Si quieres saber de la historia, en mi perfil de wattap está Estoy como Lijorge21 o en Ao3 pero está en inglés, yo solo la estoy traduciendo
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Fue un viaje corto desde el auto hasta la sala de estar, incluso más rápido debido a la supervelocidad. Después de un breve nanosegundo para abrir la puerta, Barry y Caitlin estaban de regreso en su apartamento, mirándose el uno al otro con hambre en los ojos.
Esta vez, cuando caminaron para encontrarse en medio de la sala había más calor, más electricidad. Se besaron con una intensidad que sólo conocen las parejas en esa fase de luna de miel de una relación, en la que Barry y Caitlin definitivamente encajaban.
Sus labios y lenguas no eran lo único activo en ese momento. Caitlin tenía sus manos manoseando su camisa de vestir, eventualmente desabrochó suficientes botones y se la pasó por la cabeza.
Mientras tanto, Barry entrelazó sus dedos en el frente de su camisa antes de separar rápidamente sus brazos, desabrochando cada botón de su blusa al mismo tiempo.
Caitlin:“Nunca deja de sorprenderme”, afirmó la científica con su dulce voz.
Él le sonrió con orgullo, pero en lugar de que la pareja se recostara el uno contra el otro, ambos se concentraron en sí mismos.
Barry usó sus manos para desenvainar el botón de sus pantalones ajustados antes de dejarlos caer, junto con sus boxers, alrededor de sus pies.
Mientras él se desnudaba, Caitlin se estiró hacia atrás, encontró el cierre de su sujetador y lo desabrochó.
Barry:"Simplemente hermoso", elogió Barry, observando su forma en topless.
Aunque tuvieron relaciones sexuales en varias ocasiones, él todavía se sentía asombrado al verla.
Los pechos de Caitlin eran montículos suaves y redondos, altos y alegres. Se ajustaban perfectamente a su esbelto físico y sabía que llenaban su mano cuando los agarraba.
Sus pezones rosados, un poco más delgados que la primera articulación de su pulgar, estaban duros debido a la excitación e hicieron que sus tetas parecieran hechas para ser chupadas.
Caitlin:"Dios, tienes una bonita polla", comentó Caitlin.
Su delicada mano estaba agarrando ligeramente su virilidad antes de que las palabras salieran de su boca.
Su boca cayó aún más cuando su suave palma y sus hábiles dedos se deslizaron suavemente alrededor de su circunferencia antes de moverse hacia arriba y hacia abajo.
Se tomó su tiempo para recorrer sus 8 pulgadas enteras mientras llevaba una cara que retrataba lo cachonda que estaba.
Barry:"Me tienes en desventaja", comentó Barry, enganchando los dedos en la cintura de sus pantalones.
Caitlin:"Oh, bueno, no puedo permitir eso", Caitlin sonrió fríamente mientras se desabrochaba los pantalones.
Después de bajarse los pantalones por las piernas, la morena ahora estaba frente a su amante completamente desnuda.
Él bebió de la vista de ella, permitiendo que sus ojos viajaran desde sus redondas tetas, pasando por su vientre plano y finalmente hasta su sexo.
Tal como lo había estado haciendo desde que comenzaron a dormir juntos, el espacio reservado para lo que debería haber sido un triángulo de rizos marrones apuntando a su coño estaba ausente.
En cambio, tenía una vista sin obstáculos de sus labios inferiores, de colores tan brillantes como sus pezones pero que ya brillaban por la humedad.
"Hermoso", resopló.
Caitlin le dedicó una sonrisa y luego volvió a ponerse delante de él. Se besaron con pasión y él sintió su mano bajar entre sus muslos.
Al segundo siguiente, un dedo grueso entró en sus pliegues, penetró su vagina y ella gimió en su boca. Le encantaba sentirlo dentro de ella, ya fuera su polla u otra parte del cuerpo, pero tenía otros planes.
Caitlin:"Deberíamos hablar sobre lo que queremos obtener esta noche", le dijo Caitlin, rompiendo el beso. "Pero hablar es aburrido, así que mientras lo hacemos, te chuparé la polla".
Y dicho esto, la científica estaba descendiendo hasta ponerse de rodillas, arrodillándose ante él en el duro piso de madera de la sala.
Barry se sorprendió, pero no iba a quejarse, sin embargo, en lugar de envolver sus labios regordetes alrededor de su virilidad, los usó para hablar de nuevo.
Caitlin:“Así que, como dije en la cena, quiero darte una pequeña recompensa después de callar a Iris tan noblemente. Por lo tanto, puedes hacerme lo que quieras esta noche”, dijo Caitlin mientras le acariciaba la polla.
Con una sonrisa malvada en su rostro, Caitlin deslizó su polla hacia su cara antes de envolver su bulbosa cabeza entre sus labios.
El hombre de cabello castaño no pudo evitar dejar un gemido audible mientras su boca caliente y húmeda trabajaba la primera mitad de su polla.
El chico cachondo ya estaba a punto de meter su carga en su boca una vez que ella comenzó a inhalar toda su polla en su boca con cada embestida.
Barry:"Sí. Chúpalo, nena”, gimió Barry deleite hacia la morena sucia.
"Mmmmm", gimió Caitlin mientras babeaba ruidosamente en su palito de carne.
Barry:“¿Cuáles son las restricciones?”, preguntó buscando más detalles y también para frenarla.
"Ninguno", respondió Caitlin sin perder el ritmo.
Desafortunadamente ella tuvo que apartar la boca de su virilidad para darle la respuesta, pero él agradeció el descanso aunque solo durara un momento.
El segundo después de dar su respuesta, los labios de la chica cachonda estaban envueltos alrededor de su reluciente polla, ya goteando mojada en su copiosa cantidad de saliva.
Barry:"¿Ninguno? Entonces, ¿te refieres a algo?
Honestamente, Barry habría estado feliz de tener su tipo de sexo "habitual" esta noche.
Después de todo, Caitlin Snow era hermosa y un verdadero placer en el dormitorio. Sin embargo, su oferta, sin mencionar la mamada en el instante en que entraron a la casa, hizo que su mente se acelerara.
Tuvieron sexo anal hace sólo unas semanas, pero no desde entonces. No es que a Caitlin no le gustara, después de todo tenían muy buena y clara comunicación en su relación.
Parecía que el sexo anal era para ocasiones especiales, ¡y aparentemente esta noche lo era!
Caitlin:“Tú estás a cargo esta noche, semental. No tenemos barreras. Puedes tener todo de mí”, respondió la científica de Star Labs.
Una vez que ella respondió, tal como lo había estado haciendo desde que comenzó a mamarlo, reanudó su trabajo.
Caitlin separó sus lujosos labios rojos y se pasó el largo cabello detrás de las orejas y luego lo llevó a su boca nuevamente.
Al igual que antes, Barry gimió audiblemente cuando ella comenzó a chuparlo mientras él se quedaba reflexionando sobre su respuesta.
"Sólo para que conste, sabes que estoy buscando el derecho anal", dijo sonriéndole.
Caitlin escuchó su pregunta pero no respondió de inmediato, aunque la respuesta era obvia para ella.
En lugar de eso, lo ignoró por el momento y comenzó a ganar impulso mientras movía la cabeza hacia arriba y hacia abajo por su imponente poste, tomando más de él dentro de ella cada vez.
Después de un buen minuto de una mamada más intensa, ella redujo el ritmo y luego le quitó la polla cubierta de saliva por completo.
Caitlin:"Soy plenamente consciente de lo que quieres", respondió la morena. “Tendrás acceso completo a todos mis agujeros. Se te permite correrte donde y con qué frecuencia quieras. Fóllame de la manera que quieras también”, explicó con un tono neutral. “Rudo, atado, suavemente durante horas. Lo que sea."
Caitlin quería aprovechar esta oportunidad para sentar un buen precedente para el resto de la noche, por lo que necesitaba su mejor juego.
Ella sacó la boca de su polla, ahora resbaladiza con su saliva, y usó su mano para golpear febrilmente su carne.
Ella hizo esto para poder usar su lengua para ayudar a acorralar su pesado saco y llevárselo a la boca.
Caitlin se turnó para llevarse cada nuez a la boca y darle la atención adecuada antes de volver a algo más sólido.
Ella movió la mitad de su palo entre sus labios mientras acariciaba la otra mitad.
Usando su mano libre para masajear su saco nuevamente, pudo escuchar cuánto apreciaba él lo que estaba haciendo.
Barry fingió pensar en su oferta por un momento antes de proclamar con entusiasmo: "Estoy dentro".
Caitlin:"Chico tonto, ya estás dentro, bueno, en mi boca de todos modos", dijo Caitlin en su sorprendente tono sucio.
Aunque no era su intención sacar al hombre lo más rápido posible, probablemente así lo sentía él.
Caitlin quería darle su mejor mamada ya que las anteriores se realizaron después de una noche de bebida o simplemente como juego previo antes de follar.
Ahora, sin embargo, ella lo estaba chupando con la única intención de hacerlo mamar para que él tuviera la experiencia completa.
Caitlin:"Te gusta cómo chupo", preguntó la morena de piernas largas con arrogancia en su voz.
“Sigue adelante”, suplicó mientras aplicaba presión hacia abajo en la parte superior de su cabeza para ayudar a transmitir su mensaje.
Caitlin:"Está bien, semental", respondió Caitlin mientras comenzaba a lamer su saco de nueces antes de recorrer lentamente su eje hasta encontrar la punta y envolver sus labios regordetes alrededor de ella.
Con sus labios nuevamente alrededor de su polla y sin necesidad de decir más palabras, Caitlin pudo concentrarse en la tarea que tenía entre manos.
Barry no pudo evitar mirar hacia abajo y observar a la morena mientras ella le daba placer.
Después de tomar la mitad de él en su boca para que ambos volvieran a tener un tono normal para la mamada, ella plantó sus labios completamente alrededor de él y meneó la cabeza hacia la punta.
Su boca se sentía cálida y húmeda para él, y la forma en que sus labios regordetes se arrastraban a lo largo de su piel resbaladiza hizo que su resistencia a bombearla llena de semen en ese mismo momento disminuyera.
"Si te gustó", dijo con un brillo en los ojos. "Entonces realmente deberías disfrutar esto".
Barry continuó mirando hacia abajo y observándola, especialmente después de sus crípticas palabras y sintió como mi cabeza bulbosa tocaba la parte posterior de su garganta.
Por lo general, en este punto la mayoría de las chicas tosían un poco y luego se retiraban rápidamente con lágrimas en los ojos, pero Caitlin no era la mayoría de las chicas.
La delgada morena siguió avanzando hasta que la punta se deslizó dentro de los estrechos confines de su garganta.
Continuó metiéndose más carne en la boca hasta que su linda nariz quedó enterrada en el vello púbico recortado de Barry y sus labios envolvieron el extremo de su palo.
“Dulce Madre de Dios”, fue todo lo que pudo gemir.
Caitlin sonrió para sus adentros ante su aprobación vocal de sus habilidades para hacer garganta profunda, pero no iba a dormirse en los laureles.
Ella continuaba hundiendo toda la longitud de su eje mientras él todavía la miraba, pero fue el tercer sentido que estaba usando lo que hizo que fuera una mamada tremenda.
Sus labios y garganta se sentían muy bien en su eje mientras se balanceaba en toda su longitud una y otra vez, mientras que ella estaba más que bien con dejarlo mirar hacia abajo y observar su talento, algunas otras chicas se sentían raras con eso.
Sin embargo, escuchar los gorgoteos cuando el científico de Star Labs le dio sexo oral húmedo fue realmente extraordinario.
Los ruidos solo aumentaron en volumen y frecuencia a medida que la mujer desnuda pasó de tomar lenta y metódicamente toda la polla de Barry a su garganta a aumentar enormemente la velocidad.
:“Baja el ritmo o la diversión se acabará antes”, advirtió .
Caitlin:"Tenemos toda la noche y dudo que te agote con una pequeña mamada", respondió ella, imperturbable en su lujuria por excitarlo.
Su sexo oral con garganta profunda le estaba dando a Barry más placer del que podría haber imaginado, aunque tenía un gran costo.
Por mucho que le hubiera gustado que la bella científica le hubiera chupado la polla todo el día y toda la noche, sabía que era una quimera. El hecho era que necesitaba correrse pronto...
Caitlin:"¿Vas a correrte pronto?" Preguntó Caitlin, aunque podía sentir la respuesta palpitando en su lengua.
Aparte de los frecuentes y reveladores espasmos de su virilidad, había otras formas en que ella sabía lo que se avecinaba.
Ella sintió que el agarre de su cabello en su mano se aflojaba. Podía ver su rostro cada vez más largo y contorsionado, ya que había mantenido bastante contacto visual mientras lo chupaba.
"Tan cerca", gimió con los ojos cerrados, pensando en formas de prolongar su orgasmo el mayor tiempo posible. "¿Dónde lo quieres?"
Caitlin:"Lléname la boca, Barry", animó sexymente Caitlin. "Quiero probar tu semen ahora mismo".
"Uggghhhhh", gruñó Barry cuando sus palabras lo llevaron al límite.
Caitlin sintió la primera ráfaga de su carga pegajosa golpear la parte posterior de su boca poco después de su fuerte gemido.
No le tomó mucho tiempo llenarle la boca con su excesiva cantidad de semen, pero Caitlin estuvo a la altura de la tarea.
Ella recogió cada gota que él le ofreció hasta que finalmente se secó. De un gran trago, la mujer cachonda tragó su carga cálida y salada, amando la sensación del líquido espeso mientras se deslizaba por su garganta.
Desde muy joven, Caitlin comprendió rápidamente que a los niños y ahora a los hombres les gustaba correrse en una mujer.
Podría ser su boca o su coño, no importaba, simplemente no querían salir. Rápidamente aprendió a acostumbrarse al sabor del semen y ahora, después de una década de tragar con gusto carga tras carga, le encantó.
El sabor salado era común para ella, y disfrutaba de la forma en que a los hombres les encantaba y de cómo su miembro palpitaba antes de derramarse sobre su lengua y luego moverse en su boca.
"Maldita sea", juró Barry.
Mientras su hombre estaba allí en medio de la sala de estar, Caitlin estaba contenta.
Ella los hizo tener un buen comienzo para recibir su recompensa por la forma en que cerró por completo a Iris, al mismo tiempo que le mostraba a Caitlin lo importante que era para el Speedster.
Sabía que Barry no necesitaba ningún tipo de recompensa, ni habría pedido nada parecido. Sin embargo, Caitlin estaba ansiosa por mostrar su agradecimiento de todos modos.
Con la cabeza de Barry inclinada hacia atrás, Caitlin sacó la lengua y lamió ligeramente su hendidura para orinar.
Más semen comenzaba a salir del agujero y ella estaba más que feliz de recogerlo y desecharlo en su estómago. La acción hizo que su novio se estremeciera, pero lo ayudó a salir del trance.
"¿Una solicitud?" Dijo Barry, mirando a su sonriente novia quien le dijo que continuara. "Siempre tragas".
Caitlin:"¿Cuándo no?", respondió Caitlin con un guiño. “¿Ahora puedo hacer una solicitud?”
"Supongo que sí", respondió Barry mientras veía su forma desnuda ponerse de pie.
Caitlin:“Llévame al dormitorio. Creo que tu fisiología metahumana nos dice que ya estás listo para la segunda ronda”, observó la científica.
Barry sonrió al aceptar sus términos. Aunque fácilmente podría haber usado su velocidad, esta vez el metahumano decidió cargarla y caminar con ella envuelta en sus brazos.
Era un apartamento bastante pequeño, por lo que era una caminata corta, pero Barry decidió ir despacio para poder besarse con su hermosa pareja todo el tiempo.
Después de llegar al dormitorio, volvió a colocar a Caitlin sobre sus pies, quien estaba de espaldas a él mientras quitaba algunas prendas sueltas de los pies de la cama.
Aunque acababa de correrse minutos antes, ver el trasero de Caitlin Snow fue suficiente para que su polla se endureciera.
Era una chica esbelta con caderas estrechas por lo que su trasero no era muy ancho, pero sí tenía un grosor impresionante.
Sobresalía a una buena distancia detrás de ella y sería descrito como un tope de burbuja según los estándares actuales.
Mientras ella limpiaba la ropa de la cama, Barry actuó. Se arrodilló detrás de la morena inclinada y enterró su rostro en su sexo.
Su lengua cortó fácilmente sus pliegues, mojada de emoción, antes de perforar su coño para lamer sus paredes internas.
"Oh Dios", gimió Caitlin.
Su única respuesta a sus gemidos de placer fue la forma ruidosa en que le comió el coño.
Una y otra vez, su lengua se hundió profundamente en su sexo y probó su esencia en la fuente, mientras él sentía un placer perverso al frotar su nariz contra su arrugado culo.
Barry:"Sí, te gusta eso, ¿no?", preguntó Barry, dándole un ligero golpe a cada una de sus adorables mejillas.
Caitlin gimió en respuesta, especialmente cuando él usó su lengua para hablar menos y comérsela más. Sin embargo, pronto el Speedster dejó de usar su lengua en absoluto y en su lugar solo usó sus dedos.
Barry siguió haciendo largos golpes comenzando en su clítoris, bajando a través de sus pliegues y luego divergiendo hacia afuera lo suficiente como para que sus dedos acolchados tocaran el borde exterior de su culo arrugado y luego invirtieron el curso.
"Qué broma", resopló Caitlin.
Por supuesto, las burlas continuarían. La morena sintió sus fuertes manos abandonar su trasero y la decepcionó.
Barry se puso más cómodo y bajó la cabeza para estar justo en frente del arranque del científico de Star Labs, pero no volvió a sumergirse de inmediato.
En lugar de eso, mantuvo el lento acercamiento y le dio besos y lamidas primero a la parte carnosa del trasero de Caitlin y luego estrechó la zona más cerca de la grieta.
Finalmente, Barry plantó un beso directamente encima de su culo, sin embargo no sacó la lengua, pero la chica científica sintió la presión en su puerta trasera de todos modos.
"Bromeo", dijo Caitlin, esta vez en voz alta.
Barry:“Bromear, ¿eh? Bueno, una burla haría esto”. Barry preguntó antes de actuar.
Caitlin ni siquiera se inmutó cuando sus fuertes dedos se clavaron en la suave carne de su regordete trasero.
Con un buen agarre en su lugar, Barry separó sus mejillas lo más que podían para darle fácil acceso al trasero de la chica de pie.
Esta vez no hubo demora cuando su lengua decidida encontró su estrella de mar arrugada y lamió su esfínter.
Caitlin:"Mhmm... mucho mejor", confirmó Caitlin.
Una y otra vez, Barry lamió su abertura y ocasionalmente incluso sumergió la punta de su hábil lengua más allá de la apretada barrera exterior para lamer sus paredes rectales internas.
Fue una lucha lograr la entrada, aunque Caitlin lo estaba ayudando relajando el tono de su anillo.
Caitlin:"Mhmm... oh sí", gimió Caitlin en agradecimiento.
"Dilo. Di lo que quieras”, incitó Barry.
"Sí... lame mi trasero", exigió la científica.
Y eso fue exactamente lo que hizo su novio. Su lengua realizó repetidamente movimientos largos y constantes sobre el agujero arrugado de la chica.
Con cada lamida que pasaba, el Speedster no podía evitar sorprenderse por la estanqueidad de cada orificio de su novia.
Su culo permaneció sellado a pesar de que las manos separaron el pequeño y regordete trasero de Caitlin, sin mencionar el hecho de que él sabía que ella no era una virgen anal.
Barry:"Te gusta que te coman el trasero", dijo Barry sobre la charla sucia.
Caitlin:"Qué desagradable", gimió Caitlin en señal de acuerdo. "Pero quiero esa polla dura dentro de mí".
Barry:"Creo que puedo lograrlo", sonrió Barry.
Para cuando Barry sacó su lengua del culo de la chica delgada y se puso de pie, Caitlin ya no estaba en el mismo lugar. Obviamente cachonda, no perdió el tiempo.
En lugar de esperar, saltó sobre la cama y se dejó caer con la cabeza sobre las almohadas.
Él la miró y la vio con el águila extendida sobre su espalda. Sabiendo que tenía su atención, se llevó una mano al coño y abrió bien los labios.
Le dio una vista excelente que reveló las profundidades de su vagina; perfectamente rosado por dentro y empapado en jugos y saliva.
Barry subió a la cama para reclamar lo que era suyo, encajando fácilmente entre sus piernas abiertas antes de que se envolvieran alrededor de su cintura.
Siempre habían usado condones cuando follaban, pero dada su actitud en ese momento estaba claro que hoy sería muy diferente.
Por favor, ella le estaba dando el control total y su deseo era renunciar al condón. Flotando sobre ella, Barry se inclinó para besar a su novia mientras su mano agarraba su virilidad alrededor de la base para estabilizarla.
No tuvo mucho tiempo para viajar ya que su punta encontró fácilmente sus pliegues antes de que un empujón tomara la mitad de su longitud en los húmedos confines de su coño.
"Awwh... sí", gimió Caitlin de placer.
No perdió el tiempo moviéndose dentro de ella, levantándose rápidamente para embestir toda su longitud de 8 pulgadas profundamente dentro de ella.
Ella dejó escapar largos gemidos y apretó sus piernas sorprendentemente fuertes alrededor de su musculosa cintura.
Se mudaron al unísono como una pareja que había estado junta durante años, a pesar de que solo habían estado saliendo durante semanas.
Una y otra vez, sus caderas se alzaron hacia atrás antes de lanzarse hacia adelante, metiéndose completamente en su coño.
Estaba apretada pero lo suficientemente suelta como para que su virilidad se deslizara hacia adentro y hacia afuera sin dolor ni restricciones.
Al ser la primera vez dentro de ella sin condón, notó lo mojada que estaba, sintiéndose como un resbalón y deslizamiento, lo que lo complació.
Su respiración se hacía más irregular y sus gemidos se hacían cada vez más fuertes, a veces gritos completos liberados en su oído cercano.
Caitlin claramente se estaba acercando al orgasmo, y a él le hubiera gustado dárselo, pero la rápida follada también lo estaba afectando a él. Necesitaba reducir el ritmo o detenerlo por completo si quería continuar.
"Vamos a darte la vuelta", gruñó Barry.
Al instante siguiente, él había salido de su coño, haciéndola sentir vacía y deseando tenerlo de nuevo dentro de ella.
Ella rodó de espaldas a su estómago, pero sólo por un momento. Rápidamente se levantó sobre sus manos y rodillas, poniéndose a cuatro patas.
Barry tampoco se tomó su tiempo para moverse. Su polla brillaba en la tenue iluminación del dormitorio en sus jugos, excitándolo.
Ver lo rápido que se puso en posición demostró lo ansiosa que estaba por follarlo, y en poco tiempo él estaba detrás de ella, de pie en el suelo con su polla en su entrada.
Él no esperó e inmediatamente empujó la mitad de su miembro nuevamente dentro de su sexo húmedo.
Encontraron su ritmo una vez más cuando él volvió a acariciar todo su grueso miembro dentro de su apretado coño a buen ritmo.
Tenía los ojos bien cerrados mientras su boca permanecía abierta para liberar torrentes de gemidos y gritos.
"Mhmm… awwhh… sí", gimió.
El largo cabello castaño de Caitlin, con una sensación de seda, caía en cascada sobre su rostro, balanceándose de lado a lado mientras su cabeza se movía hacia adelante y hacia atrás.
Cada vez que Barry la empujaba, su pelvis aplastaba su culo redondeado, provocando que la piel pálida y suave se ondulara por la fuerza.
Podía sentir su mano debajo de su cuerpo para acorralar su teta que colgaba y rebotaba, dándole un pellizco áspero a los duros pezones, lo cual a ella le gustó.
Barry:"No puedo esperar para volver a follar este culo perfecto", gruñó Barry, atrapado en el sexo sudoroso.
“Correte primero. Estoy tan cerca”, suplicó.
Barry:"Dilo", su otra mano envolvió su muslo para acercarse a su sexo. "Ruega por esto."
"Haz que me corra y te dejaré follarme el culo", Caitlin le dio lo que quería.
Luego cumplió su parte del trato. Con su mano ya en posición, extendió su dedo medio y lo acarició a través de sus pliegues rosados.
Sin embargo, él sabía lo que buscaba y apenas aisló su clítoris hinchado y comenzó a rasguearlo firmemente con su dedo.
Él aligeró el pellizco de su pezón derecho para que fuera más placentero que áspero, pero eso no importaba, Caitlin ya había pasado el punto de retorno.
Sus gritos de orgasmo fueron precedidos apenas por su coño apretando su polla antes de que su coño comenzara a rezumar su dulce semen sobre él.
Caitlin era una bola de músculos tensos encima de la cama cubierta de franela mientras uno de los orgasmos más poderosos de su vida sacudía su ágil cuerpo.
Después de un minuto, ella comenzó a aflojarse, lo que le permitió a Barry retirar lentamente su polla de su agujero.
Una vez libre, Caitlin liberó la tensión en sus brazos y apoyó la cara y las tetas en el suave colchón mientras su trasero permanecía en el aire, de cara a su novio.
"Santa... mierda...", jadeó Caitlin, pasando una mano por su largo y sedoso cabello.
"¿Dónde está tu lubricante?" Preguntó Barry, queriendo meterse en su trasero de forma rápida pero segura.
"Hazlo. Me derramé sobre ti”, explicó.
Barry miró hacia abajo y vio que ella estaba diciendo la verdad. Su polla estaba absolutamente cubierta de sus jugos y dudaba en ese momento si alguna lubricación hubiera ayudado en lo que estaba a punto de hacer.
Aunque no era ajena a tener una polla en su puerta trasera, Caitlin quería soltarse primero antes de llenarse con una enorme polla.
La morena se llevó la mano a la cara, se metió 2 dedos en la boca y les aplicó una generosa cantidad de saliva, cubriéndolos generosamente.
Barry esperó con la polla en la mano y observó cómo Caitlin extendía su brazo detrás de ella antes de que la científica de Star Labs encontrara su apretado culo con las puntas de sus dedos.
Después de untar una porción de su saliva en la abertura, hundió los dedos dentro y continuó moviéndolos hacia adentro y hacia afuera mientras se sodomizaba.
Aunque Barry estaba emocionado de volver a sodomizar a la hermosa morena, la primera vez desde su única vez hace una o dos semanas, estaba más que feliz de ver el programa.
Mientras acariciaba ligeramente su polla, observó cómo Caitlin gemía mientras se metía los dedos en el trasero, incluso añadiendo un tercer dedo.
Cuando parecía que estaba tomando los tres dedos con facilidad, Barry habló. "No puedo esperar más".
Caitlin usó sus rápidos reflejos para retirar los dedos de la puerta trasera y hacer espacio para su impaciente amante, aunque no lo culpó.
Ella lo tentó más dándole un pequeño movimiento a su adorable trasero, a lo que él respondió de la misma manera con una fuerte bofetada en su pálida mejilla.
Un agarre hecho de hierro agarró su cadera derecha, estabilizándola mientras Barry usaba su otra mano para guiarse hacia adelante.
Se sintió como si apenas se hubiera quitado la longitud de los dedos cuando el hombre de cabello castaño se acercó y plantó la punta bulbosa de su polla contra su agujero parcialmente abierto.
"Simplemente hazlo", instruyó, concentrándose en la calma.
Barry no dudó y avanzó con firmeza pero sin malicia. La combinación de la humedad de su eje, la actitud relajada de Caitlin y el aflojamiento que habían realizado sus dedos permitió que su cabeza desapareciera en su trasero sin problema.
Sólo el más leve gruñido escapó de sus labios mientras él descansaba con el primer centímetro dentro de ella.
Conociendo la forma correcta de practicar el sexo anal, Barry esperó a que Caitlin diera el siguiente paso, lo que ocurrió en poco tiempo.
Tan pronto como él penetró sus intestinos, Caitlin inclinó su peso hacia atrás para tomar los siguientes centímetros de su trasero.
"Qué apretado", gruñó Barry.
Una vez conseguido su sello de aprobación, Barry recuperó el control. Con dos manos sosteniendo ahora sus caderas para detener su movimiento, el Speedster comenzó a avanzar más hacia las profundidades de su ano.
Aunque fue lento, a Barry no le importó ya que sus pequeños golpes seguían metiendo más de su gorda polla dentro de ella.
Incluso con 6 pulgadas de su eje clavándose continuamente en su trasero, Caitlin continuó expresando su satisfacción, que se ahogó cuando comenzó a morder la manta debajo de ella.
Una y otra vez su enorme culo se estiró hasta lo que tenía que ser su límite para poder acomodar su ansioso sondeo.
La sonrisa en su rostro y la forma en que lo miró mientras él la taladraba solo ayudaron a elevar la lujuria que sentía por la chica sumisa.
Si ella estaba sufriendo por el implacable sexo anal que él le estaba dando, Barry nunca podría haberlo sabido.
Cada vez que toda la longitud de su polla se deslizaba fuera de sus intestinos sólo para perforarlos una vez más hasta que le llegaban hasta las pelotas, ella gemía.
De hecho, mientras mordía la manta de franela que había encima de la cama, la morena le instó exigentemente a que siguiera follándole el culo sin palabras.
Mientras él se aferraba firmemente a las curvas de sus caderas, donde su estrecha cintura bramaba para crear curvas modestas, ella movió su trasero de manera tentadora para él.
Él aceptó la invitación cada vez retrocediendo antes de clavarla con su lanza en su recto sin falta.
Caitlin estaba debajo de él y amaba cada segundo que pasaba de la sodomía. Había aprendido los secretos del sexo anal sin dolor, por lo que estaba feliz de ofrecer su lindo trasero a cualquier hombre que quisiera, y Barry no era la excepción.
Aunque sus embestidas eran demasiado fuertes, no le resultaban dolorosas, especialmente porque su mano frotaba su clítoris con tanta furia como lo hacía.
Sin necesidad de usar los brazos para mantener el equilibrio ya que su pecho y su cabeza descansaban sobre el colchón, Caitlin se llevó la mano libre a la cara.
Mientras su cuerpo se balanceaba por la constante e implacable sodomía, la morena se metió dos dedos en la boca y los chupó entre sus labios rojo rubí.
"Se siente increíble", gimió Barry, sudando.
Con la saliva cubriendo sus dedos, Caitlin deslizó su brazo hacia abajo por su cuerpo.
Su mano pasó la otra, todavía frotando su clítoris, luego pasó para poder empujar los dedos húmedos entre sus piernas.
Encontraron su objetivo, sus propios pliegues femeninos, y Caitlin comenzó a tocar su coño mientras la gruesa polla continuaba hundiéndose en las profundidades de su culo.
"Sigue... ugghh... awwhh... adelante", suplicó Caitlin.
Barry no sabía por qué tenía que preguntar ya que no tenía ninguna intención de detenerse.
Sin embargo, mientras su polla continuaba volando con ritmo hacia los rincones más profundos de su ano, su resistencia estaba siendo derrotada.
Se habría corrido hace mucho tiempo si no fuera por la mamada en la sala treinta minutos antes.
“Sí… sí… cerca. Oh, tan cerca”, jadeó Caitlin.
Cuando Caitlin se corrió por segunda vez desde que empezaron a follar en el dormitorio, fue el principio del fin para Barry.
Los orgasmos de la morena hicieron que su culo se apretara, lo que significó actuar como un vicio en la polla de Barry.
Su herramienta todavía estaba mojada y resbaladiza por lo que aún podía hundirse en su puerta trasera, pero a un costo.
La presión añadida era demasiado placentera para él y ahora era el momento de correrse.
"Mierda, necesito correrme", gruñó Barry con desesperación.
"Corre dentro de mí bebé", rogó Caitlin.
"No. De rodillas”, respondió ejerciendo la autoridad que ella le ofreció al inicio de la noche.
"Correcto. Quieres que me trague cada carga”, recordó inconscientemente Caitlin su comentario anterior.
Antes de que llegara su respuesta, Barry empujó profundamente sus entrañas por última vez.
Deseaba poder follar su pequeño y apretado culo por el resto de sus días dado lo bien que se sentía tener su esfínter ordeñando su polla, pero tendría que conformarse con un descanso por ahora.
Levantó las caderas hacia atrás una última vez y, en lugar de golpear la puerta trasera como lo había hecho durante los 20 minutos anteriores, se retiró por completo.
Mientras Caitlin se dejaba caer de espaldas, un pensamiento repentinamente golpeó al Speedster. "¡Mierda! Estaba justo en tu trasero…”
"No me importa", replicó Caitlin, sabiendo exactamente lo que quería decir. "Esta es tu noche".
Eso fue suficiente para Barry, que estaba muy feliz de no haber presionado demasiado a la chica.
Después de todo, Caitlin ya había llegado tan lejos, ¿realmente necesitaba correr el riesgo de perderla por llevarle la polla directamente de su culo a su boca?
Sin embargo, dio un suspiro de alivio cuando la morena aceptó su pedido y abrió mucho la boca.
Efectivamente, sintió su polla, que estaba pegada a sus jugos anales, golpear su lengua.
"¡Chupa, chupa, chupa!" exclamó Barry, con los ojos cerrados mientras se lanzaba hacia su orgasmo.
Caitlin no necesitaba consejos sobre cómo hacer que un chico se corriera. Todavía un poco borracha de semen, la morena todavía tuvo la presencia de ánimo para mover la cabeza con velocidad a lo largo de la primera mitad de su polla mientras usaba mucha succión.
Al instante, el fuerte sabor del culo explotó en su lengua y Caitlin se sorprendió al ver que no estaba disgustada.
La polla sin lugar a dudas salió directamente de sus entrañas, pero se sentía tan traviesa que realmente la disfrutó.
"¡Mierda! ¡A mí!" Barry gritó mientras se corría por segunda vez en menos de una hora.
Justo cuando Caitlin estaba obteniendo solo una pizca de sabor a culo de su polla, fue recompensada con un sabor completamente diferente.
A diferencia de chupar los jugos de su culo, que era un gusto nuevo, tener semen empapando sus papilas gustativas era algo a lo que Caitlin Snow estaba muy acostumbrada.
Permitiendo que su considerable carga de esperma llenara su boca por completo, Caitlin continuó moviendo su cabeza sobre su bulbosa cabeza hasta que el semen dejó de gotear y permitió que la belleza morena se tragara toda la masa de bebé por su garganta.
"Dios, eso fue tan jodidamente sexy", exclamó Barry con asombro, viendo a su novia chuparle la polla que estaba recién salida de su propio culo. “¿No te presioné demasiado al final?” Preguntó Barry, todavía a horcajadas sobre su pecho.
“¿Qué te dice esto?”, respondió Caitlin.
Barry salió de la confusión mental que tenía después de su maravilloso orgasmo y miró con asombro a su novia.
La morena inclinó la cabeza hacia adelante, hacia su ingle.
Su boca se abrió con asombro cuando su lengua contactó su polla y lamió toda su longitud.
Repitió esto tres veces más, acariciando su miembro de arriba a abajo, de izquierda a derecha hasta cubrir cada centímetro cuadrado de carne que había ocupado su recto no más de un minuto antes.
"Me dice que eres un pájaro sucio", sonrió. “Ahora creo que nos ganamos un postre. El sexo contigo aparentemente abre el apetito”, se rió Barry. "¿Quieres cualquier cosa?"
"Estoy sorprendentemente llena", respondió Caitlin antes de que su rostro estallara en una sonrisa de oreja a oreja.
"Oh, realmente estás sucio", sonrió antes de desaparecer.
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Fue un viaje corto desde el auto hasta la sala de estar, incluso más rápido debido a la supervelocidad. Después de un breve nanosegundo para abrir la puerta, Barry y Caitlin estaban de regreso en su apartamento, mirándose el uno al otro con hambre en los ojos.
Esta vez, cuando caminaron para encontrarse en medio de la sala había más calor, más electricidad. Se besaron con una intensidad que sólo conocen las parejas en esa fase de luna de miel de una relación, en la que Barry y Caitlin definitivamente encajaban.
Sus labios y lenguas no eran lo único activo en ese momento. Caitlin tenía sus manos manoseando su camisa de vestir, eventualmente desabrochó suficientes botones y se la pasó por la cabeza.
Mientras tanto, Barry entrelazó sus dedos en el frente de su camisa antes de separar rápidamente sus brazos, desabrochando cada botón de su blusa al mismo tiempo.
Caitlin:“Nunca deja de sorprenderme”, afirmó la científica con su dulce voz.
Él le sonrió con orgullo, pero en lugar de que la pareja se recostara el uno contra el otro, ambos se concentraron en sí mismos.
Barry usó sus manos para desenvainar el botón de sus pantalones ajustados antes de dejarlos caer, junto con sus boxers, alrededor de sus pies.
Mientras él se desnudaba, Caitlin se estiró hacia atrás, encontró el cierre de su sujetador y lo desabrochó.
Barry:"Simplemente hermoso", elogió Barry, observando su forma en topless.
Aunque tuvieron relaciones sexuales en varias ocasiones, él todavía se sentía asombrado al verla.
Los pechos de Caitlin eran montículos suaves y redondos, altos y alegres. Se ajustaban perfectamente a su esbelto físico y sabía que llenaban su mano cuando los agarraba.
Sus pezones rosados, un poco más delgados que la primera articulación de su pulgar, estaban duros debido a la excitación e hicieron que sus tetas parecieran hechas para ser chupadas.
Caitlin:"Dios, tienes una bonita polla", comentó Caitlin.
Su delicada mano estaba agarrando ligeramente su virilidad antes de que las palabras salieran de su boca.
Su boca cayó aún más cuando su suave palma y sus hábiles dedos se deslizaron suavemente alrededor de su circunferencia antes de moverse hacia arriba y hacia abajo.
Se tomó su tiempo para recorrer sus 8 pulgadas enteras mientras llevaba una cara que retrataba lo cachonda que estaba.
Barry:"Me tienes en desventaja", comentó Barry, enganchando los dedos en la cintura de sus pantalones.
Caitlin:"Oh, bueno, no puedo permitir eso", Caitlin sonrió fríamente mientras se desabrochaba los pantalones.
Después de bajarse los pantalones por las piernas, la morena ahora estaba frente a su amante completamente desnuda.
Él bebió de la vista de ella, permitiendo que sus ojos viajaran desde sus redondas tetas, pasando por su vientre plano y finalmente hasta su sexo.
Tal como lo había estado haciendo desde que comenzaron a dormir juntos, el espacio reservado para lo que debería haber sido un triángulo de rizos marrones apuntando a su coño estaba ausente.
En cambio, tenía una vista sin obstáculos de sus labios inferiores, de colores tan brillantes como sus pezones pero que ya brillaban por la humedad.
"Hermoso", resopló.
Caitlin le dedicó una sonrisa y luego volvió a ponerse delante de él. Se besaron con pasión y él sintió su mano bajar entre sus muslos.
Al segundo siguiente, un dedo grueso entró en sus pliegues, penetró su vagina y ella gimió en su boca. Le encantaba sentirlo dentro de ella, ya fuera su polla u otra parte del cuerpo, pero tenía otros planes.
Caitlin:"Deberíamos hablar sobre lo que queremos obtener esta noche", le dijo Caitlin, rompiendo el beso. "Pero hablar es aburrido, así que mientras lo hacemos, te chuparé la polla".
Y dicho esto, la científica estaba descendiendo hasta ponerse de rodillas, arrodillándose ante él en el duro piso de madera de la sala.
Barry se sorprendió, pero no iba a quejarse, sin embargo, en lugar de envolver sus labios regordetes alrededor de su virilidad, los usó para hablar de nuevo.
Caitlin:“Así que, como dije en la cena, quiero darte una pequeña recompensa después de callar a Iris tan noblemente. Por lo tanto, puedes hacerme lo que quieras esta noche”, dijo Caitlin mientras le acariciaba la polla.
Con una sonrisa malvada en su rostro, Caitlin deslizó su polla hacia su cara antes de envolver su bulbosa cabeza entre sus labios.
El hombre de cabello castaño no pudo evitar dejar un gemido audible mientras su boca caliente y húmeda trabajaba la primera mitad de su polla.
El chico cachondo ya estaba a punto de meter su carga en su boca una vez que ella comenzó a inhalar toda su polla en su boca con cada embestida.
Barry:"Sí. Chúpalo, nena”, gimió Barry deleite hacia la morena sucia.
"Mmmmm", gimió Caitlin mientras babeaba ruidosamente en su palito de carne.
Barry:“¿Cuáles son las restricciones?”, preguntó buscando más detalles y también para frenarla.
"Ninguno", respondió Caitlin sin perder el ritmo.
Desafortunadamente ella tuvo que apartar la boca de su virilidad para darle la respuesta, pero él agradeció el descanso aunque solo durara un momento.
El segundo después de dar su respuesta, los labios de la chica cachonda estaban envueltos alrededor de su reluciente polla, ya goteando mojada en su copiosa cantidad de saliva.
Barry:"¿Ninguno? Entonces, ¿te refieres a algo?
Honestamente, Barry habría estado feliz de tener su tipo de sexo "habitual" esta noche.
Después de todo, Caitlin Snow era hermosa y un verdadero placer en el dormitorio. Sin embargo, su oferta, sin mencionar la mamada en el instante en que entraron a la casa, hizo que su mente se acelerara.
Tuvieron sexo anal hace sólo unas semanas, pero no desde entonces. No es que a Caitlin no le gustara, después de todo tenían muy buena y clara comunicación en su relación.
Parecía que el sexo anal era para ocasiones especiales, ¡y aparentemente esta noche lo era!
Caitlin:“Tú estás a cargo esta noche, semental. No tenemos barreras. Puedes tener todo de mí”, respondió la científica de Star Labs.
Una vez que ella respondió, tal como lo había estado haciendo desde que comenzó a mamarlo, reanudó su trabajo.
Caitlin separó sus lujosos labios rojos y se pasó el largo cabello detrás de las orejas y luego lo llevó a su boca nuevamente.
Al igual que antes, Barry gimió audiblemente cuando ella comenzó a chuparlo mientras él se quedaba reflexionando sobre su respuesta.
"Sólo para que conste, sabes que estoy buscando el derecho anal", dijo sonriéndole.
Caitlin escuchó su pregunta pero no respondió de inmediato, aunque la respuesta era obvia para ella.
En lugar de eso, lo ignoró por el momento y comenzó a ganar impulso mientras movía la cabeza hacia arriba y hacia abajo por su imponente poste, tomando más de él dentro de ella cada vez.
Después de un buen minuto de una mamada más intensa, ella redujo el ritmo y luego le quitó la polla cubierta de saliva por completo.
Caitlin:"Soy plenamente consciente de lo que quieres", respondió la morena. “Tendrás acceso completo a todos mis agujeros. Se te permite correrte donde y con qué frecuencia quieras. Fóllame de la manera que quieras también”, explicó con un tono neutral. “Rudo, atado, suavemente durante horas. Lo que sea."
Caitlin quería aprovechar esta oportunidad para sentar un buen precedente para el resto de la noche, por lo que necesitaba su mejor juego.
Ella sacó la boca de su polla, ahora resbaladiza con su saliva, y usó su mano para golpear febrilmente su carne.
Ella hizo esto para poder usar su lengua para ayudar a acorralar su pesado saco y llevárselo a la boca.
Caitlin se turnó para llevarse cada nuez a la boca y darle la atención adecuada antes de volver a algo más sólido.
Ella movió la mitad de su palo entre sus labios mientras acariciaba la otra mitad.
Usando su mano libre para masajear su saco nuevamente, pudo escuchar cuánto apreciaba él lo que estaba haciendo.
Barry fingió pensar en su oferta por un momento antes de proclamar con entusiasmo: "Estoy dentro".
Caitlin:"Chico tonto, ya estás dentro, bueno, en mi boca de todos modos", dijo Caitlin en su sorprendente tono sucio.
Aunque no era su intención sacar al hombre lo más rápido posible, probablemente así lo sentía él.
Caitlin quería darle su mejor mamada ya que las anteriores se realizaron después de una noche de bebida o simplemente como juego previo antes de follar.
Ahora, sin embargo, ella lo estaba chupando con la única intención de hacerlo mamar para que él tuviera la experiencia completa.
Caitlin:"Te gusta cómo chupo", preguntó la morena de piernas largas con arrogancia en su voz.
“Sigue adelante”, suplicó mientras aplicaba presión hacia abajo en la parte superior de su cabeza para ayudar a transmitir su mensaje.
Caitlin:"Está bien, semental", respondió Caitlin mientras comenzaba a lamer su saco de nueces antes de recorrer lentamente su eje hasta encontrar la punta y envolver sus labios regordetes alrededor de ella.
Con sus labios nuevamente alrededor de su polla y sin necesidad de decir más palabras, Caitlin pudo concentrarse en la tarea que tenía entre manos.
Barry no pudo evitar mirar hacia abajo y observar a la morena mientras ella le daba placer.
Después de tomar la mitad de él en su boca para que ambos volvieran a tener un tono normal para la mamada, ella plantó sus labios completamente alrededor de él y meneó la cabeza hacia la punta.
Su boca se sentía cálida y húmeda para él, y la forma en que sus labios regordetes se arrastraban a lo largo de su piel resbaladiza hizo que su resistencia a bombearla llena de semen en ese mismo momento disminuyera.
"Si te gustó", dijo con un brillo en los ojos. "Entonces realmente deberías disfrutar esto".
Barry continuó mirando hacia abajo y observándola, especialmente después de sus crípticas palabras y sintió como mi cabeza bulbosa tocaba la parte posterior de su garganta.
Por lo general, en este punto la mayoría de las chicas tosían un poco y luego se retiraban rápidamente con lágrimas en los ojos, pero Caitlin no era la mayoría de las chicas.
La delgada morena siguió avanzando hasta que la punta se deslizó dentro de los estrechos confines de su garganta.
Continuó metiéndose más carne en la boca hasta que su linda nariz quedó enterrada en el vello púbico recortado de Barry y sus labios envolvieron el extremo de su palo.
“Dulce Madre de Dios”, fue todo lo que pudo gemir.
Caitlin sonrió para sus adentros ante su aprobación vocal de sus habilidades para hacer garganta profunda, pero no iba a dormirse en los laureles.
Ella continuaba hundiendo toda la longitud de su eje mientras él todavía la miraba, pero fue el tercer sentido que estaba usando lo que hizo que fuera una mamada tremenda.
Sus labios y garganta se sentían muy bien en su eje mientras se balanceaba en toda su longitud una y otra vez, mientras que ella estaba más que bien con dejarlo mirar hacia abajo y observar su talento, algunas otras chicas se sentían raras con eso.
Sin embargo, escuchar los gorgoteos cuando el científico de Star Labs le dio sexo oral húmedo fue realmente extraordinario.
Los ruidos solo aumentaron en volumen y frecuencia a medida que la mujer desnuda pasó de tomar lenta y metódicamente toda la polla de Barry a su garganta a aumentar enormemente la velocidad.
:“Baja el ritmo o la diversión se acabará antes”, advirtió .
Caitlin:"Tenemos toda la noche y dudo que te agote con una pequeña mamada", respondió ella, imperturbable en su lujuria por excitarlo.
Su sexo oral con garganta profunda le estaba dando a Barry más placer del que podría haber imaginado, aunque tenía un gran costo.
Por mucho que le hubiera gustado que la bella científica le hubiera chupado la polla todo el día y toda la noche, sabía que era una quimera. El hecho era que necesitaba correrse pronto...
Caitlin:"¿Vas a correrte pronto?" Preguntó Caitlin, aunque podía sentir la respuesta palpitando en su lengua.
Aparte de los frecuentes y reveladores espasmos de su virilidad, había otras formas en que ella sabía lo que se avecinaba.
Ella sintió que el agarre de su cabello en su mano se aflojaba. Podía ver su rostro cada vez más largo y contorsionado, ya que había mantenido bastante contacto visual mientras lo chupaba.
"Tan cerca", gimió con los ojos cerrados, pensando en formas de prolongar su orgasmo el mayor tiempo posible. "¿Dónde lo quieres?"
Caitlin:"Lléname la boca, Barry", animó sexymente Caitlin. "Quiero probar tu semen ahora mismo".
"Uggghhhhh", gruñó Barry cuando sus palabras lo llevaron al límite.
Caitlin sintió la primera ráfaga de su carga pegajosa golpear la parte posterior de su boca poco después de su fuerte gemido.
No le tomó mucho tiempo llenarle la boca con su excesiva cantidad de semen, pero Caitlin estuvo a la altura de la tarea.
Ella recogió cada gota que él le ofreció hasta que finalmente se secó. De un gran trago, la mujer cachonda tragó su carga cálida y salada, amando la sensación del líquido espeso mientras se deslizaba por su garganta.
Desde muy joven, Caitlin comprendió rápidamente que a los niños y ahora a los hombres les gustaba correrse en una mujer.
Podría ser su boca o su coño, no importaba, simplemente no querían salir. Rápidamente aprendió a acostumbrarse al sabor del semen y ahora, después de una década de tragar con gusto carga tras carga, le encantó.
El sabor salado era común para ella, y disfrutaba de la forma en que a los hombres les encantaba y de cómo su miembro palpitaba antes de derramarse sobre su lengua y luego moverse en su boca.
"Maldita sea", juró Barry.
Mientras su hombre estaba allí en medio de la sala de estar, Caitlin estaba contenta.
Ella los hizo tener un buen comienzo para recibir su recompensa por la forma en que cerró por completo a Iris, al mismo tiempo que le mostraba a Caitlin lo importante que era para el Speedster.
Sabía que Barry no necesitaba ningún tipo de recompensa, ni habría pedido nada parecido. Sin embargo, Caitlin estaba ansiosa por mostrar su agradecimiento de todos modos.
Con la cabeza de Barry inclinada hacia atrás, Caitlin sacó la lengua y lamió ligeramente su hendidura para orinar.
Más semen comenzaba a salir del agujero y ella estaba más que feliz de recogerlo y desecharlo en su estómago. La acción hizo que su novio se estremeciera, pero lo ayudó a salir del trance.
"¿Una solicitud?" Dijo Barry, mirando a su sonriente novia quien le dijo que continuara. "Siempre tragas".
Caitlin:"¿Cuándo no?", respondió Caitlin con un guiño. “¿Ahora puedo hacer una solicitud?”
"Supongo que sí", respondió Barry mientras veía su forma desnuda ponerse de pie.
Caitlin:“Llévame al dormitorio. Creo que tu fisiología metahumana nos dice que ya estás listo para la segunda ronda”, observó la científica.
Barry sonrió al aceptar sus términos. Aunque fácilmente podría haber usado su velocidad, esta vez el metahumano decidió cargarla y caminar con ella envuelta en sus brazos.
Era un apartamento bastante pequeño, por lo que era una caminata corta, pero Barry decidió ir despacio para poder besarse con su hermosa pareja todo el tiempo.
Después de llegar al dormitorio, volvió a colocar a Caitlin sobre sus pies, quien estaba de espaldas a él mientras quitaba algunas prendas sueltas de los pies de la cama.
Aunque acababa de correrse minutos antes, ver el trasero de Caitlin Snow fue suficiente para que su polla se endureciera.
Era una chica esbelta con caderas estrechas por lo que su trasero no era muy ancho, pero sí tenía un grosor impresionante.
Sobresalía a una buena distancia detrás de ella y sería descrito como un tope de burbuja según los estándares actuales.
Mientras ella limpiaba la ropa de la cama, Barry actuó. Se arrodilló detrás de la morena inclinada y enterró su rostro en su sexo.
Su lengua cortó fácilmente sus pliegues, mojada de emoción, antes de perforar su coño para lamer sus paredes internas.
"Oh Dios", gimió Caitlin.
Su única respuesta a sus gemidos de placer fue la forma ruidosa en que le comió el coño.
Una y otra vez, su lengua se hundió profundamente en su sexo y probó su esencia en la fuente, mientras él sentía un placer perverso al frotar su nariz contra su arrugado culo.
Barry:"Sí, te gusta eso, ¿no?", preguntó Barry, dándole un ligero golpe a cada una de sus adorables mejillas.
Caitlin gimió en respuesta, especialmente cuando él usó su lengua para hablar menos y comérsela más. Sin embargo, pronto el Speedster dejó de usar su lengua en absoluto y en su lugar solo usó sus dedos.
Barry siguió haciendo largos golpes comenzando en su clítoris, bajando a través de sus pliegues y luego divergiendo hacia afuera lo suficiente como para que sus dedos acolchados tocaran el borde exterior de su culo arrugado y luego invirtieron el curso.
"Qué broma", resopló Caitlin.
Por supuesto, las burlas continuarían. La morena sintió sus fuertes manos abandonar su trasero y la decepcionó.
Barry se puso más cómodo y bajó la cabeza para estar justo en frente del arranque del científico de Star Labs, pero no volvió a sumergirse de inmediato.
En lugar de eso, mantuvo el lento acercamiento y le dio besos y lamidas primero a la parte carnosa del trasero de Caitlin y luego estrechó la zona más cerca de la grieta.
Finalmente, Barry plantó un beso directamente encima de su culo, sin embargo no sacó la lengua, pero la chica científica sintió la presión en su puerta trasera de todos modos.
"Bromeo", dijo Caitlin, esta vez en voz alta.
Barry:“Bromear, ¿eh? Bueno, una burla haría esto”. Barry preguntó antes de actuar.
Caitlin ni siquiera se inmutó cuando sus fuertes dedos se clavaron en la suave carne de su regordete trasero.
Con un buen agarre en su lugar, Barry separó sus mejillas lo más que podían para darle fácil acceso al trasero de la chica de pie.
Esta vez no hubo demora cuando su lengua decidida encontró su estrella de mar arrugada y lamió su esfínter.
Caitlin:"Mhmm... mucho mejor", confirmó Caitlin.
Una y otra vez, Barry lamió su abertura y ocasionalmente incluso sumergió la punta de su hábil lengua más allá de la apretada barrera exterior para lamer sus paredes rectales internas.
Fue una lucha lograr la entrada, aunque Caitlin lo estaba ayudando relajando el tono de su anillo.
Caitlin:"Mhmm... oh sí", gimió Caitlin en agradecimiento.
"Dilo. Di lo que quieras”, incitó Barry.
"Sí... lame mi trasero", exigió la científica.
Y eso fue exactamente lo que hizo su novio. Su lengua realizó repetidamente movimientos largos y constantes sobre el agujero arrugado de la chica.
Con cada lamida que pasaba, el Speedster no podía evitar sorprenderse por la estanqueidad de cada orificio de su novia.
Su culo permaneció sellado a pesar de que las manos separaron el pequeño y regordete trasero de Caitlin, sin mencionar el hecho de que él sabía que ella no era una virgen anal.
Barry:"Te gusta que te coman el trasero", dijo Barry sobre la charla sucia.
Caitlin:"Qué desagradable", gimió Caitlin en señal de acuerdo. "Pero quiero esa polla dura dentro de mí".
Barry:"Creo que puedo lograrlo", sonrió Barry.
Para cuando Barry sacó su lengua del culo de la chica delgada y se puso de pie, Caitlin ya no estaba en el mismo lugar. Obviamente cachonda, no perdió el tiempo.
En lugar de esperar, saltó sobre la cama y se dejó caer con la cabeza sobre las almohadas.
Él la miró y la vio con el águila extendida sobre su espalda. Sabiendo que tenía su atención, se llevó una mano al coño y abrió bien los labios.
Le dio una vista excelente que reveló las profundidades de su vagina; perfectamente rosado por dentro y empapado en jugos y saliva.
Barry subió a la cama para reclamar lo que era suyo, encajando fácilmente entre sus piernas abiertas antes de que se envolvieran alrededor de su cintura.
Siempre habían usado condones cuando follaban, pero dada su actitud en ese momento estaba claro que hoy sería muy diferente.
Por favor, ella le estaba dando el control total y su deseo era renunciar al condón. Flotando sobre ella, Barry se inclinó para besar a su novia mientras su mano agarraba su virilidad alrededor de la base para estabilizarla.
No tuvo mucho tiempo para viajar ya que su punta encontró fácilmente sus pliegues antes de que un empujón tomara la mitad de su longitud en los húmedos confines de su coño.
"Awwh... sí", gimió Caitlin de placer.
No perdió el tiempo moviéndose dentro de ella, levantándose rápidamente para embestir toda su longitud de 8 pulgadas profundamente dentro de ella.
Ella dejó escapar largos gemidos y apretó sus piernas sorprendentemente fuertes alrededor de su musculosa cintura.
Se mudaron al unísono como una pareja que había estado junta durante años, a pesar de que solo habían estado saliendo durante semanas.
Una y otra vez, sus caderas se alzaron hacia atrás antes de lanzarse hacia adelante, metiéndose completamente en su coño.
Estaba apretada pero lo suficientemente suelta como para que su virilidad se deslizara hacia adentro y hacia afuera sin dolor ni restricciones.
Al ser la primera vez dentro de ella sin condón, notó lo mojada que estaba, sintiéndose como un resbalón y deslizamiento, lo que lo complació.
Su respiración se hacía más irregular y sus gemidos se hacían cada vez más fuertes, a veces gritos completos liberados en su oído cercano.
Caitlin claramente se estaba acercando al orgasmo, y a él le hubiera gustado dárselo, pero la rápida follada también lo estaba afectando a él. Necesitaba reducir el ritmo o detenerlo por completo si quería continuar.
"Vamos a darte la vuelta", gruñó Barry.
Al instante siguiente, él había salido de su coño, haciéndola sentir vacía y deseando tenerlo de nuevo dentro de ella.
Ella rodó de espaldas a su estómago, pero sólo por un momento. Rápidamente se levantó sobre sus manos y rodillas, poniéndose a cuatro patas.
Barry tampoco se tomó su tiempo para moverse. Su polla brillaba en la tenue iluminación del dormitorio en sus jugos, excitándolo.
Ver lo rápido que se puso en posición demostró lo ansiosa que estaba por follarlo, y en poco tiempo él estaba detrás de ella, de pie en el suelo con su polla en su entrada.
Él no esperó e inmediatamente empujó la mitad de su miembro nuevamente dentro de su sexo húmedo.
Encontraron su ritmo una vez más cuando él volvió a acariciar todo su grueso miembro dentro de su apretado coño a buen ritmo.
Tenía los ojos bien cerrados mientras su boca permanecía abierta para liberar torrentes de gemidos y gritos.
"Mhmm… awwhh… sí", gimió.
El largo cabello castaño de Caitlin, con una sensación de seda, caía en cascada sobre su rostro, balanceándose de lado a lado mientras su cabeza se movía hacia adelante y hacia atrás.
Cada vez que Barry la empujaba, su pelvis aplastaba su culo redondeado, provocando que la piel pálida y suave se ondulara por la fuerza.
Podía sentir su mano debajo de su cuerpo para acorralar su teta que colgaba y rebotaba, dándole un pellizco áspero a los duros pezones, lo cual a ella le gustó.
Barry:"No puedo esperar para volver a follar este culo perfecto", gruñó Barry, atrapado en el sexo sudoroso.
“Correte primero. Estoy tan cerca”, suplicó.
Barry:"Dilo", su otra mano envolvió su muslo para acercarse a su sexo. "Ruega por esto."
"Haz que me corra y te dejaré follarme el culo", Caitlin le dio lo que quería.
Luego cumplió su parte del trato. Con su mano ya en posición, extendió su dedo medio y lo acarició a través de sus pliegues rosados.
Sin embargo, él sabía lo que buscaba y apenas aisló su clítoris hinchado y comenzó a rasguearlo firmemente con su dedo.
Él aligeró el pellizco de su pezón derecho para que fuera más placentero que áspero, pero eso no importaba, Caitlin ya había pasado el punto de retorno.
Sus gritos de orgasmo fueron precedidos apenas por su coño apretando su polla antes de que su coño comenzara a rezumar su dulce semen sobre él.
Caitlin era una bola de músculos tensos encima de la cama cubierta de franela mientras uno de los orgasmos más poderosos de su vida sacudía su ágil cuerpo.
Después de un minuto, ella comenzó a aflojarse, lo que le permitió a Barry retirar lentamente su polla de su agujero.
Una vez libre, Caitlin liberó la tensión en sus brazos y apoyó la cara y las tetas en el suave colchón mientras su trasero permanecía en el aire, de cara a su novio.
"Santa... mierda...", jadeó Caitlin, pasando una mano por su largo y sedoso cabello.
"¿Dónde está tu lubricante?" Preguntó Barry, queriendo meterse en su trasero de forma rápida pero segura.
"Hazlo. Me derramé sobre ti”, explicó.
Barry miró hacia abajo y vio que ella estaba diciendo la verdad. Su polla estaba absolutamente cubierta de sus jugos y dudaba en ese momento si alguna lubricación hubiera ayudado en lo que estaba a punto de hacer.
Aunque no era ajena a tener una polla en su puerta trasera, Caitlin quería soltarse primero antes de llenarse con una enorme polla.
La morena se llevó la mano a la cara, se metió 2 dedos en la boca y les aplicó una generosa cantidad de saliva, cubriéndolos generosamente.
Barry esperó con la polla en la mano y observó cómo Caitlin extendía su brazo detrás de ella antes de que la científica de Star Labs encontrara su apretado culo con las puntas de sus dedos.
Después de untar una porción de su saliva en la abertura, hundió los dedos dentro y continuó moviéndolos hacia adentro y hacia afuera mientras se sodomizaba.
Aunque Barry estaba emocionado de volver a sodomizar a la hermosa morena, la primera vez desde su única vez hace una o dos semanas, estaba más que feliz de ver el programa.
Mientras acariciaba ligeramente su polla, observó cómo Caitlin gemía mientras se metía los dedos en el trasero, incluso añadiendo un tercer dedo.
Cuando parecía que estaba tomando los tres dedos con facilidad, Barry habló. "No puedo esperar más".
Caitlin usó sus rápidos reflejos para retirar los dedos de la puerta trasera y hacer espacio para su impaciente amante, aunque no lo culpó.
Ella lo tentó más dándole un pequeño movimiento a su adorable trasero, a lo que él respondió de la misma manera con una fuerte bofetada en su pálida mejilla.
Un agarre hecho de hierro agarró su cadera derecha, estabilizándola mientras Barry usaba su otra mano para guiarse hacia adelante.
Se sintió como si apenas se hubiera quitado la longitud de los dedos cuando el hombre de cabello castaño se acercó y plantó la punta bulbosa de su polla contra su agujero parcialmente abierto.
"Simplemente hazlo", instruyó, concentrándose en la calma.
Barry no dudó y avanzó con firmeza pero sin malicia. La combinación de la humedad de su eje, la actitud relajada de Caitlin y el aflojamiento que habían realizado sus dedos permitió que su cabeza desapareciera en su trasero sin problema.
Sólo el más leve gruñido escapó de sus labios mientras él descansaba con el primer centímetro dentro de ella.
Conociendo la forma correcta de practicar el sexo anal, Barry esperó a que Caitlin diera el siguiente paso, lo que ocurrió en poco tiempo.
Tan pronto como él penetró sus intestinos, Caitlin inclinó su peso hacia atrás para tomar los siguientes centímetros de su trasero.
"Qué apretado", gruñó Barry.
Una vez conseguido su sello de aprobación, Barry recuperó el control. Con dos manos sosteniendo ahora sus caderas para detener su movimiento, el Speedster comenzó a avanzar más hacia las profundidades de su ano.
Aunque fue lento, a Barry no le importó ya que sus pequeños golpes seguían metiendo más de su gorda polla dentro de ella.
Incluso con 6 pulgadas de su eje clavándose continuamente en su trasero, Caitlin continuó expresando su satisfacción, que se ahogó cuando comenzó a morder la manta debajo de ella.
Una y otra vez su enorme culo se estiró hasta lo que tenía que ser su límite para poder acomodar su ansioso sondeo.
La sonrisa en su rostro y la forma en que lo miró mientras él la taladraba solo ayudaron a elevar la lujuria que sentía por la chica sumisa.
Si ella estaba sufriendo por el implacable sexo anal que él le estaba dando, Barry nunca podría haberlo sabido.
Cada vez que toda la longitud de su polla se deslizaba fuera de sus intestinos sólo para perforarlos una vez más hasta que le llegaban hasta las pelotas, ella gemía.
De hecho, mientras mordía la manta de franela que había encima de la cama, la morena le instó exigentemente a que siguiera follándole el culo sin palabras.
Mientras él se aferraba firmemente a las curvas de sus caderas, donde su estrecha cintura bramaba para crear curvas modestas, ella movió su trasero de manera tentadora para él.
Él aceptó la invitación cada vez retrocediendo antes de clavarla con su lanza en su recto sin falta.
Caitlin estaba debajo de él y amaba cada segundo que pasaba de la sodomía. Había aprendido los secretos del sexo anal sin dolor, por lo que estaba feliz de ofrecer su lindo trasero a cualquier hombre que quisiera, y Barry no era la excepción.
Aunque sus embestidas eran demasiado fuertes, no le resultaban dolorosas, especialmente porque su mano frotaba su clítoris con tanta furia como lo hacía.
Sin necesidad de usar los brazos para mantener el equilibrio ya que su pecho y su cabeza descansaban sobre el colchón, Caitlin se llevó la mano libre a la cara.
Mientras su cuerpo se balanceaba por la constante e implacable sodomía, la morena se metió dos dedos en la boca y los chupó entre sus labios rojo rubí.
"Se siente increíble", gimió Barry, sudando.
Con la saliva cubriendo sus dedos, Caitlin deslizó su brazo hacia abajo por su cuerpo.
Su mano pasó la otra, todavía frotando su clítoris, luego pasó para poder empujar los dedos húmedos entre sus piernas.
Encontraron su objetivo, sus propios pliegues femeninos, y Caitlin comenzó a tocar su coño mientras la gruesa polla continuaba hundiéndose en las profundidades de su culo.
"Sigue... ugghh... awwhh... adelante", suplicó Caitlin.
Barry no sabía por qué tenía que preguntar ya que no tenía ninguna intención de detenerse.
Sin embargo, mientras su polla continuaba volando con ritmo hacia los rincones más profundos de su ano, su resistencia estaba siendo derrotada.
Se habría corrido hace mucho tiempo si no fuera por la mamada en la sala treinta minutos antes.
“Sí… sí… cerca. Oh, tan cerca”, jadeó Caitlin.
Cuando Caitlin se corrió por segunda vez desde que empezaron a follar en el dormitorio, fue el principio del fin para Barry.
Los orgasmos de la morena hicieron que su culo se apretara, lo que significó actuar como un vicio en la polla de Barry.
Su herramienta todavía estaba mojada y resbaladiza por lo que aún podía hundirse en su puerta trasera, pero a un costo.
La presión añadida era demasiado placentera para él y ahora era el momento de correrse.
"Mierda, necesito correrme", gruñó Barry con desesperación.
"Corre dentro de mí bebé", rogó Caitlin.
"No. De rodillas”, respondió ejerciendo la autoridad que ella le ofreció al inicio de la noche.
"Correcto. Quieres que me trague cada carga”, recordó inconscientemente Caitlin su comentario anterior.
Antes de que llegara su respuesta, Barry empujó profundamente sus entrañas por última vez.
Deseaba poder follar su pequeño y apretado culo por el resto de sus días dado lo bien que se sentía tener su esfínter ordeñando su polla, pero tendría que conformarse con un descanso por ahora.
Levantó las caderas hacia atrás una última vez y, en lugar de golpear la puerta trasera como lo había hecho durante los 20 minutos anteriores, se retiró por completo.
Mientras Caitlin se dejaba caer de espaldas, un pensamiento repentinamente golpeó al Speedster. "¡Mierda! Estaba justo en tu trasero…”
"No me importa", replicó Caitlin, sabiendo exactamente lo que quería decir. "Esta es tu noche".
Eso fue suficiente para Barry, que estaba muy feliz de no haber presionado demasiado a la chica.
Después de todo, Caitlin ya había llegado tan lejos, ¿realmente necesitaba correr el riesgo de perderla por llevarle la polla directamente de su culo a su boca?
Sin embargo, dio un suspiro de alivio cuando la morena aceptó su pedido y abrió mucho la boca.
Efectivamente, sintió su polla, que estaba pegada a sus jugos anales, golpear su lengua.
"¡Chupa, chupa, chupa!" exclamó Barry, con los ojos cerrados mientras se lanzaba hacia su orgasmo.
Caitlin no necesitaba consejos sobre cómo hacer que un chico se corriera. Todavía un poco borracha de semen, la morena todavía tuvo la presencia de ánimo para mover la cabeza con velocidad a lo largo de la primera mitad de su polla mientras usaba mucha succión.
Al instante, el fuerte sabor del culo explotó en su lengua y Caitlin se sorprendió al ver que no estaba disgustada.
La polla sin lugar a dudas salió directamente de sus entrañas, pero se sentía tan traviesa que realmente la disfrutó.
"¡Mierda! ¡A mí!" Barry gritó mientras se corría por segunda vez en menos de una hora.
Justo cuando Caitlin estaba obteniendo solo una pizca de sabor a culo de su polla, fue recompensada con un sabor completamente diferente.
A diferencia de chupar los jugos de su culo, que era un gusto nuevo, tener semen empapando sus papilas gustativas era algo a lo que Caitlin Snow estaba muy acostumbrada.
Permitiendo que su considerable carga de esperma llenara su boca por completo, Caitlin continuó moviendo su cabeza sobre su bulbosa cabeza hasta que el semen dejó de gotear y permitió que la belleza morena se tragara toda la masa de bebé por su garganta.
"Dios, eso fue tan jodidamente sexy", exclamó Barry con asombro, viendo a su novia chuparle la polla que estaba recién salida de su propio culo. “¿No te presioné demasiado al final?” Preguntó Barry, todavía a horcajadas sobre su pecho.
“¿Qué te dice esto?”, respondió Caitlin.
Barry salió de la confusión mental que tenía después de su maravilloso orgasmo y miró con asombro a su novia.
La morena inclinó la cabeza hacia adelante, hacia su ingle.
Su boca se abrió con asombro cuando su lengua contactó su polla y lamió toda su longitud.
Repitió esto tres veces más, acariciando su miembro de arriba a abajo, de izquierda a derecha hasta cubrir cada centímetro cuadrado de carne que había ocupado su recto no más de un minuto antes.
"Me dice que eres un pájaro sucio", sonrió. “Ahora creo que nos ganamos un postre. El sexo contigo aparentemente abre el apetito”, se rió Barry. "¿Quieres cualquier cosa?"
"Estoy sorprendentemente llena", respondió Caitlin antes de que su rostro estallara en una sonrisa de oreja a oreja.
"Oh, realmente estás sucio", sonrió antes de desaparecer.
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