Mi hija Jolette empezó a crecer más rápido de lo normal cuando entro al colegio a segundo grado.
Empecé a gastar más dinero en útiles escolares y en uniformes porque a esa edad crecen muy rápido. Habíamos acordado mi esposa Diana y yo en ir el fin de semana a comprar ropa nueva para Jolette a la plaza comercial.
Llegó el sábado por la mañana y mi hija aún estaba desayunando en el comedor y viendo la televisión. Yo recién me desperté y entre a la ducha enseguida. Mi esposa había salido al centro comercial que estaba a unas cuadras por leche fresca y yo terminé de la ducha muy rápido, así que olvidé la toalla de secar en el tocador principal del baño. Grité a mi hija Jolette que viniera a donde el baño a pasarme la toalla. Ella llegó muy rápido y atendió mi llamado. Cuando me pasó la toalla pude notar que ella tenía una especie de curiosidad en su mirada. Aún que fué muy rápido, sentí su mirada al pasarme la toalla y su olor de perfume de sandía se mezclaba con el olor a jabón de la ducha. Solo fueron unos segundos en lo que me pasó la toalla pero cuando lo noté mi pene estaba erecto. Sentí algo muy extraño por obvias razones, y no sabía porque la erección si en la noche había tenido buen sexo con mi esposa.
Luego espere un momento a que se me bajara la erección en la ducha y me sequé rápido para irnos al centro comercial.
Jolette llevaba puesto un pants y unos tenis blancos. Cuando caminaba noté que había crecido mucho a su corta edad. Su pants se le marcaba mucho en las nalgas y sus senos ya estaban muy pronunciados. Varios señores le miraban mucho su cola, a pesar de que es una niña aino. Mi esposa se daba cuenta como le miraban los senos a Jolette y su culo sobre todo, así que le dijo que se tapara más la cola con un suéter.
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Empecé a gastar más dinero en útiles escolares y en uniformes porque a esa edad crecen muy rápido. Habíamos acordado mi esposa Diana y yo en ir el fin de semana a comprar ropa nueva para Jolette a la plaza comercial.
Llegó el sábado por la mañana y mi hija aún estaba desayunando en el comedor y viendo la televisión. Yo recién me desperté y entre a la ducha enseguida. Mi esposa había salido al centro comercial que estaba a unas cuadras por leche fresca y yo terminé de la ducha muy rápido, así que olvidé la toalla de secar en el tocador principal del baño. Grité a mi hija Jolette que viniera a donde el baño a pasarme la toalla. Ella llegó muy rápido y atendió mi llamado. Cuando me pasó la toalla pude notar que ella tenía una especie de curiosidad en su mirada. Aún que fué muy rápido, sentí su mirada al pasarme la toalla y su olor de perfume de sandía se mezclaba con el olor a jabón de la ducha. Solo fueron unos segundos en lo que me pasó la toalla pero cuando lo noté mi pene estaba erecto. Sentí algo muy extraño por obvias razones, y no sabía porque la erección si en la noche había tenido buen sexo con mi esposa.
Luego espere un momento a que se me bajara la erección en la ducha y me sequé rápido para irnos al centro comercial.
Jolette llevaba puesto un pants y unos tenis blancos. Cuando caminaba noté que había crecido mucho a su corta edad. Su pants se le marcaba mucho en las nalgas y sus senos ya estaban muy pronunciados. Varios señores le miraban mucho su cola, a pesar de que es una niña aino. Mi esposa se daba cuenta como le miraban los senos a Jolette y su culo sobre todo, así que le dijo que se tapara más la cola con un suéter.
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1 comentario - Mi hija Jolette (parte 1)