Tuve sexo con: mi mamá (parte 2)

Bueno, veo que les gustó el primer relato con mi madre. Me siento bien de liberar eso de mi mente sin que nadie cercano supiera, pero que si hubiese gente que me escuchara. Pero ya, supongo que están aquí por más.
Como les dije en la parte 1, tuve sexo muy rico con mi madre de 40 años mientras que, en ese año, yo tenía 17. Nunca me llamó la atención el incesto, nunca vi a mi madre con deseo hasta que ella entró en su etapa de“mujer confiada y empoderada”. Empezó a vestirse como una mamacita, bajó de peso, era más feliz y todo indicaba a que salía con más hombres a escondidas. Uno de esos hombres fui yo en Rio de Janeiro, Brasil en la ducha de un baño del apartamento en el que mi papá nos hospedo por su trabajo. Perdí la virginidad con una experta y jamás se me va a olvidar sus exquisitos movimientos de culo con mi verga erecta metida en su chota. Lo curioso es que después de todo eso,nunca volvimos a tener sexo. Habíamos dejado en claro cuando terminamos de cogernos, que esto nadie lo sabría. Sobre todo, mi papá. ¿Entonces por qué no siguió el rico sexo? Simple, ella es mi mamá y yo era su hijo biológico. Claro,eso no nos detuvo a seguir hablándonos, ella contarme sus problemas y yo los míos, pero ahora era una conversación más de “pareja” que el de una madre y su hijo. Yo la veía como una mujer con problemas, sentimientos, sueños, deseos y necesidades, pero no sabía cómo me veía ella después de lo que pasó. Su comportamiento era demasiado normal. Como si hubiese eliminado ese momento de su memoria. Les haría perder el tiempo si les digo todos mis momentos eróticos con ella, porque no volvimos a tener sexo, pero si hacíamos locuras cuando mi papá se iba a trabajar. Nada que valga mucho la pena contar en un solo relato,todo se limitó a que nos besábamos acostados en su cama mientras ella me hacia las pajas, yo le metía los dedos a ella hasta que eyaculaba, me dejaba chuparle los pezones, yo la dejaba chuparme la poronga, me dejó tocar sus piernas de diosa que tiene, besar sus ricos y esponjosos muslos, etc. Tal vez, el momento que más recuerdo de esos, fue cuando ella estaba acostada boca abajo en su cama mientras miraba el celular, y como ella siempre vestía faldas cortas o, en este caso, vestidos veraniegos, sus piernas se lucían completitas, menos su culo que estaba tapado con el vestido. Me tiré sobre ella, besé y lamí sus piernas hasta que llegué a su culo, le corrí su calzón blanco y comencé a lamer su vagina con mi lengua. Yo sentía con mi cara sus glúteos y los espasmos que le daban cada vez que lamia alguno de los 2. Eso me prendía y la violé con mi lengua hasta que pegó un grito y mi cara quedó cubierta de su “cum”. Desde ese momento es que disfruto mucho del olor que desprende cuando está excitada. Ah y la vez en la que tiernamente me invitó en la mañana a su habitación a acostarme con ella porque tenía flojera y me chupó la verga por casi 30 minutos, solo porque quería enseñarme a como durar más en el sexo cuando lo hiciera con mi novia, aparte de aprender a besar a una mujer con lengua sin ser vulgar. Esa fue la excusa que me dio. Pero todo eso pasó durante los días que estábamos de viaje, así que solo les voy a contar una anécdota de nuestro penúltimo día en Rio.
No recuerdo bien que estábamos haciendo, pero estábamos en el centro de la ciudad o balneario de Rio de Janeiro. Solo me acuerdo que esto pasó en una tienda de ropa, porque mi mamá quería comprarse ropa nueva y yo también. Yo obviamente vestía mi tradicional camiseta con short y sandalias,pero por lo que les he contado, ya saben que mi mamá se preocupó el doble por su vestimenta. Esa vez vistió una especie de “enterito”. Ya saben, esas cosas que son una camiseta y falda todo en uno. El de ella parecía más bien una camisa y falda (no short) negras, pero el género del “enterito” era igual al delos jeans. Mientras que su pelo limpio y liso se movía con el viento y sus piernas estaban mejor que nunca, porque traía puestas estas sandalias que son con tacos altos y sus piernas se definían muy sexys. En internet aparece con“sandalias con taco chino”. Benditas sean esas sandalias y que mi mamá las compró. La cosa es que, mientras que comprábamos ropa, un negro brasileño chistosito empezó a hablarle a mi mamá. Le preguntó que buscaba, que talla era,pero me enojé cuando le preguntó su nombre, si estaba soltera y le tocaba el brazo derecho cada vez que podía o la tocaba en general porque podía. Todo esto lo vi de lejos porque yo estaba buscando cosas para mí, pero alcancé a ver a ese negro puto acosando a mi mamá y nadie hacia nada. Yo me interpuse en su camino y le dije a mi mamá si todo estaba bien. El negro este se enojó con mi presencia porque interrumpí su conversación. Yo con toda la rabia contenida me enojé más fuerte diciéndole que ella era mi madre y que no tenía por qué tocarla o preguntarle cuál es su talla. Esto último lo dije algo fuerte para que la gente de la tienda se diera cuenta que el tipo era un acosador y me apoyaran. Ya luego de tanta discusión le grité “¿la estas acosando?”, “¿por qué estas acosando a mi mamá?”. El tipo se fue de la tienda con toda la gente mirándolo feo mientras que se iba. Me voltee a preguntarle a mi mamá si todo estaba bien, si se pasó con ella o cosas así. Y creo que la gente de la tienda supo que yo era su hijo, porque era más joven y alto que mi mamá que es unos 1o 2 cm más pequeña que yo. Ella estaba algo temblorosa y fría, me pidió que estuviera con ella el resto del tiempo en la tienda mientras que buscaba su ropa. No pasaron ni 5 minutos de búsqueda cuando agarró una camiseta corta gris de estas que enseñan la pansa de las mujeres jóvenes, me pregunto si me gustaba y yo le dije que tenía que gustarle a ella, no a mí. Sus ojos, su mirada y su tono hicieron un cambio radical, se me acerco y me dijo con voz de mujer horny:“pues a mí sí me gusta”. Puedo jurar que terminó esa frase con un gemido leve.Seguido de eso, me agarró la mano y me llevó a preguntar dónde estaban los probadores. La chica a la que le preguntó le dijo que estaban en el segundo piso en una esquina. Ella sin soltarme la mano, me llevó hasta el segundo piso que estaba algo vacío y yo detrás de ella pensaba “ojalá me deje entrar al probador para verla desnuda”. Caminamos hasta los probadores que estaban en la esquina del segundo piso. Mi mamá me llevó hasta el probador más escondido que encontró, abrió la puerta de madera y entramos al probador los 2. Cerró la puerta, puso el seguro, tiro la camiseta gris al suelo y se me tiró a besarme apasionadamente como si no hubiese un mañana. Les juro que apenas pude reaccionar o hacer algo en ese momento. Trataba de seguirle el paso a sus besos, pero ella metía toda su lengua en mi boca como si me quisiese asfixiar,mientras que sentía y escuchaba sus fuertes respiraciones con gemidos leves.Cuando metió sus manos dentro de mi short para agarrarme la verga y masajearla, supe lo que quería que hiciera. Me bajé los shorts, los calzoncillos, pero ella no bajó a comerme la verga, por el contrario, me susurró muy excitada al oído “métemelo rápido y no hagas ruido”. Eso último, mientras que sentía su cara suave con mi cachete izquierdo, su perfume de marca y sus manos acariciando mi pene,rápidamente le bajé el cierre de su “enterito”, lo abrí y me llevé la sorpresa de que no llevaba puesto sus sostenes. Creo que de todas formas quería que follaramos ese día, porque habían pasado como casi 4 días desde que lo hicimos en la ducha. Esa sorpresa se me fue rápido de la cabeza y le bajé el “enterito”hasta sus pies y sus sandalias de taco chino (nunca se los quitó). Subí manoseando y lamiendo sus piernas, glúteos, caderas, panza hasta llegar a sus tetas. La volví a besar con lengua por lo caliente que estaba. Ella solo se movió un poquito para atrás como aguantando el besó que le di, mientras que me agarraba la cara con una de sus delicadas manos y la otra acariciaba mi nuca con sus uñas largas de mujer, mientras entrelazábamos nuestras lenguas. Fue el beso con lengua más largo que nos dimos, porque cuando dejamos de jugar con nuestras lenguas con nuestras bocas abiertas unidas, ella cerró su boca para terminar el beso mientras que soltó mucho aire al separar nuestras bocas que,al separarse, la saliva que compartimos y que cayó al suelo, fue mucha. Levantó su pierna izquierda, yo la tomé con mi brazo derecho, me agaché para tomar la camiseta y con ella cubrir la boca de mi mamá porque era seguro que iba a gritar. Le metí mi pene, ella me miraba con esa cara de dolor, deseo y satisfacción mientras que apretaba mi nuca con su mano por lo lento que se lo metía (aprendí mi error de la vez que se lo metí con fuerza en la ducha y le dolió). Una vez puesto mi pene dentro de ella, sintiendo nuevamente su vagina húmeda, caliente y un poco más abierta, ella juntó su frente con la mía,sintiendo su fuerte respiración y no dudó en mover su culo hacia arriba y abajo con mi pene duro sintiendo como chocaba con sus músculos vaginales. “¿Te gusta?”. Yo le dije súper caliente “me encanta mamita”. Tiró su cabeza para atrás con la boca abierta y los ojos en blanco a punto de soltar un gemido. Yo le tome la cabeza de nuevo y me vi obligado a que mordiera la camiseta que se trajo del primer piso para que gimiera tranquila. Empezó a hacer ondas lentas con su cuerpo de manera que me excitara más al ver la imagen de mi pene dentro de su vagina, pero yo solo veía sus caderas y panza apegadas a mí, moviéndose sensualmente como los bailes de reggaetón. Sus ondas fueron cada vez más rápidas y ella soltó un “AAHHH mi hombre mi héroe”. Supe cuál fue la excusa de llevarme a los probadores para que se lo metiera y eso me excitó demasiado, así que agarré su suave espalda con una mano y con la otra afirmaba su pierna levantada y, rezando por que la chupada de pene de 30 minutos de mi madre de hace unos días hiciera efecto, comencé a meter y sacar rápidamente para que se viniera rápido.
Luego de haber metido y sacado por unos 2 minutos, me di cuenta que no podía llenarla de amor (o de semen para los que no entienden),pero tampoco podía eyacular en su espalda o en el piso de un lugar público. Así que metí y saque muy rápido para dejar a mi mamá cerca del orgasmo, para luego parar y preguntarle ya exhausta donde eyaculo. Ella se quitó la camiseta de la boca y me dijo que aguatara hasta que la hiciera acabar a ella. Dándolo todo por hacerla acabar lo más rápido posible con esa posición que no me estaba beneficiando y rezando por no acabar dentro de ella, finalmente llegaron sus espasmos y contracciones indicando que lo logré. Me apretó mi culo con las 2manos y lo empujó hacia su cuerpo en lo que a ella se le pasaba el orgasmo.Supongo que fue para que su “cum” no se escapara, porque vaya que me hizo la tarea más difícil cuando terminó. Sentía sus jugos vaginales calientes cubriendo mi pene que estaba durísimo y con sus contracciones apretándome el miembro que estaba a punto de estallar, no ayudó mucho que digamos. Luego se me quitó toda esa molestia cuando mi mamá se quitó la camiseta de la boca y me dijo “ahora te voy a coger yo a ti”. Ella me sentó en la silla pequeña que estaba en el probador en el que cogíamos, se sentó dándome la espalda sobre mi pene, metiéndolo de nuevo en su vagina completamente mojada y volvió a mover el culo como me gusta. Debí durar como máximo 1 minuto en lo que mi mamá intentaba sacarme la verga con sus movimientos de baile. Sabía que me excitaban un montón y también porque ya llevábamos como más de 5 minutos dentro del probador y teníamos que salir. Unos cuantos ricos giros de culo y sentones sobre mi pene y ya estaba listo para acabar. Le di unos golpes suaves de aviso en la espalda de mi mamá y le dije “mamá ya me vengo” y en un santiamén ella se puso de rodillas frente a mí y se tragó todo mi pene para que yo pudiera eyacular en su boca(nunca se me ocurrió). La sensación que sentí al tocar la vagina de mi madre con mi pene fue muy diferente a la que sentí cuando se lo tragó completo.Sentía su lengua rozar la parte trasera de mi pene y sentía como la punta tocaba su garganta. Sentía como se movía con las arcadas que hacía y lo apretada que estaba. Pensé que sentiría sus dientes y que me dolería, pero no fue así. Eyaculé tanto como pude en su boca y para mi sorpresa ella se lo tragó. En mi cabeza pensé en el embarazo, pero ella me dijo que no puede quedar embarazada si mi semen se iba al estómago. Tomen eso como ustedes quieran hacerlo.
Luego de ese breve momento intenso de sexo que disfrute tanto, nos vestimos lo más rápido que pudimos para salir de los probadores.Luego surgieron unos pequeños problemas, como el olor a sexo que quedó en los probadores, que lo resolvimos saliendo de la tienda sin comprar nada para que no nos culparan. Pero luego estaba el hecho de que iban a ver a una madre y su hijo salir del mismo probador en el que estuvieron casi 10 minutos. Al final quedamos en que yo saldría primero y luego ella. Y los 2 problemas más importantes eran la vagina de mi mamá que aún goteaba y la camiseta que estaba toda babeada. Lo resolvimos todo muy fácilmente, ella tenía que quedarse a doblar la camiseta bien doblada para que no se notara lo húmedo y ella lo dejaría escondida en la sección de dónde sacó la camiseta. En cuanto a su vagina, pues ella vestía su “enterito” que tenía falda, así que contuvo el goteo con su calzón y como llevaba falda, no se le mojaría nada y no habría evidencia.
Salimos de la tienda lo más rápido posible sin parecer que éramos cómplices de algo, yo todavía tenía mi cabeza en el probador con mi mamá, perola mejor parte, es que a mi mamá se le quitó completamente el miedo del negro que la acosó en la tienda y estaba muy contenta y risueña. Yo le ofrecí mi gancho con mi brazo derecho como un caballero, ella me lo aceptó, abrazó mi brazo y nos fuimos caminando felices por el centro hasta el apartamento. Que puedo decir, supongo que se satisfacer a mi madre en la ducha, en los probadores y en los futuros lugares que lo hicimos, pero eso tal vez lo cuente después.

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