Cobrando

Como todos los relatos estan basados en mis fantasías. 
Fuí a una casita improvisada que tienen los albañiles les lleve la factura firmada para que pudieran cobrar por la tarde y cuando me estaba por ir uno de ellos me tomo del brazo, otro me agarro por las manos y me dijo:

- Esto te va a gustar ya veras

Comenze a sentir manos en mis piernas sobandolas llegaron hasta mi pubis en donde se detuvieron uno de concha dijo:

- Mira la muy puta usa tangas y con este vestidito lo mas seguro es que quiere que todos la vean.

El que me sostenia por las manos comenzo a tocarme las tetas encima de vestido intentaba meter la mano para sentirlas mejor, los tres se lanzaron hacia mí, me tiraron en el catre y comezaban a meter dedos en mi concha, me pellizcaban los pezones, apretanto mis tetas se quitaron la ropa y me decian mira perra esta sera tu comida del dia de hoy, una de las vergas me la metieron en mi boca comenzando a hacerle una mamada, me decia:

- Sigue puta cometela toda, a que bien la chupas puta, eres toda una puta

Me tomaban de los cabellos y me hacia tragármela toda, estaban fascinados y no paraban de insultarme, de pronto uno de ellos me dijo:

- Te quiero coger puta

Me tiro en el catre, se subio encima de mi abrio mi piernas y de un solo golpe metió toda su pija gorda en mi concha lance un grito, comenzó a meter y sacar su pija rápidamente hasta que se vino, otro metió su pija de un solo golpe subio mis piernas en sus hombros y comenzo un mete y saca muy rápido, los otros dos me mordian las tetas, me tomo de la cintura y comenzó a hacerlo más rapido yo gritaba mientras ellos me decian:

- Vaya puta la que nos encontramos aquí, eres un gran puta te vamos coger como nunca te lo han hecho

El que me estaba follado también se vino, el último me tomo del brazo y me levanto y me llevo hasta donde estaba la mesa y me empujo sobre ella y me la metio de un golpe su enorme pija, un gran dolor me invadio grite trate de quitarme pero su fuerza era mayor, me tomo del cabello e incremento sus movimientos, no se detenia cada vez lo hacia más fuerte, puso sus dos manos en mi cintura y lo hacia más rapido, hasta que por fin termino, las piernas me temblaban, me solto y se fue a donde estaban sus amigos, me sostuve de la mesa pero mis piernas no tenian fuerza así que quede de rodillas y con las manos apoyadas en el suelo. Uno de ellos se levanto del catre y me dijo:

- Que bonita posición puta, eso quiere decir que quieres que continuemos

Uno de ellos me agarró y se acosto en el catre y me la metió, me apretaba la tetas pellizcaba mis pezones, alguien atrás de mí me enpujo hacia él y senti como una verga buscaba entrar también en mi concha, los dos comenzaron a moverse entrando y saliendo de mi agujero, los dos buscaban mis tetas, las apretaban las besaban, mordian mis pezones, luego una tercera pija se metía en mi concha, no pararan de cojerme, me daban más fuerte y por momentos se detenian, era increíble lo que aguantaban cojiendome, yo estaba agotada, cuando terminaron casi al mismo tiempo sudaba, me dejaron en el catre y me dijeron:

- Vaya que te gustan las pijas puta, has aguantado a tres sin ningun problema

Yo solo los veía, sin decirles nada, estaba cansada, uno se acerco a mí y traía unas cuerdas y un trapo, me amarro de las manos a la cama y con el trapo me tapo la boca, los tres albañiles salieron de la casa .
No supe en que momento me quede dormida, solo recuerdo que ya era de noche cuando escuche que alguien se acercaba se abrio la puerta pero no pude ver nada, era de noche y no teníamos luz, escuche risas y alguien dijo:

- Bien putita ya estamos de regreso ahora volverás a gozar con nosotros

Encendieron una velas y pude distinguir que ahora eran cinco los tipos que habian llegado.

- Que rica puta, te cogeremos entre todos, te vamos a romper toda
       
Todos estaban borrachos, todos comenzaron a pasar sus lenguas por mi cuerpo, luego sus dedos comenzaron a buscar mi concha, todos se fueron desnudando, uno a uno fueron subiendo en mí para meter sus pijas en mi concha, a veces una otras veces dos a la vez. Luego de horas de cojerme salvajemente las cinco pollas apuntaron a mí y comenzaron a mearme durante un buen rato.

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