Mi papá me quiere coger. Parte 1

Yo vivo sola con mi papá, ya que cuando mis padres se divorciaron yo elegí quedarme con el y mi hermana con mi mamá. 
Nuestra relación es bastante buena porque aunque sea su hija siempre me ha tratado como si fuéramos mejores amigos, hablamos de lo que sea sin problema, jugamos, viajamos juntos, salimos de compras y me da mucha libertad para hacer lo que quiera.
El sexo nunca ha sido un tema taboo para nosotros, de hecho cuando yo empecé a experimentar, el tuvo esa charla conmigo acerca de usar protección, tener cuidado con quién lo hago y todas esas cosas de padres a hijos. 
Soy su mayor tesoro, por eso síempre me dice lo bonita que soy, el gran cuerpo que tengo y lo mucho que me aprecia. 
Ahora sí, habiendo dado el contexto de nuestra relación ahora viene lo caliente. Al vivir sola con el, yo le pregunto que tal se me ve la ropa cuando salgo y el siempre dice cosas bonitas, pero llegó el día en que empecé a utilizar ropa más corta y ajustada, a lo que el no estaba de acuerdo pero no me decía que me la quitará o cambiará, solo aceptaba que su hija ya estaba creciendo y tenía que cambiar su forma de vestir. Unos de los momentos más incómodos fue cuando el descubrió que usaba tangas, yo las lavaba a parte para que no se diera cuenta pero un día una se colo entre toda la demás ropa y al lavarla se percató de ella, no me dijo nada hasta que me entrego la ropa limpia, puso la tanga hasta arriba para que la viera, se me heló la sangre al pensar que me regañaria pero solo me dijo que era algo normal y no tenía que esconder nada de el, que había suficiente confianza como para contar esa cosas, y así fue nunca más escondí mis tangas. 



Estábamos en una tienda comprando ropa cuando yo veía bikinis para el verano, el se acercó a mi y señaló unos bikinis que parecían tangas, y me dijo que sabía lo que hacía cuando el no estaba y que sería más cómodo para mí si usaba ese bikini. Lo que hacía era que cuando el no estaba conmigo yo metia los bikinis dentro de mis nalgas para que parezcan cacheteros y se ve viera más el culo. El se sentía muy orgulloso de tener una hija que estuviera tan buena y por eso me dejaba vestir así.
Los deberes de la casa nos los dividimos, por supuesto esta lavar la ropa. Hace algunos meses el no me dejaba lavar la ropa, el lo hacía, me pareció extraño ese comportamiento pero no me importó, así durante varias semanas cuando de pronto el estaba por hacerlo y le llaman del trabajo a lo cual yo decido ayudarlo sin preguntarle, mientras metía la ropa a la lavadora toque una de mis tangas y estaba húmeda, lo cual era raro porque me la había puesto días atrás, la acerque para verla bien y al olerla me di cuenta que era semen, pero de quien? Era domingo y por la mañana nos visitaron familiares, sin dudarlo pensé que había sido mi primo quien hizo eso, ya que anteriormente he visto a algunos primos masturbarse con mis tangas usadas, solo que esta vez había terminado sobre ella. No le di mucha importancia, solo son adolescentes calientes. 
Días después necesitaba algunos documentos para hacer trámites, le pregunté a mi papá donde estaban y me contestó que tal vez en su cuarto, empecé a buscar por todos lados hasta que de repente abrí un cajón en su armario y habían 2 tangas mías que yo use 2 y 3 días antes, rápidamente corrí a ver dónde yo pongo mi ropa sucia y no estaban. Entonces entendí que el día que encontré mi tanga con semen había sido el y por eso no quería que yo lavara la ropa, porque me daría cuenta de lo que el hacía. Mi cabeza explotó al saber que mi papá se masturba con mi ropa interior usada, durante semanas el lo estuvo haciendo y yo no sabía nada. Tuve un conflicto muy grande conmigo misma, por un lado no podía creerlo y me sentía enojada con él pero por el otro lado me calentaba un poco el saber que se la pongo dura a mi papá. 
Sin importar lo que sintiera tenía que saber porque el hizo eso y porque hasta ahora, que sucedió para llevarlo a hacer eso. Sinceramente mujeres no es algo que le falte a mi padre, no es el hombre más guapo o con mejor cuerpo pero algo tiene que despierta pasiones. Era recurrente que cuando salíamos alguna que otra mujer le coqueteara. Una de las reglas más importante para el, es no llevar mujeres a la casa, esto debido a que cuando era más joven se volvía muy incómodo por la mañana ver a una mujer en la casa y no fuera mamá, así que el entendió que nunca más lo haría. Hoteles, moteles o en casa de ellas pero no en nuestra casa. Parejas estables no eran su fuerte, por miedo a llegar a algo serio y que salgan mal las cosas y divorciarse de nuevo. 
Claramente el no estaba con nadie en ese momento, pero porque se enfoco en mi y no en alguien más? Tal vez fuera el tiempo que pasamos juntos en el confinamiento, el trabajaba desde casa y yo tenía clases online, 24/7 nos veíamos. Eh de decir que al no poder salir me vestía muy cómoda, y aveces iba a la cocina en cachetero o panties, shorts cortos e incluso en bra. Tal vez ahí se dio cuenta de con quién compartía casa, para mí no era nada raro que el me viera vestida así, infinidad de veces el me ha visto en bikinis enseñando el culo a todo mundo, nada que el no hubiera visto antes.
 
No le dije absolutamente nada respecto a lo que el hacía, solo esperé unos días más para confirmar sus travesuras, volví a buscar y esta vez encontre una tanga entre su ropa sucia y tenia semen. El esperaba a que yo me fuera a la escuela para masturbarse antes de ir a trabajar, yo deduje eso porque la tanga era la que me había quitado entes de bañarme en la mañana y aún tenía fresco su semen. Muchas cosas pasaron por mi cabeza en ese momento pero solamente cerré los ojos y lentamente con mi lengua empecé a lamer la tanga y saborear su semen, increíblemente estaba comiéndome la lache de mi papá. 
La decisión estaba tomada, provocar a mi papá!
Empecé a usar menos ropa en la casa, cuando el se quedaba trabajando en la noche, yo iba a la cocina en tanga y bra, me acercaba a él para decirle buenas noches o darle un beso en la mejilla. Al ser por la noche ya se veía cansado y no disimulaba bien al verme fijamente, podía sentir su mirada por todo mi cuerpo. Cada vez me ponía más cariñosa y tonta, me acercaba a preguntarle en que trabajaba mientras me sentaba en sus piernas, tiraba objetos de la mesa para tener que agacharme y recogerlos, poniendo mi culo entangado frente a el. A partir de ahí el empezó a masturbarse por las noches y no por las mañanas, supe esto porque cuando yo llegaba de clases las tangas no estaban húmedas pero olían a semen. Yo quería que el tuviera mis tangas frescas, así que con la excusa del calor le dije que mi ropa sucia la dejaría en el cuarto de lavado cada día para que mi habitación no tuviera mal olor por la ropa sudada. Trababa de tocarme o calentarme antes de que el llegará para dejar una tanga húmeda lista para que el la disfrute. 
Cada vez lo veía con mejor humor y una sonrisa en la cara al verme. Aprovechando eso, le comenté de ir a la playa juntos, ya que por la pandemia casi no salíamos juntos como antes, el accedió y le dije que tenía que comprar nuevos bikinis y quería que el me diera su opinión, de nuevo accedió sin problema. Estando ya en la tienda escogimos varios bikinis, al terminar le comenté que iría a ver ropa interior a lo que el respondió con "Si aquí te espero" yo lo tome de la mano y lo lleve a la sección de ropa interior, el claramente se le notaba nervioso al verme escoger calzones y bras, escogí algo de encaje y se lo mostré, me dijo que estaban lindas, yo le contesté que para que las compraba si nadie me las iba a ver, asi que respondió "no te preocupes por eso amor, llévatelas seguro te quedan increíbles" en ese instante me lancé para abrazarlo y decirle te amo papá. 



Solo teníamos en fin de semana en la playa así que llegamos el viernes por la noche al hotel, misma habitación pero camas separadas, después de cenar nos fuimos a dormir, ahí enfrente de el me quite la ropa, quedando ropa interior, me preguntó que si así me dormiría, tenía calor esa fue mi excusa para no ponerme más ropa encima, entonces recordé, la tanga que tenía puesta era una de las nuevas y rápidamente se la mostré. 
Papá! Mira que traigo puesto, como me queda? El solo asentó con la cabeza, la tengo puesta desde que salimos y es súper cómoda, es como si no la tuviera, tocala para que sientas le dije yo, el se negó en un principio pero de tanto insistir termino tocando tímidamente, incluso le temblaba la mano de los nervios, después de eso me fui a dormir dándole la espalda sin cubrirme, el tenía vista libre a mi cola. 
Al día siguiente ya estando en la playa mucho no paso, no pude mantenerlo enfocado en mi porque habían otras chicas a las que el veía, llegó la noche, aplique la misma de la noche anterior enseñándole mi culo con la excusa de que me había quemado y se me marco la tanga, me baje la tanga a medio culo para mostrarle la marca del bronceado pero parecía no surtir efecto, ya estaba rendida por esa noche y ya planeaba lo que haría mañana, me tiré en la cama con el culo al aire mientras intentaba dormir, cuando de pronto escucho la regadera, no pude evitar intentar verlo, lentamente abrí la puerta del baño y ahí estaba el, bajo la regadera con los ojos cerrados masturbándose mientras olía y se metía en la boca la tanga del bikini que me acababa de quitar, su verga es promedio tal vez 16-17cm sin ningún vello incluso sus huevos se los había depilado, las ganas que tenía por entrar ahí eran impresionantes, solo de imaginar que el me cogiera en la ducha me hacía agua la concha, pero era mi papá! Que pasaría si entrará ahí y decide hacerme suya? Sería su juguete sexual de ahora en adelante? O solo sería algo de una noche? Todo eso rondaba mi cabeza mientras imaginaba su verga dentro de mi, aparentando mis tetas y dándome nalgadas, al mismo tiempo diciéndome lo mucho que esperaba ese momento, poder cogerme al fin, hacerme su mujer. 
Cuando regresaba a la realidad, verlo ahí a unos pocos pasos, cada vez su respiración aumentaba más y más, masturbándose con una violencia que nunca había visto, mordía mi tanga, parecía que no podía más con las ganas de ir a mi cama y hacerme a un lado la tanga para penetrarme sin importarle nada. Su exitacion hacia que soltara algunos gemidos y murmullos de placer pero al darse cuenta se callaba para no despertarme, si tan solo supiera que yo estaba detrás de la puerta viendo y escuchando todo. Ya no podía aguantar más las ganas de entrar. Pero ante todo pronóstico no entre. Tenía miedo de su reacción, seguramente fuera de rechazo y vergüenza, yo era para el más una fantasía que nunca sucedería, no creo que el buscará cogerme de verdad. Y eso es lo que tenía que comprobar, el siguiente día sería el último antes de regresar a casa y ahí tendría que jugar todas mis cartas para saber si realmente quiere cogerme o solo es una fantasía más. 


Pronto la segunda parte
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Los quiero bebés 😘