Historia de un reencuentro

Viviana me contactó por Facebook a mediados de 2019. Ella estaba viviendo en el sur, en Madryn, desde hacía más de 20 años y pensaba venir a mi ciudad para las fiestas a saludar a su familia a la que hacía bastante no veía.
Esta comunicación con Viviana trajo a mi mente nuestro viaje de egresados, que es lo que les voy a relatar ahora.


Hicimos juntos toda la secundaria ... Viviana no era de las más lindas, pero lo suplía con simpatía y dos enormes tetas, y cuando digo enormes créanme que así eran.
Era morocha, de pelo revuelto, grandes ojos negros, estatura promedio y un hoyuelo en la pera que le daba un toque de distinción ... pero sus pechos eran dos uvas, literalmente hablando: grandes, en punta ... y ella los llevaba de buena forma.
Siempre tuvo el mismo novio, Juan, al que todos conocíamos a pesar de asistir a otro colegio ya que la buscaba cada tanto a la salida de clases.
Ella y yo nos habíamos hecho bastante amigos, de esos que se permitían pellizcarse, abrazarse o morder el lóbulo de la oreja ... obviamente cuando algo de eso pasaba - que era cada vez con mas frecuencia- terminaba en mi casa descargando con una paja bajo la ducha.

Terminando el último año y un par de semanas antes de nuestro viaje de egresados a Bariloche, asistimos a una fiesta con chicos del colegio para despedir el año, era en la casa de uno de nuestros compañeros de curso.
La noche venía con muchos tragos encima y me aparté hacia una baranda de la terraza para observar a unas chicas del otro curso.
- " ... dejá de mirar culos !!!..." me gritó Viviana acercándose hacia donde yo estaba
- " ... dejame morir en paz !! ... le contesté riendo
Ella vino y directamente se apoyó en mí, de espaldas ... su culo quedó pegado a mi pija y apoyando mi cara en su hombro tenía una vista privilegiada de sus tetas.
Tenía un vestido gris como con lentejuelas, corto, con un escote bastante abierto que dejaba casi la mitad de sus pechos al aire... una delicia.
Pasé mi brazos rodeando su cintura lo que hizo que se pegara aún más a mi cuerpo... sus tetas descansaban sobre uno de mis brazos... me sentía en el cielo.
Me convidó de su vaso un poco de daiquiri de durazno ... ninguno decía nada.
Empecé el jueguito que siempre hacíamos: morderle el lóbulo de su oreja... su piel se erizó al instante.
Clavó sus uñas sobre mi mano pero no dijo nada... esos minutos de juego y de hacerle sentir mi pija dura sobre su culo fueron una maravilla.
- "... voy a buscar otro trago ..." dijo apartándose y yendo hacia la barra.
Acomodé mi bulto para evitar que alguien se diera cuenta.
Viviana llegó y me dio el vaso, ella se puso una pastilla de menta en su boca y volvió a ubicarse sobre mí  dándome la espalda.
Esta vez la separé un poco y acomodé nuevamente mi pija. Viviana rió y me pegó un manotazo en el brazo, pero se volvió a apoyar.
Comencé a hablarle al oído y su piel se electrificaba.
" ... me convidás con una pastilla para sacarme el gusto a alcohol de la boca ...'" le solicité
- " ... no tengo más, ésta era la última... querés ?..." y mientras preguntaba giró su cabeza mostrando la pastilla entre sus dientes.
Acerqué mi boca a la suya y me pasó la pastilla. Los dos reímos.
La giré con mis brazos para que quedara frente a mí e imitando el gesto, mordí la pastilla ofreciéndosela para que la retirase.
Nuestras lenguas se juntaron ... por un corto tiempo ... pero ya estaba hecho.

No pasó nada más esa noche, había mucha gente y todos sabían que ella tenía novio, pero sabía que existía algo y que tendría que aprovecharlo durante el viaje.

Partimos para Bariloche cerca de las 7 de la tarde. El micro era de esos inmensos que existían por aquellos años.
En la parte delantera se ubicaban algunas madres y las mujeres ... los varones ocupábamos la parte media y algo de la trasera, pero como estaba el ruido del motor, nadie se ubicó en los asientos finales, solo un par de bolsos y maletas iban en ese lugar.

Después de varias horas de viaje y de jugar a las cartas, cantar y otras boludeces que uno hace a esa edad, el clima fue decayendo y algunos se acomodaron para dormir.
Viviana se acercó con café y nos pusimos a hablar en el pasillo, pero quienes querían dormir nos pidieron que nos callásemos.
Le hice señas y nos fuimos hacia los asientos del fondo, nos ubicamos y a pesar de ser Noviembre estaba bastante fresco, por lo que Viviana se levantó y fue a buscar una manta para taparnos.
Nos ubicamos tipo "cucharita" con lo cual mi pija quedaba afirmada entre sus nalgas. La abracé y nos tapamos.
El movimiento del micro hacía que no bajara la intensidad de mi dureza. Viviana se acomodó más pegada a mi y tomando mi brazo lo pasó por su cintura.
Ambos vestíamos conjunto de gimnasia - como casi todos para viajar más cómodos- y viendo que mi mano estaba calentita, levantando su campera y remera la ubicó directamente sobre su vientre. El contactó con su piel hizo que se estremeciera.
Comencé a jugar con su ombligo y ella reía, y cada tanto me corría la mano de allí, pero la calentura iba en aumento.
 No tardamos mucho en comenzar a besarnos, primero suavemente, después con intensidad.
- " estás bien ? ... me preguntó
- " ... claro ... y vos ?..." 
- " ... bien, con un poquito de calor ... " respondió
Se levantó y observó si alguien miraba o estaba cerca ... metió su mano por su espalda como buscando algo, y se volvió a ubicar, haciendo que bajara una pierna y escondiendo el apoyabrazos entre medio, ubicó mi otra pierna lo largo de los asientos, acostándose ella sobre mi.
Tomó mi brazo y volvió a meterlo bajo su ropa, acariciando su vientre.
Tiró la cabeza hacia atrás quedando su boca junto a la mía y continuamos con los besos.
- " ... me desprendí el corpiño ... acariciame ..." dijo casi suplicando, y mis manos tocaron por primera vez lo que tantas veces había imaginado en mis pajas ...

4 comentarios - Historia de un reencuentro

Seppuku_stafe40
noooooo!!!!!! no podes cortarlo ahi!!!! hdp!!!! jajajajaj
Venia muy bien, y espero la parte 2 y 3 y 4 jajajaj
martinfcd
Que buen momento el de la pastillita de menta, me despierta lindos recuerdos.
gust7387
Muy buen relato que lindo recuerdo
kramalo
muy bueno..! bien caliente.!