Estela cumplió 72 y recibió mujeres, hombres, de todo

El domingo fue el cumpleaños 72 de Estela, mi potranca pelirroja que si no tuviera 72 la dejaría embarazada. Es que la divina y fina me excita con sólo acordarme. Cómo me puse cuando la llamé ese domingo desde la cama con mi otra yegua Sandrita. Cuando Estela se puso chocha de mi llamado, me creció lindo pene. Pero mejor fue cuando la llamé el lunes a ver qué tal la pasó.

Y como Teli no guarda detalle de sus locuras, me contó todo de una, casi no tuve que preguntonearle. El domingo tipo 7 de la tarde, ni bola a la cuarentena por coronavirus, Estela recibió a sus amigachas María Teresa con su marido Juan Carlos, María Beatriz, Ana María y Liliana con su nuevo novio, María del Carmen con su mujer Mónica y otras. Y la familia de Estela, su marido Ernesto, sus hijas con sus maridos o mujeres (Cristina y Consuelo tienen). Todos muy elegantes, varias mujeres con cuero, María Teresa y María Beatriz campera, Moni campera y pollera de cuero, Annabella tapado de cuero pegoteada con Belinda, la hija mayor de la cumplera. Así Estela y los invitados pasaron fiestacha con picada, sandwiches de miga, saladitos y mucha cerveza, luego torta grandota y potente y hasta champagne. Y lo de siempre, Teresa pegadita a Estela convidándole un sandwich y de la manito, pasándole la mano por el medio de sus piernas cubiertas de su fina pollera. Estela le devolvía un piquito y mimos, justo al lado de Ernesto, que igual también la mimaba, le daba sandwichito y la manoseaba en la vagina. Estela excitada disfrutaba la previa de lo que aunque no sabía, veía venir una noche muy fuerte. Más si Ana y Lily estaban elegantes y con alguna droga para ponerla a Estela por las nubes.

Se fueron yendo los y las invitadas, las mujeres a puro besuqueo donde quisieran, boca, tetas, mano, mejilla. Annabella se fue con Beli a un hotel cerca, igual que Carmen y su mujer o Consuelo y Cristina con las suyas. Ana se fue a su casa al lado de Estela y Lily con su novio a la suya. Al fin María Beatriz también se fue y Estela se quedó con María Teresa y los maridos de las dos, que tomaron café y masas y luego siguieron a polvo y alcohol.

Y eso y toda la previa encendieron la locura. María Teresa besuqueó a Estela que gustaba pero quería con Ernesto, que nomás le dio un pico y le metió mano en la teta. Estela excitada quiso devolverle a su marido y mandó manaza en el pene de aquél que voló. Aprovechando que Erne estaba en otra, ebrio como los otros, Juan Carlos se le sentó a Estela, la abrazoteó, besuqueó bien y manoseó. Estela también se la devolvió, y borracha mientras tomaba lo que Tere le daba, gritó que quería sexo, así, sin especificar con quién.

Nomás María Teresa, su marido y Ernesto, totalmente desatados, la agarraron a Estela y la hicieron puré de la garchada. Teli fue aplastada contra la heladera por el corpacho de María Teresa, que la manoseó bien la pollera, la cola y tetas mientras la besaba atrás. Luego, la gordota le bajó sin miramientos la pollera, vio su bombacha negra fina y se la toqueteó, y Estela borracha gritó que se la bajara. Teresa le bajó la bombacha de una, sacó de su cartera un juguete lubricadito y se lo metió en el fondo de la cola, Estela gimió y acabó en su pollera.

"Chicos, quiero hacerlo así pero más cómoda", suplicó Estela con la voz ida por tanta cerveza y champagne. Y ahí entraron en acción los hombrazos: Erne y Juan la sujetaron enloquecidos, la llevaron a una pieza, la desnudaron, fueron desnudados por las locas y tras pelar sus salchichonazos, la penetraron y cogieron a Estela, uno por adelante y otro por atrás mientras la manoseaban bien. La finura y locura, los mil perfumes de Estela volaban a los dos que eyacularon semen a chorros en sus orificios. Pero no quedaron ahí: Juan la agarró y tras tirarla en la cama, se la dio por vagina llenándola de semen terrible, Estela largó buen flujo gritando chocha y ebria. Todo delante de María Teresa que se masturbó y acabó al aire, y Erne le chupó su concha. Y luego éste la agarró a su mujer y le dio arriba de la cama pero dos, uno vagina bien de semen, más por la cola y uno más con doble vía. Mientras, Juan acabó su semen en la boca de María Teresa y se la pasó chorreada por tetas y cola, rematándola con uno por vagina que Tere gemía genial. Y así estuvieron felices los cuatro cogiendo bien hasta media madrugada, cuando no dieron más y de la borrachada y garchada acordaron ir a dormir. Y estela, para hacer un cumple único, se acostó en pelotas con Juan, mientras María Teresa desnuda lo hizo con Ernesto. Pero ni se hicieron, tal era el pedo y el cansancio de una noche salvaje que se durmieron. Estela disfrutó de todo y para todo un superfeliz cumpleaños, bien lleno de buena leche.

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