Los amigos de mi esposo - Relato

Hola a todos! Para quién ha sido fiel y ha leído todos mis relatos les agradezco, también aquellos que me han demostrado que realmente los pone a full jeje,...

De aquél día de capacitación y el regreso, no se tocó más el tema, pues ambos eran casados y al parecer Rosa era muy comunicativa...

Para quién no ha leído me presento, mi nombre es Sofía, SofMa para los amigos... Soy una chica de 1.67 de altura y 67 kg de peso, amplias caderas, labios carnositos mamadores y unas ricas tetas, soy de piel blanca y me encanta saber que sacan lechita por mí...

Fue una semana entretenida entre el trabajo y la casa, aunque algo cansada... No pensé que la vida laboral fuera así.

de miércoles que regresé de mi capacitación, al sábado al medio día que concluía mi jornada laboral todo había sido tranquilo, no había tenido ni por la cabeza, experimentar de nuevo lo que acababa de descubrir en mí, que me encanta montar y comer lechita de otros envases...

el sábado a la 1 p.m. me llamó mi esposo, él también estaba saliendo de laborar, pero se iría a una cantina con tres amigos de él.

Yo ese día no tenía planes, por lo que decidí ir a descansar de la semana tan pesada que sentí tener.

Fui a casa, me di un refrescante baño y mientras me enjabonaba, pasé mi mano suavemente por mi sexo, teniendo sensaciones de placer y por mi mente pasó como brotaban la leche aquellas vergas que me había comido días anteriores....
Comencé a masturbarme y a frotarme las tetas, me encontraba sola en casa por lo que gemía demasiado sin miedo a que me fuesen a escuchar. Un timbre abrumador sonó de repente y tuve que parar mi rico acto.

Al parecer había llegado la pizza que encargué, rápidamente me puse una bata de baño y salí a recibir, al abrir la puerta, me encontré con un joven alto, fornido, aunque algo feo jeje, tenía en sus manos una caja de pizzas, por lo que me entregó y le pedí me permitiera un momento para regresar con el dinero, pensé cerrar la puerta, pero inconscientemente la dejé abierta y di media vuelta, me dirigí al mueble que tenía en el recibidor y abrí la bolsa, me tomé mi tiempo para buscar el dinero, pues en el espejo de re ojo veía como aquél repartidor, se apretaba su pantalón mientras veía el comienzo de mis nalgas por debajo de la bata. Aquello me calentó y accidentalmente se me cayó un billete, por lo que me agaché sin doblar las rodillas y pudo ver completamente todo mi sexo, rápidamente dí vuelta al levantarme y el se sorprendió y se soltó su pantalón, fuí hasta con él y le dí el dinero, se despidió y se fue... Aquella situación me había dejado súper excitada, así que decidí arreglarme para esperar a mí esposo a que me diera mucha verga, me puse un conjunto azúl que él me había regalado, era de encaje transparente y una tanguita azul que apenas me tapaba mi rajita, me tumbé a la cama y me puse a ver un poco de televisión, pues normalmente cuando va a la cantina, llega a eso de las 4 p.m. y ya eran las 3:30... Le mandé mensaje y le dije que dormiría un poco, él no me contestó así que dormité, entre sueños escuché la puerta de la entrada abrir suavemente y después ya no se escuchó ningún ruido.

Seguro ya llegó, pensé... Aunque al no escuchar ruido me preocupé y me puse a pensar si no había sido el aire si la dejé mal cerrada al abrir yo la puerta, por lo que decidí bajar y si era mi esposo, sorprenderlo para que me cogiera en dónde me lo encontrara...

Al bajar por las escaleras noté que la puerta ya estaba cerrada, por lo que definitivamente era mi esposo, así que me tumbé la bata y decidí buscarlo con aquél conjunto sexy que traía puesto, escuché ruidos en la cocina, el sólo imaginar que me cogería encima de la mesa o de la barra me puso a mil, sentía como se me mojaba la tanga sólo de pensarlo, lo vi agachado buscando algo en las puertas de la cocineta y salté con un "Bu" para asustarlo, no sabiendo quién se sorprendería era yo, pues él definitivamente no era mi esposo, era Javier, uno de los mejores amigos de mi esposo, quién tiene una complexión sumamente parecida a la mía, por la sorpresa me quedé en shock que ni taparme pude, él se puso ruborizado y me dijo -Hola Sofma una disculpa que entré sin avisar, los chicos están en el jardín prendiendo el asador y me mandaron por las pinzas-

Yo, aún sin poder hablar, le indiqué dónde estaban por lo que él me dijo,- Ya las busqué en ese lugar pero nada, sabes como estoy de tonto, ¿me las podías dar?-

En este momento, supe que él definitivamente sabía lo que hacía pero, muy inteligentemente me las pidió, pues se encontraban en un cajón abajo y me tendría que agachar, recordé aquél momento con el repartidor y seguí me calenté más, decidí agarrarlas de la misma manera, pues al fin de cuentas mi esposo tenía la culpa por no haberme avisado y de igual manera, yo me encontraba cómoda en mi casa.

Agaché sin doblar rodillas y me puse a buscar entre las cosas, las pinzas se encontraban a simple vista, las agarré en tres ocasiones y las soltaba, pues no quería que me dejara de ver, las tomé en un cuarto intento y se las entregue viéndolo a los ojos, él no me soportó la mirada o no quiso, pues volteo para todos lados menos conmigo.

salió de la casa rumbo al jardín y yo subí enfurecida con mi esposo por no haberme avisado, le comencé a mandar textos dignos de una esposa "enojada".
cito:
-Por que me haces esto, me dijiste que estarías en la cantina un ratico y te estaba esperando sexy, ahora el cabronsete de javier, pudo ver a tu esposa como sólo tú la deberías de ver, espero te sientas conforme y satisfecho, muero de vergüenza y no pienso bajar hasta que se vayan, ni pienses que se van a meter a la casa pues yo NO me pienso cambiar ni tapar y así andaré, estaré en mi habitación, pero si tengo que bajar a algo, bajaré así, ya tu sabes si quieres que alguien más me vea-

No me contestó, se escuchaban risas y voces a lo lejos, yo la verdad no estaba enojada, estaba excitada, me sentía sexy, empoderada, comencé a masturbarme nuevamente, ya que por lo que ví, estaban tomando bastante y mi esposo cuando está en casa le gusta tomar hasta desmayarse. Seguro que ese día no me atendería...

Pasaron las horas y por eso de las 9pm, bajé por algo a la cocina, así, sin taparme, yo ya había advertido, para pasar a la cocina, después de bajar las escaleras, pasar el recibidor, tenía que pasar por la sala para llegar.

En la sala se encontraba mi esposo, Javier, Sergio y David. Tres amigos de años de él, sus mejores amigos diría yo.

Pasé de largo y supe que me estaban comiendo con la mirada ya que en cuánto pase se quedaron callados, rápidamente me alcanzó mi esposo en la cocina pidiéndome disculpas, pero al parecer había empezado a llover y se tuvieron que meter, ya estaba algo tomado, así que no le importó en definitiva como iba vestida yo.

Le dije que estaba bien, pero que no me pensaba cambiar, que ese, era problema de él. Regresó con sus amigos y siguieron su plática, ya estaban todos tomados, pero muy ambientados.

Pasé nuevamente, cuando Javier me interceptó con un comentario -Sofma, ven a tomarte una copita con nosotros, ya que estamos de intrusos en tu casa, de perdido para que te sientas cómoda-

Los demás asintieron emocionados, pues por como estaba vestida, me podrían ver mis pezones por las transparencias del atuendo que traía y mis ricas piernas.

Me sorprendió que mi esposo dijera, ándale, ven con los muchachos no seas fresa.

Para darle en el orgullo y ponerlo celoso, acepté, sentándome en el sillón disponible que estaba frente a los cuatro.

Siguieron su plática, hablaban de carros y trabajo, cuando Javier me comenzó a dirigir preguntas a mí, como me iba en el trabajo, que me habían parecido mis compañeros, etc,etc.

Yo seguí el ritmo de la plática, sin morbo alguno, cuando Sergio dijo, pero esto está muy callado y yo ya me estoy quedando dormido, pondré algo de música en el estéreo, al cabo Sofma aquí esta y por ella no la poníamos.

Se levantó y puso música, comenzó con música de banda, todos sabían que a mí esposo no le gustaba bailar nada, aunque a mí me encantara. Se dirigió con migo y me pidió la mano, me estaba pidiendo salir a bailar con él, me levanté y empecé a bailar, pues yo lo que quería era hacer enojar a mi esposo, con el baile y el movimiento de cadera, podía enseñar mis nalgas a los otros tres, nadie decía nada, en las vueltas, notaba como me veían con morbo, pues en mayor parte, Sergio se encargó de que les diera la espalda, supongo para que me vieran mis nalgas o no se diera cuenta mi esposo que con su mano derecha "Sujetando mi mano" la tenía pegada a mi teta y apretaba en ocasiones...

Así seguimos un par de canciones, cuando Javier dijo, me toca a mí,, pero yo no bailo eso, soy más de perreo. Puso un reggaeton lento y comenzó a restregarse en mí, sentía lo abultado que tenía el miembro, Sergio apagó la luz diciendo -"para que parezca antro" Por lo que por unos segundos no se veía nada más que sombras, Javier rápidamente aprovechó y me apretó mis tetas y mis nalgas lo más rápido que pudo, mi esposo con un tono algo molesto dijo "prendan la luz" mejor juguemos baraja....

Todos hicieron caso y comenzaron a jugar, pero los que perdieran, tenían que dar un shot de tequila, no sé si yo soy buenísima a las cartas o de plano lo ebrio que estaban no les dejaba pensar, pero estaban uno tras otro, mi esposo se levantó a orinar y demoró algo, Javier fue a buscarlo y regresó con él casi cargado, se había dormido en la taza... Lo recostó en el sillón y él no daba señales de poder despertarse, decidimos seguir un rato más el juego, David, el más serio de los 3, dijo. "SofMa no ha tomado, así que chiste".

Todos comenzaron a abuchear y seguir la corriente y yo les repliqué - Pero de perdido les he estado enseñando las tetas y las nalgas, no les parece suficiente.

Yo no quiero tomar, mejor que les parece si regresamos a la bailada. Los tres rápidamente se levantaron, apagaron la luz y se acercaron a mí.

Mi esposo al estar dormido, no interrumpiría nuevamente.

Pusieron música suave y los tres se turnaban para embarrar su verga entre mis nalgas, aún con el pantalón, yo "simulando taparme para que no llegaran" ponía mi palma de la mano tratando de cubrir mis nalgas, pero era más que nada para poner mi mano en sus vergas, lo cuál funcionó de maravilla, ya que pude sentir la verga parada de los 3.

La calentura estaba a full conforme bailabamos, más descarados eran y tocaban mis tetas, mis nalgas, me agarraban de las piernas, Javier me comenzó a besar, Sergio sacó mis tetas y las comenzó a chupar mientras David me embarraba la verga en las nalgas, se alejó poquito y regresó a mí, pero esta vez pude sentir aquella verga frotandose en mi culo, sin pantalón, sin bóxer, carnita solamente....


Les dije que necesitabamos saber si mi esposo no despertaría, por que no quería problemas para seguir bailando, David me sorprendió, no sé si estaba tomado, excitado o así se llevan pero dijo, -Este no se levanta ni a vergazos, mira- Y sujetando su verga le dió palmadas en la cara a mi esposo, se la pasó y mi esposo como si nada.

Yo me quedé callada, estaba viendo como una verga estaba tocando la cara de mi esposo, me acerqué a él y me agaché, le dije mejor dámelas a mí.

se acercó y metió su verga gruesa y llena de pelos conmigo, se la empecé a chupar como una desquiciada, se acercaron los otros dos y me hicieron sacarselas a ellos, de pronto tenía tres vergas a la altura de mi cara, "me estoy superando" pensaba yo, pero eso no me importaba, se las chupaba con mucha pasión, Javier me levantó y me inclinó, comenzó a meter su verga ruda y salvajemente en mí, - No te ibas a escapar de mí puta, sé que eres una zorra-
esto me ponía a full, estaba siendo penetrada, mientras mamaba y jalaba verga y con mi esposo dormido en la sala...

A David, se la estaba chupando, recordando como se la había puesto a mi esposo en la cara, cuando de pronto me dijo...

-Si tanto te preocupa tu esposo, que das el culo para que a él no le haga nada, tu deberías de preocuparte por la limpieza de la casa, eres una zorra, te gusta la verga,- Se salió de mi boca y se fue con mi esposo, arrojandole la leche en toda la cara a él.

Me levanté y fui con él, pasé toda la lengua por su cara tratando de rescatar toda la leche calientita que se estaba desperdiciando, Javier dijo - Yo no la pienso desperdiciar, me voy a venir adentro- y con un alarido sentí chorros llenándome de placer, Sergio seguía con la verga parada y me dijo - Yo quiero el culo o esto sale a la luz,.- el muy cabron estaba grabando todo, no hice más que empinarme, de espaldas a él y ofrecerle mi culo en bandeja de plata,

-Sólo que dame despacio- Le dije,

El sólo me contestó mientras de un golpe metió toda su verga, ya que era delgada y no muy grande mientras me decía -Nada de despacio zorra, este culo pide verga, eres una perra- Me cogió por unos minutos y también derramó toda su leche en mí...

Los tres se cambiaron y se despidieron de beso de mí, diciédome en manera de burla. "Luego venimos al recalentado".

Mi esposo al día siguiente tenía una resaca increíble, y definitivamente, no recordaba nada de lo que había pasado.

Lo desperté con un desayuno rico, pues gracias a él, me habían dado una cena increíble.
Los amigos de mi esposo - Relato

2 comentarios - Los amigos de mi esposo - Relato

Antelesex +1
Con esa culo yo también te contrato
Hectorlu11
Y esperaremos ese vídeo eh.. buen relato