Mi mujer cazó al pijudo...(parte 1)

...o el pijudo cazó a mi mujer, no me queda claro. Luego de haber ido al gimnasio llegó a casa unas tres horas después. Ni bien cruzó la puerta se me abalanzó y me comió la boca de un beso. Nos pusimos a chapar y sin mediar palabra alguna me empezó a acariciar el bulto, abrió el cierre del pantalón y metió sus dedos apretándome la pija. Seguíamos besándonos y fuimos así hasta la cama, donde nos empezamos a desnudar rápidamente. "Cojiste? " le pregunté con la voz entrecortada por la calentura. "Sí" me respondió. Acto seguido me llevó una mano a sus tetas y llevándola con su mano me hizo acariciarle el cuello, los pechos y la panza. Estaba completamente bañada en semen ya seco. "Y eso que me lavé la cara y las manos" me dijo ya gimiendo.
-te bañó - le dije ya con extremada excitación.
-despues te cuento- me dijo y siguió besándome mientras se acostaba boca arriba en la cama jalandome para ponerme encima de ella.
Sólo tuve que apuntar la cabeza de mí pija hacia su vagina para que desaparezca dentro de ella como por arte de magia. Es bastante estrecha y jamás había sentido esa vagina tan abierta. Casi no sentía el contacto al bombear. En menos de un minuto me dijo que la saque que le dolía, sentía que le raspaba. Se puso en cuatro y me acomodé para besarle la cola. Primero algunos mordiscos suaves en sus nalgas y fui llevando mí lengua hacia el ano. Le di varios besos negros, un dedo y se lo metí. Entró como si nada y redoblé la apuesta. Los dos dedos se deslizaban sin problemas mientras ella movía las caderas como cojiendolos. Llene de saliva el glande y me dispuse a penetrarla. Hacía mucho tiempo que no cojíamos por atrás. Ambos estabamos en éxtasis. Creo que no pasaron ni cinco minutos y le avisé que estaba por acabar. Me dijo con vos entrecortada y dando vuelta la cabeza para mirarme: "acabame adentro".
Creo que al instante de pronunciar esas palabras comencé a eyacular y ella acabó también.
Me tiré boca arriba en la cama y se acostó al lado mío, de costado abrazándome y me dijo al oído mientras me acariciaba suave y lentamente el pene y los testículos: "perdón que te lo diga así, pero no sabés la tremenda pija que me comí ".
Continuará.