Mi Odontóloga y yo - Parte II

Bueno, gracias a los comentarios y likes, y también los puntos de todos, voy a contarles la segunda parte: aviso, hay una parte más, o dos, dependiendo de cómo vaya ésta entrega, pero no termina acá.


Como les comentaba en la parte anterior, la relación estaba en un punto de noviazgo, casi. Las visitas a su consultorio eran cada vez más, y, si bien ya no teníamos la imperiosa necesidad de estar, de vez en cuando lo hacíamos, incluso con los pacientes afuera.

Laura me había dicho que se le complicaba mucho explicarle a su jefa el porqué de tener un paciente hasta 3 veces en la semana. Por cuestiones de facturación, no les convenía, puesto que tenía que cancelar turnos que eran pagos, y, por lo tanto, ella facturaba menos.

En uno de esos raptos de calentura, hice un juego de las llaves de mi departamento y se las di, para que no tuviera que viajar mucho ni tuviéramos que vernos solamente esos días. Ella no quería, pero aceptó; como yo viajaba permanentemente por trabajo, le dije que si yo no estaba, que usara tranquila mi departamento.

El departamento donde yo vivo está dentro de La Imprenta, es un departamento de tres ambientes, pero lo más lindo que tiene, es que, al ser moderno y amplio, tanto el comedor como el dormitorio están vidriados para afuera, por lo que la vista es muy linda, tanto de día, como de noche. Comento esto para contextualizar una de las sorpresas que Laura me dio al poco tiempo.

Yo tenía que hacer un viaje a USA por trabajo, eran 6 días dando vueltas por allá, pasar por México dos días y volver a Buenos Aires. Estando en USA, entré en una joyería para comprar un conjunto de aros, colgante y pulsera muy lindo, que no estaba tan caro, y que pensaba que era perfecto para ella. Era plateado con vivos celeste, pero me cebé y le compré un vestido ajustado blanco, unos zapatos de taco medios, y también un conjunto de Victoria's Secret, quería ir a por todo, si bien gasté mucho al ser algo tan nuevo, sentía que ella lo iba a apreciar. Por lo que guardé todo en las valijas y cuando volví, tenía la esperanza de dárselo al otro día. Antes de salir de DF para Ezeiza, le mandé un whatsapp, le dije que se había atrasado el vuelo y tenía que tomar uno con escala en Bogotá, no sé cómo me creyó, pero mi idea era llegar al departamento y dejarlo arriba del sofá.

Apenas llego a Ezeiza, me llega un mensaje de ella diciéndome que me extrañaba, pero que nos veíamos pronto, compré unos chocolates para ella, le compré cigarrillos y enfilé para el departamento. Era de noche, aproximadamente las 11 y media cuando llegué a la puerta de mi casa. Mientras subo en el ascensor, le mandé un mensaje que todavía estaba en Bogotá esperando nos asignaran vuelo, y ella me mandó un simple "te extraño". Abro la puerta normal, y la veo a ella en el sofá, en lencería, revisando el celular, las luces ténues, el cenicero lleno de colillas, vuelve la mirada en una sorpresa hacia mí, se para y viene corriendo, me abraza, se larga a llorar y me pide perdón por haberme utilizado el depto. Yo estaba con mi traje, las valijas en mano y la mochila cargada al hombro. Solté todo, la abracé, me dice que soy un mentiroso, que ella pensaba quedarse ahí para darme el regalo de bienvenida. Yo la beso, le acaricio el pelo y le digo que la extrañé, que le mentí a propósito porque quería darle algo pero dejarlo como sorpresa. Ella me mira, se seca las lágrimas, y empieza a besarme el cuello, me saca la corbata, empieza a desabrochar mi camisa, mi pantalón, y baja directo a chuparme toda mi pija, le dije que me dejara lavar, porque estuve varias horas arriba de un avión, y ella me dice que no, que no le importaba, quería chuparme la pija, tragarse toda la leche, que esperó el momento por 8 días, y que en esos 8 días no le bastaba con hablar por teléfono, o mandarnos fotos, o hacer videollamada: ella quería sentir mi pija, adentro de su boca, entre sus tetas, en su conchita, y en su cola también. Me sorprendí, la besé, y le dije que necesitaba bañarme. Ella me dice que fuéramos juntos, pero yo realmente necesitaba abrazarla más que otra cosa.
Accedo, nos bañamos juntos, ella empieza a jugar conmigo en la ducha, ver su cuerpo mojado mientras el jabón le bajaba por sus tetas, todo su abdomen bien plano y chiquito, hasta su conchita, y por la espalda hasta meterse en la cola, era algo que no podía creer, yo me sentía cansado, pero empezamos a tocarnos, cerramos el agua, nos secamos, fuimos a la cama, empezamos a besarnos, y todo pasó a un 69, degusté esa conchita mientras sentía que se mandaba toda mi pija adentro de la boca y rozaba sus pezones con mi abdomen, gemía, me mordía un poco, y me pidió que la cogiera fuerte...en ese momento la calentura me llevó, se subió encima mío, empezó a cabalgarme mientras sus tetas rebotaban, y yo sentía cómo se mojaba, cómo su conchita estaba muy caliente, y se mordía los labios mientras gemía fuerte, pero con su voz dulce, yo no aguantaba más, le dije que quería cogerla en cuatro, para ganar un poco de tiempo. La pongo contra el borde de la cama y empiezo a pasarle la pija entre las nalgas, despacito, y le meto toda la pija adentro de la conchita y se la dejo un rato. Ella me agarra del muslo, me empuja hacia ella, y me mira, se muerde los labios, y me pide que la cogiera muy fuerte. Empiezo a bombear, empieza a hacer el aplauso de foca entre mi pélvis y su cola, mientras ella gemía más fuerte, y se agarraba de las sábanas mientras me miraba y se mordía el labio. Ella me dice que no pare, que estaba por acabar, y yo también, pero le digo que tengo una mejor idea, que era de parados, ella contra la pared, yo agarrándola de los brazos mientras la cogía bien fuerte. Accede, bien viciosa, me mira y apenas le meto la pija adentro, ella empezó a gemir bien fuerte, yo ya estaba por acabar, y le comento, a lo que ella me pide por favor que se la dejara adentro, me dijo un "dámela toda bien calentita y adentro bebé", todo con su voz suave, mientras jadeaba. Yo me dejé llevar, y acabé todo adentro de su conchita, ella estaba a punto de acabar, y seguí hasta que acabó, se mojó mucho, empezó a tocarse y me besó apenas terminamos...ambos nos calmamos, ella se vistió, yo también, ya eran cerca de las 12 y media, y yo al otro día trabajaba desde mi casa, pero sólo a la tarde, para descansar durante la mañana.
Fuimos al comedor, ella prendió un cigarrillo y me abrazó, me dijo que iba a tomar la pastilla, que no nos preocupáramos, yo no estaba preocupado, en absoluto, de hecho, deseaba que se olvidara de tomarla, porque quería todo con ella. Mientras estábamos en el sofá, abrazados, le dije que le había comprado algo afuera, y ella me dijo que no era necesario. Le dije que después de los regalos tenía otra sorpresa, y procedí a mostrarle cada uno, empecé por el vestido, que le encantó, seguí con los zapatos, que también le encantaron, le di el conjunto de joyería, y no paraba de besarme, pero al mismo tiempo me decía que no le gustaba que le regalaran esas cosas, y por último le doy la lencería, y ella me miró fijo a los ojos, y me comió la boca. Acto seguido me dice que no es necesario, que esas cosas son caras, que no gastara plata, y yo la abrazaba y le besaba la mejilla y el cuello. Ella me dice que se lo iba a poner todo, se va a la habitación, y vuelve, con esos tacos medios, el vestido, toda perfumada, la lencería, y el conjunto de joyería. Su pelo estaba recogido, con una colita larga, en sus brazos finitos, sus tetas grandes, esas piernas perfectas, sin tatuajes en parte alguna de su cuerpo, y esa cola marcada, mientras me mira me dice: "cómo me queda?" mientras sostenía el cigarrillo en lo alto y me miraba, yo estaba en otra dimensión ya. Pero estaba agotado, no quería volver a coger, tenía ganas de dormir. Ella se sube arriba mío en el sofá y empieza a frotarme despacito, se deja el vestido en su abdómen y se corre el culotte, apoya su conchita contra mi boxer, y se toca las tetas. Yo me estaba quedando dormido pero estaba caliente de vuelta, pero la pude convencer de dormir juntos.

Al otro día, me levanto con un beso de ella, diciéndome que se iba a trabajar, y de mi trabajo me llamaron para decirme que me tomara el día, que no tenía que firmar nada, ni aprobar cosas. Yo igual me conecté y mientras ella trabajaba, yo estaba sacando dos pasajes a San Martín de Los Andes, para que pasáramos juntos una semana, cerca de fin de año.

Pasan las horas, y Laura me llama por teléfono, me dice que ya tomó la pastilla, que si podía quedarse conmigo hoy también, y le dije que sí, que obviamente, viniera y se quedara conmigo todo lo que quisiera. Apenas llega a casa le muestro la reserva, y ella me abraza, pero al mismo tiempo me dice que no es necesario. Yo le dije que era para que estuviéramos fuera de la ciudad, y le digo que no quiero sólo sexo con ella, sino que me sentía acobijado a su lado. Ella me abraza de vuelta, y oficialmente nos ponemos de novios, al mismo tiempo que le pido viva conmigo, que cancelara el alquiler y se mudara conmigo. Ella acepta y llama a la familia para contarles. Yo estaba viviendo un sueño: la mujer más hermosa que conocí, pervertida, dulce y encima me amaba. Todo fue perfecto por un tiempo, las visitas a su consultorio eran más llegada la noche, cogíamos y cuando volvíamos al departamento, a veces cogíamos en el garage del edificio, a veces en el ascensor, otras veces en el balcón. Y llegó el día de irnos juntos al sur.

Voy a parar acá y dejar ésta parte para la próxima entrega, si no se hace muy largo, y por otro lado para dejar un poco de suspenso. Se viene una tercera parte muy picante, pero creo la historia va a llevar otra parte final.

Agradezco a quienes hayan llegado hasta acá, sé que es caliente ésta parte pero no tan emocionante como la primera, pero prometo la próxima va a ser épica.

Abrazo y gracias!, si tiene muchas visitas, likes y comentarios, paso a la tercera parte!
Saludos

7 comentarios - Mi Odontóloga y yo - Parte II

CrossaA +1
Buenísimo! Leí toda la historia. Escribís muy bien y me imagino la mina q te enamoró... Debe ser hermosa
Ferelmillo14 +1
Muy bueno, van +10, no podés dejarnos así con esa intriga, ahora a esperar ansioso la próxima entrega de este relato
diegodaniel7878 +1
Es real?
bsasjohnny +1
Claro que es real, por eso lo cuento. Hubiera deseado no lo fuera, en la tercera parte, o la cuarta, voy a contar el porqué. Saludos
toy206
Buenísima la historia, se nota que ella tuvo la iniciativa. Leí la primer parte también.
diegoprey
Excelente amigo me encantó van 10pts y a esperar x la continuación.