Fatima B se gana su contrato

Mi amiga y, buena infiel, Fátima B estaba en paro, y mis morbosos jefes estaban buscando un nuevo camarero para el bar, ahora que podían volver a abrir más tiempo tras el toque de queda. Esta daba muy bien el perfil, tenía experiencia de camarera y además es morbosa como nosotros. Se lo dije a ella y a mis jefes y decidieron que se pasara una tarde antes de la apertura para hacerla una prueba. Yo no la quise decir exactamente en qué consistiría esa prueba a Fátima B, pero la pedí que viniera sexy pues al jefe le iba a gustar y la daría más puntos para ser contratada.
Cuando pase por su casa a recogerla y monto al coche, sabía que iba a ser muy difícil que no la contrataran. Iba con un espectacular vestido blanco, con estampado de flores rojas y amarillas, de tirantes, hasta medio muslo, ajustadísimo, con un escotazo redondo por donde se la veía un espectacular canalillo, más que apetecible. Nos dimos un buen beso y la di varios besitos en su canalillo, antes de partir hacia el bar.
Al llegar allí estaban ya Lourdes y Fernando, mis jefes. Lourdes llevaba una camiseta gris, ajustada y un vaquero también ajustado. Tras los saludos protocolarios y charlar sobre su experiencia como camarera, llego el momento de la entrevista más importante. Me coloqué detrás de Fátima y la cogí de la cintura. La dije que todo muy bien por el momento, pero que a ellos lo que de verdad les importaba era lo morbosa que era, y que era el momento de demostrarlos que lo que yo les había contado sobre ella, era cierto.
Comencé a besarla el cuello y pasé mis manos por debajo sus brazos, agarrando sus tetazas. Fátima puso cara de sorpresa, pero rápido se comenzó a reír, pues estaba en su ambiente. Lourdes y Fernando se acercaron y comenzaron a besarse los tres. Fernando un par de veces bajo su cabeza pasando la cara por el canalillo de Fátima. El culo de Fátima también fue muy acariciado por todos.
Comencé a bajar la cremallera trasera del vestido y la iba besando la espalda que iba quedando a descubierto. Cuando estuvo totalmente desabrochada, la baje los tirantes, dejándola el vestido por la cintura. Sus tetazas iban cubiertas por un sensual sujetador blanco, de aro, con encaje, por donde se la veía su moreno pezón. El sujetador ajustaba maravillosamente sus tetazas, siendo el culpable de aquel impresionante canalillo. Pase mis manos por debajo sus brazos, para agarrárselas por abajo y movérselas. Lourdes fue la primera que quiso meter su cabeza en el canalillo, mientras yo las apretaba contra ella.
Fernando se sacó la polla del pantalón y comenzó a masturbarse. Cuando su mujer se retiró, yéndose al almacén, este fue quien metió su cara para jugar con las tetazas de Fátima. Esta le agarro la polla y comenzó a masturbarlo. La otra mano de Fátima acabo acariciando mi paquete, a la vez que giro su cabeza para besarnos. Me acabe poniendo al lado de Fernando y ambos jugamos con sus tetazas, mientras nos masturbaba. Sacamos sus tetazas del sujetador y se las comimos con un ansia tremendo. Tal era este que más de una vez se nos escapaba un mordisco más fuerte de lo normal y Fátima gritaba de dolor.
Fátima se acabó arrodillando para hacernos unas buenísimas mamadas. De vez en cuando se metía una polla entre sus tetazas haciendo unas cubanas de espectáculo. Cuando mi polla estaba libre, le daba golpes en la cara con ella.
Lourdes salió del almacén y venia desnuda, con una fusta y un arnés con un pollón negro bien grande. Fátima al verla se empezó a reír. Lourdes se puso entre nosotros 2 y la pidió a Fátima que se la empezara a comer. Comenzó a comerse el pollón de plástico, mientras seguía masturbándonos. Nosotros nos besábamos con Lourdes.
Lourdes la ordeno levantarse y quitarse el vestido, quedándose con el sujetador y un tanga blanco, de hilo, con encaje. La sentó en la barra y se colocó entre sus piernas. Se inclino y comenzó a comerla el coño. Fernando se colocó al lado y siguió comiéndola las tetazas. Yo me puse detrás de Lourdes, me puse un condón y comencé a follarla el culo.
Lourdes me pidió parar, pues ella se levantó y arrimo bien a Fátima. Aparto su tanga a un lado y comenzó a follarla. Fernando se subió a la barra y Fátima volvió a comérsela. Yo cogí una botella de jagermeister y rocié sus tetazas, lamiéndoselas. Lourdes golpeaba las tetazas a Fátima, con la fusta.
Nos fuimos a uno de los sofás. Colocamos a Lourdes tumbada y Fátima a gatas comiéndola la polla de goma. Yo me coloqué detrás de Fátima y comencé a follarla el culo y el coño. Fernando se arrodillo para meter su cabeza por debajo y comerla las tetazas a Fátima. Lourdes apretaba de vez en cuando la cabeza de Fátima para que se metiera su pollón entero viendo que esta tenía una buena garganta profunda.
Fernando se levantó, se puso un condón y me pidió dejarle mi puesto. Comenzó a follar a Fátima y yo me puse al lado de Lourdes para que ella se comiera mi polla. Lourdes ordeno a Fátima sentarse sobre ella. Esta lo hizo metiéndose la polla en su coño. Fernando se colocó detrás de ella y se la metió por el culo. Fátima lo estaba gozando mucho con la doble penetración. A mi Lourdes siguió mamándomela, hasta que Fernando y yo nos cambiamos los puestos. Yo la follaba el culo bien duro a Fátima. Lourdes no paraba de golpear las tetas de esta con la fusta. Mis envestidas hacían que las tetazas se la movieran mucho a Fátima, lo que puso muy cachonda a Lourdes y se las empezó a comer. Entonces Fernando se besaba con Fátima.
Me senté en el sofá y Fátima se sentó sobre mí, de rodillas. metí mi polla en su coño y Fernando desde atrás la volvía a follar el culo. Gracias a que esta se inclinó, pude devorar las tetazas a Fátima, una vez más. Al rato, Lourdes era la que estaba follando y azotando el culo de Fátima con la fusta. Fátima volvió a comerle la polla a Fernando.
Cuando este iba a correrse, Fátima se sentó en el sofá, le quito el condón y le hizo una cubana, lamiéndole el glande. Lourdes se sentó al lado, me quito el condón y me la comió a mí. Cuando Fernando se corrió, Lourdes le pidió que lo hiciera en las tetazas de Fátima y esta comenzó a comérselas llenas de semen. Yo me subí al sofá para que Fátima continuara la mamada de Lourdes. Cuando esta dejo las tetas a Fátima limpias, me bajé y comenzó a hacerme a mí la cubana hasta que también me corrí en sus tetazas y Lourdes volvió a comérselas. Fátima mientras nos limpiaba las pollas a Fernando y a mí con su juguetona lengua.

Tras unos minutos de relax, Lourdes preparo unas copas y brindamos por Fátima y su nuevo contrato.

1 comentario - Fatima B se gana su contrato

DnIncubus
Que relato y lo importante es que hay trabajo, algo muy necesario para estos tiempos, saludos gente!! 😎