Sofi, muñeca sexual

Sofi, muñeca sexual
Después de esa noche, pareciera que Edu se había mudado con nosotros, no me sorprendía mucho llegar del trabajo y encontrarlos follando como animales, incluso recibía llamadas de alguno de los dos y solo se escuchaban los gemidos de la puta o las palabras "humillantes" que el le decía, también se hizo costumbre que ella llevará todo el día los agujeros con vaselina, pues nunca sabía cuándo se le ocurriría a mi hermanito cogersela sin calentarla, directamente le abría las nalgas o las piernas y sin más, la empalaba a fondo, muchas veces ya dormidos, Edu la destapaba y de pie junto a la cama, se jalaba la verga observando las nalgas de su puta cuñada, al límite del orgasmo, encajaba el glande en cualquier hoyo, eyaculaba y se marchaba sin más, en efecto fueron semanas completas dónde cualquier lugar de la casa servía para un polvo, incluso a la hora de la comida, mientras ella servía la comida, la hacía sentar sobre el, lo cabalgaba un poco y seguía con sus tareas, otras tantas no la dejaba probar bocado, mientras el y yo platicábamos y comíamos ella mamaba su verga.


Solo recordarlo me pone nostálgico ja ja en la actualidad son muy pocas veces al año las que Edu nos visitaba, ahora, mis lectores, pasamos bruscamente de los inicios en la puteria de Sofi a hechos más actuales, buscando maneras distintas de compartir a la zorra, encontré distintos videos sobre dogging, en otros países incluso hay lugares específicos donde los esposos llevan a las putas de sus mujeres para que extraños les den sus buenas cogidas, he leído incluso que tienen chats donde se ponen de acuerdo para tales encuentros, lamentablemente aquí en México, precisamente en la zona donde vivimos, no existen aún, dichos lugares, así que improvisando un poco y arriesgando bastante, una noche cualquier, pase por ella a casa después del trabajo, horas antes le envié mensaje pidiéndole que se pusiera falda de vuelo y blusa escotada sin ropa interior, que tenía una fantasía y que no preguntara nada, subió al auto y me agrado mucho la vista, así que con bastantes nervios, conduje sin rumbo mucho rato, saque de la guantera la dichosa bufanda con la que impedía su visión, ella misma se la colocó, recliné su asiento y le dije que se hiciera la dormida, esa noche, solo unos cuantos tuvieron la fortuna de mirar sus tetas de cerca , ya que al ver a algún fulano solitario, me emparejaba con el y le pedía que me indicaran tal o cuál lugar y a pesar de que les hice señas de que tocaran, ninguno se atrevió, hacer que funcionará medianamente bien, requirió de muchas salidas, las que me dejaron un poco de experiencia para completar con éxito mi plan, incluso llegue a repostar combustible con las gomas de la zorra al aire para ver si algún despachador se agarraba la propina en especie, pero los tontos solo sonreían de manera estúpida y se negaban, tras muchísimos intentos fallidos el los que apenas un par de ebrios en distintas calles, si que le tocaron las tetas y uno de ellos, hasta la concha le sobó, harto de no cumplir con el objetivo recurrí a telegram y sus grupos de deprave locales, en los cuales expuse mi fantasía y ahí si que no faltaron voluntarios, así en varias ocasiones disfrute de las vistas que me obsequiaba mi zorra, distintos hombres manosearon sus tetas, disfrutaron de sus labios y dejaron toda la leche en el paladar de la zorra, los que no, elegían terminar sobre sus piernas y otros sobre los globos, no paso mucho cuando en los mismos grupos, los mismos integrantes que ya habían tenido su oportunidad, pedían meterle la verga, diciendo que no les importaría cogersela a media calle de ser necesario, ni siquiera le pedí su opinión, la próxima vez que la lleve, el contá de ese día, abrió la puerta de su lado para darle su mamila, mientras una mano tocaba lo que podía, al poco, retiró su herramienta y procedió a separar sus muslos, ahhhh puta, estás empapada, en efecto los dedos que hurgaron bajo la falda, brillaban con la poca luz de una lámpara lejana, pedazo de puta, te voy a llenar de verga, la jalo de las piernas quedando atravesada en el asiento, se acomodo entre ellas hizo a un lado la tanga y la penetró, Sofi solo gemía, toma puta toma, te voy a dar la leche, por privado, había acordado con el que se la podría coger pero no llegar dentro, pero la realidad fue muy distinta, la perra le decía que no, que no se corriera en ella, pero tanto a él como a mí nos importo bien poco y entre insultos, se vacío completo en su interior, de regreso a casa, la golfa no me habló para nada y pensé que se terminarían las aventuras, pero no, apenas guardar el auto, se puso en cuatro sobre el asiento y me dijo, ven aquí cornudo, mezcla tu leche con la de ese bastardo... No puse peros, me la cogí y le hice limpiar mi verga empapada de leche mezclada, así de tanto en tanto, contactaba a algún miembro del grupo, incluso a dos al tiempo quienes se la cogía de lo lindo, unos a pelo otros con el respectivo condón, pero sin duda, las más exitantes fueron las más recientes, con la llegada de cientos de ahitianos al país, la boca, concha y ano de mi puta, recibieron carne negra y leche extranjera a más no poder.



Ya les contaré otras aventuras con tremenda puta.

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