Hola Soy Javier, tengo 45 años y esto pasó hace 20 años, pero las secuelas de eso todavía las sigo viendo. Las veo cuando mi esposa Vanesa cada tanto sufre de hemorroides. Hemorroides que cuando la conocí no tanía y por hacerme el macho dominante la cosa se me fue de las manos.
En esa epoca estaba estudiando cominicación en la universidad y ahi conocía a Vanessa. Al principio no le daba mucha bola porque la verdad a pesar de que estaba buena era y es un poco gordita y quería algo mejor. Siempre me creí el macho del grupo y tenía una actitud muy creida y prepotente. Vane en ese tiempo era una morochita de tes blanca ojos marrones oscuro unas tetas talla 100 que era lo mejor que tenía y una cola bastante respetable. Después de mucho insistirme comencé a salir con ellay a las pocas semanas la invite a mi casa.
Vivía en una pensión donde la dueña de la casa era una vieja gorda que no permitía mujeres en la pensión, estaba juntada con un viejo de unos 60 años, Don Carlos. El viejo era un asco, media 1.65 como mucho, pelado y le faltaban varios dientes. Si bien la vieja no era una belleza, hasta que me pasó lo que me pasó, nunca entendí como alguien como Rosa siendo una vieja tan pituca le había dado bola a ese viejo tan impresentable. Todas las noches se ponia a ver boxeo y a fumar un par de benson para luego ir a dormirse. En la pensión no se permitían mujeres y de echo solo había dos personas en la misma, Luis y yo. Luis era un flaco de 1.8 mts delgado rubio y fachero pero muy introvertido, estudiaba informatica y se la pasaba todo el día estudiando y metido en su habitación, por mi parte media 1.9 contextura robusta tirando gordito y ni feo ni lindo, morocho y muy sociable. De hecho decidí compartir parte de mi vida social con ese pendejo porque me daba lastima.
Mi historia creo que arranca cuando una noche cuando sabía que Rosa no iba a estar decidí invitar a Vane a casa para tener un poco de intimida. Luis iba a salir al cine a ver Matrix asi que tenía como 3 horas para estar solos. Estabamos en el living besándonos cuando escuchamos la llave de la puerta del fondo de la casa. Me cague en las patas porque pensé que era Rosa la que había llegado y no tuvimos tiempo de esconder a mi novia. Por suerte no era ella sino Luis. Se había olvidado la billetera y volvió a buscarla. No tuve opción que decirle que Vanesa era mi novía y que no podía decirle nada a Rosa. El me dijo que me relajara que el no había oido o visto nada asi que tranquilo. Lugo que se fue y mas confiado que nadie iba a venir invité a Vanesa a mi dormitorio y tuvimos sexo por primera vez. No fue la mejor experiencia porque ella era virgen pero debo de reconocer que Vanesa se banco bien mis 19cm de verga. Me dijo que algo le había dolido cuando la penetré. Y para mi orgullo cuando acabé y saque mi pija de dentro de ella tenía todo el forro con manchas de sangre, para mi orgullo había sido su primer hombre y eso me llenaba de vanidad. Pero ademas de haberla desflorado Vane había había cambiado en su semblante, dejó de ser la gordita inocente para dar paso a una mujer que le encantaba disfrutar del sexo.
Los meses siguientes ya habiendole sacado la ficha de los horarios de Rosa y Don Carlos, sabía cuando se quedaban en una casa de campo que tenían. Por lo general Rosa se iba los fines de semana y Luis viajaba a visitar a sus padres por lo que la casa me quedaba para mi y mi novia. No voy a entrar en detalles lo que hacíamos pero solo voy a decir que no quedó rincon de la casa donde no la hubiese cogido, incluso en la cama de Doña Rosa. Para estas instancias Vane cabalgaba mi pija como una amazona y habíamos decidido que tomara la pastilla por lo que no usabamos forros y con cada sesiónn de sexo le terminaba inundando la concha de leche.
En esa epoca estaba estudiando cominicación en la universidad y ahi conocía a Vanessa. Al principio no le daba mucha bola porque la verdad a pesar de que estaba buena era y es un poco gordita y quería algo mejor. Siempre me creí el macho del grupo y tenía una actitud muy creida y prepotente. Vane en ese tiempo era una morochita de tes blanca ojos marrones oscuro unas tetas talla 100 que era lo mejor que tenía y una cola bastante respetable. Después de mucho insistirme comencé a salir con ellay a las pocas semanas la invite a mi casa.
Vivía en una pensión donde la dueña de la casa era una vieja gorda que no permitía mujeres en la pensión, estaba juntada con un viejo de unos 60 años, Don Carlos. El viejo era un asco, media 1.65 como mucho, pelado y le faltaban varios dientes. Si bien la vieja no era una belleza, hasta que me pasó lo que me pasó, nunca entendí como alguien como Rosa siendo una vieja tan pituca le había dado bola a ese viejo tan impresentable. Todas las noches se ponia a ver boxeo y a fumar un par de benson para luego ir a dormirse. En la pensión no se permitían mujeres y de echo solo había dos personas en la misma, Luis y yo. Luis era un flaco de 1.8 mts delgado rubio y fachero pero muy introvertido, estudiaba informatica y se la pasaba todo el día estudiando y metido en su habitación, por mi parte media 1.9 contextura robusta tirando gordito y ni feo ni lindo, morocho y muy sociable. De hecho decidí compartir parte de mi vida social con ese pendejo porque me daba lastima.
Mi historia creo que arranca cuando una noche cuando sabía que Rosa no iba a estar decidí invitar a Vane a casa para tener un poco de intimida. Luis iba a salir al cine a ver Matrix asi que tenía como 3 horas para estar solos. Estabamos en el living besándonos cuando escuchamos la llave de la puerta del fondo de la casa. Me cague en las patas porque pensé que era Rosa la que había llegado y no tuvimos tiempo de esconder a mi novia. Por suerte no era ella sino Luis. Se había olvidado la billetera y volvió a buscarla. No tuve opción que decirle que Vanesa era mi novía y que no podía decirle nada a Rosa. El me dijo que me relajara que el no había oido o visto nada asi que tranquilo. Lugo que se fue y mas confiado que nadie iba a venir invité a Vanesa a mi dormitorio y tuvimos sexo por primera vez. No fue la mejor experiencia porque ella era virgen pero debo de reconocer que Vanesa se banco bien mis 19cm de verga. Me dijo que algo le había dolido cuando la penetré. Y para mi orgullo cuando acabé y saque mi pija de dentro de ella tenía todo el forro con manchas de sangre, para mi orgullo había sido su primer hombre y eso me llenaba de vanidad. Pero ademas de haberla desflorado Vane había había cambiado en su semblante, dejó de ser la gordita inocente para dar paso a una mujer que le encantaba disfrutar del sexo.
Los meses siguientes ya habiendole sacado la ficha de los horarios de Rosa y Don Carlos, sabía cuando se quedaban en una casa de campo que tenían. Por lo general Rosa se iba los fines de semana y Luis viajaba a visitar a sus padres por lo que la casa me quedaba para mi y mi novia. No voy a entrar en detalles lo que hacíamos pero solo voy a decir que no quedó rincon de la casa donde no la hubiese cogido, incluso en la cama de Doña Rosa. Para estas instancias Vane cabalgaba mi pija como una amazona y habíamos decidido que tomara la pastilla por lo que no usabamos forros y con cada sesiónn de sexo le terminaba inundando la concha de leche.
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