado en busca de una abertura. Ming pisoteó el suelo con un pie, provocando ondas en el estacionamiento de concreto. A su vez, Elastigirl se tragó el nudo que tenía en la garganta y saltó sobre los trozos de piedra que se elevaban en el cielo. Los que salvó huyeron a la ciudad. Sólo entonces lanzó sus brazos a la cintura de su adversario; Los nudillos se le blanquearon mientras se aferraba.



Fue cuando Elastigirl alcanzó la cadera de Ming que esta última se empujó hacia atrás. Extendió sus mejillas hacia la arena, sacudiéndolas verticalmente hasta que pedazos de escombros atraparon su pelaje. Mientras tanto, los latidos del corazón sonaban en los oídos de Elastigirl. Por lo que vio arriba, Ming puso sus manos en sus rótulas y frunció el ceño a Elastigirl cuanto más se acercaba a su trasero. Los nervios hormigueantes que comenzaron en el estómago de Ming llegaron a su intestino inferior, justo cuando Elastigirl abrazó su mejilla derecha.



“TÚ… ¡NO CREAS QUE NO ESCUCHÉ LO QUE DIJERON ALLÍ ABAJO!” Ming gruñó. “¡¡ES PERFECTAMENTE NORMAL QUE UNA MUJER HAGA SUS ALIVIOS!!”



Apartando las palmas de sus manos, Ming golpeó su brazo contra el estadio y limpió las losas que estaban anudadas en su muñeca peluda. Estiró la cabeza por encima del hombro para encontrar una delgada línea que se extendía hasta su rostro. Tras una inspección más detallada, lo encontró comenzando en sus caderas, donde un insecto plateado abrazaba su trasero. Los dedos se movieron cuando ella alcanzó detrás y apretó. Por un momento, la frente de Ming se animó al agarrar su mejilla. Lo amasó a fondo, incapaz de encontrar sus huesos sin empujar más profundamente. No es de extrañar que Jin dijera que luchaba por mantenerla en su regazo.


Sin embargo, los enormes músculos de Ming se flexionaron y luego se relajaron cuando los brazos de Elastigirl quedaron flácidos. Lo vio caer más allá de su codo sólo para retroceder hacia su pata peluda. Al abrirlo, se reveló a Elastigirl retorciéndose ante ella, encogida en posición fetal. Su brazo se deslizó hacia su cintura y se envolvió alrededor de su cuerpo.



Los temblores recorrieron su figura cada segundo que pasaba. Incluso después de que Ming dejó de caminar, las piernas de Elastigirl se estremecieron al intentar ponerse de pie. Se le secó el fondo de la garganta cuando Ming la acercó a su cara. Miró a Elastigirl y a cambio recibió una mirada furiosa similar. Sus cejas se juntaron; dientes apretados, moretones manchando las mejillas de Elastigirl.



"¡No tengo tiempo que perder!" —bramó Ming. “¿Sabes dónde está mi hija?”



"¡¿De qué estás hablando?!" Elastigirl se protegió usando su brazo bueno y le gritó. Su voz bajó a medida que la distancia entre ellos dos se hizo más pequeña.



"Se suponía que el resto de mi familia y yo debíamos ayudarla para que no se convirtiera en esto". Ming señaló el resto de su cuerpo y luego volvió a su rostro hinchado. “Pero en lugar de eso, fue a un concierto donde algunas personas ni siquiera pueden vestirse. ¡Cuando la encuentre, se arrepentirá!



Cuando la respiración de Ming Lee se volvió errática, los ojos de Elastigirl se abrieron como platos. Miró la arena en ruinas y descubrió que los civiles seguían huyendo o chillando a las estrellas. Sus gritos resonaron más allá de todo lo que ella jamás escuchó. El sudor goteaba por su frente, a veces cayendo en espiral hacia el suelo. Hubo un escalofrío que le puso rígido el cuello cuando la visión de Elastigirl giró. Toda esta destrucción, todo este terror... porque el hijo de alguien no cumplió con el toque de queda.



Elastigirl no dejó pasar el latido. Apretó las manos y volvió a concentrarse en Ming, cuya mirada permanecía fija en ella. Bien. Le gustaba que sus enemigos no retrocedieran.



"¡Habla por ti mismo! ¡Piensa en cuánto destruiste al llegar aquí! Elastigirl hizo un gesto frenético a los que aún estaban vivos y luego a Ming. “¡Mira a la gente a tus pies! ¡Estas loco!"



Las pupilas de Ming Lee se encogieron cuando llevó a Elastigirl a su boca. Su palma derecha fue a sus fosas nasales mientras que la otra permaneció en la pata de Ming. El olor a podrido que olió antes estaba siempre presente gracias a sus mandíbulas.



“¡Estoy haciendo lo mejor para aquellos a quienes amo!” -replicó Ming-. “¿Qué sabes sobre ser madre?”



"¡Mucho más que tú!" Elastigirl le espetó a Ming mientras ella se tambaleaba para ponerse de pie. La presión disminuyó al llegar a los labios de Ming. Fue sólo entonces que Elastigirl apuntó con su dedo índice a Ming desde el mismo brazo que aplastó momentos antes y levantó la voz. “¡No es de extrañar que tu hija se haya escapado si así eres! ¡Estás actuando como un niño egoísta que no puede salirse con la suya, así que se desquita con todos!



Pasaron los segundos en total silencio. Ming parpadeó dos veces, sin saber cómo procesar lo que escuchó. Su boca se abrió mientras bajaba a Elastigirl, luego le mostró sus colmillos. Pequeños rubíes brillaron en sus ojos. Los dedos de los pies se curvaron en el suelo y arrastraron trozos de piedra y tierra entre los huecos. Todo su cuerpo retumbó, obligando a Elastigirl a caer sobre su trasero nuevamente. El aire de sus pulmones escapó en forma de un grito estridente que fue silenciado poco después. Porque a medida que la superficie de abajo se acercaba más hacia Elastigirl, su mundo quedó envuelto en un manto de oscuridad rodeado de suave pelaje.



Empujar las paredes enmarañadas a ambos lados no ayudó mucho. Elastigirl presionó sus manos y pies en todas direcciones, pero sus extremidades volvieron a su lugar. Tosió contra la superficie mientras volvía a tener arcadas. El olor a huevos se adhirió a dondequiera que Ming la empujara. Una capa de sudor brillaba en la frente de Elastigirl. Puntos blancos de oxígeno brotaron en su rostro hasta que respiró el olor fermentado a su paso. Sólo entonces desaparecieron junto con todo el color del rostro de Elastigirl.



“¡Actué como actúo gracias a mi familia! Lo sabrías si realmente criaras a tus propios hijos”. Ming se frotó el estómago y gimió. Se tambaleó en su lugar antes de colocar su trasero frente al hueco que dejó en el estadio. La mancha rosada que Elastigirl vio cuando escapó se flexionó nuevamente.



“¡¡Ahora sal de mi vista y regresa a casa, donde perteneces!!”




Bbbbbbrrrrr-RRRRRROOOOOOOOOOOOBBBBBBBBBBBLLLLLLLLLPPPPPPPPPPPPPPFFFFFFTTTTTTTT!!!!



La lengua de Ming cayó hasta su barbilla mientras suspiraba. La presión en su estómago desapareció gradualmente. Sus pies se arrastraron donde yacían. La baba se le fue saliendo gradualmente de la boca, pero ella nunca se dio cuenta. Se detuvieron cuando Ming se mordió el labio y levantó la pierna. Apretó sus patas cuando su pedo alcanzó un tono más profundo. No sabía cuánto tiempo permaneció reprimida. Como mínimo, los miserables gases de su madre tenían más sentido.



Cuando el pedo de Ming llegó a los diez segundos, los dedos de Elastigirl se despegaron de su trasero. Sonaba parecido al llamado de apareamiento de un pato, y Ming no ayudó a mover sus caderas durante toda la prueba. El olor rancio dejó de existir al igual que los sentidos de Elastigirl. Ya no sentía el pelaje esponjoso de Ming, ni se estremecía cuando su trasero se retorcía hacia ella. De ahí que cuando el cielo la saludó de nuevo cuando Ming la disparó por el culo, sus labios permanecieron estirados en una mueca de tristeza que no cambió hasta que hizo el impacto.



La frialdad del suelo se correspondía con su nariz manchada contra el cemento. Elastigirl gritó y luego se atragantó con el sabor amargo que le dejó Ming. Por supuesto que sintió algo cuando no podía sentir nada en su interior. Ella jadeó repetidamente, luego miró al horizonte y encontró a Ming continuando caminando penosamente por el estadio. Fue cuando pisoteó por segunda vez que Elastigirl se fijó en la mancha de color burdeos oscuro donde descansaba. Ver el trasero de Ming presentado a toda la región de Toronto le provocó dolor de estómago. Ella gimió mientras sus piernas se levantaban. Saber que ella podría haber detenido el alboroto que ocurrió a varios metros hizo que la sensación empeorara.



PppppPPPPPLLLLLLLRRRRrrrrrmmmmfffft!!



"¡Ah!" Elastigirl se estremeció sólo para agacharse momentáneamente. Un pedo que sonó extrañamente jugoso golpeó el aire, aunque parecía demasiado cerca para haber venido de Ming. Aunque olfatear el aire hizo poco para calmar las constricciones que soportaba Elastigirl. El gas olía extrañamente a tierra cuando se comparaba con lo que Ming le roció. Y al inhalar otra bocanada se reveló un ligero sabor al viento. Al igual que los pasteles de arroz que su esposo Bob insistió en que comieran antes de que ella se vistiera...



Tomó tiempo. Elastigirl infló su pecho y luego corrió hacia Ming, quien continuó asaltando el estacionamiento. Mientras ella aceleraba hacia ella, otro hombre pasó empujando un carro no más grande que este cuerpo delgado. Su piel tenía una tez seca y rubia que contrastaba con una camisa a cuadros blancos y pantalones de vestir. Un simple pie de espacio lo separaba de Elastigirl, quien saltó al verlo tirarse un pedo. Ella la agarró del codo y luego dio un paso atrás antes de que él desapareciera. Sólo entonces Elastigirl notó el largo rastro de sal que el hombre dejó atrás, comenzando frente a los pies de Ming y siguiendo por donde corría.



No había coches a su paso, ni nadie más que Ming entró en el círculo inacabado. Los labios de Elastigirl se fruncieron mientras miraba hacia atrás en el tiempo para que el gigantesco trasero de Ming se elevara en el aire. Ella se estremeció en el lugar al escuchar gritos mientras permanecía parada y seguía corriendo. Lo que sea que el otro hombre planeara, Elastigirl no lo sabía. Sin embargo, a medida que el círculo se conectó gradualmente con el otro extremo, una sensación de calidez la invadió. Ella hizo crujir sus nudillos mientras las burbujas en su estómago estallaban. Los brazos se estiraron una vez más con Elastigirl saltando en el aire y estirándose hacia adelante. La longitud de sus muñecas superó la de la rica vena que latía furiosamente en su frente.



Elastigirl corrió a través de los pedazos irregulares de tierra a su alrededor, saltó del concreto y se arrojó alto cuando Ming pisoteó de nuevo. Todo se detuvo gradualmente mientras ella bombeaba su pecho antes de que una losa de piedra le rozara la nariz. Los ojos de Elastigirl se abrieron mientras miraba hacia abajo para encontrar agujeros más grandes que el pie de Ming donde una vez estuvo la superficie. Más allá de las sombras grises estaban las mejillas de Ming; retorciéndose y retorciéndose con la cola curvada en la parte superior. El pulso sonó en los oídos de Elastigirl ante la vista. Se deslizó debajo de un camión de comida con un cohete redondeado en la parte superior y envolvió sus extremidades debajo de la parte inferior del exterior. A partir de ahí, Elastigirl contuvo la respiración, giró su cuello en un bucle y luego se plantó boca abajo. Es cuestión de respirar por la nariz una última vez antes de que la mandíbula de Ming se aflojara, enviando a Elastigirl volando hacia atrás por cortesía de su trasero.



PPPPRRRRRRROOOOOOOOOOBBBBBBBBBLLLLLLLLLPPPPPPPPTTHHHHHBBBBBTTTT!!!



Un coro de sirenas de autos sonó alrededor de Elastigirl incluso después de que el pedo de Ming llegó a su fin. Dominaron el sonido de la sirena de niebla a más de doce metros de distancia. Puntos blancos de oxígeno decoraban las mejillas de Elastigirl, pero prosperaron aún más mientras succionaba su boca hacia adentro. Mientras un grupo de vehículos pasaban en espiral a su lado por todos lados, Elastigirl pasó rápidamente a través de cada uno de ellos sin mirar dos veces. Los destellos de metal azul o plateado dieron paso a las ondulantes manchas rojas frente a ella. Sin embargo, en lugar de saltar a la pierna de Ming, Elastigirl se disparó hacia el techo de un auto y saltó al otro. Continuó incansablemente saltando sobre cada uno mientras se fijaba en los hombros cuadrados de Ming. La distancia se acortó cuando el rostro de Elastigirl se puso azul. Sus labios chisporrotearon antes de estallar con un suspiro y arcadas ante el aroma acre que llenaba sus pulmones. Sin embargo, nunca dejó de sacudirse las lágrimas que se formaban en sus ojos. Gotearon por sus mejillas mientras Elastigirl daba un último salto y lanzaba sus manos sobre el cuello de Ming, todo mientras apretaba los dientes nuevamente cuando chocaba contra su columna.



Cuando los brazos de Ming se dispararon, Elastigirl se reclinó, se lamió los labios y se soltó antes de lanzarse al aire. Ming miró al cielo y le mostró sus colmillos nacarados. Apoyó sus garras a su lado, lista para atrapar a Elastigirl cuando regresara a la tierra. Sin embargo, para el héroe que giraba en espiral en el cielo, ella simplemente dejó que su corto flequillo ondeara y estiró una pierna hacia arriba. Una vez más abrió los brazos y vio una tenue sombra circular en la luna y luego juntó su frente. Cubrió una cuarta parte del espacio y se alejó aún más. Debajo de ella se oían débiles gritos provenientes de cinco personas de las que no había oído hablar antes, aunque cuando miró hacia abajo no pudo encontrar ningún otro punto en el suelo. Todo lo que Elastigirl vio fue el hocico de Ming ensanchando, sus garras golpeando contra sus patas acolchadas y un anillo blanco puro rodeando a la bestia.



Superó el campo de visión de Elastigirl antes de que ella entrecerrara la cabeza en dirección a Ming. A medida que la distancia entre ellos se redujo, Elastigirl juntó sus brazos y piernas y luego exhaló por la boca. Infló todo su cuerpo hacia afuera, volviéndose tan delgada como el papel mientras volaba con el viento hasta que aterrizó precisamente en la cara de Ming. Elastigirl apoyó su cabeza sobre la de Ming mientras sus piernas se enrollaban alrededor de su cuello. En ningún momento dejó de fijarse en el círculo en el que Ming tropezó. Su pie se desvió fuera del círculo antes de que Elastigirl se pusiera el pelaje y pateara los hombros de Ming dos veces. Estuvo demasiado cerca para quedarse corta y no dejaría que nadie más saliera lastimado.



“¡¡AAAAGGGH!! ¡¡ALÉJATE DE MÍ!! ¡¡Quítate de encima AHORA MISMO!!” Ming agitó sus brazos hacia Elastigirl mientras estiraba su mitad inferior sobre la cabeza de Ming. Se peinaron cerdas de pelo hacia adelante antes de que las caderas de Elastigirl llegaran al frente. Es cuestión de inflarse desde allí y aun así mantener sus delgadas piernas atadas por detrás. Una vez que Elastigirl recuperó su físico original, curvó los labios y se frotó el estómago. Escuchar cómo se agitaba mientras Ming gritaba fue suficiente para que se le oprimiera el pecho. Lo frotó en pequeños círculos y luego mantuvo la cabeza baja mientras giraba los brazos para mantener los de Ming sujetos a la cintura. Un pequeño gemido se escuchó en medio del caos. Lo peor estaba por llegar.



Apretando los puños, Elastigirl se metió el estómago y apretó los dientes mientras el tejido suave y flexible de su culo se hinchaba. Ella curvó su columna hacia atrás mientras gemía febrilmente. Los muslos se tambalearon y se retorcieron mientras le separaban el mono. Oscuros rayos de luz brillaban a través de sus piernas a medida que el spandex se deformaba. Llegó a las pantorrillas de Elastigirl, luego se detuvo a favor del patrón oscuro en el medio de sus nalgas siempre hinchadas. Ya superaron el tamaño de su torso, sin embargo, ese no era el objetivo final de Elastigirl. Sacudió ligeramente la cabeza mientras sus nudillos se blanqueaban y finalmente dejó escapar un grito cuando Ming cedió a su cuerpo.



Cuando Ming chocó contra el anillo de sal, Elastigirl gimió ante una pequeña sacudida que recorrió su coxis. Giró el cuello hacia atrás y se quedó boquiabierta ante su ahora gigantesco trasero que cubría toda la cara de Ming. Un tono de negro contrastaba con los tintes de rojo en sus mejillas perfectamente esféricas. Sacudir sus caderas las hizo ondularse como si las estuvieran abofeteando. Mientras tanto, Elastigirl se masajeaba la lengua cuando se escuchó otro leve zumbido. Todo el cuerpo de Ming tembló antes de que Elastigirl abriera sus fosas nasales y gruñera. Se agarró de sus muñecas peludas mientras miraba al cielo, incapaz de concentrarse en nada a favor del espeso peso que pasaba por su abrasador estómago.



“Es hora de vengarse un poco…” murmuró Elastigirl. Le dio otro empujón a su estómago y empujó, dejando que su trasero se hiciera cargo del castigo.



FFFFFFFRRRRRRRROOOOOOOOOMMMMMMMPPPPPPTTTTTT!!!

PPPPPTTTTTTHHHHHBBBBTTTT!! BbbbBBBBBRRRRRRRROOOOOOOOOOPPPPTTT!!



Elastigirl chilló mientras permitía que su lengua saliera a raíz de sus pedos. Su pecho giraba con rastros de sudor golpeando sus enormes piernas. Los gritos de Ming sirvieron para hacerlos tambalearse cuando el aire caliente golpeó su ano. Gracias al agarre que las mejillas de Elastigirl mantenían sobre ella, Ming se retorció contra el espacio apretado, caliente y rancio establecido por ellas. Golpeó sus patas en el estacionamiento, pero no pudo liberarlas del nudo de Elastigirl. En el mejor de los casos, el trasero de Elastigirl se sacudió cuando ella junto al suelo tembló, pero de todos modos permaneció pegada a Ming. Ni siquiera sus rechonchas piernas lograron ponerla de pie sin que le tiraran un pedo en represalia.



Una cuarta ráfaga llovió sobre la nariz de Ming mientras las mejillas de Elastigirl se iluminaban con un exuberante tono rojo. Ella gimió porque su trasero se ondulaba cada vez que se liberaba un pedo y limpiaba el concreto con Ming resoplando en sus vapores. El cambio de posición ciertamente ayudó. Cambiar el hedor rancio de la comida rápida de Tim Horton adherido a kilómetros de piel por un olor crudo adherido al spandex podría haber sido preferible a otros. Sin embargo, es la lucha de Ming la que mantuvo los ojos de Elastigirl pegados a lo que sucedió detrás de ella.



Cada bocanada de gas que golpeaba a Ming amortiguaba aún más sus rugidos. Abrir la boca provocó que ráfagas de viento mancharan la parte posterior de su garganta, lo que provocó que Ming la escupiera entre lágrimas. Partes del estacionamiento fueron destrozadas por sus garras que las excavaron. Los músculos de su cuerpo hormiguearon y luego se aflojaron con el paso del tiempo. En el mejor de los casos, rozó los brazos de Elastigirl y pronto dejó que sus dedos se despegaran. Los dedos de sus pies se curvaron contra sus pies cuando focos de oscuridad nublaron los ojos de Ming. Elastigirl observó con los labios fruncidos en una sonrisa mientras los espasmos de Ming cesaban. Un último pedo estilo vibrato puso fin a su ataque, con sus extremidades desenvolviéndose y su trasero encogiéndose hasta el final de su soliloquio.

PPPPPPPPTTTTTTTTTHHHHHHHHHHHBBBBBBBBBBBBBBBOOOOOOOOOOOORRRRRRRRFFFFFFFFFFFTTTTTTTT!!!!



Elastigirl meneó sus caderas mientras el último gas le ponía el culo en forma. Apoyó sus mejillas en el labio caído de Ming y luego se reformó para que cada una de ellas adquiriera el tamaño de la cabeza de Elastigirl. Cuando se puso de rodillas y saltó del cuerpo de Ming, el mundo a su alrededor se volvió borroso. Elastigirl tropezó antes de agarrar el enorme y carnoso brazo detrás de ella y apoyar su espalda contra él. El olor impío de la carne sonaba fuerte, lo suficiente como para que dar un paso adelante le debilitara las rodillas. Cayó al suelo y se contuvo usando sus manos justo cuando sus labios besaban el concreto. Todo, desde sus hombros hasta sus pies, gorjeaba con los dientes de Elastigirl castañeteando febrilmente. Fue entonces cuando hizo una mueca cuando una avalancha de voces resonó en el horizonte, lideradas por lo que parecía ser el hombre que vio antes junto a un grupo de mujeres mayores.



"…¡¿En g?! Ming cariño!! ¡Di algo por favor!" gritó el hombre; voz quebrada al final.



"¡Ella tiene que estar bien!" una de las mujeres sollozó. "¡Hemos sobrevivido a cosas peores que esto!"



“¡No seas estúpido! ¡Alguien, ack ack, debe haberla dejado inconsciente con gas! Otra mujer tosió. "Tendremos suerte si no sufrimos daños respiratorios si el ritual funciona".



El cerebro de Elastigirl amortiguó esas últimas palabras. ¿Ritual? ¿Estaban tratando de exorcizar algún tipo de demonio que convirtió a Ming en la bestia que ella mató? Había documentos que mostraban signos de misticismo en su tienda de regalos. Estudios adicionales detallaron aproximadamente cuatro parientes femeninas vivas mayores que formaban parte del árbol genealógico. ¿Quizás llegaron para ayudarla en lugar de hacerle daño? Eso explicaría por qué la policía aún no había aparecido en escena. Y especialmente el anillo de sal que permaneció allí después de la tormenta de viento que Elastigirl desató sobre Ming….



Sin pensarlo más, Elastigirl sacudió la cabeza y saltó hacia un poste de luz cercano. Un pie se torció delante del otro mientras ella gemía y se tambaleaba, luego extendió un brazo hacia donde la oscuridad desaparecía. Voló más allá de las estrellas y se despidió de Ming con la mano. La misma sonrisa que mostró cuando se tiró un pedo regresó, aunque se suavizó al salir del ring. Elastigirl cruzó cojeando el estacionamiento pero su sonrisa no se suavizó. En el fondo, sabía que Ming saldría adelante. Así es como se construyeron las mamás.