Otro relato con Maria (real)

Buenas! Les traigo otro relato de los encuentros con María, para quienes no hayan leído el otro relato http://www.poringa.net/posts/relatos/3715130/Relato-de-cuarentena-real.html . Nos vimos dos veces mas pero eran encuentros de una o dos horas y queríamos buscar la manera de quedarme ahí a dormir y aprovechar el fin de semana entero cogiendo, todas las noches sexteando a pleno, volábamos de calentura todos los días. Un finde en el que yo no tenia mucho para hacer aprovecho para arreglar y quedarme ahí, ella tampoco tenia muchas cosas que estudiar ni clases de zoom así que nos venia perfecto a los dos.
Llego por fin el sábado y yo estuve con alta ansiedad todo el día, miraba el reloj cada dos por tres esperando que llegue la hora de poder vernos y matarnos cogiendo, y a eso de las 16 hs pase por el súper a hacer unas compras para el fin de semana e ir a su casa. Apenas entramos al ascensor otra vez nos matamos metimos una franeleada intensa, que lastima que son pocos pisos pero que ya íbamos dejando poco a imaginación para lo que iban a ser las próximas 28 hs en su casa. Ella estaba vestida normal, con un pantalón largo y un suéter ya que eran los primeros días de frió en buenos aires y bueno la gente suele abrigarse. Entramos y nos comimos otra vez la boca, pero de esos besos que uno suele dar cuando no ven a su pareja por mucho tiempo, lleno de deseo y pasión. Automáticamente tire la mochila al piso y mientras íbamos acercándonos a la cama con cada paso era una prenda que me iba sacando, las zapatillas, la campera, la remera. el cinturón, ella me sienta en la cama y me saca el jean con calzoncillo y todo. Después de todo ese tiempo desde la ultima vez que nos habíamos visto y toda la calentura acumulada por falta de acción la pija ya estaba al palo, me acuesta en la cama y me la empieza a chupar con una maestría increíble, jugando con la lengua pasando de arriba a abajo en el tronco y después se la metía hasta la garganta tratando de hacer fuerza para apoyar la nariz en el abdomen mio. Y no solo eso ver que cuando se la saca de la boca que este cubierta de toda la baba, todo eso me calentaba aun mas de solo mirarla. Así estuvo un rato hasta que me toco a mi, cosa que me fascina chuparle la conchita deliciosa que tiene y encima sin un pelo. La deje en bolas en cuestión de segundos, la guacha ya venia preparada, tenia un conjunto a juego que le quedaba jamón del medio. Ese día entre las cosas que agarre de mi casa, lleve una soga larga y siempre habíamos fantaseado con el tema de coger estando atados y jugar con las zonas erogenas mientras que la otra persona no pueda ni moverse, me animo a decir que lo psicológico acá juega fuerte y les juro que todo se siente aun mas; cuando la lengua o los labios rozan la piel, el cosquilleo es muchísimo mas fuerte y la calentura llega a niveles inimaginables. Cuestión que en menos de un minuto la tenia atada de pies y manos a los extremos de la cama y fui a buscar un hielo al freezer, la iba a volver loca con la lengua y ella lo sabia. Empece con un mordisco frió en la oreja que ya lanzo su primer gemido, y fui bajando poco a poco por la nuca hacia el cuello, después por los hombros, el pecho y las tetas y acá como se que le encanta que juegue con sus pezones que a esta altura ya estaban todos duros esperando el primer lenguetazo se los empece a comer sin dejar un centímetro sin recorrer, mordisqueando sus pezones y intercalando entre una teta y otra, como para que no se pongan celosas entre si. Ya María sin poder mover las manos y los pies movía su pelvis como para pedirme que deje de jugar y vaya al grano, así que le di el lujo y fui bajando con los mordiscos fríos a la conchita que me estaba esperando. Primero le fui comiendo todos los contornos y ya sentía ese calor latente que emanaba su vagina, y cuando ya la tuve un ratito así cosa que se desespere de no avanzar con lo que se merecía después de haberme chupado la pija con tanto esmero, le mande la lengua helada del cubito, recordar que todo ese tiempo lo tuve adentro de la boca, bien adentro de su concha que estaba hirviendo, ella casi acaba con eso, se retorció entera y me apretó con sus piernas como podía la cabeza por como la había hecho volar con eso ultimo. Claramente se la comi entera de arriba a abajo, adentro afuera y le mordía el clítoris y así hacerla acabar un par de veces y me empezó a pedir que se la meta, y sin desatarla me calce el forro y nomas se la puse de misionero. Le empece a dar fuerte un rato largo así en la misma posición hasta que no aguante mas y acabe. Quedamos extasiados después de por fin habernos sacado esas ganas del polvo que veníamos acumulando después de unos cuantos días. Ambos igual sabíamos que este no iba a ser el único polvo del fin de semana, ni del día tampoco. La desate y nos quedamos hablando abrazados hasta que nos levantamos y yo por mi parte tenia una reunión por internet y mientras volver a recargar pilas para coger mas y mas.
Hora y media después por fin termino esa reunión por videollamada, María me cerro la computadora, me agarro de la mano y me llevo a la cama,durante ese tiempo la loca ya tenia un plan para vengarse de mi por haberla vuelto loca mientras la tenia atada y la comía entera. Me puso en bolas, me acostó, me ato como ella y saco un antifaz que tenia atrás de la cama que a veces lo usa para dormir. Claro, ahora ella estaba con total control de mi y no solo eso yo no sabia que iba a hacerme porque no la podía ver, se puso a jugar con mi piel igual que le hice yo a ella, con el cuello, el abdomen y solita fue bajando por mi entrepierna a comerme los huevos mientras me pajeaba, pocas veces llegue a sentir la pija dura de esa manera, de tal manera que iba pegando saltitos y goteando el pre-seminal, me estaba volando la cabeza de la excitación, termino de jugar con eso, me la volvió a comer toda la verga llenándola de baba y se me puso arriba, sentir el calor de su conchita sin el forro de por medio es una sensación increíble, yo a todo eso seguía atado y con el antifaz puesto, sentía que flotaba en la cama. Me cabalgo despacito, con toda la pija adentro moviendo la cadera, sabia que no iba a durar mucho así que le pedí que me desate para tomar un poco las riendas yo. Cuando me saca las ataduras yo me saco el antifaz y la pongo en cuatro, le como la conchita y el culo, para poder bajar mi calentura un rato e ir abriendo la cola para cojerla por ahí, ya lleno de saliva fui dedito a dedito mientras le comía por el otro lado, y otra vez tuvo su hilo de orgasmos que la hicieron temblar entera, le fascina que le haga eso, cuando le pude meter los 3 dedos en el culo, saque la mano y le puse gelcito y le empece a meter la pija despacito hasta el fondo. Empece a moverme despacio de atrás a adelante y con mi mano fui buscando el clítoris para estimularlo mientras la cogía por atrás subiendo poco a poco mi intensidad hasta que acabe adentro mientras explotábamos una vez mas juntos.
Nos higienizamos, pedimos comida porque era tarde y paja cocinar y después de eso pusimos una película que duro literalmente 5 minutos, cogimos una vez mas y nos quedamos desmayados del sueño en posición de cucharita. Para no hacer largo el relato si quieren y les gusta puedo hacer otro mas del día siguiente en el que nos matamos cogiendo también.

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