Vi cuando el vecino se estaba cogiendo a mi mamá 6

Como dije en el relato anterior después de que mi mama y el vecino estuvieron cogiendo en el baño, ambos se fueron directo a la recamara principal y se acostaron en la cama completamente desnudos, y ya sin ningún pude ver claramente el vecino acariciaba a mi mama. Y ya cuando la lujuria y la calentura regreso de nuevo a sus cuerpos mi mama y el vecino se enredaron en las sabanas comenzaron a devorarse a besos.
Yo me fui a mi recamara a tratar de dormir, sin embargo eso sería imposible, ya que era la primera vez que el vecino se quedaría con mi mama toda la noche; desde mi recamara podía escucharse como tronaban sus bocas por los besotes que mi mama y el vecino se daban.
Como mencione anteriormente, puedo describir perfectamente lo que mi mama y el vecino se decían ya que el depravado este, grababa en un casete de esa época, todos los sonidos y cosas que se decían él y mi mama mientras cogían.
Yo me quede con esos casetes y no sé porque me los quede y los escuchaba, esa noche en especial mi mama y el vecino estaban tan calientes de pasar su primera noche juntos, que mientras cogían, no dejaron de decirse cosas depravadas y lujuriosas, esto es lo que les oí decirse:
Vecino: ¿Quieres algo duro y enorme dentro de tu boca?
MAMA: ¿Qué, mi amor?
VECINO: Esta
MAMA: ¡Uy así de dura, la quiero adentro!
VECINO: Quiero masturbarme en tu boca metértela toda, hoy si te la vas a comer toda chiquitaaaa¡
MAMA: Ok, tengo que decirlo… Quiero chupártela YA…
VECINO: Estas bien buena, tanto que lamería todo tu cuerpo me encanta verte desnuda
MAMA: Si, bebe, ¿Quieres lamer mi cuerpo?
VECINO: Mmmmhhh siiiii chiquita, ahhhhh quiero darte lengua y verte retorcerte de place y tu, ¿Cuántas ganas tienes de sexo ahora mismo?
MAMA: Si, mi amor, métemela asiiii asiiiiiiiii, métemela todaaaa aaahhh, acaba conmigo
VECINO: Ahhhh no puedo más ricura ahhhhh esto es lo que mas deseaba quedarme contigo toda la noche, cogiendote!
MAMA: Siii chiquitooo ahhhhh quiero que me devores a besos, que me babees y sobre todo quiero tenerte entre mis piernas”.
VECINO: Pues preparate chiquitaaaa aahhhhhh porque no te voy a dejar dormir en toda la noche mmhhhhhh voy a cogerte hasta que amanezca ahhhhhhhh
MAMA: ¡Oh bebe¡ ¿Te encanta estar dentro de mi?
VECINO: Ahhhhhh chiquitaaaa espero que tu cama aguante mmhhhhh porque tu y yo vamos a revolcarnos toda la noche ahhhhhhhh
MAMA: Ahhhhh siiiii bebe ahhhhhh ouhhhhhh quiero sentir tus manos sobre todo mi cuerpo ahhhhhh siiii bebe ven otra vez hazme tuyaaaaaaa ahhhhhhhh
Yo no aguante más escuchando todo eso y fui directo a la recamara donde estaban ellos, encontré la puerta entreabierta y fui testigo de cómo en ese momento los amantes seguían diciéndose palabras obscenas, mi mama y el vecino estaban sobre la cama, hincados, uno enfrente del otro besándose, ambos se veían locos de deseo y es que era impresionante ver la manera en que mi mama y el vecino se besaban con total lascivia a bocas abiertas, devorándose sus lenguas.
Pero lo más excitante estaba por ocurrir, mi mama y el vecino comenzaron a masturbarse mutuamente, el vecino metía sus dedos en el sexo de mi mamita y la estimulaba mientras mi mama con su mano comenzó a chaquetearlo.
Así, estando mi mama y el vecino desnudos sobre la cama, pude ver como se masturbaban uno al otro, ambos se miraban con lujuria y deseo, en ese momento mi mama y el vecino eran dos amantes en celo urgidos de placer; el aroma viril que proyectaba su lujuria, comenzó a encenderlos de nuevo, la intensidad con la que se masturbaban mutuamente se acrecentaba a cada instante, lo que termino por calentarme fue ver cómo se besaban, ver como mi mama y el vecino sacaban sus grandes lenguas y las introducían uno en la boca del otro, se besaban muy rico, lo disfrutaban, lo más excitante era oír los chasquidos de como tronaban sus bocas por los besotes que se daban. con cada beso, con cada caricia, sus cuerpos desnudos comenzaron a suplicar que nuevamente se necesitaban.
¿Te gusta?, pregunto mi madre, mmmju, mamacita ahhhh me tienes tan excitado, respondió el vecino, expeliendo aire como si su corazón se hubiera acelerado; el vecino gemía como en trance, fue entonces que vi como mi mama comenzó a chuparle el pene lentamente, primero lamiéndole la punta, bajando por el tronco y luego rozándole las bolas.
¿Te gusta, bebe? Pregunto mi madre, ohhhh, no parees, mmhhh mamacitaaaaa que ricooooo, mmmhhhh exhalo el vecino, mi mama se atragantaba con el miembro en su boca, mientras el vecino se retorcía de placer. Y así otra vez empezaron las frases obscenas
VECINO: Mmmhhhh siiii, asíiiiii me encanta… Chúpalo, ahhhhh mamacitaaaa me pones tan caliente, ahhhhhh no aguanto las ganas chiquitaaaaa aahhhhhh quiero cogerteeeeee ahhhhhhh
MAMA: Ahhhhh ouuuuhhh bebe mmhhhh la tienes demasiado grande, se siente muy rico!
VECINO: Ahhhhh chiquitaaaaa me encanta lo caliente que te ves chupando mi macana mmhhhhh
MAMA: Ahhhhh, mmmhhh, bebe esto es lo que más deseaba que ricoooo ahhhhh mmhhhhh
De repente ocurrió otra situación que nuevamente superaba el pudor y la lujuria de que he sido testigo, el vecino se levanta y le dice a mi mamita, ven chiquita, quiero agasajarme viéndote desnuda acostada en la cama de frente a mí, cuando mi mama quedo acostada frente a él, el vecino le dijo chiquita, mastúrbate.
Lo increíble fue que mi madre acepto, ella estaba completamente dominada por él, el vecino se había adueñado de su voluntad; mi madre se lamio dos dedos y así viendo al vecino de frente y mordiéndose el labio inferior, mi mama comenzó a masturbarse.
El vecino con la boca completamente abierta por la excitación de ver como mi mama se masturbaba, expreso:
Vecino: Asíiiiii , asíiiiiiii, ahhhhhh no mames chiquita que rico, síguete masturbando, mmmhhhhh así fue como el vecino comenzó a masturbarse también sin dejar de mirar a mi mamita con su mirada excitada y libidinosa.
Mama: ¿Te gustaaaa bebe?
El vecino exclamo: Ahhhhh, siiiiii chiquita, ya me prendiste otra vez, mmmhhhhh no sabes cómo te deseo, mamacitaaaaa ya quiero cogerte otra vez ahhhhh.
Mi mama le sonrió y mordiéndose el labio inferior, arqueo la espalda y abrió las piernas, estaba tan excitada que no podía hablar; así fue que el vecino no aguanto más, se acercó, se recostó encima de mi mamita, y empezó a cogérsela.
El vecino le empino por completo su macana a mi mamita, gimiendo a medida que se lo hundía, oooohhhh, mmmmhh, mi mama apretó la sabana con los puños y hundió el rostro en una almohada para ahogar los gemidos; ambos se fundieron en un abrazo caliente, y empezaron a agitarse, acoplados como si fueran uno solo, gimiendo y gruñendo, mientras la madera de la cama rechinaba de manera excitante debajo de ellos.
Yo era testigo de cómo el vecino penetraba a mi madre con su movimiento rítmico de cadera, una y otra vez sin parar; ambos rodaban por la cama, comiéndose a besos. Era excitante ver como el vecino gozaba a plenitud, al estar entre las piernas de mi mama,
El vecino y mi mama estaban cogiendo de una manera por demás excitante, de pronto los amantes estaban restregándose y acariciándose sus cuerpos desnudos, lo más rico era ver que mientras se besaban ambos juntaron sus lenguas y comenzaron a mamárselas con placer. Las manos del vecino fueron describiendo ágilmente una ruta sobre la piel de mi mama, primero en los redondos senos de mi madre, luego por sus caderas, por su cintura, pero lo mas delirante era ver como el vecino volvió se deleitaba acariciandole sus deliciosas piernas a mi mamita.
Era impresionante ver la manera en que mi mama y el vecino se estaban revolcando, rodaban por la cama hasta quedar como atravesados, acostados en horizontal; el vecino se estaba cogiendo a mi mama con un deseo fuerte y latente, empujándole aquella pieza animal, enterrándosela sin detenerse, con los ojos encendidos de éxtasis.
De pronto, el vecino puso un pie en la cama y continúo cogiéndose a mi mama, clavándole hasta el fondo su macana prensada a mi mamita. Los senos de mi madre brincaban con cada una de sus arremetidas y el vecino las apretaba con sus manos varoniles; las nalgas de mi mama rebotaban en la ingle del vecino, a medida que el arremetía sin parar, agitando su cadera. Así fue como de repente, ambos volvieron a decirse sus frases candentes:
VECINO: Ahhh no mameeees, ricura, ahhhh que rico va a ser estar en tu cama toda la noche, encima de ti, ahhhhhh cogiéndote mmmhhhhhh
MAMA: Ahhhhh, ouuuhhhh, bebe, ¿Te esta gustando cogerme? Ahhhhhh mmhhhh ahhhhhh
VECINO: Ouuhhh mmmmhhh siiiiii chiqutaaaa ahhhhhhh ¡Esto es lo que más deseaba mmmhhhhhh ahhhhhh quedarme contigo toda la noche cogiéndote! Ahhhhhhhh mmmhhhh
MAMA: Ahhhhh ouuuuhhh ¡Que bárbaro, que grande la tienes, ahhhh se siente muy rico! ahhhhh
Yo no pude más me saque mi pene y comencé a masturbarme, y es que como podía aguantarme al ser testigo de semejante escena sexual; era increíble pero yo ya estaba muy caliente, mientras en la cama sin importar nada el vecino se seguía cogiendo a mi mama.
Mi mama y el vecino rodaban por la cama, estrujándose con pasión, parecían un par de animales en celo, ambos entrelazaron sus piernas como si quisieran enredarse y no volver a separarse, hasta que de repente sus bocas volvieron a encontrarse, mi madre y su amante se miraron de frente, se sonrieron y comenzaron a besarse con lascivia, sus bocas húmedas y lujuriosas se empalmaron un buen rato, mordisqueándose mutuamente.
El vecino estaba convertido en un verdadero animal, estaba desatado, hundiendo su cadera entre las piernas de mi mamita, el gemía como un toro ouuuhhhh mmmmhhhh y así mientras ella, le acariciaba su cabellera rizada y espesa a él, hundiendo sus dedos en sus hebras gruesas, sin perder más tiempo el vecino comenzó a mamarle los senos a mi mamita.
Era excitante ver como el vecino poseía a mi madre; el vecino se estaba cogiendo a mi mama con un deseo fuerte y latente, empujándole aquella pieza animal, enterrándosela sin detenerse, con los ojos encendidos de éxtasis; mientras mi mama nuevamente apretaba la sabana con los puños y ahogaba sus gemidos en la almohada.
El vecino se movía vertiginosamente mientras penetraba con fuerza a mi mamita; fue entonces que mi madre comenzó a masturbarse de nuevo; los gemidos del vecino se trasformaron en gruñidos, mientras mi mamita totalmente excitada continuo masturbándose.
Poco después, el vecino tomo a mi mama por la cintura y la coloco encima de él, y así acomodando su pene en la hendidura de mi madre comenzó a penetrarla de nuevo, cuando mi madre tenía el pene del vecino bien adentro se puso como en trance y comenzó a menearse, inclinando sus senos hacia adelante para que así, el vecino pudiera mamárselos a placer.
No puedo explicar la sensación que sentía en ese momento al ver como mi mama estaba desnuda contoneándose encima del vecino mientras este, la penetraba; los senos de mi madre brincaban, sus nalgas rebotaban en la ingle del vecino y la respiración de ambos se agitaba cada vez más, a medida que las sensaciones se intensificaban. El vecino deslizo rápidamente sus manos por las nalgas de mi mama, enterrándole sus dedos estrujándole las nalgas a mi mamita, en cuanto más rápido la contoneaba; el vecino tomo a mi madre por la cintura y le alzo la cadera para enterrarle su pieza hasta la base, mi mama arqueo la espalda y continuo a meciéndose y contoneándose, y así, mientras mi mama y el vecino cogían como desesperados, volvieron a las frases candentes:
MAMA: Ahhhhh, mmmhhh, chiquitooo me encanta sentirte adentro mío, me coges tan ricooo ahhhhh
VECINO: Mmmhhh ahhhhh, prepárate no te voy a dejar dormir en toda la noche voy a cogerte hasta que amanezca
MAMA: Uy siiiii ahhhhh así de dura la quiero adentro todaaaa la nocheee ahhhhh!
VECINO: Ahhhh, no mameees estas bien buenaaaa, tanto que lamería todo tu cuerpoooo me encanta verte desnudaaaa ahhhhhh, mis ganas de ti no se quitan ahhhhhh
MAMA: Siiii siiii asiiiii que rico mmmmhhhh ahhhhhh coges bien ricooooo mmmmhh ahhhhhh
VECINO: Ahhhhh siiiiiiii mamacita mmmhhhhh me encanta como te mueves ahhhhhhh ouuhhhhh
Mama: Ahhhh siiii bebe sigue, aahhh sigue, mmmhhh quédate adentro de mi ahhhhh ouuhhhh
VECINO: Ahhhhhh mamacita ahhhhh se siente tan bien tenerlo dentro de ti ahhhhh mmmhhhhhh
MAMA: Mmmmhhh oooooh aaahhhh no puedoooo aguantar maaaassss ahhhhhh
VECINO: Vente mi amor… Vente! Vente ya ay siii…vamooooos
El vecino comenzó a darle más y más duro a mi mama, tomándola por la cadera el vecino le empujo su palo hasta hundírselo hasta el fondo a mi mamita, ambos tenían los ojos en blanco y exhalaban gemidos de placer con la boca totalmente abierta jadeando ambos gritaban ahhhhh me vengooo ahhhhh me vengooooo ahhhhhh de repente al ver la expresión de placer de mi mama y el vecino así como su respiración agitada, eso solo indicaba una sola cosa, que mi mama y el vecino estaban a punto de venirse.
Mi mamá y el vecino apretaron el ritmo y se desbocaron en la efervescencia eterna del orgasmo, ambos estallaron juntos, el vecino ahogo sus gemidos, apretó el rostro y mordiéndose los labios, disparo un chorro de leche sobre el cuerpo de mi madre.
Como recién salido de un sauna, el vecino se despegó de mi madre y se desplomo boca arriba sobre la cama, sonriendo y satisfecho jalo a mi mama para recostarla junto a él, pero ahí no acabo todo ya que mientras mi mama quedo recostada boca arriba, el vecino se sentó encima de ella y aprisionándole sus manos con las rodillas hundió su pene en la boca de mi mamita para que así, ella le absorbiera todo el semen que había chorreado.
Así, mientras el vecino obligaba a mi mamita a que le siguiera haciendo sexo oral, yo no pude más y me fui de nuevo a mi cuarto a tratar de dormir aun sabiendo que el vecino no iba a dejar en paz a mi mama en toda la noche.

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