Esté es el segundo resumen de mis anteriores post que fueron perdidos ya que me dieron baja y vuelvo para resumir y seguir con mis relatos...
Como verán me gustaría aclarar ciertos puntos antes de continuar con el resumen, ya que siento que todo lo que conté fue con eventos directos y sin saber su transfondo, de paso me estoy tomando el tiempo de redactar desde mi trabajo y espero que P! tenga la amabilidad para ver el contenido y examinarlo para ver si es apto para locochones que gustan de este contenido.
Aclarando algunos puntos:
• mi relación con mi abuela fue algo inesperado por no decir otras cosas, a mi llegada para vivir con ella apenas prestó vergüenza ante su intimidad ya que me sorprendió verla tan suelta utilizando prendas casi diminutas, su cuerpo era tan proporcionado que las cosas más simples se volvían diminutas como un short o una falda hacían resaltar mucho su cuerpo, pero de igual manera tuvo algo de recelo y solo por un tiempo corto utilizo cosas que no la hagan ver tan provocadora.
• como si fuera poco, no encontramos la forma que yo pueda tener mi propia privacidad y me refiero a una habitación separada, la casa de mi abuela era compacta y se fue llenando de muchas cosas de su época, baúles, camastros viejos y demás trastes ocupaban algunos ambientes que el abuelo fue amontonando ya que según tendría reparación en algún futuro, (gracias abuelo, a causa de eso pasaron cosas increíbles con la abuela).
• sin ver una salida a la problemática de mi privacidad y la de mi abuela decidió compartir la cama conmigo, no en el sentido erótico solo fue la manera de resolver las cosas para que al menos pueda descansar, asta ese momento yo veía a mi abuela como una mujer muy madura que si no estoy al pendiente de hacer mis obligaciones me retaria(regaño) y la pasaría muy mal, sentía que era una mujer más temible e imponente que mis propios padres.
• al establecerme en casa de mi abuela que la verdad vivía en un lugar apartado de la ciudad pero quedaba cerca de un pueblo, me fue incómodo al principio.
como dije mi abuela cuidaba poco el aspecto íntimo de su cuerpo, al principio si se cuidaba pero cuando pasó unas semanas el descuido era notorio, primero utilizo esos típicos camisones de vieja, la verdad no le quedaba tan mal, hacía resaltar su gran cuerpo, luego utilizaba una especie de ropa deportiva que utilizaba como pijama, esa si me gustó ya que sus curvas la hacían ver muy sexy pero creo que todo eso no le gustaba.
• después de todo eso, la primera noche que durmió en ropa interior fue que mi mente la vio por primera vez como mujer, aún no me picaba el bichito de la lujuria pero su cuerpo era increíblemente atractivo, casi se me salen los ojos al ver sus enormes tetas, y más aún verla por detrás, su gran culo era inexplicablemente lindo? No le podía apartar la mirada, y esa noche la pensé mucho, mi mente solo se llenaba de pensamientos perversos pero no eran pensamientos sexuales, más eran como pensamientos inmorales.
- como serán sus pezones?
- sus nalgas serán blanditas?
- le saldrá leche?
- podré abrazarla?
- le gustara acariciarse todo eso?
- como se bañara?
Yo era inocente, no veía el grado de magnitud que representaba el cuerpo de una mujer madura, mi bichito aún estaba dormido.
• luego se fue liberando y los descuidos fueron empeorando, utilizo una falda de tela y una sudadera muy delgada para dormir ya que aveces me quedaba mirándola y creo que se daba cuenta de la situación y por eso utilizaba esa clase de ropa para dormir, aún así no se daba cuenta que era imposible dejar de verla teniendo ese cuerpo descomunal, luego los descuidos ya eran naturales para ella, tengo un ejemplo:
- al ir a lavar ropa a la pileta de la casa la cual se sacaba agua bombeando de una palanca mi abuela utilizaba una especie de vestido que empezaba de su escote y terminaba por los muslos y su defecto era que cada vez que lavaba ropa solo se ponía esa clase de vestido sin nada debajo, se notaba sus labios carnosos de su vagina a través de la luz que transparentaba el vestido, cada vez que se agachaba para enjuagar la ropa se le notaba asta los pelitos, y le colgaba jodidamente sexy las tetas, luego de acabar con toda la ropa, se daba una pequeña limpieza y con ese mismo vestido se iba a dormir conmigo, desde entonces empese a alucinar con lo que tenia entre sus piernas y así mi bichito de la lujuria despertó.
• así fue que la primera etapa de conocer el cuerpo de una mujer se formó, ahora no pensaba en mi abuela como mi abuela, la pensaba como mujer al tener en mi mente las partes eróticas de su cuerpo, sabía que era mi abuela pero ella seguía siendo mujer y tenía un cuerpo tan sabroso que mi mente se descontroló y poco a poco comencé a tener fantasías eróticas con ella, pero aún no era fantasías sexuales eso lo desarrolle mas adelante, cuando ya pasó los meses para el año.
• en mi etapa de conocimiento cruce muchos límites del pudor y lujuria, le toque tantas partes de su cuerpo que al final me resultaba irresistible no hacer algo más, así pase al siguiente nivel donde mis dedos exploraban todo, y mi pene se ponía tan duro como la rama de un árbol, y no muy lejos de ahí, paso lo que tenía que pasar, le comencé a tallar mi verga por encima de la ropa, su enorme culo era mi deleite este tipo de actos lo hacía cada cierto tiempo, una o dos veces por semana, mayormente cada vez que utilizaba esos vestidos cuando se iba a lavar la ropa, como aún era inexperto no me daba cuenta que le podía frotar mi verga si solo le remangada un poco el vestido me di cuenta de eso más adelante, lo que si me gustaba era sentir su culote a través de la ropa, como era ropa delgada se sentía muy rico frotarse de ves en cuando.
• después de este tipo de actos mi lujuria se descontroló, y un día cualquiera me atreví a sacar mi pene para frotarme en su culo, ese día mi abuela dormía con una falda de tela y un calzón rosado y viejo, lo digo así por qué su ropa interior estaba tan suelto por el desgaste del uso, recuerdo que primero le puse la punta de mi pene sobre la falda y hundiéndolo le trataba de perforar a la altura de su ano, se sentía muy rico, pero luego queria sentir rico y estar cómodo, así que le remange un poquito la falda y le puse la verga en medio de su vagina, lo único que nos separaba del contacto carnal era la delgada tela de su calzoncito gastado por el tiempo, pero de igual manera si tuvimos contacto carnal, ya que sus enormes nalgas hicieron una especie de embutido con mi verga, ahora adivinen que faltaría para sentir un contacto de piel con piel al sien por ciento?
• así fue que aprendí a frotarme con su cuerpo y aprovechar sus descuidos, aún no podía cruzar ese límite que nos separaba de un contacto carnal de verdad, tenía miedo que se diera cuenta de lo que le hacía, pero como no veía alguna especie de señal que se daría cuenta seguí con mi travesura, con algo más de tiempo me di cuenta que sus calzones o short las podía bajar asta la mitad de sus nalgas y luego pellizcar el pliegue que va por la vagina y hacerla a un lado, al principio lo hice así, y puse mi pene en medio de sus piernas pensando que lo hacia bien, pero solo era una prueba y error, fui probando corde pasaba los dias en la cual podia disfrutar de esta manera, era tan estúpido que no me daba cuenta que lo podia hacer los días de lavar ropa, no se me cruzaba por la cabeza, aún!
• seguí haciendo mis intentos de conseguir placer a como de lugar, estaba segado por seguir sintiendo más y más, por conocer distintas sensaciones placenteras, luego me atreví a poner mi pene entre sus nalgas por encima del calzón así no tendría que jalar el pliegue que va por su vagina ya que estaba seguro que mi pene desnudo apartaría esa tela, y así fue pero aún seguía apuntando a su entre pierna, la cual era muy rico, más adelante me daba morbo por saber dónde se encontraba mi pene y con los dedos y muy lentamente exploraba la zona y me daba cuenta que le dejaba lubricado por los jugos pre seminales que salía de mi pene, le dejaba así entre las piernas y la parte que me interesaba estaba más arriba, me parecía lejos la distancia pero en realidad solo estaba a un par de dedos.
• no sabía cómo hacerle para llegar con mi verga asta su zona erótica(vagina), cada vez que intentaba acomodarme sus calzones me obstruían el paso, luego de tanto tiempo intentando por fin se me ocurrió hacerlo el día que se lava la ropa, ya que en una de esas vi a mi abuela lavar la ropa y traía un vestido que me gustaba y pensaba en mi mente sería genial si duerme con eso, ahí desperte y dije si va dormir con eso? Me saque de honda y dije si duerme con vestido cada ves que lavamos ropa, hay me sentí estúpido, perdí tanto tiempo sufriendo y luchando con sus calzones que no recordaba estos días, así que esperé pacientemente a la noche y si, al final durmió con el vestido y sin nada puesto debajo.
• esa noche fue mi noche esperada, nunca pensé que un contacto tan íntimo me haría enloquecer como nunca en mi vida, ahí estaba mi abuela, en toda la oscuridad de la noche, con ese ronquido entrecortado y con el sueño pesado, yo comencé a subir el vestido lentamente a la altura de su espalda, para no provocar algun movimiento que la perturbe de su sueño fui muy sigiloso, el contacto con la piel de sus nalgas era una maravilla, sentir toda su piel desnuda sin nada de prendas, sin un calzoncito que me obstaculice lo era todo en ese momento, luego de un paciente y delicado remange de prenda la tenia ahí, a mi merced, yo era como un perro hambriento en busca de carne, le calce las nalgas entre mi pelvis y era enorme, demasiado grande para mí pero eso no me iba a detener, sin pensar en nada más saqué mi pene erecto y la tentación era única, nervioso y tembloroso me fui pegando en ese enorme trasero y comence a buscar el contacto ideal de nuestras carnes.
• ya para concluir todo este jaleo y comenzar con la segunda parte de mis relatos perdidos les diré que estar en esa situación en la cual iba a descubrir nuevas sensaciones me hacía muy feliz pero a la vez no pensé en que pasaría más adelante, esa noche coloque mi pene muy cerca de su vagina y me frote entre sus piernas, me di cuenta por que con mis dedos acomodaba mi pene y aveces sentia que solo se manchaba con mi pre semen entre sus piernas y la parte que quería sentir estaba un poco más arriba, así cada oportunidad en los días que podia trataba de acercarme, con el tiempo la práctica me hacía cada vez más hábil, cada ves estaba más cerca de lograr mi meta, no voy a negar que solo me conformaba frotando mi pene entre sus piernas, era fantástico sentir tanto placer que provenía de mi verga friccionando entre sus carnes, pero aún no era lo suficiente como para desmayarme, aún no lo era.
• ya sin remediar más cosas, un día inesperado por fin pude probar ese manjar exquisito, por fin pude poner mi pene a la altura de su vagina y frotar sin control alguno, más tarde y me refiero a unas semanas después, ya podía disfrutar en manchar su vagina con las babas de mi pene, aveces se mojaba poquito y aveces se lubricaba todo esa carne q me gustaba osea sus labios vaginales, me encantaba cuando lograba mojar y empapar toda su vagina, no sabía que la estaba lubricando con sus jugos vaginales, siempre pense que era yo quien la mojaba con mi pene, tenía en mi mente bien claro, hoy si la voy a lubricar y le voy a frotar toda mi verga, así poco a poquito logré llegar asta el punto de querer penetrarla y desde ahí ya todo el cuento está en el primer resumen que hice, ahora sí sin mas remediar continuare con mi relato, lamento si está parte fue muy larga, esque cómo decía mis relatos eran muy largos y a detalle y pienso que haciendo esto se podrá entender todo lo que trato de contar.
Segunda parte del resumen de el incesto con mi abuela.
Nos quedamos en que por fin pude tener ese encuentro carnal que tanto deseaba tener, por fin pude lograr tener sexo con mi abuela, esa primera vez nunca lo voy a olvidar, es mi recuerdo atesorado, lo hicimos tan mal que fue tan bueno a la vez, después de eyacular como un ser delicado no recuerdo muy bien que pasó entonces, solo sentí muchísimo placer que sentía que me asfixiaba y que a la vez se me salía todo, como si estuviera orinando con fuerza, era como expulsar chorro a chorro, no sabía que eso era eyacular, pero eso que hacía mi cuerpo me hacía ir al cielo, sentía que flotaba en las nubes y que todo era multicolores, todo eso podia ver a pesar de estar en completa oscuridad, no veía nada, pero mi cuerpo y mis manos lo sentían todo, la poco rato me quedé dormido desde ahí no tuve ganas de hacer algo parecido por qué sentia temor que mi abuela me tenga rencor, sentí que hice algo muy malo pero no podíamos estar asi todo el tiempo.
En esta parte fue donde conté las experiencias que tuvo mi abuela conmigo, trataré de escribirlo lo más corto posible:
acá expliqué por qué mi abuela hacia el resto de cosas y luchaba para que yo no logré mi cometido y de las mismas palabras de ella podría decir que fue lo siguiente...
~ abuela: me sentí feliz de poder volver a tener a alguien que me haga compañía, y uno de mis primeros nietos fue que lo trajeron para mí, este muchacho era problemático pero cuando llegó se veía muy indefenso y tímido, no pensé que fuese un problema, pero luego sucedieron muchas cosas, trate de darle su espacio pero solo podíamos compartir la cama para descansar, cometí un error terrible, debí separar nuestros lugares de descanso.
~ no me daba cuenta de las cosas que ocurrían por las noches, yo soy una mujer que estuvo mal de salud y con el tiempo eso me pasó factura, mi cuerpo se sentía agotado que lo único que me reponía era descansar profundamente, así fue que un dia sentí algo inquietante pero no le di mucha importancia, pense que mi tesoro estaba incomodo a mi lado pero mas adelante otras eran las cuestiones.
No tarde en darme cuenta que mi vida estaba al pendiente de mi cuerpo, me tocaba y me daba besitos en lugares donde me ponía nerviosa, pensé que era por el cariño de su parte y esto lo hizo por mucho tiempo, eso me gustó tanto que me fui acostumbrando a que sea cariñoso pero luego su cariño se convirtió en tormento, me tocaba las bubis y frotaba con sus manos parte de mi trasero al principio lo iba a detener pero solo fue delicado conmigo y pensé que se calmaría por si solo y lo deje hacer sus cosas y volví a recobrar el sueño, con el tiempo mi dulzura empezó a portarse mal y trataba de quitarme la ropa interior de mi cuerpo y sentía miedo en detenerlo y decirle un no! Como respuesta, no lo quería asustar, pero esas decisiones fueron mi peor error, mientras más tiempo pasaba peores cosas me hacía, asta que sentí su trozo de carne en mis nalgas, me puse muy nerviosa y sentia una presión muy fuerte en mi pecho, mi corazón palpitaba a mil por hora, estaba asustada de lo que pasaría, pero me estaba armando de valor para detenerlo con rudeza si hacía falta.
~ no pensé que las cosas que estaba por hacer me congelaría la sangre de mi cuerpo y me quedaría perpleja ante la situación, mi vida estaba tratando de hacer cosas de adultos, era algo que siempre me ponia nerviosa, sentir su carne entre mis piernas era lo mas estresante que podía aguantar, cada noche le pedia al de arriba que pare por piedad, pero no parecía que se detendría, así que tendría que intervenir si algo fuera de lugar lograse pasar, con los días no se atrevía hacer nada, solo sentía que me utilizaba para descubrir estás cosas que a los de su edad les interesaría, era lo que suponía en aquel entonces.
~ me fui acostumbrando a que esté tras mia haciendo sus travesuras, en algún punto me parecía lindo volver a sentir un hombre tras mío, "un hombre como tal" era extraño que no me cause alguna especie de enojó hacia el, tal ves lo quería mucho como dejar permitir tal aberración, eso fue otro de mis errores, me sentia sola, mi marido se me fue y lo que me consolaba y me unia a mi lindura era que compartíamos la misma sangre, tal ves eso me hacia cambiar de opinión al momento de soportar sus locura, más tarde sus atrevimientos fueron más consecuentes y con más agresividad, sentía que en cualquier momento seria atravesada por su trozo de carne que ya lo sentia cerca de mi conejo.
No sabía qué hacer, no quería estropear todo esto, mi mente se llenaba de muchas cosas que me tenían dudosa de lo que tenía que hacer, cuando pasó la cuestión, el día que se atrevio a penetrar mi conejo me asusté mucho, me altere y pasó algo terrible que no me gustaría recordar, luego de eso sentí mucha culpa, fue mi culpa por permitir llegar asta está situación, no sabía cómo enmendar mis actos, lo veía todo indefenso, lo quería abrazar y consolar entre mis brazos, se que le gustaba mis pechos y trate de darcelos sintiendo muy dentro de mi remordimientos ya que no debería hacer esas cosas, pero me sentía confundida, no sabía lo que estaba haciendo, cuando vi que se veía mejor decidí dejar de darle consuelo y trate de volver a la situación en donde estábamos, era mejor eso a que el no quiera seguir más a mí lado, me daba miedo volver a quedarme sola.
~ luego mi querido nieto volvió a tener la confianza de tocar mi cuerpo y eso me calmo un poco, pero luego busco la situación en la que estábamos la última vez y yo me dejaba pero muy dentro de mi estaba nerviosa, no quería malograr nuestra relación de familia, pensaba mucho que eso sería un gran error y cada vez que sentía que se propasaría intentaba escapar de el, lo intenté muchas veces pero mi cuerpo ya no podía aguantar, no tenía las fuerzas que tenía antes, así que decidí pensarlo mejor y le puse reglas para que no pase más cosas, y así fuimos insistiendo y cada vez mi mente se adormecía más, no podía pensar con claridad, solo trataba de no cometer otro error, pero no pude ya estaba sintiéndome derrotada, que mi nieto tome mi cuerpo no me parecía mala idea, entonces estaba decidida que me haga lo que le plazca, total esto solo será entre nosotros y nadie más, cuando estuve decidida y preparándome mentalmente para ceder mi nieto ya no me volvió a tocar, fue extraño, estaba más confundida aún, que pasó? Cambio de opinión? Ya no me quiere? Hice algo malo? Mi cuerpo es desagradable? Pensaba un montón de cosas y veía como empeso hacer su vida normal, cada noche ya no intentaba tocarme, que le pasó? Quería preguntarle que le pasó? Pero estaba aterrada y confundida.
~ no quería que se aleje de mi, no quería estar sola, no me importaba nada, solo quería estar bien con mi nieto, desde entonces comencé a pensar mucho sobre nosotros, y cada noche estaba más convencida en darle mi cuerpo a mi nieto pero no sabía que más hacer? Si dormía con ropa provocativa tal ves vuelva a tocarme? Fue lo que pensé!
Entonces comencé a dormir cómodamente utilizando todo tipo de prendas, pero nada lo convencía, me enoje mucho y lo tomé entre mis brazos para tenerlo cerca de mi, tampoco quería tocar mis bubis, algo estaba mal, decidí dormir sin brasier y como que le gustaba poner su cabeza entre mis tetas pero eso y nada más, ya me sentía derrotada, no sabía lo que me estaba pasando, estaba sintiendo de nuevo esa presión en mi pecho que no me dejaba tranquila.
~ llegué a pensar que tal vez el ya se fijó en otra mujer, tal vez más bonitas y llenas de vida o alguna como yo, como se iba al pueblo a hacer sus obligaciones esas ideas me destrozaban por dentro, no me daba cuenta que estaba celosa y llena de rabia, quería recuperar a mi lindura a mi amor, me decidí entonces que esa noche sería la última que haría algo tan atrevido y me acosté desnuda a su lado, el sabía cómo estaba y lo provoque con mi trasero, al final si cayó y me sentí alegre, quería sentir su cuerpo y sobre todo su trozo de carne, y no dudé en hacer todo lo que sus manos y su cuerpo me iban hacer, estaba esperando el momento, y lentamente se acomodaba, asta me puse nerviosa cuando se quitó la ropa, no sabía cómo dejar mi cuerpo, pero cuando sentí sus calidas manos no dudé en ser dócil y sumisa, me acomodó varias veces mi cola, y en una de esas senti que me atravesaba con su verga, y se quedó inmóvil, yo intente animarlo pero su pene se salió de mi conejo, yo quería que sea mas rudo conmigo, quería todo de él, incluso su leche, mi mente ya estaba frita, solo tenía los deseos por delante, quería tenerlo dentro de mí y que este lo más profundo posible, y así me volvió a acomodar la cola y está ves creo que si estaba en una pose correcta, doble mis piernas para no causarle incomodidad y de la nada volví a sentir que me atravesaba con su verga, estaba muy excitada para pensar en otras cosas, en ese momento todo tipo de problemas desapareció de mi cabeza, y así empujando un poco mis nalgas mi cielo hermoso tomo valor y empeso a cogerme, torpemente pero me cogía por que sentía como se friccionaba su pene dentro de mi conejo, era lindo sentir otra ves algo de placer, asi subimos la intensidad y al final mis nalgas se estrellaban delicadamente en su pelvis, era hermoso muy hermoso, era lindo mi precioso, me estaba dando su felicidad, asta que sentí sus empujones de pelvis y ya me di cuenta que estaba por terminar así que puse firme mi cola para que deje todo su amor dentro de mi, así terminé agotada y llena de su caliente leche, al poco rato sin darme cuenta me sentí agotada y me quedé dormida de felicidad...
Volviendo al momento de todo esto, pues lo que dijo en alguna ocasión lo trate de plasmar de puño y letra aún que algunas cosas sonaban diferentes pero así fue como se describió.
Luego de ese encuentro cárnico no volví a pensar en sexo otra vez, bueno no asta unos días, miré a mi abuela y su rostro estaba lleno de confusiones, pero igual tratamos de salir de esos pensamientos negativos, después de algunos días ya estaba activo otra vez y lentamente volví a pensar en mí abuela, la quería mucho, la abracé y le di todos mis sentimientos, la ayudaba en todo lo que necesitabas, limpiaba y lavaba las cosas junto a ella, le alcanzaba muchas cosas, le acompañaba en todo, trate de ser un buen muchacho para ella después de lo que hicimos esa noche, pasaron los días y todo volvió a ser casi normal solo que está ves mi abuela me trataba con más cariño, algo así como el amor de una mujer a un hombre, ante sus ojos aún seguía siendo su nieto, pero en sus sentimientos ya era algo más que solo eso!
No pasó mucho días cuando nos volvimos a acurrucar en la cama, me sentía nervioso y con algo de temor pero al tocar a mi abuela está no se negó y me acarició para hacerme sentir mejor, así pude tocar su cuerpo de nuevo y lentamente buscaba la manera de provocarla, todo esto era repentino, no sabía lo que pensaba mi abuela solo seguí a mis instintos que me volvía a exigir placer otra vez, tenía miedo de que me vea como un mañoso, un pervertido sin remedio pero no me decía nada, solo comencé a acariciar tal vez así no me vea como yo pensaba que lo hacía, lejos de eso mi abuela comenzó a calentarse poco a poco yo no lo notaba recuerden que aún era inexperto y no sabía leer las expresiones corporales de una mujer.
Pensamientos individuales de nosotros:
• toque varias partes de su cuerpo y volví a explorar zonas eróticas, llegando a acariciar la vulva de su vagina, cada vez mis deseos de poseerla era más fuerte, y con cada paso que bada estaba muy cerca de mi meta.
~ mi amor hermoso volvió a tocar mi cuerpo, pensé que ya no volvería a hacerlo pero me alegro mucho que después de varios días lo vuelva hacer, me sentía convencida de que solo íbamos a tener intimidad una sola vez, por qué pasaban los días y no me tocaba solo estaba cerca de mi ayudándome en todo lo que podía, cada vez que lo tenía cerca me sentía nerviosa y no sabía si está ves irían bien las cosas? Podía sentir sus caricias en todo mi cuerpo, me hacía estremecer, algo que nunca sentí antes, cuando llevaba sus manos cerca de mi conejo me dolía la cabeza pero no era un dolor real sino, era un dolor de que no podia pensar con claridad, estaba feliz pero a la ves confundida, sus caricias cada vez me ahogaba y no me dejaba pensar en nada, solo quería que lo que pasase termine lo mas pronto posible.
• mi abuela estaba muy callada pero no me decía nada si tocaba algo de más, así comencé a acariciar su cuerpo y lentamente le fui quitando la ropa, primero lo de arriba y no oponía resistencia se dejaba, luego le quite lo de abajo y así asta dejarla desnuda, luego la bese por todos lados por qué sentí que debería hacerlo, mientras besaba y acariciaba su vagina, quería prepararla para frotarle mi pene, después de un rato me propuse a cogermela.
~ mi precioso, mi amor estaba fuera de control, me dejó desnuda que por los nervios no pude hacer nada, simplemente me dejé llevar, lo que me dejó así fue que me este dando cariño en todo momento, algo que nunca sentí en mi vida, era especial ese momento, me besaba mucho y me acariciaba mi conejo que fue lo que más me gustaba que haga, cada vez sentía mucho calor en mi vientre, estaba completamente segada por la lujuria, y en unos momento mi libido se elevo más cuando sentí que se quitaba la ropa, estaba súper nerviosa pero con una felicidad que recorría cada rincón de mi ser, sabía lo que iba a pasar así que espere a que mi nieto amoroso haga el resto del trabajo, yo no quería malograr ese momento especial que me hacía sentir una mujer completa y la más dichosa del mundo.
• nunca pensé que volvería a probar el placer con mi abuela, ella estaba callada que supuse que no abría problema alguno en seguir adelante, se dejó desnudar y eso ya era prueba irrefutable de que si quería que pase lo que más adelante íbamos a hacer, seguí acariciando y besándola por qué sentí que eso era lo correcto, mi instinto me guiaba en cada momento, era como si supiera que eso se debería de hacer, yo sólo no debería sentir esas ganas, si no que mi abuela también debería sentirlo, así que con algo más de caricias y besos me acurruqué detrás de ella y comencé a frotar mi verga en su vagina.
~ mi querido cielo, mi amor y mi vida me hacía sentir especial, sus caricias eran insistentes, no dejaba de tocar con sus dedos varias partes de mi conejo, aún que era torpe me hacía sentir muy bien, luego de estar dándome caricias excitantes me excite mas aún cuando se me pegó detrás y puso su trozo de carne entre los labios de mi bajina, mi cuerpo se puso tenso pero trate de pensar en que eso sería un momento especial y me soltaba para no causar incomodidad.
• ya no podíamos resistir más.
~ ya no podíamos resistir más.
• deseaba penetrarla con todo mi ser.
~ deseaba tenerlo dentro de mi pero ya!
• me perfile para luego penetrarla lentamente.
~ sentí como me atravesaba de delicioso el conejo.
• muy lentamente comencé a menear mis caderas tal como mi abuela me lo enseñó.
~ empeso a tallarme por dentro, mi amor hermoso por fin me hacía sentir mujer otra vez.
• sentí que nuestros cuerpos compatibilizaban a la perfección ya que cada bombeo era divino, mi pelvis encajaba tan bien en sus nalgas que cada vez me emocionaba más y más.
~ me sentía completamente fuera de esta realidad, podía sentir como el pene de mi nieto lindo se abría paso dentro de mi conejo, se sentía delicioso volver a sentir placer, por más que parezca mal lo que voy a decir yo quería sentir más de ese delicioso y carnoso pene.
Cada vez nuestros cuerpos pedían más placer, tanto yo como mi abuela dábamos todo nuestros sentimientos en este momento tan maravilloso, sentía que era un suertudo al poder tener sexo con mi abuela, este encuentro íntimo era más especial que la primera vez que lo hicimos, aun que recuerdo más la primera vez está siento que fue la más especial, acá liberamos nuestros sentimientos sobre todo mi abuela, no nos dimos cuenta que rompimos las reglas del pudor y la cordura y cometimos incesto, aún así me entrego su cuerpo para complacerme a voluntad, desde acá podía hacer todo lo que me plazca pero nunca lo hablamos así que yo solito me puse mis limites sin saber que no avía límites, ya me entenderás más adelante, sigamos con los pensamientos personales de cada uno, que me párese que es mejor así a que estar recortando parte por parte que es lo que hice en mis antiguos relatos.
• no podía contenerme ante tanta lujuria, pronto nuestras partes íntimas se sumergieron en un mar de sentimientos, me refiero a que nuestros jugos corporales empezaron a mezclarce dentro de mi abuela y a causa de los bombeos constantes se fueron saliendo por el borde de nuestro penetrante placer.
~ mi cielo hermoso hizo que mi conejo babeé de placer, podía sentir como se me salía mis jugos internos en cada embestida que me daba, era una maravilla, sentía que solo podía ser la mujer de mi nieto y de nadie más, no quería pensar en nada, ni el pasado en nada, solo podia sentir como entraba y salía la verga de mi querido encanto, cada vez me sentía más mujer, pero no una mujer realizada si no, la mujer de mi nieto, yo queria que este momento nunca se terminara, pero la realidad es diferente.
• no pensé que mi abuela sería tan ardiente en la cama, si tan solo desde un principio hubiésemos llevado bien las cosas ya abríamos disfrutado mucho más antes.
~ que delicioso se sentía tenerlo dentro de mi, aún que sabía que estaba mal no podía dejar de sentirme excitada y libidinosa, estaba deseosa de que me vuelva a llenar con su cálido semen, lo quería y lo deseaba cada vez más, mi cuerpo empeso a arder en llamas.
• en un momento de arrebato comence a sentir los empujones de nalgas que hacía mi abuela, se estaba excitando demasiado que estaba llegando al clímax, no se que pasó en verdad, tampoco tenía la verga tan grande como para hacerla entrar en éxtasis, pero bueno, se sentía rico verla así, meneando la cola para provocar mi eyaculación.
~ estaba deseosa de que me eyacule dentro de mi conejo, solo quería su semen y nada más el resto no me importaba, yo me sentía más excitada al saber que mi propio nieto me iba a eyacular en la vagina, eso me tenía ardiente, estaba desesperada, me lo quería comer enterito, los pulsos de mi corazón estaban muy fuertes, pensaba que en cualquier momento me llenaría de leche.
• no pude más con tremendo placer, me estaba derritiendo por completo dentro de la vagina de mi abuela, cada vez las ganas de eyacular estaba más cerca, la tomé de la cintura y la jale contra mi cuerpo, perdí la razón al hacer eso, comencé a soltar grandes chorros de semen, fue increíble la sensación.
~ mi tesoro estaba cada vez mas intenso, me trataba con rudeza, al sentir sus manos tomando mi cintura sabía lo que iba a pasar, estaba por eyacular dentro de mi, mis piernas comenzaron a temblar, no podía controlarme, mi cuerpo empeso a llenarse con mucho lujuria, y por fin podía sentir sus chorros calientes de semen, me estaba llenando con lo que mas deseaba y no me controle y mi cadera se descontrolo, estaba convulsionando de placer.
~• nada nos calmaría esas oleadas de placer, era intenso y exquisito lo que sentíamos, nuestros cuerpos no se negaban al placer extremo que sentían
• estaba dejando toda la leche que tenía mis huevos dentro de mi abuela, era tan placentero tenerla sometida mientras inyectaba todo mi semen.
~ no podía controlarme, mi cuerpo y mis piernas temblaban y daba constantes espasmos, nunca sentí algo tan intenso, era tan delicioso que no quería que se termine, su semen caliente de mi nieto lo podía sentir muy dentro de mi, me enloquecía con arrechura, ya le pertenecía mi cuerpo le pertenecía a mi nieto, yo me sentía feliz de ser su mujer y que me dese de esa manera.
Al terminar el coito decidimos descansar por fin, ya era muy de madrugada, me aparte y de su coño salió disparado a borbotones todo mi semen, era un sonido erótico que me lleno de lujuria, mi abuela solo se estremecía diciendo hay!!! Hay!!!! Hmmm!!!
Me acurruqué entre sus tetas y me abrazo con ternura, me dio unos besitos y nos quedamos dormidos, al día siguiente despertamos sintiéndonos avergonzados por lo que pasó esa noche, no tenía cara para verla al rostro, estaba apenado, no entendía cómo pasó eso, era mi abuela me dio una especie de morbo que me hacía sentir apenado, mi abuela estaba igual pero ella controlaba mejor las cosas, luego hicimos vida normal y todos los días sentía que estaba más acaramelada conmigo, cuando sentí que pasó esa sensación tan extraña ya me sentía más en confianza.
Nuestra relación fue por buen rumbo, desde acá solo me faltaría un par de capítulos y estoy pensando en dejarlo así ya que en este resumen lo monte como no tienen idea, prácticamente los diez capítulos están en los dos resúmenes, de acá iré contando lo que íbamos viviendo, los días que fuimos tomando como un día de darnos cariño, ya pasó muchas horas pensando como ir relatando todo esto, me siento cansado y con hambre, tengo sueño y quisiera tomarme mi tiempo, si P! No me suspende seguiré con mi relato, de igual manera lamento tener mala práctica de la caligrafía, no soy escritor ni nada solo soy una persona común con un trabajo común, si desean comentar por favor háganlo en el primer resumen, ahí son libres de hacer críticas, preguntas y más...
Como verán me gustaría aclarar ciertos puntos antes de continuar con el resumen, ya que siento que todo lo que conté fue con eventos directos y sin saber su transfondo, de paso me estoy tomando el tiempo de redactar desde mi trabajo y espero que P! tenga la amabilidad para ver el contenido y examinarlo para ver si es apto para locochones que gustan de este contenido.
Aclarando algunos puntos:
• mi relación con mi abuela fue algo inesperado por no decir otras cosas, a mi llegada para vivir con ella apenas prestó vergüenza ante su intimidad ya que me sorprendió verla tan suelta utilizando prendas casi diminutas, su cuerpo era tan proporcionado que las cosas más simples se volvían diminutas como un short o una falda hacían resaltar mucho su cuerpo, pero de igual manera tuvo algo de recelo y solo por un tiempo corto utilizo cosas que no la hagan ver tan provocadora.
• como si fuera poco, no encontramos la forma que yo pueda tener mi propia privacidad y me refiero a una habitación separada, la casa de mi abuela era compacta y se fue llenando de muchas cosas de su época, baúles, camastros viejos y demás trastes ocupaban algunos ambientes que el abuelo fue amontonando ya que según tendría reparación en algún futuro, (gracias abuelo, a causa de eso pasaron cosas increíbles con la abuela).
• sin ver una salida a la problemática de mi privacidad y la de mi abuela decidió compartir la cama conmigo, no en el sentido erótico solo fue la manera de resolver las cosas para que al menos pueda descansar, asta ese momento yo veía a mi abuela como una mujer muy madura que si no estoy al pendiente de hacer mis obligaciones me retaria(regaño) y la pasaría muy mal, sentía que era una mujer más temible e imponente que mis propios padres.
• al establecerme en casa de mi abuela que la verdad vivía en un lugar apartado de la ciudad pero quedaba cerca de un pueblo, me fue incómodo al principio.
como dije mi abuela cuidaba poco el aspecto íntimo de su cuerpo, al principio si se cuidaba pero cuando pasó unas semanas el descuido era notorio, primero utilizo esos típicos camisones de vieja, la verdad no le quedaba tan mal, hacía resaltar su gran cuerpo, luego utilizaba una especie de ropa deportiva que utilizaba como pijama, esa si me gustó ya que sus curvas la hacían ver muy sexy pero creo que todo eso no le gustaba.
• después de todo eso, la primera noche que durmió en ropa interior fue que mi mente la vio por primera vez como mujer, aún no me picaba el bichito de la lujuria pero su cuerpo era increíblemente atractivo, casi se me salen los ojos al ver sus enormes tetas, y más aún verla por detrás, su gran culo era inexplicablemente lindo? No le podía apartar la mirada, y esa noche la pensé mucho, mi mente solo se llenaba de pensamientos perversos pero no eran pensamientos sexuales, más eran como pensamientos inmorales.
- como serán sus pezones?
- sus nalgas serán blanditas?
- le saldrá leche?
- podré abrazarla?
- le gustara acariciarse todo eso?
- como se bañara?
Yo era inocente, no veía el grado de magnitud que representaba el cuerpo de una mujer madura, mi bichito aún estaba dormido.
• luego se fue liberando y los descuidos fueron empeorando, utilizo una falda de tela y una sudadera muy delgada para dormir ya que aveces me quedaba mirándola y creo que se daba cuenta de la situación y por eso utilizaba esa clase de ropa para dormir, aún así no se daba cuenta que era imposible dejar de verla teniendo ese cuerpo descomunal, luego los descuidos ya eran naturales para ella, tengo un ejemplo:
- al ir a lavar ropa a la pileta de la casa la cual se sacaba agua bombeando de una palanca mi abuela utilizaba una especie de vestido que empezaba de su escote y terminaba por los muslos y su defecto era que cada vez que lavaba ropa solo se ponía esa clase de vestido sin nada debajo, se notaba sus labios carnosos de su vagina a través de la luz que transparentaba el vestido, cada vez que se agachaba para enjuagar la ropa se le notaba asta los pelitos, y le colgaba jodidamente sexy las tetas, luego de acabar con toda la ropa, se daba una pequeña limpieza y con ese mismo vestido se iba a dormir conmigo, desde entonces empese a alucinar con lo que tenia entre sus piernas y así mi bichito de la lujuria despertó.
• así fue que la primera etapa de conocer el cuerpo de una mujer se formó, ahora no pensaba en mi abuela como mi abuela, la pensaba como mujer al tener en mi mente las partes eróticas de su cuerpo, sabía que era mi abuela pero ella seguía siendo mujer y tenía un cuerpo tan sabroso que mi mente se descontroló y poco a poco comencé a tener fantasías eróticas con ella, pero aún no era fantasías sexuales eso lo desarrolle mas adelante, cuando ya pasó los meses para el año.
• en mi etapa de conocimiento cruce muchos límites del pudor y lujuria, le toque tantas partes de su cuerpo que al final me resultaba irresistible no hacer algo más, así pase al siguiente nivel donde mis dedos exploraban todo, y mi pene se ponía tan duro como la rama de un árbol, y no muy lejos de ahí, paso lo que tenía que pasar, le comencé a tallar mi verga por encima de la ropa, su enorme culo era mi deleite este tipo de actos lo hacía cada cierto tiempo, una o dos veces por semana, mayormente cada vez que utilizaba esos vestidos cuando se iba a lavar la ropa, como aún era inexperto no me daba cuenta que le podía frotar mi verga si solo le remangada un poco el vestido me di cuenta de eso más adelante, lo que si me gustaba era sentir su culote a través de la ropa, como era ropa delgada se sentía muy rico frotarse de ves en cuando.
• después de este tipo de actos mi lujuria se descontroló, y un día cualquiera me atreví a sacar mi pene para frotarme en su culo, ese día mi abuela dormía con una falda de tela y un calzón rosado y viejo, lo digo así por qué su ropa interior estaba tan suelto por el desgaste del uso, recuerdo que primero le puse la punta de mi pene sobre la falda y hundiéndolo le trataba de perforar a la altura de su ano, se sentía muy rico, pero luego queria sentir rico y estar cómodo, así que le remange un poquito la falda y le puse la verga en medio de su vagina, lo único que nos separaba del contacto carnal era la delgada tela de su calzoncito gastado por el tiempo, pero de igual manera si tuvimos contacto carnal, ya que sus enormes nalgas hicieron una especie de embutido con mi verga, ahora adivinen que faltaría para sentir un contacto de piel con piel al sien por ciento?
• así fue que aprendí a frotarme con su cuerpo y aprovechar sus descuidos, aún no podía cruzar ese límite que nos separaba de un contacto carnal de verdad, tenía miedo que se diera cuenta de lo que le hacía, pero como no veía alguna especie de señal que se daría cuenta seguí con mi travesura, con algo más de tiempo me di cuenta que sus calzones o short las podía bajar asta la mitad de sus nalgas y luego pellizcar el pliegue que va por la vagina y hacerla a un lado, al principio lo hice así, y puse mi pene en medio de sus piernas pensando que lo hacia bien, pero solo era una prueba y error, fui probando corde pasaba los dias en la cual podia disfrutar de esta manera, era tan estúpido que no me daba cuenta que lo podia hacer los días de lavar ropa, no se me cruzaba por la cabeza, aún!
• seguí haciendo mis intentos de conseguir placer a como de lugar, estaba segado por seguir sintiendo más y más, por conocer distintas sensaciones placenteras, luego me atreví a poner mi pene entre sus nalgas por encima del calzón así no tendría que jalar el pliegue que va por su vagina ya que estaba seguro que mi pene desnudo apartaría esa tela, y así fue pero aún seguía apuntando a su entre pierna, la cual era muy rico, más adelante me daba morbo por saber dónde se encontraba mi pene y con los dedos y muy lentamente exploraba la zona y me daba cuenta que le dejaba lubricado por los jugos pre seminales que salía de mi pene, le dejaba así entre las piernas y la parte que me interesaba estaba más arriba, me parecía lejos la distancia pero en realidad solo estaba a un par de dedos.
• no sabía cómo hacerle para llegar con mi verga asta su zona erótica(vagina), cada vez que intentaba acomodarme sus calzones me obstruían el paso, luego de tanto tiempo intentando por fin se me ocurrió hacerlo el día que se lava la ropa, ya que en una de esas vi a mi abuela lavar la ropa y traía un vestido que me gustaba y pensaba en mi mente sería genial si duerme con eso, ahí desperte y dije si va dormir con eso? Me saque de honda y dije si duerme con vestido cada ves que lavamos ropa, hay me sentí estúpido, perdí tanto tiempo sufriendo y luchando con sus calzones que no recordaba estos días, así que esperé pacientemente a la noche y si, al final durmió con el vestido y sin nada puesto debajo.
• esa noche fue mi noche esperada, nunca pensé que un contacto tan íntimo me haría enloquecer como nunca en mi vida, ahí estaba mi abuela, en toda la oscuridad de la noche, con ese ronquido entrecortado y con el sueño pesado, yo comencé a subir el vestido lentamente a la altura de su espalda, para no provocar algun movimiento que la perturbe de su sueño fui muy sigiloso, el contacto con la piel de sus nalgas era una maravilla, sentir toda su piel desnuda sin nada de prendas, sin un calzoncito que me obstaculice lo era todo en ese momento, luego de un paciente y delicado remange de prenda la tenia ahí, a mi merced, yo era como un perro hambriento en busca de carne, le calce las nalgas entre mi pelvis y era enorme, demasiado grande para mí pero eso no me iba a detener, sin pensar en nada más saqué mi pene erecto y la tentación era única, nervioso y tembloroso me fui pegando en ese enorme trasero y comence a buscar el contacto ideal de nuestras carnes.
• ya para concluir todo este jaleo y comenzar con la segunda parte de mis relatos perdidos les diré que estar en esa situación en la cual iba a descubrir nuevas sensaciones me hacía muy feliz pero a la vez no pensé en que pasaría más adelante, esa noche coloque mi pene muy cerca de su vagina y me frote entre sus piernas, me di cuenta por que con mis dedos acomodaba mi pene y aveces sentia que solo se manchaba con mi pre semen entre sus piernas y la parte que quería sentir estaba un poco más arriba, así cada oportunidad en los días que podia trataba de acercarme, con el tiempo la práctica me hacía cada vez más hábil, cada ves estaba más cerca de lograr mi meta, no voy a negar que solo me conformaba frotando mi pene entre sus piernas, era fantástico sentir tanto placer que provenía de mi verga friccionando entre sus carnes, pero aún no era lo suficiente como para desmayarme, aún no lo era.
• ya sin remediar más cosas, un día inesperado por fin pude probar ese manjar exquisito, por fin pude poner mi pene a la altura de su vagina y frotar sin control alguno, más tarde y me refiero a unas semanas después, ya podía disfrutar en manchar su vagina con las babas de mi pene, aveces se mojaba poquito y aveces se lubricaba todo esa carne q me gustaba osea sus labios vaginales, me encantaba cuando lograba mojar y empapar toda su vagina, no sabía que la estaba lubricando con sus jugos vaginales, siempre pense que era yo quien la mojaba con mi pene, tenía en mi mente bien claro, hoy si la voy a lubricar y le voy a frotar toda mi verga, así poco a poquito logré llegar asta el punto de querer penetrarla y desde ahí ya todo el cuento está en el primer resumen que hice, ahora sí sin mas remediar continuare con mi relato, lamento si está parte fue muy larga, esque cómo decía mis relatos eran muy largos y a detalle y pienso que haciendo esto se podrá entender todo lo que trato de contar.
Segunda parte del resumen de el incesto con mi abuela.
Nos quedamos en que por fin pude tener ese encuentro carnal que tanto deseaba tener, por fin pude lograr tener sexo con mi abuela, esa primera vez nunca lo voy a olvidar, es mi recuerdo atesorado, lo hicimos tan mal que fue tan bueno a la vez, después de eyacular como un ser delicado no recuerdo muy bien que pasó entonces, solo sentí muchísimo placer que sentía que me asfixiaba y que a la vez se me salía todo, como si estuviera orinando con fuerza, era como expulsar chorro a chorro, no sabía que eso era eyacular, pero eso que hacía mi cuerpo me hacía ir al cielo, sentía que flotaba en las nubes y que todo era multicolores, todo eso podia ver a pesar de estar en completa oscuridad, no veía nada, pero mi cuerpo y mis manos lo sentían todo, la poco rato me quedé dormido desde ahí no tuve ganas de hacer algo parecido por qué sentia temor que mi abuela me tenga rencor, sentí que hice algo muy malo pero no podíamos estar asi todo el tiempo.
En esta parte fue donde conté las experiencias que tuvo mi abuela conmigo, trataré de escribirlo lo más corto posible:
acá expliqué por qué mi abuela hacia el resto de cosas y luchaba para que yo no logré mi cometido y de las mismas palabras de ella podría decir que fue lo siguiente...
~ abuela: me sentí feliz de poder volver a tener a alguien que me haga compañía, y uno de mis primeros nietos fue que lo trajeron para mí, este muchacho era problemático pero cuando llegó se veía muy indefenso y tímido, no pensé que fuese un problema, pero luego sucedieron muchas cosas, trate de darle su espacio pero solo podíamos compartir la cama para descansar, cometí un error terrible, debí separar nuestros lugares de descanso.
~ no me daba cuenta de las cosas que ocurrían por las noches, yo soy una mujer que estuvo mal de salud y con el tiempo eso me pasó factura, mi cuerpo se sentía agotado que lo único que me reponía era descansar profundamente, así fue que un dia sentí algo inquietante pero no le di mucha importancia, pense que mi tesoro estaba incomodo a mi lado pero mas adelante otras eran las cuestiones.
No tarde en darme cuenta que mi vida estaba al pendiente de mi cuerpo, me tocaba y me daba besitos en lugares donde me ponía nerviosa, pensé que era por el cariño de su parte y esto lo hizo por mucho tiempo, eso me gustó tanto que me fui acostumbrando a que sea cariñoso pero luego su cariño se convirtió en tormento, me tocaba las bubis y frotaba con sus manos parte de mi trasero al principio lo iba a detener pero solo fue delicado conmigo y pensé que se calmaría por si solo y lo deje hacer sus cosas y volví a recobrar el sueño, con el tiempo mi dulzura empezó a portarse mal y trataba de quitarme la ropa interior de mi cuerpo y sentía miedo en detenerlo y decirle un no! Como respuesta, no lo quería asustar, pero esas decisiones fueron mi peor error, mientras más tiempo pasaba peores cosas me hacía, asta que sentí su trozo de carne en mis nalgas, me puse muy nerviosa y sentia una presión muy fuerte en mi pecho, mi corazón palpitaba a mil por hora, estaba asustada de lo que pasaría, pero me estaba armando de valor para detenerlo con rudeza si hacía falta.
~ no pensé que las cosas que estaba por hacer me congelaría la sangre de mi cuerpo y me quedaría perpleja ante la situación, mi vida estaba tratando de hacer cosas de adultos, era algo que siempre me ponia nerviosa, sentir su carne entre mis piernas era lo mas estresante que podía aguantar, cada noche le pedia al de arriba que pare por piedad, pero no parecía que se detendría, así que tendría que intervenir si algo fuera de lugar lograse pasar, con los días no se atrevía hacer nada, solo sentía que me utilizaba para descubrir estás cosas que a los de su edad les interesaría, era lo que suponía en aquel entonces.
~ me fui acostumbrando a que esté tras mia haciendo sus travesuras, en algún punto me parecía lindo volver a sentir un hombre tras mío, "un hombre como tal" era extraño que no me cause alguna especie de enojó hacia el, tal ves lo quería mucho como dejar permitir tal aberración, eso fue otro de mis errores, me sentia sola, mi marido se me fue y lo que me consolaba y me unia a mi lindura era que compartíamos la misma sangre, tal ves eso me hacia cambiar de opinión al momento de soportar sus locura, más tarde sus atrevimientos fueron más consecuentes y con más agresividad, sentía que en cualquier momento seria atravesada por su trozo de carne que ya lo sentia cerca de mi conejo.
No sabía qué hacer, no quería estropear todo esto, mi mente se llenaba de muchas cosas que me tenían dudosa de lo que tenía que hacer, cuando pasó la cuestión, el día que se atrevio a penetrar mi conejo me asusté mucho, me altere y pasó algo terrible que no me gustaría recordar, luego de eso sentí mucha culpa, fue mi culpa por permitir llegar asta está situación, no sabía cómo enmendar mis actos, lo veía todo indefenso, lo quería abrazar y consolar entre mis brazos, se que le gustaba mis pechos y trate de darcelos sintiendo muy dentro de mi remordimientos ya que no debería hacer esas cosas, pero me sentía confundida, no sabía lo que estaba haciendo, cuando vi que se veía mejor decidí dejar de darle consuelo y trate de volver a la situación en donde estábamos, era mejor eso a que el no quiera seguir más a mí lado, me daba miedo volver a quedarme sola.
~ luego mi querido nieto volvió a tener la confianza de tocar mi cuerpo y eso me calmo un poco, pero luego busco la situación en la que estábamos la última vez y yo me dejaba pero muy dentro de mi estaba nerviosa, no quería malograr nuestra relación de familia, pensaba mucho que eso sería un gran error y cada vez que sentía que se propasaría intentaba escapar de el, lo intenté muchas veces pero mi cuerpo ya no podía aguantar, no tenía las fuerzas que tenía antes, así que decidí pensarlo mejor y le puse reglas para que no pase más cosas, y así fuimos insistiendo y cada vez mi mente se adormecía más, no podía pensar con claridad, solo trataba de no cometer otro error, pero no pude ya estaba sintiéndome derrotada, que mi nieto tome mi cuerpo no me parecía mala idea, entonces estaba decidida que me haga lo que le plazca, total esto solo será entre nosotros y nadie más, cuando estuve decidida y preparándome mentalmente para ceder mi nieto ya no me volvió a tocar, fue extraño, estaba más confundida aún, que pasó? Cambio de opinión? Ya no me quiere? Hice algo malo? Mi cuerpo es desagradable? Pensaba un montón de cosas y veía como empeso hacer su vida normal, cada noche ya no intentaba tocarme, que le pasó? Quería preguntarle que le pasó? Pero estaba aterrada y confundida.
~ no quería que se aleje de mi, no quería estar sola, no me importaba nada, solo quería estar bien con mi nieto, desde entonces comencé a pensar mucho sobre nosotros, y cada noche estaba más convencida en darle mi cuerpo a mi nieto pero no sabía que más hacer? Si dormía con ropa provocativa tal ves vuelva a tocarme? Fue lo que pensé!
Entonces comencé a dormir cómodamente utilizando todo tipo de prendas, pero nada lo convencía, me enoje mucho y lo tomé entre mis brazos para tenerlo cerca de mi, tampoco quería tocar mis bubis, algo estaba mal, decidí dormir sin brasier y como que le gustaba poner su cabeza entre mis tetas pero eso y nada más, ya me sentía derrotada, no sabía lo que me estaba pasando, estaba sintiendo de nuevo esa presión en mi pecho que no me dejaba tranquila.
~ llegué a pensar que tal vez el ya se fijó en otra mujer, tal vez más bonitas y llenas de vida o alguna como yo, como se iba al pueblo a hacer sus obligaciones esas ideas me destrozaban por dentro, no me daba cuenta que estaba celosa y llena de rabia, quería recuperar a mi lindura a mi amor, me decidí entonces que esa noche sería la última que haría algo tan atrevido y me acosté desnuda a su lado, el sabía cómo estaba y lo provoque con mi trasero, al final si cayó y me sentí alegre, quería sentir su cuerpo y sobre todo su trozo de carne, y no dudé en hacer todo lo que sus manos y su cuerpo me iban hacer, estaba esperando el momento, y lentamente se acomodaba, asta me puse nerviosa cuando se quitó la ropa, no sabía cómo dejar mi cuerpo, pero cuando sentí sus calidas manos no dudé en ser dócil y sumisa, me acomodó varias veces mi cola, y en una de esas senti que me atravesaba con su verga, y se quedó inmóvil, yo intente animarlo pero su pene se salió de mi conejo, yo quería que sea mas rudo conmigo, quería todo de él, incluso su leche, mi mente ya estaba frita, solo tenía los deseos por delante, quería tenerlo dentro de mí y que este lo más profundo posible, y así me volvió a acomodar la cola y está ves creo que si estaba en una pose correcta, doble mis piernas para no causarle incomodidad y de la nada volví a sentir que me atravesaba con su verga, estaba muy excitada para pensar en otras cosas, en ese momento todo tipo de problemas desapareció de mi cabeza, y así empujando un poco mis nalgas mi cielo hermoso tomo valor y empeso a cogerme, torpemente pero me cogía por que sentía como se friccionaba su pene dentro de mi conejo, era lindo sentir otra ves algo de placer, asi subimos la intensidad y al final mis nalgas se estrellaban delicadamente en su pelvis, era hermoso muy hermoso, era lindo mi precioso, me estaba dando su felicidad, asta que sentí sus empujones de pelvis y ya me di cuenta que estaba por terminar así que puse firme mi cola para que deje todo su amor dentro de mi, así terminé agotada y llena de su caliente leche, al poco rato sin darme cuenta me sentí agotada y me quedé dormida de felicidad...
Volviendo al momento de todo esto, pues lo que dijo en alguna ocasión lo trate de plasmar de puño y letra aún que algunas cosas sonaban diferentes pero así fue como se describió.
Luego de ese encuentro cárnico no volví a pensar en sexo otra vez, bueno no asta unos días, miré a mi abuela y su rostro estaba lleno de confusiones, pero igual tratamos de salir de esos pensamientos negativos, después de algunos días ya estaba activo otra vez y lentamente volví a pensar en mí abuela, la quería mucho, la abracé y le di todos mis sentimientos, la ayudaba en todo lo que necesitabas, limpiaba y lavaba las cosas junto a ella, le alcanzaba muchas cosas, le acompañaba en todo, trate de ser un buen muchacho para ella después de lo que hicimos esa noche, pasaron los días y todo volvió a ser casi normal solo que está ves mi abuela me trataba con más cariño, algo así como el amor de una mujer a un hombre, ante sus ojos aún seguía siendo su nieto, pero en sus sentimientos ya era algo más que solo eso!
No pasó mucho días cuando nos volvimos a acurrucar en la cama, me sentía nervioso y con algo de temor pero al tocar a mi abuela está no se negó y me acarició para hacerme sentir mejor, así pude tocar su cuerpo de nuevo y lentamente buscaba la manera de provocarla, todo esto era repentino, no sabía lo que pensaba mi abuela solo seguí a mis instintos que me volvía a exigir placer otra vez, tenía miedo de que me vea como un mañoso, un pervertido sin remedio pero no me decía nada, solo comencé a acariciar tal vez así no me vea como yo pensaba que lo hacía, lejos de eso mi abuela comenzó a calentarse poco a poco yo no lo notaba recuerden que aún era inexperto y no sabía leer las expresiones corporales de una mujer.
Pensamientos individuales de nosotros:
• toque varias partes de su cuerpo y volví a explorar zonas eróticas, llegando a acariciar la vulva de su vagina, cada vez mis deseos de poseerla era más fuerte, y con cada paso que bada estaba muy cerca de mi meta.
~ mi amor hermoso volvió a tocar mi cuerpo, pensé que ya no volvería a hacerlo pero me alegro mucho que después de varios días lo vuelva hacer, me sentía convencida de que solo íbamos a tener intimidad una sola vez, por qué pasaban los días y no me tocaba solo estaba cerca de mi ayudándome en todo lo que podía, cada vez que lo tenía cerca me sentía nerviosa y no sabía si está ves irían bien las cosas? Podía sentir sus caricias en todo mi cuerpo, me hacía estremecer, algo que nunca sentí antes, cuando llevaba sus manos cerca de mi conejo me dolía la cabeza pero no era un dolor real sino, era un dolor de que no podia pensar con claridad, estaba feliz pero a la ves confundida, sus caricias cada vez me ahogaba y no me dejaba pensar en nada, solo quería que lo que pasase termine lo mas pronto posible.
• mi abuela estaba muy callada pero no me decía nada si tocaba algo de más, así comencé a acariciar su cuerpo y lentamente le fui quitando la ropa, primero lo de arriba y no oponía resistencia se dejaba, luego le quite lo de abajo y así asta dejarla desnuda, luego la bese por todos lados por qué sentí que debería hacerlo, mientras besaba y acariciaba su vagina, quería prepararla para frotarle mi pene, después de un rato me propuse a cogermela.
~ mi precioso, mi amor estaba fuera de control, me dejó desnuda que por los nervios no pude hacer nada, simplemente me dejé llevar, lo que me dejó así fue que me este dando cariño en todo momento, algo que nunca sentí en mi vida, era especial ese momento, me besaba mucho y me acariciaba mi conejo que fue lo que más me gustaba que haga, cada vez sentía mucho calor en mi vientre, estaba completamente segada por la lujuria, y en unos momento mi libido se elevo más cuando sentí que se quitaba la ropa, estaba súper nerviosa pero con una felicidad que recorría cada rincón de mi ser, sabía lo que iba a pasar así que espere a que mi nieto amoroso haga el resto del trabajo, yo no quería malograr ese momento especial que me hacía sentir una mujer completa y la más dichosa del mundo.
• nunca pensé que volvería a probar el placer con mi abuela, ella estaba callada que supuse que no abría problema alguno en seguir adelante, se dejó desnudar y eso ya era prueba irrefutable de que si quería que pase lo que más adelante íbamos a hacer, seguí acariciando y besándola por qué sentí que eso era lo correcto, mi instinto me guiaba en cada momento, era como si supiera que eso se debería de hacer, yo sólo no debería sentir esas ganas, si no que mi abuela también debería sentirlo, así que con algo más de caricias y besos me acurruqué detrás de ella y comencé a frotar mi verga en su vagina.
~ mi querido cielo, mi amor y mi vida me hacía sentir especial, sus caricias eran insistentes, no dejaba de tocar con sus dedos varias partes de mi conejo, aún que era torpe me hacía sentir muy bien, luego de estar dándome caricias excitantes me excite mas aún cuando se me pegó detrás y puso su trozo de carne entre los labios de mi bajina, mi cuerpo se puso tenso pero trate de pensar en que eso sería un momento especial y me soltaba para no causar incomodidad.
• ya no podíamos resistir más.
~ ya no podíamos resistir más.
• deseaba penetrarla con todo mi ser.
~ deseaba tenerlo dentro de mi pero ya!
• me perfile para luego penetrarla lentamente.
~ sentí como me atravesaba de delicioso el conejo.
• muy lentamente comencé a menear mis caderas tal como mi abuela me lo enseñó.
~ empeso a tallarme por dentro, mi amor hermoso por fin me hacía sentir mujer otra vez.
• sentí que nuestros cuerpos compatibilizaban a la perfección ya que cada bombeo era divino, mi pelvis encajaba tan bien en sus nalgas que cada vez me emocionaba más y más.
~ me sentía completamente fuera de esta realidad, podía sentir como el pene de mi nieto lindo se abría paso dentro de mi conejo, se sentía delicioso volver a sentir placer, por más que parezca mal lo que voy a decir yo quería sentir más de ese delicioso y carnoso pene.
Cada vez nuestros cuerpos pedían más placer, tanto yo como mi abuela dábamos todo nuestros sentimientos en este momento tan maravilloso, sentía que era un suertudo al poder tener sexo con mi abuela, este encuentro íntimo era más especial que la primera vez que lo hicimos, aun que recuerdo más la primera vez está siento que fue la más especial, acá liberamos nuestros sentimientos sobre todo mi abuela, no nos dimos cuenta que rompimos las reglas del pudor y la cordura y cometimos incesto, aún así me entrego su cuerpo para complacerme a voluntad, desde acá podía hacer todo lo que me plazca pero nunca lo hablamos así que yo solito me puse mis limites sin saber que no avía límites, ya me entenderás más adelante, sigamos con los pensamientos personales de cada uno, que me párese que es mejor así a que estar recortando parte por parte que es lo que hice en mis antiguos relatos.
• no podía contenerme ante tanta lujuria, pronto nuestras partes íntimas se sumergieron en un mar de sentimientos, me refiero a que nuestros jugos corporales empezaron a mezclarce dentro de mi abuela y a causa de los bombeos constantes se fueron saliendo por el borde de nuestro penetrante placer.
~ mi cielo hermoso hizo que mi conejo babeé de placer, podía sentir como se me salía mis jugos internos en cada embestida que me daba, era una maravilla, sentía que solo podía ser la mujer de mi nieto y de nadie más, no quería pensar en nada, ni el pasado en nada, solo podia sentir como entraba y salía la verga de mi querido encanto, cada vez me sentía más mujer, pero no una mujer realizada si no, la mujer de mi nieto, yo queria que este momento nunca se terminara, pero la realidad es diferente.
• no pensé que mi abuela sería tan ardiente en la cama, si tan solo desde un principio hubiésemos llevado bien las cosas ya abríamos disfrutado mucho más antes.
~ que delicioso se sentía tenerlo dentro de mi, aún que sabía que estaba mal no podía dejar de sentirme excitada y libidinosa, estaba deseosa de que me vuelva a llenar con su cálido semen, lo quería y lo deseaba cada vez más, mi cuerpo empeso a arder en llamas.
• en un momento de arrebato comence a sentir los empujones de nalgas que hacía mi abuela, se estaba excitando demasiado que estaba llegando al clímax, no se que pasó en verdad, tampoco tenía la verga tan grande como para hacerla entrar en éxtasis, pero bueno, se sentía rico verla así, meneando la cola para provocar mi eyaculación.
~ estaba deseosa de que me eyacule dentro de mi conejo, solo quería su semen y nada más el resto no me importaba, yo me sentía más excitada al saber que mi propio nieto me iba a eyacular en la vagina, eso me tenía ardiente, estaba desesperada, me lo quería comer enterito, los pulsos de mi corazón estaban muy fuertes, pensaba que en cualquier momento me llenaría de leche.
• no pude más con tremendo placer, me estaba derritiendo por completo dentro de la vagina de mi abuela, cada vez las ganas de eyacular estaba más cerca, la tomé de la cintura y la jale contra mi cuerpo, perdí la razón al hacer eso, comencé a soltar grandes chorros de semen, fue increíble la sensación.
~ mi tesoro estaba cada vez mas intenso, me trataba con rudeza, al sentir sus manos tomando mi cintura sabía lo que iba a pasar, estaba por eyacular dentro de mi, mis piernas comenzaron a temblar, no podía controlarme, mi cuerpo empeso a llenarse con mucho lujuria, y por fin podía sentir sus chorros calientes de semen, me estaba llenando con lo que mas deseaba y no me controle y mi cadera se descontrolo, estaba convulsionando de placer.
~• nada nos calmaría esas oleadas de placer, era intenso y exquisito lo que sentíamos, nuestros cuerpos no se negaban al placer extremo que sentían
• estaba dejando toda la leche que tenía mis huevos dentro de mi abuela, era tan placentero tenerla sometida mientras inyectaba todo mi semen.
~ no podía controlarme, mi cuerpo y mis piernas temblaban y daba constantes espasmos, nunca sentí algo tan intenso, era tan delicioso que no quería que se termine, su semen caliente de mi nieto lo podía sentir muy dentro de mi, me enloquecía con arrechura, ya le pertenecía mi cuerpo le pertenecía a mi nieto, yo me sentía feliz de ser su mujer y que me dese de esa manera.
Al terminar el coito decidimos descansar por fin, ya era muy de madrugada, me aparte y de su coño salió disparado a borbotones todo mi semen, era un sonido erótico que me lleno de lujuria, mi abuela solo se estremecía diciendo hay!!! Hay!!!! Hmmm!!!
Me acurruqué entre sus tetas y me abrazo con ternura, me dio unos besitos y nos quedamos dormidos, al día siguiente despertamos sintiéndonos avergonzados por lo que pasó esa noche, no tenía cara para verla al rostro, estaba apenado, no entendía cómo pasó eso, era mi abuela me dio una especie de morbo que me hacía sentir apenado, mi abuela estaba igual pero ella controlaba mejor las cosas, luego hicimos vida normal y todos los días sentía que estaba más acaramelada conmigo, cuando sentí que pasó esa sensación tan extraña ya me sentía más en confianza.
Nuestra relación fue por buen rumbo, desde acá solo me faltaría un par de capítulos y estoy pensando en dejarlo así ya que en este resumen lo monte como no tienen idea, prácticamente los diez capítulos están en los dos resúmenes, de acá iré contando lo que íbamos viviendo, los días que fuimos tomando como un día de darnos cariño, ya pasó muchas horas pensando como ir relatando todo esto, me siento cansado y con hambre, tengo sueño y quisiera tomarme mi tiempo, si P! No me suspende seguiré con mi relato, de igual manera lamento tener mala práctica de la caligrafía, no soy escritor ni nada solo soy una persona común con un trabajo común, si desean comentar por favor háganlo en el primer resumen, ahí son libres de hacer críticas, preguntas y más...
3 comentarios - 2do resumen del incesto con mi abuela