Día salvaje

Como todos los relatos estan basados en mis fantasías.
Estaba en la casa de un amigo de repente aparecen dos perros enormes, yo estaba en el sofá acostada vestida con un vestido corto, ellos se me acercaron a mí y empezaron a oler mi concha y a lamerme, yo me asuste mucho y cuando intente sacarlos me gruñieron, me di vuelta para que no lo hicieran más y uno me empujó y quede boca abajo, siguieron lamiendome, me hacían cosquilla, en eso levanto la cola y uno me la mete de una por mi concha, pegue un grito, su pene gigante se inflama dentro de mí, me quise salir pero el perro me violaba sin parar, pensé que me iba a reventar, así estuvo por varios minutos hasta que acaba adentro, después de un rato se despego y yo quede tirada, cansada y dolorida, el otro perro se me acerco y también me la metió y también me dió sin parar hasta acabar, mi amigo se había ido hacer mandados pero no me había dado cuenta que había vuelto y al ver lo que el primer perro me hacía se escondió para seguir viendo, cuando los perros terminaron él apareció y me pregunto que había pasado pero se dió cuenta y me ayudó a limpiarme sino antes obligandome a hacerle una mamada.
Me fuí a casa, caminando como podía pase por una calle desierta, solo había una manada de perros, eran seis en total, de pronto estaba rodeada de ellos, sus ladridos me asustaron que al hacer un mal movimiento me tropecé y caí, se acercaron y comenzaron a lamerme, yo me asusté porque pensé que me morderian pero lo que querían era follarme, quede en cuatro, uno de los perros me ensarto a la primera y me cojio de manera salvaje, la tenía grande y gorda, al terminar otro me la clavo también por la concha, yo ya sin fuerzas,era más grande que el anterior y más dura, también me dió hasta acabar, así pasaron todos con sus enormes penes y me violaron llenándome con sus corridas, en una oportunidad llegue a tener dos pijas en mi vagina haciendo todo más doloroso, así estuve un buen rato siendo violentamente cojida por esa manada de perros.
Al otro día voy al trabajo, estaba limpiando y al agacharme para juntar la basura sentí que algo se metia debajo de mi pollera, me quede paralizada por el miedo y algo humedo y rasposo me estaba lamiendo mi concha, me di vuelta y era el perro de mi jefe, lo asuste pero se paro en dos patas y se me vino encima, me di vuelta para correr pero me abrazo con sus dos patas delanteras, me hizo caer de rodillas. De nuevo se metió debajo de mi pollera y de inmediato se monto en mi espalda. Me tenía agarrada de la cintura con sus patas delanteras y comenzó a moverse. Quise levantarme pero su peso me venció, su pija dura entro en mi concha y sentí un gran dolor. Le gritaba que me soltara, me cojia fuertemente, entraba cada vez más profundamente. Agotada por el dolor, mi cara dió en el suelo y comencé a llorar, el perro seguía empujando y cada vez su pija dura crecía y se ensanchaba más dentro de mí. De pronto sentí que me entraba algo más grande y volví a gritar de dolor al rato sentí como acababa, me quede quieta, sin moverme. Después de un buen rato, lo que tenía adentro comenzó a ponerse blando y el dió un tirón y se salio. Me acosté en el suelo asustada y muy adolorida y me quede así un rato largo, hasta que sentí que se acercó y comenzó a lamerme con su lengua mi concha y mis piernas, abri las piernas por que sus lamidos calmaron el ardor y dolor que sentía. Me fuí como pude a lavarme y al mirar mi concha me asuste, tenía un hueco grande, estaba en eso cuando apareció mi jefe que sin darme cuenta se me tiró encima y me la metió de una en mi concha, la tenía gruesa y gorda
- Vi como te cojia mi perro y yo no voy a quedarme a atrás
Mientras me violaba me agarró las manos y me las ato, me dió vuelta y me la volvió a meter está vez con mis piernas en sus hombros haciendo que entrara más profundamente, estuvo así un largo rato dandome duro hasta que acabo y se fue.
- Me encantó y a partir de ahora será así sino quieres que el vídeo de mi perro violandote sea difundido.
No sólo había sido violada por un perro, también por una manada de perros, el perro de mi jefe y esté. Los días pasaron, a veces me cojia mi jefe, a veces hacia que su perro me cojiera, otras me cojian ambos a la vez, hasta llevo amigos para que vieran como me cojian y que ellos también me violaran o traía a otros perros para que lo hagan.

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