Tía y sobrino ... con mamá?

Estaba en la pileta boludeando, hacia un calor terrible y en mi casa no teníamos donde refrescarnos así que veníamos a la casa de mis tíos.
Eva es mi tía, hermana de mi vieja, casada con Juan.
Juan es un viejo boludo que se la pasa trabajando en el campo y prácticamente solo está los findes, los cuales se los pasa durmiendo o mirando carreras de autos.
Eva es una cuarentona pero fitness, no aparenta su edad. Yo no entendía como podía estar con mi tío, que le sobresalía la panza cervecera tapándole el pito hundido. Pobre mujer.
Toco el timbre.
"Hola?"
"Hola tia, soy yo, vengo a la pileta un rato"
"Está abierto, entrá"
La saludo, me invitó algo para beber y fuimos al patio.
"Tu mamá no viene? Que está haciendo?"
"No sé, le dije que venga pero da mil vueltas"
"Si es boluda, con el calor que hace, queres que me meta con vos así no te dejo solo?"
"Como vos quieras tía, si vos queres, por mí genial"
"Ojito con mirar a tu tía eh jajaja"
"Y bueno, soy chico y sabes como funciona"
"Como funciona el que?"
"Dale tía, no te hagas"
"Decime, hable ahora o calle para siempre"
La dejé ahí.
Eva tenía cierta fama en el boca en boca. Las malas lenguas decían que mi tío era cornudo y ella aprovechaba sus días en el campo para satisfacer sus necesidades. Yo entraba en el rango, entonces, porque estábamos en miércoles y solo estábamos nosotros.
"Tía y el tío? Se la pasa trabajando, no?"
"Ni me hables, te digo la verdad? Me tiene cansada"
"Pero se lo dijiste? Imagino que vos como mujer debe ser jodido"
"Puede ser, por que lo decis?"
"Y bueno tía, este, yo decía porque vos como mujer..."
"Si?"
"No, que vos como mujer, este, seguro lo debes extrañar, no se digo, no?"
"Ay mi amor jaja si, tenes razón, lo extraño, soy mujer, que deducción más brillante jaja"
"Y que haces?"
"Que hago con qué?"
"Cuando lo extrañas"
"Me queres preguntar si me hago la paja?"
Era la primera vez que hablaba así con mi tía. Ella estaba sobre la esquina de la pileta, sentada sobre el borde y remojando los pies. Lucía una bikini que me estaba llevando la sangre del pito a hincharse.
"Si no te molesta si"
"Si, me gusta tocarme"
"Perdoname tía que te pregunté esto, yo no soy así, no le cuentes nada a mamá, puede ser?"
"Yo te conté un secretito de tu tía, ahora quiero uno tuyo"
"Y que queres saber?"
"Mmmm lo mismo, te gusta hacerte la paja?"
"La verdad? Llevo una racha de 3 por día, así que la respuesta seria si"
"Jajaja no lo puedo creer, todos los días 3 veces? Y te quedan ganas?"
"Si fuera por mi seguiría todo el día, pero tengo que ir a estudiar o a entrenar y no puedo jaja"
"Ojalá tu tío fuese así, acaba una vez y no llega al minuto"
"Enserio?"
"Ay no debería estar contándote esto, pero si, por eso te digo que estoy cansada"
Lo pensé unos minisegundos y tomé la decisión más valiente en mi corta vida.
Me dirigí nadando hacia ella.
"Tía, si me das permiso, te puedo dar lo que una mujer hermosa como vos merece"
"Estamos yendo muy lejos amor, somos familia"
"Quien se va a enterar? Además somos chico y chica, ambos tenemos necesidades y lo queremos"
"Ni una palabra a tu madre ni al tío, está?"
"Levantá las piernas tia"
Puso sus pies sobre el borde y me dejó toda su bombacha hacia mí. Yo no tenía mucha experiencia con mujeres pero lo poco que había hecho lo consideraba suficiente, más allá del aprendizaje diario de tanto ver porno.
Le corrí la tela hacia un costado y dejé su concha al descubierto. Olía a jazmines.
"Te la voy a chupar, tia"
"Hacé lo que quieras pero hacelo ya antes de que me arrepienta"
Empecé a chuparle los labios y la fui babeando en círculos, su clitoris lucia gordito y pidiendo por favor que lo comiera. Eso hice.
"Ayyyyyyy Dios santo, Santa María"
"A que el tío no te come asi"
"Que va a hacer ese inútil, no hables y seguí por favor"
Le mordí un rato ese clitoris que se iba poniendo rojo cada vez más. Empecé a utilizar las manos que para algo las tenía y coloqué 2 dedos dentro de esa concha jugosa.
"Cuantos dedos te entran, tía?"
"Mmmm me suelo meter 3"
"Y atrás?"
"Atrás hay telarañas, tu tío se olvidó de que tengo otro agujero extra"
"Al tío no le gustaba?"
"Por eso te decía que estoy cansada, solo cuando nos casamos y en la luna de miel me la metió pero después decía que le daba asco, tsss hombres..."
Le metí un dedo más en la concha. Y otro. Y le metí la mano completa. Había visto un montón de videos de fisting y esa concha se abría de par en par. Metía y sacaba el brazo lentamente. Mi tía aullaba.
Con la otra mano levanté un poco su culo hacia mí y le metí 2 dedos en el culo. Ella se arqueó y se molestó pero no me paró.
"Ni se te ocurra"
"Ni se me ocurra qué?"
"Ese lugar es sagrado"
"Y para qué te lo guardas? Si tu marido no se ocupa dijiste"
Quedó pensativa. Yo seguí con mi labor. Con la mano derecha entrando y saliendo de su concha brillosa, con la otra ya le tenía 2 dedos dentro de su ano, me los sacaba para probarselos en su boca que ponía cara de asco pero los chupaba por completo y volvía a meterselos.
Estuvimos así varios minutos. Ella se desprendió el corpiño y dejó sus tetas al aire. Unas tetas bastante firmes, para su edad, con unos pezones erguidos y pidiendo ser comidos.
"Quiero cojerte, tia"
"No puedo, sos mi sobrino"
"Mirá como estamos, tengo las manos dentro de tus agujeros y me estas mostrando las tetas, que más hace falta?"
"Prometeme que esto queda acá, por favor"
"Te lo prometo tia"
"Yo también se los prometo" - dijo una voz que venia de la puerta. Ambos nos giramos y la vimos con los brazos en jarra. Era mi mamá. Su hermana y su hijo...
.
.
.
Continuará?