El zorro de Kumo

La Tercera Guerra Mundial Shinobi había terminado hace mucho, pero incluso hoy en día las secuelas de ese conflicto se pueden ver en todo el mundo. Hace muchos años, Kushina Uzumaki de Konoha había sido capturada por agentes de Kumo, le lavaron el cerebro y la transformaron en la zorra más guarra, lasciva y sucia que cualquiera de las cinco aldeas Shinobi había visto. Su hijo, de padre desconocido (había bastantes candidatos) fue uno de los Shinobi más poderosos de su generación, pero eso fue sólo el comienzo de su naturaleza prodigiosa. Como muchos hombres de Kumo, estaba bien dotado y gracias a una peculiaridad de la genética de Uzumaki, así como a las modificaciones realizadas a la propia Kushina y la influencia del Zorro de Nueve Colas, era el macho alfa indiscutible, un superdepredador que había elegido hoy para consolidar aún más su estatus.

Naruto era muy conocido entre los Kumo (no había muchos hombres rubios en la aldea, para empezar), pero algo menos conocido en el resto del mundo. Las misiones a las que asistía tendían a ser de naturaleza más tranquila, ya que Kumo consideraba que sus talentos reproductivos únicos y su fuerza eran una especie de arma secreta, que no debía desplegarse abiertamente excepto en las circunstancias más espantosas. De pie unos centímetros más alto que seis pies y cubierto de músculos ondulados y cordosos que parecían tallados en piedra, Naruto tenía una figura impresionante, su piel unos tonos más clara que la del hombre Kumo promedio, aunque pocos habrían adivinado quién era su madre. era si no hubieran escuchado las historias. Algunas de las mujeres de Kumo estaban convencidas de que Naruto era único en su especie y que sus posibles padres (probablemente A o Killer 😎 nunca más podrían engendrar un hijo como él.

Como resultado de todo esto, Naruto generalmente estaba demasiado ocupado para las misiones tradicionales Shinobi y demasiado importante para cualquier cosa de mayor riesgo. Las posibilidades de que sus hijos nacieran con reservas de chakra y un potencial natural incluso cercano al suyo fueron suficientes para que el Raikage y otros líderes importantes de Kumo dejaran felizmente a Naruto pasar sus días persiguiendo su próxima conquista sexual. En lo que a Naruto concernía, ese era un arreglo perfecto y le dejaba mucho tiempo para concentrarse en sus propios intereses, y hoy iba a ser uno de sus logros de los que estaría más orgulloso hasta el momento. Tenía una mujer interna en la aldea de Konoha, manteniéndola interesada en él pero sin seducirla todavía, ya que probablemente sería inútil después con lo destrozada física y mentalmente que la enorme polla negra de Naruto y su resistencia infinita la dejarían. En cambio, Naruto decidió matar dos pájaros de un tiro.

Habían pasado varios meses desde que Naruto conoció a Anko, una de las mujeres más guarras y masoquistas hambrientas de pollas que jamás había conocido, lo cual era decir algo. Anko había estado trabajando para Kumo desde hacía algún tiempo, desde que su maestro Orochimaru dejó Konoha y viajó a Kumo. Algunos de sus jutsu y otras técnicas habían sido fundamentales para inventar la tecnología de modificación, por lo que se le permitió quedarse por un tiempo, mientras que Anko se había vuelto bastante adicta a los hombres bien dotados (y a más de unas pocas mujeres) de Kumo. Ella optó por cambiar sus lealtades y había sido un agente doble desde entonces, como probablemente se la vería de rodillas en uno de los muchos burdeles de la aldea de Kumo mientras pasaba mensajes importantes sobre los movimientos de Konoha a los shinobi de Kumo.

Hoy, Anko iba a ayudar a Naruto a obtener acceso a la mismísima Hokage, una de las mujeres más deseadas de todo el mundo y especialmente a Kumo, la mismísima Sucker Legendaria, Tsunade de las Senju. La rubia tetona había estado con muchos hombres a lo largo de los años, incluidos el Raikage y Killer B, pero ninguno de ellos había podido domesticarla… hasta ahora. El plan de Naruto era romper completamente a Tsunade en su polla, y a Anko también, antes de traerlos de regreso a Kumo para realizar modificaciones y convertirlos a ambos en miembros permanentes de su harén en constante crecimiento. Sin embargo, Tsunade no era tonta y no pondría un pie en Kumo sin algunos guardias obvios e incluso más ocultos, por no hablar de sus propias habilidades para anticipar y lidiar con amenazas. Afortunadamente, Naruto no era conocido tanto por su sutileza como por su franqueza: tenía un plan para conseguir lo que quería y lo llevaría a cabo hasta el final.

Entonces, en un pequeño asentamiento en algún lugar de territorio neutral, Tsunade había acordado reunirse con Naruto en un hotel privado. La reunión había sido organizada por Anko, quien a menudo ayudaba a Tsunade en tales asuntos, sin saber que Anko estaba completamente del lado de Naruto, ya que le habían prometido que Naruto finalmente le daría la puta vida de la pequeña zorra del dolor como siempre lo había hecho. buscado. A partir de ahí, Naruto simplemente confiaba en sus propios talentos naturales, además de todo lo que sabía sobre Tsunade, especialmente que ella tenía una libido que igualaba o superaba incluso a la más cachonda y modificada de todas las mujeres de Kumo. Para Naruto, quien descubrió que incluso las mujeres con mayor resistencia en Kumo finalmente no eran rival para él, esto simplemente hizo que Tsunade fuera un premio más digno de tener.

"Por aquí, Hokage-sama". Dijo Anko, inclinándose profundamente mientras abría la puerta de la sala de conferencias, ubicada en el segundo piso más alto del hotel. Tsunade estaba justo detrás de ella, observando atentamente el interior: muchos muebles lujosos, sofás, amuletos cómodos, etc., algunas mesas y sillas de madera, y una hermosa vista del entorno algo monótono proporcionada por una gran cantidad de pisos hasta el techo. ventanas. Nada que pareciera fuera de lo común o motivo de preocupación.

“Entonces, ¿qué has aprendido sobre este hombre de Kumo, este… Naruto? Hmm, ¿no tiene apellido?

Anko se inclinó de nuevo, poniendo cara de disculpa, mientras que por dentro no podía esperar a que Tsunade consiguiera lo que se merecía. Tsunade apenas le prestaba atención, vestía su atuendo habitual, tan apretado alrededor de la cintura que la figura normal de reloj de arena de Tsunade se exageraba aún más.

“Es algo desconocido y supuestamente no tiene apellido porque nadie está seguro de quién es realmente su padre. Algo acerca de que su madre era toda una… yegua de cría, era el término”. Anko no pudo evitar reírse ante eso, mientras Tsunade simplemente levantó una ceja perfectamente depilada, lo que provocó que Anko continuara.

“Bueno, en la semana desde que lo conocí y observé sus movimientos, escuché muchos rumores sobre él. Incluso entre los hombres agresivos y obsesionados con el sexo de Kumo, Naruto es considerado todo un toro y domina a todas las mujeres que conoce. Supuestamente, su madre es Kushina Uzumaki, la kunoichi perdida hace mucho tiempo, y por eso, Naruto es el actual Jinchūriki de las Nueve Colas. Por lo que tengo entendido, aunque Naruto tiene más de unas pocas mujeres en Kumo totalmente adictas a su pene y sus habilidades sexuales, en lo que realmente sobresale es en convertir a mujeres de otras aldeas para que se sometan a Kumo”.

Que es exactamente lo que me pasó a mí, Anko no añadió. ¿Y qué va a pasar contigo , oh engreído Hokage-sama?

“Así que hay muchos rumores y rumores. ¿Eso es todo, después de una semana entera? Dijo Tsunade, dando vueltas en un pequeño círculo en la habitación. Sus agudos sentidos no detectaron nada inusual, pero Tsunade todavía estaba alerta. Miró a Anko rápidamente, pero aparte de usar nada más que su traje de malla y falda, habiendo abandonado su abrigo habitual, la kunoichi especial parecía la misma de siempre: demasiado ruidosa y demasiado emocionada.

Tsunade, por su parte, se consideraba la imagen perfecta de belleza y modestia juntas, a pesar de que una respiración profunda podía hacer que la parte superior de su bata se abriera y revelara sus enormes y perfectamente redondas tetas en todo su esplendor. Tsunade sabía que era la envidia de las mujeres en todas partes y el objeto del deseo de los hombres, con sus pechos gordos y pálidos, cada uno del doble del tamaño de su cabeza, y su bata lo suficientemente corta como para casi hacer que sus pezones se salieran. Pantalones oscuros ajustados estaban prácticamente pegados a sus ágiles piernas, y aunque Tsunade nunca más salió al campo, todavía estaba tan apretada y esbelta como una mujer varias décadas más joven que su verdadera edad, gracias a algún Jutsu de su propia invención. Combinado con un maquillaje de buen gusto (aunque Anko podría decir "zorra") y un par de sandalias de tacón alto que solo acentuaban aún más las piernas de Tsunade y su enorme y alegre trasero de burbuja, Tsunade estaba bastante segura de que sería capaz de envolver a este Naruto a su alrededor. dedo meñique sin mucho esfuerzo.

Finalmente, se burló, enfrentándose a Anko y mirando esos extraños ojos marrones, sin duda el resultado de los retorcidos experimentos que Orochimaru había realizado con ella.

“Entonces él es sólo un mocoso que piensa con su pene. Kumo ya tiene muchos de esos, pero si incluso a un Jinchūriki se le permite correr como un adolescente aturdido por las hormonas, entonces no debería preocuparme mucho por sus posibilidades. Es cierto que algunas de las otras aldeas han informado de desapariciones y todavía extrañamos a Uzumaki-san”.

Anko hizo todo lo posible por mantener una cara seria ante eso; Todos en Kumo sabían que a Tsunade nunca le había gustado Kushina y se alegraban de que se hubiera ido.

“No hay nada de qué preocuparse. Si él es el hijo del Raikage, un gran si, espero que el gran bruto aprecie que tomé esta reunión como una cortesía hacia él debido a nuestro… pasado.

Anko pudo ver por los pequeños tics en el rostro de Tsunade que todavía llevaba una antorcha por el Raikage, y probablemente le molestaba el hecho de que él estuviera preñando a otras mujeres, especialmente a las de Konoha, y no a ella. Tsunade tenía más de cincuenta años, a pesar de su inteligente Jutsu que desafiaba la edad, y siempre había estado amargada por no tener hijos.

Antes de que Anko pudiera comentar sobre el pasado del que Tsunade había hablado, sabiendo que se refería a las docenas de veces que Tsunade había sufrido accidentalmente algún daño en su ropa durante una de sus peleas con el Raikage que inevitablemente la llevó a volarla durante horas, las puertas se abrieron de nuevo. . Sin necesitar que nadie le mostrara los alrededores, llegó Naruto, vestido con su habitual chándal naranja, destacando contra su piel oscura y contrastando con su cabello rubio oscuro. Dos pendientes dorados brillantes adornaban sus orejas y las mangas de su chaqueta estaban arremangadas para revelar una serie de tatuajes kanji, como era común en Kumo. Si bien no era tan grande como el Raikage, Naruto todavía medía más de seis pies de altura, era más delgado que voluminoso pero aún estaba cubierto de músculos, y se cernía sobre ambas mujeres.

Deteniéndose justo al alcance de su brazo, Naruto inclinó un poco la cabeza hacia Tsunade, antes de darle un pequeño guiño a Anko. Tsunade sintió que un músculo en su mejilla se tensaba ante este mocoso impertinente, a pesar de que tenía que admitir que era guapo de una manera sorprendente y descarada. Los hombres de Kumo y las mujeres de Konoha aparentemente hacían una buena combinación cuando se trataba de criar niños atractivos, y si él realmente era el Jinchūriki de las Nueve Colas, eso hacía que Naruto fuera realmente especial, aunque Tsunade pensó que todo lo demás sobre él no era sorprendente. Ropa llamativa, tatuajes llamativos y joyas, aunque sí se dio cuenta de las extrañas marcas en forma de bigotes en su rostro y de sus ojos azules brillantes, casi fascinantes, que traicionaban su evidente entusiasmo. Tsunade fingió no darse cuenta mientras Naruto la miraba de arriba abajo, era algo a lo que estaba acostumbrada por parte de los hombres, especialmente los jóvenes, y estaría mintiendo si dijera que no le daba una pequeña y sucia emoción.

"¿Siempre haces esperar a tus invitados, Naruto-chan?" Preguntó Tsunade, moviéndose para pararse detrás de una de las largas y bajas mesas de la habitación.

Naruto se rió entre dientes y tomó asiento sin siquiera esperar a ver si Tsunade haría lo mismo. Puso los pies sobre la mesa, cruzó los tobillos y entrelazó las manos detrás de la cabeza.

“Lo siento, hay un pequeño puesto de fideos estupendo en este pueblo y me dejé llevar. Tengo un gran... apetito. Respondió Naruto, sus ojos claramente comiéndose con los ojos los pechos de Tsunade por un momento.

“Pero tienes razón, tenemos asuntos que atender. El Raikage me envió aquí con una oferta: abastecer a la aldea Kumo exclusivamente con su experiencia médica. Comparte los secretos de tu longevidad con nuestros shinobi, para que puedan luchar y tener hijos hasta una edad avanzada, como tú”.

Tsunade casi apretó los dientes ante ese comentario, no le gustaba cuando la gente señalaba su verdadera edad. “¿Y qué obtendría yo a cambio?”

Anko habló, haciendo que Tsunade se preguntara quién en nombre de Dios le había preguntado. “Estoy seguro de que la gente de Kumo te recompensaría más… generosamente, Hokage-sama. Pueden ser bastante generosos”.

Naruto asintió, echando un vistazo al cuerpo curvilíneo de Anko, sus pezones claramente erectos en su blusa de malla, obviamente sin usar sostén.

"Así es. Le recompensaremos con riquezas e incluso le demostraremos algunas de nuestras propias técnicas ocultas. Quizás, si todo va bien, incluso puedas ser recompensado con el regalo más grande de todos, el poderoso Hokage”. Dijo Naruto, queriendo decir cada palabra, aunque no del modo que podría pensarse.

Cuando quiso decir que las técnicas de Kumo se le demostrarían a Tsunade, en realidad quería decir que se usarían con ella. Eso convertiría a la mujer ya tetona, que tenía las tetas más grandes que Naruto había visto jamás, más que Kushina o Samui, quienes habían sufrido modificaciones corporales media docena de veces o más, en una verdadera tonta rubia perfecta con más tetas que cerebro, y un cuerpo destinado sólo a una cosa.

"¿El mejor regalo de todos?' ¿Qué sería eso? ¿Quizás tus servicios, Jinchūriki, a la bestia con cola más poderosa? Respondió Tsunade, preguntándose si debería sentarse, sin querer dar un aire demasiado casual. Era importante que este mocoso supiera su lugar antes que ella.

Naruto se encogió de hombros. “Honestamente, podría ser eso, pero no quiero alardear. Pero para que conste, me refiero al regalo de un niño, finalmente quedar embarazada... incluso a tu edad.

Tsunade se irguió, su cuerpo increíblemente curvilíneo se colocó de la manera correcta sobre sus tacones de cinco pulgadas de alto. Se aseguró de poner la mirada justa de desdén en sus ojos, mordiéndose el labio exactamente de la manera para verse enojada y haciendo pucheros sexualmente, mientras acercaba sus brazos a su pecho, lo que llevó a que las perfectas tetas Hokage de Tsunade fueran empujadas hacia arriba hasta Los enormes orbes estaban casi justo al lado de su cabeza,

"A tu edad, preferiría que ya hubieras aprendido a respetar, Naruto- chan". Tsunade lo regañó, agitando un dedo en su cara.

“¿Cómo te atreves a hacer declaraciones tan descorteses justo delante de mí? Hablando de mi... impregnación con semen viril, extremadamente potente, con un noventa y nueve por ciento de espermatozoides, y con algún matón de Kumo. Tsunade suspiró, como si lo hubiera decepcionado un estudiante que constantemente lo decepcionaba.

“Eso realmente va demasiado lejos. Y dejando de lado, nunca tendría un hijo con nadie que no fuera de Konoha”. Esto era una mentira, pero Tsunade sintió la necesidad de decirla, pero sólo porque Anko estaba allí. La rubia tetona le dedicó una rápida mirada, preguntándose exactamente por qué Anko estaba aquí. ¿No sabía que negociaciones como ésta se discutían mejor en intimidad... bueno, Tsunade quería decir, en privado ? No era como si Tsunade pudiera manejar cualquier cosa que Naruto le arrojara, aunque, por supuesto, Anko entendía que Tsunade nunca daría el primer paso ya que parecía demasiado agresivo... y desesperado.

Naruto pareció reprendido, al menos por un momento. “Ah, tienes razón Hokage-sama, me apresuré demasiado. Sólo quise decir que tal vez podríamos hacer una apuesta al respecto. Con el ganador aceptando todas las concesiones diplomáticas de la apuesta, sin importar las exigencias”.

Tsunade frunció los labios, intentando y sin éxito ocultar el interés. “¿Una… apuesta? ¿A qué podríamos apostar aquí? ¿Apostar dinero sobre cuál de los pequeños comerciantes de este pequeño pueblo es también el alcalde o algo así?

Naruto sonrió ampliamente, sabiendo que la tenía enganchada.

"Bueno, si me perdona por ser demasiado familiar, poderoso Hokage-sama, sé que tiene tendencia a preferir a los hombres... de mi complexión, digamos".

Parecía que Tsunade iba a hablar, pero luego simplemente se aclaró la garganta antes de indicarle a Naruto que continuara. El musculoso rubio estaba feliz de continuar.

“Nuevamente, mis disculpas. Pero como tienes esta preferencia, apostaríamos a que esa es mi gran polla gorda. SI puedes tragarte más de un tercio de mi enorme, enorme y dura polla negra, entonces ganarás y no seré más que un perfecto caballero para ti y para todas las damas de Konoha, de ahora en adelante. Pero si pierdes, tendrás que trabajar para Kumo y no te pagaremos. Al menos no en dinero”.

Cerca, de pie donde Naruto no podía ver su rostro y sabiendo que Tsunade difícilmente la consideraría lo suficientemente importante como para mirarla, los ojos de Anko se iluminan como fuegos artificiales ante la idea. Tsunade respondió tan rápido que realmente parecía desesperada, pero simplemente habría dicho que estaba ansiosa por dejar en ridículo a este mocoso de Kumo lo antes posible. No era como si quisiera perder ni nada por el estilo, y no tenía curiosidad por todos los pequeños y sucios rumores y susurros de Anko... ni siquiera un poco.

"¡Estás en! Ejem, quiero decir, estoy de acuerdo. No tengo miedo de nada de lo que tienes para ofrecerme, Naruto, estoy bastante seguro de que me he acostado con tu viejo y honorable padre muchas, muchas veces. Pocas mujeres podrían sobrevivir a él como yo, y terminaré drenandote .  Pero , si al menos puedes cumplir con mis requisitos de tamaño mínimo”.

Incluso una puta como Anko se habría sorprendido de lo alto que sería ese tamaño.

"Entonces haré que las cosas sean muy agradables para ti, Naruto-chan, y te daré un... servicio personalizado". Tsunade dejó que su lengua se deslizara por sus labios de color rojo brillante, recordándole a Naruto que la llamaban la Lechón Legendaria por más de una razón. Sus brazos se descruzan, como si estuviera calentándose con Naruto, antes de que Tsunade abiertamente agarrara y apretara sus propias tetas, levantándolas con sus dedos largos y delgados, resaltando cuán masivas, lujosas y pesadas eran, más que las de Tsunade y Naruto (e incluso las de Anko). las manos juntas podrían cubrirlos.

Naruto asintió y saltó de la mesa tan rápido que Tsunade casi se sorprendió, aunque trató de calmar su corazón rápidamente. Naruto tenía mucha confianza en sí mismo, pero Tsunade había estado con los hombres más grandes de Kumo, más de una vez. Estaba bastante segura de que podría...

Tsunade de repente se detuvo, sus pensamientos se detuvieron bruscamente dentro de su mente mientras Naruto se bajaba los pantalones. Su pesado, rizado y muy oscuro arbusto apareció a la vista, una maraña de pelos púbicos que llegaban hasta sus enormes bolas de color chocolate, cada una del tamaño de uno de los puños de Naruto. Su polla era increíblemente gruesa, y los ojos de Tsunade comenzaron a agrandarse mientras veía aparecer más de ella, que incluso más, y luego aún más. Ella jadeó mientras la mandíbula de Anko caía por un momento, antes de que la kunoichi de cabello oscuro se mordiera el labio inferior, sus gruesos muslos se frotaban mientras casi se untaba tontamente en ese mismo momento.

Para cuando la enorme, palpitante e increíblemente venosa polla de Naruto se reveló por completo, mostrándola balanceándose más allá de sus rodillas, la propia mandíbula de Tsunade estaba floja, sus ojos tan abiertos que sus iris se habían reducido a pequeños pinchazos.

"Oye, Anko, ¿por qué no vienes aquí y eres un buen 'enlace en la aldea'? Me pones bien duro para el Hoe... kage de allí".

Tsunade parpadeó rápidamente, como si acabara de despertar de un sueño profundo, físicamente despierta pero mentalmente no al cien por cien. Sin embargo, cuando vio a Anko caminando hacia Naruto, balanceando sus caderas de lado a lado tanto que su gordo trasero blanco casi derriba la mesa, mostrando que mientras Tsunade era una hermosa belleza con las tetas más gordas del mundo, Anko era También era bastante gruesa, especialmente en lo que respecta a su trasero, incluso más gorda que el de Kushina y prácticamente construida para que hombres enormes y musculosos rebotaran sus cuerpos lo más rápido y fuerte posible. Una vez que Tsunade vio eso, supo qué hacer y comenzó a caminar hacia Naruto inmediatamente después.

"Mhhm... es tan asombroso, Naruto-sama". Anko habló por primera vez desde que Naruto ingresó a la ROM, y su voz era mucho más lujuriosa, casi enloquecida, de lo que Tsunade había llegado antes. Esta Anko sonaba como una stripper sucia dispuesta a hacer cualquier cosa por unas cuantas puntas más metidas en sus bragas. Tsunade se dejó caer sobre sus manos y rodillas justo al lado de Anko, apartándola del camino.

“Oye, es mi c, quiero decir, mi apuesta con Naruto. Primero intentaré drenarle las pelotas. Anko le dio una última lamida a Naruto, y Tsunade siguió, lo que llevó a un frenesí de besos y lamidas largas y descuidadas arriba y abajo de la superficie de esa polla. Tsunade juntó sus labios y sopló burbujas turbias y sucias sobre la punta violácea de la polla de Naruto, mientras Anko colocaba su lengua contra cada una de las venas anchas y casi palpitantes de Naruto en la parte inferior de su polla, siguiéndolas desde la base oscura y almizclada de la polla de Naruto hasta hasta su propina, donde intercambió saliva como dos adolescentes borrachos con Tsunade. La desesperación de Tsunade era obvia, y ahora ni siquiera se molestaba en intentar ocultarla más.

“¡ Glagg, glawwgg, glackk!” Tsundae se atragantó. Ella sólo estaba tratando de parecer más zorra, no porque fuera zorra ni nada por el estilo, sino simplemente porque sabía que eso haría que Naruto se corriera más rápido. Anko se inclinó debajo de la polla de Naruto, besando sus bolas gordas y arrugadas, ahuecando desesperadamente sus mejillas mientras intentaba chupar uno de los enormes testículos hinchados de esperma detrás de sus labios regordetes y jugosos.

Naruto solo gimió mientras Tsunade movía su boca arriba y abajo por su polla, acariciando el resto con ambas manos en una mamada a toda velocidad y una masturbación áspera y agresiva. Tenía que admitir que ella dio una mamada increíble, y pronto toda la polla de Naruto estaba resbaladiza con la baba goteando de la boca de Tsunade. No iba a dejar que Anko la eclipsara cuando se trataba de complacer grandes pollas negras... aunque Tsunade nunca lo admitiría. Pronto Tsunade se echó hacia atrás, y luego tuvo que retroceder un poco más cuando se dio cuenta de que la polla de Naruto estaba completamente dura, mientras él gruñía por encima de ellos, "Buen trabajo, zorras ~", y era más magnífico de lo que Tsunade podría haber imaginado.

Aun así, no podía dejarle saber que le importaba en primer lugar. Tsunade se llevó la mano a la boca y se anzuló mientras estaba desesperada por tomar aún más de esa polla. Pero a pesar del desordenado rastro de saliva y burbujas que dejó sobre esa polla, untada junto con su lápiz labial, no pareció profundizar mucho más. Incluso con más de diez pulgadas dentro de su boca, Tsunade la sacudió mucho más rápido y Anko dejó escapar gemidos desagradables, casi animales, mientras prácticamente se besaba con las grandes nueces alfa negras de Naruto. Pero, incluso cuando ella se retiró, hundiendo la lengua profundamente en la raja de orina de Naruto durante un segundo rápido y lascivo, Tsunade iba a tener que admitir la derrota. Se mantuvo presionada sobre esa polla tanto tiempo como pudo, con todo su elegante y delgado cuello abultado por la polla hasta casi tres veces su tamaño normal, pero finalmente tuvo que retroceder, con las caras rojas.

“Muy bien, perdiste a la vieja bruja. ¡Ahora es mi turno!" Dijo Anko, empujando a Tsunade hacia atrás mientras terminaba de aplicar el lápiz labial de color morado oscuro. Gritó Tsunade, protestando cuando Anko comenzó a chupar esa polla, rápido y descuidado. Ella hizo contacto visual lascivo con Naruto todo el tiempo, asegurándose de sacar la lengua y hacerla girar alrededor de las gruesas venas de la polla de Naruto, una señal de su virilidad y su tamaño negro y crudo. Al igual que Tsunade, Anko dejó gruesas manchas de lápiz labial, acercándose cada vez más a las más profundas de Tsunade. La rubia jadeó, tirando de Anko por el cabello.

“¡Tú, pequeña zorra increíble! Yo era peor... quiero decir, trabajar esa polla primero. ¡Y no me llames viejo!

Naruto simplemente se divirtió, sabiendo que Tsunade ya había perdido y esperando poder doblegar a ambas mujeres. Las mujeres siguieron disparándose entre sí a medida que se profundizaban un poco más que la última vez, batiendo lentamente sus récords. Cuando Tsunade finalmente se acercó un poco a un tercio completo, tuvo que volver a subir para tomar aire. Anko tomó su lugar con entusiasmo, justo antes de que Naruto gruñera.

“Ahh, joder, aquí viene. ¡Bébelo todo, puta sucia! Naruto empujó la cabeza de Anko hacia abajo, sin darle más voz que tragar la mayor cantidad de polla que pudiera, profundizando mucho más de lo que cualquiera de las putas de Konoha había llegado antes. Ahora se había tragado a la fuerza la mitad de esa enorme polla, y Naruto gruñó, obviamente teniendo un orgasmo poderoso y corriéndose como cubos por la garganta de Anko. Tsunde hizo un puchero de una manera que no era habitual en ella... incluso si lo hubiera hecho un poco antes. Todo para ganar, por supuesto. Tsunade hizo todo lo posible para mirar a Naruto, pero sus ojos seguían rodando hacia su cabeza por pura lujuria, mientras él se inclinaba y lamía y besaba cada centímetro de la polla de Naruto que Anko no había tragado.

¡Diviértete! ¡Diviértete! ¡Dispara!

Naruto trabajó aún más para someter a Tsunade mientras la excitaba cuando se corría, sacando su polla de la de Anko y diciéndole a la rubia que '¡ábrete, puta!'

Ella quería decirle que no, pero por alguna razón abrió la boca tanto como pudo. Hilos gruesos, casi grumosos, de semen blanquecino salpicaron todo el hermoso rostro de cada niña, antes de que comenzaran a acumularse dentro de sus bocas abiertas, y finalmente se elevaron más allá de sus dientes mientras las niñas se enganchaban entre sí, goteando baba como felices, con muerte cerebral. retrasados.

“No está mal, Tsunade. Serás una buena incorporación a mi harén”. Tsunade tuvo el tiempo justo para gritar: "¡N-nunca!" antes de que Naruto se abalanzara sobre ella.

“¡HNGGG!” Tsunade estaba apretando los dientes, dejando escapar aullidos vergonzosos, parecidos a los de una tonta, y gemidos enojados.

“¡Tomaré un tercio de esa polla, y aún más! ¡N-no importa cuánto tiempo me lleve o qué acto lascivo y depravado tenga que cometer! Tsunade colocó sus manos sobre el amplio y musculoso pecho de Naruto, montándolo en una posición de vaquera puta. Ella estaba haciendo todo lo posible para rebotar arriba y abajo sobre esa dura polla negra, poniendo velocidad, esfuerzo y apretando esa polla con cada centímetro de su coño, envuelta alrededor de él herméticamente, trabajando más duro que nunca antes. Incluso Killer Bee y Raiakge juntos no la habían dejado sintiéndose tan cachonda y abrumada al mismo tiempo. Todavía no podía creer lo jodidamente larga y gruesa que era su polla, lo loco que era que alguien pudiera ser tan grande. Tsunade miró hacia abajo, mirando con incredulidad mientras veía su estómago hincharse obscenamente, la polla de Naruto remodelando todo su cuerpo como si no fuera más que una manga de pene.

"¡Oh! ¡Oh! ¡OHhhHH!” Tsunade gritó y gimió, casi resbalándose y cayendo directamente sobre Naruto. Claramente estaba loca mientras montaba esa polla, mientras su gordo trasero rebotaba y aplaudía detrás de ella. Se había quitado la bata y otras prendas, dejando solo el cinturón atado y resaltando su pequeña cintura, con sus tacones altos y las diminutas bragas negras que le preocupaban y que Naruto tiró bruscamente a un lado. Con todos los aplausos de su gordo trasero, las tetas de Tsunade también se balanceaban hacia arriba y hacia abajo, golpeando a la tonta rubia tonta en la cara. Su coño intentó devorar más polla de Naruto, pero finalmente tuvo que detenerse de nuevo, el sudor corría por su cuerpo mientras tenía una serie de miniconvulsiones causadas por orgasmos, freyendo su cerebro una y otra vez.

“HNGG… demasiado… demasiado… ¡ sofuggenbig!” Tsunade gruñó, antes de que Anko volviera a tomar su lugar. Anko se agachó y agarró su gordo trasero, con las manos detrás de ella aplaudiendo ese trasero mientras montaba la polla de Naruto. Lanzó su enorme trasero hacia arriba y hacia abajo, haciendo todo lo posible para complacer a Naruto con su espectáculo lascivo, tratando de tomar más de esa polla. Tsunade retrocedió, apartando a Anko. Por un momento, sus traseros chocaron entre sí, sofocando la polla de Naruto mientras trabajaban sus caderas una contra la otra, dejando rastros pegajosos de sus propios jugos por toda la polla de Naruto de arriba a abajo. Comenzaron a cambiar de lugar, siempre montando esa polla y tratando de tomar más y más, Anko destacando su increíble y perfecto culo mientras Tsunade manoseaba sus propias tetas, tratando de atraer a Naruto mientras seguía corriendo, pellizcando sus gruesos pezones rosados con dureza como los de Tsunade naturalmente. Su lado sumiso y hambriento de pollas empezó a salir. Anko no perdió el tiempo, demostrando que estaba completamente enamorada de la gorda polla de Naruto, especialmente porque sabía que en el fondo era demasiado grande para ella, por lo que Naruto realmente tendría que sujetarla y simplemente forzar a ese monstruo. polla dentro de ella... no podía esperar.

Con otro gruñido, Naruto agarró la cintura de Tsunade mientras ella metía la mitad de su polla en su coño. Sus ojos se abrieron de golpe cuando se dio cuenta de lo que estaba regresando, poniendo una cara de ahegao tonta y cachonda mientras él tiraba de ella hacia abajo sobre esa polla. Tsunade sintió las bolas de Naruto golpear su coño incluso cuando la punta de su polla se estrelló contra la parte posterior de su útero, casi magullándola mientras remodelaba sus entrañas. Naruto se corría dentro del coño desprotegido de Tsunade, mientras ella jadeaba y chorreaba como una perra en celo.

“¡Pih-p-embarazada! ¡Me están criando como una puta sucia! ¡Me estoy acabando por el arriesgado sexo con creampie, quedar embarazada me hace correrme en tu gorda polla! 

Naruto simplemente sacó el cuerpo pronto inerte de Tsunade de su polla, con los ojos puestos en Anko.

“Es hora de darte lo que quieres, puta dolorosa. No te molestes en suplicar clemencia, simplemente te follaré más fuerte.

Anko, todavía en cuclillas lascivamente y balanceando su trasero hacia arriba y hacia abajo para el placer de Naruto, con los ojos entrecerrados mientras lo miraba por encima del hombro. Ella abrió su trasero lo más que pudo, apretando tan fuerte que su trasero se hinchaba entre sus dedos.

“Por favor, papi negro… no te guardes nada. Rompeme~”

En unos momentos, Anko estaba siendo criticada duramente en una posición dura de pararse y cargar, con las piernas pateando detrás de Naruto. Él estaba frente a ella, besando y chupando sus pechos llenos, no tan grandes como los de Tsunade pero aún más sensibles. Anko había aprendido muchas técnicas de modificación corporal de los shinobi de Kumo, y una le permitió aumentar su propia sensibilidad: placer en una buena cantidad, pero dolor aún más. Como resultado, ella estaba gimiendo como una perra sucia mientras sus brazos rodeaban la parte posterior de la cabeza de Naruto, mientras se inclinaba para besarlo. Anko dejó que sus mejillas se ahuecaran cuando Naruto empujó su lengua por la parte posterior de su garganta y ella pateó uno de sus pies en el aire con pura felicidad lujuriosa. Entre sesiones de besos lascivos y profundos, Anko balbuceaba, con la cabeza mirando fijamente al techo mientras se corría una y otra vez.

“Ooh, sí, así, ¡le estás dando una paliza a ese coño! ¡Fóllame papá, haz que duela jodidamente! Dijo Anko, sus manos subiendo a su cara mientras sus ojos se pusieron en blanco con locura. Naruto estaba muy feliz de obedecer, golpeando a Anko arriba y abajo en su polla, una y otra vez, cada vez más rápido. Su ritmo era tan rápido, tan intenso que Anko pensó que algo en su cuello o columna podría romperse por lo fuerte que la estaban follando. Sus brazos y piernas temblaban locamente, su cuerpo completamente fuera de control mientras el éxtasis atravesaba su mente, una y otra vez.

¡Zam! ¡Zam! ¡Zam!

Naruto dio un rápido paso hacia adelante, golpeando bruscamente a Anko contra la pared. No perdió el ritmo, empujando dentro y fuera del coño goteante de Anko y golpeando su cuerpo contra la pared. Pronto se había formado un cráter detrás de sus formas en celo, cuando Anko mordió débilmente el hombro de Naruto, tratando de amortiguar sus gritos mientras él solo gruñía, arrastrándola hacia abajo sobre esa polla antes de casi pulverizar la pared con lo fuerte que estaba follando a la puta tetona. . Sentada cerca en un charco de sus propios jugos, Tsunade simplemente miraba sin comprender. Sabía lo que estaba viendo, pero no tenía ningún sentido. Naruto se había corrido dentro de ella, sobre ella y dentro de Anko y en todos los lugares intermedios varias veces, pero no parecía cansarse en absoluto. De hecho, parecía estar acelerando, su jodidamente se volvía cada vez más áspero mientras Naruto rompía una carga gorda dentro de Anko.

“¡Ohh sí, lléname papi negro! ¡Que me jodan el cuerpo con tu esperma hiperviril, quiero que me saques la perra de Konoha y realmente destroces mi cuerpo de puta con tu monstruo cawwwkk !

Poco después, Tsunade estaba inclinada sobre el brazo de un sofá, sus tetas presionadas contra el interior y empujadas hacia afuera tan lejos que podían verse fácilmente detrás de ella. Sus ojos estaban muy abiertos por la sorpresa mientras mordía el sofá para salvar su vida, dejando marcas profundas con sus dientes.

“¡Mmmmmf! ¡Mmmfff!” Tsunade estaba gruñendo y gimiendo como loca, sintiendo a Naruto cerniéndose sobre su cuerpo desde atrás. Estaba trabajando lentamente esa enorme polla negra suya entre el grueso y gordo trasero blanco de Tsunade, extendiendo esas enormes y perfectas nalgas como un barco estrellándose contra un iceberg. Tsunade dejó escapar una serie de respiraciones entrecortadas, cada empujón lento que Naruto forzaba hacia su pequeño y agarrador culo. Una vez que logró meter la punta de su enorme polla (más grande que la polla promedio del hombre promedio de Konoha) en el trasero de Tsunade, fue como si se accionara un interruptor dentro de Naruto. Su cuerpo explotó en movimiento, una mancha oscura mientras golpeaba sus caderas hacia adelante, empujando esa polla dentro y fuera del culo de Tsunade, desatando más y más de su enorme tamaño. Con una polla casi tan gruesa como uno de los muslos de Tsunade, Naruto le sacó el culo a Tsunade. Comenzó a gritar alrededor del sofá y finalmente mordió con tanta fuerza que el cuero cedió y parte del relleno del sofá estalló.

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

“¡HNNNGG! ¡Voy a venir otra vez! Mi culo es demasiado sensible, me está volviendo loco, ¡esa gran polla negra y gorda me está abriendo! ¡Ohhh gahhhd, no pares, no pares!”

Anko se arrastró hacia Naruto, deslizando su cabeza debajo del trasero de Tsunade, comenzando a lamer y chupar las gordas nueces de Naruto. Entre lamidas y besos ruidosos, descuidados e indignos, llegando incluso a empujar su bonita cara directamente contra las enormes pelotas de Naruto y lanzarlas en motor, con los ojos en blanco en un placer lascivo y delirante.

"Por favor, Naruto-sama, fóllame el culo a continuación, ¡quiero esa polla en el instante en que termines con Tsunade! ¡Quiero que seas aún más duro conmigo, haz que tomes cada puto centímetro de mi trasero! No me importa si reorganizas mis entrañas permanentemente y si no puedo caminar derecho durante una semana, ¡quiero que destruyas mi pequeño gilipollas con tu gorda y dura polla de negro! "

Tsunade, sujeta a esa polla como si la hubieran empalado, sacudió salvajemente la cabeza, el cabello rubio volando por todas partes mientras sus tetas rebotaban.

“¡Cállate, perra loca! ¡¡S-lo estás excitando aún más, oh, joder, su polla está en el fondo de mi garganta, puedo sentirlo, mi pequeño gilipollas se está destrozando, ¡¡soy una pequeña y sucia zorra anal rubia y tonta !! 

¡Tortazo! ¡Tortazo! ¡Tortazo!

Naruto le dio una palmada al gran trasero gordo de Tsunade, su otra mano tiraba de su cabello mientras golpeaba sus caderas hacia adelante. Con el cuerpo de Tsunade casi plano debajo de él, Naruto ahora estaba sacando esa polla dentro y fuera de sus entrañas, follándola en una follada lasciva estilo perrito.

"Así es, Tsunade, solo eres una puta rubia para una gran polla negra, y cuando termine contigo, serás mi idiota personal las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Al menos Anko realmente quiere cada centímetro de mi polla, ¡eres sólo una puta con muerte cerebral que ni siquiera parece merecerlo!

Tsunde sabía que él la estaba incitando, pero no pudo resistirse. Aún con la mano de él profundamente en su cabello, ella no podía mirar atrás, lo cual estuvo bien mientras apretaba los dientes y sufría un orgasmo áspero y alucinante. La lengua de Tsunade salió de su boca mientras hablaba a toda prisa, sus palabras salían en un canto sin aliento casi como si Tsunade no tuviera idea de lo que estaba diciendo.

"Sí, eso es todo, colgaste al maldito semental negro, ¡fóllame el culo más fuerte! Soy la mujer rubia más sexy del mundo, y ahora mismo soy tu pequeño y sucio juguete anal, por favor dame más de esa polla.

Naruto felizmente empujó más profundamente, su mano soltó el trasero de Tsunade mientras envolvía su brazo alrededor de su cuello. Pronto, Tsunade sufrió una serie de orgasmos sucios y faltos de oxígeno, corriéndose hasta la médula mientras Naruto golpeaba cada centímetro de su polla. Lento pero seguro, Naruto la estaba obligando a tomar la mayor parte de su polla que había tenido toda la noche, apretujada en su tubo de mierda y probablemente lastimando la columna vertebral de Tsunade por los ásperos empujones de los dedos de los pies. Con un gruñido en su oído, Tsunade pudo sentir las caderas de Naruto presionando contra su gran trasero gordo. Ella chilló, sintiendo que se iba a desmayar (al menos) por la presión repentina. Sus pies patearon débilmente mientras se corría, viéndose obligada a finalmente tomar cada centímetro de esa monstruosidad negra y más que feliz de finalmente ser domada como una perra en celo.

Naruto gruñó detrás de ella, deleitándose con su control sobre Tsunade. “A mi mamá le tomó mucho tiempo poder meterme las pelotas hasta el fondo de cualquier hoyo. Pero mírate, Tsunade, ¡tu culito codicioso se tragó toda mi polla en tu primera noche! ¡Qué buena puta de harén serás!

Naruto puntuó sus palabras con una serie de estocadas duras y profundas. Tsunade simplemente gimió patéticamente cuando Naruto se corrió profundamente en su trasero, llenándola hasta que el estómago de Tsunade se hinchó, presionando contra su útero ya lleno y definitivamente embarazada. Sus ojos se pusieron en blanco antes de desmayarse, finalmente totalmente rota con esa polla.

"¡Me voy a morir! ¡Voy a morir, realmente voy a morir! ¡La gorda y desagradable polla negra de Naruto me está haciendo correrme de nuevo! Anko estaba gritando como loco, siendo follada en una posición brutal de martinete. La polla de Naruto entró y salió de su culo mientras Anko extendía la mano y agarraba sus tobillos, manteniéndose abierta para él. Su lengua sobresalió mientras miraba a Naruto con feliz sumisión. Él escupió en su boca y Anko se lo tragó, corriéndose por la desagradable degradación.

“¡Tómalo, maldita zorra, tómalo! ¡Estabas rogando por ello y ahora te voy a joder las entrañas hasta que estés cagando mi semen durante una semana! Naruto gruñó, cada una de sus embestidas hacía que el cuerpo curvilíneo de Anko se sacudiera y temblara.

“¡Sí, sí, lo que usted diga maestro! ¡Ohh, duele muchísimo, tu polla está golpeando mi culito sucio! A Anko le encantaba, correrse estúpidamente con todos y cada uno de los brutales y profundos empujones que le daba Naruto. Era una puta tan psicópata que Anko pronto comenzó a chorrear, los jugos de su coño brotaron en un arco lascivo antes de volver a salpicar su cara.

Una y otra vez, durante la mayor parte del día, Naruto se folló a Anko y Tsunade, poniéndolas en sus lugares. Hizo que Anko sofocara la cara de Tsunade con su gran trasero pálido mientras Naruto follaba dentro y fuera del culo y el coño de Tsunade, volviéndola loca con orgasmos uno tras otro. Luego, Naruto entraba y salía de golpe del coño de Anko mientras ella estaba parada sobre un pie, el otro apuntaba al techo mientras Naruto la follaba de pie. Las gordas tetas de Anko estaban presionadas contra el cristal, y su cuerpo cachondo habría atraído a todos en la ciudad si no hubieran estado dormidos ya. Luego Anko hizo tapping para que Tsunade volviera a chupar esa polla, decidida a tomar más. Solo le faltaban diez pulgadas increíblemente gruesas y anchas antes de desmayarse, con los ojos en blanco mientras dejaba escapar un desagradable sonido de asfixia glotal. Segundos después de eso, Naruto tiró de su cara hacia arriba y hacia abajo sobre su polla, antes de correrse tan fuerte que salió disparado de la nariz y la boca de Tsunade, sorprendiendo a la puta con lo profunda y duramente que había sido dominada y había convertido a una joven mocosa en el sexo vivo. juguete.

¡ZA! ¡ZA! ¡ZA!

Ahora, muchas horas e innumerables orgasmos para Tsunade desde que comenzaron, Naruto estaba chocando contra ella en una prensa de apareamiento dominada por hombres. Las piernas de Tsunade quedaron echadas hacia atrás sobre sus hombros mientras la polla de Naruto entraba y salía de ella, una y otra vez.

“¡Por favor Naruto, por favor, dámelo! ¡¡Que se joda un bebé negro en mi vientre, tendré cien hijos tuyos si quieres, siempre y cuando sigas jodiéndome !!

Anko estaba cerca pero se desmayó por completo, empujada demasiado lejos. Ella seguía retorciéndose en su estado de inconsciencia, como un cachorro maullando, con esperma espeso goteando de sus tres agujeros abiertos. Tsunade apenas recordaba que había estado allí en primer lugar, todavía teniendo un orgasmo que destruía su alma cuando perdió la apuesta y cualquier rastro de su autoestima hacia Naruto, una y otra vez. Ella lo miró con corazones de color rosa brillante brillando en sus ojos. Naruto gruñó, golpeando profundamente las pelotas mientras empujaba sus piernas hacia arriba un poco más, golpeando el gordo trasero de Tsunade con sus caderas incluso mientras su polla follaba su bolsa de bebé con fuerza, empujando su útero prácticamente hacia la parte posterior de su pecho. Naruto gruñó, llenando a Tsunade con tanta esperma que tuvo un orgasmo vergonzoso cuando sintió que sus caderas crujían, casi sacadas de sus órbitas por la dura, brutal y frenética follada de Naruto.

¡Desplázate! ¡Diviértete! ¡Dispara!

Tsunade deseaba poder ver el interior de su útero como aquellos con un Byakugan, pero se conformó con recurrir a un viejo Jutsu que había aprendido. Hizo que su trasero y sus tetas se hincharan, impulsados por el esperma espeso y rico en chakra de Naruto. Era como si Tsunade hubiera pasado de su peso normal, flaco pero con curvas, a estar embarazada de nueve meses, con su trasero expandido hasta tener el doble de su enorme tamaño original, y sus pechos hinchados junto con su estómago inflado, ya que Tsunade ahora lucía un enorme rack que podría simplemente haber vencido a Killer Bee y al Raikage hasta someterlos... al mismo tiempo.

“¡M-muhhr! ¡Danos más, negro colgado! Gritó Anko, despertándose lo suficiente como para levantar la cara para recibir el esperma de Naruto. Tsunade simplemente gimió, apoyándose sobre sus codos mientras volvía a correrse, desmayándose y convulsionando. Ahora tenía al menos media docena de bastardos negros follando con ella, y Naruto se aseguraría de follarla todos los días hasta que ella diera a luz. Ambos ojos le sonrieron, mientras Naruto agregaba dos mujeres más de Konoha a su harén, tomando algunas mujeres poderosas y potencialmente problemáticas y follándose sus inútiles cerebros con sus hermosas y tontas caras. No está mal para un día de trabajo, pensó Naruto mientras miraba los cuerpos de las dos zorras, con los ojos abiertos pero en blanco. Él simplemente se rió entre dientes antes de agacharse y agarrarlos a ambos por el cabello.

Cuando Naruto comenzó a salir de la habitación, arrastrando a cada perra tetona detrás de él con el sol saliendo, se rió para sí mismo. Era más que un día de trabajo, si realmente quería vaciar sus bolas.

“Bueno, qué bueno que alquilé el ático de arriba por una semana. ¡Ahora es el momento de ver cuál de ustedes puede tragar más semen hasta que prácticamente les llene los pulmones y las ahogue, putas cachondas con muerte cerebral!

Anko y Tsunade estaban más allá de hablar en ese momento, pero lograron algunos gemidos débiles y confusos. Es posible que hayan estado diciendo "mío" o "más", o tal vez incluso " mastermaaster ", una y otra vez, goteando baba con caras ahegao de coeficiente intelectual de un solo dígito completamente estúpidas. Fue realmente un sueño hecho realidad para los tres amigos lascivos y en celo, y Naruto agregó algunas de sus primeras, pero de ninguna manera las últimas, chicas de Konoha.