Manoseada en el boliche

Un noche decidimos ir un boliche de la zona de Once, era una noche agradable y ella se vistió con una minifalda negra que le cubría lo justo y necesario para que su cola no se llegara a ver, una tanguita negra de red y arriba tenía puesto una prenda que era abierta como para que sus tetas queden casi al aire, solo no se le salían los peones para afuera por una cadenita que los mantenía tapados.
Entramos y nos dirigimos a la barra para tomar algunas bebidas, después de un rato fuimos hasta la pista y bailamos un poco, en realidad ella me bailaba y de a ratos se acercaba para franelearme el culo, eso me calentaba mucho y yo se lo hacía saber tomando su mano y haciendo que me acaricie la pija, después se alejaba y seguía bailando y mostrandome sus tetas y culo, en un momento se le acercó un flaco y le dijo algo al oído y ella se dio vuelta y le mostró como movía el culo, giró la cabeza y le hizo una sonrisa pícara y volvió a girar para moverle las tetas, pero está vez mucho más cerca, casi rozando al flaco, quien la tomó por la cintura y la pegó a su cuerpo apoyando sus tetas sobre el, ella le acarició el brazo y con un gentil movimiento hizo que le apoyara una mano en el culo, se dejó tocar el culo un ratito asegurándose de que yo la viera y después le dijo algo al oído le dio un beso casi en los labios y volvió hacia donde estaba yo, me beso y me preguntó si me había gustado lo que vi a lo que le contesté que mucho y que estaba al palo. Volvimos a tomar algo y ella ya estaba bastante cariñosa, entre el alcohol y el flaco con el que había estado hacía un rato, y parada delante mío me movía el culo sobre la pija y me pedía que la apoyara fuerte lo cual yo hacía mientras la tomaba del cuello y le giraba la cara para besarla. Ya muy calientes decidimos volver a casa, la tomé de la mano y nos dirigíamos hacia la salida, lo cual era bastante complicado por la cantidad de gente que había, en un momento pasamos por entre medio de un grupo de flacos y ella me apretó fuerte la mano y sentí que se frenaba, me di vuelta y me besó un rato largo moviendo su lengua de una manera salvaje como si estuviera chupando una pija y su saliva se le empezó a derramar por los labios, cuando terminó me dijo al oído con una voz temblorosa y sensual ME ESTÁN TOCANDO EL CULO, quedémonos un ratito acá y me seguía diciendo que no era uno, si no varios los que la estaban tocando, yo bajé mi mano y se la metí por delante sintiendo su concita húmeda y de repente sentí la mano de alguien que también le estaba tocando la concha, ella gemia en mi oído y me decía que bien se sentía, nos corrimos hacia un costado y los flacos nos siguieron, yo la solté (pero estaba a su lado ) y ella quedó contra una pared y los flacos la rodearon para manosear todo su cuerpo primero se puso de espaldas y le metían mano a su culo llegando a tocarle el clitoris mientras me seguía besando y diciendo lo que le hacían, otro empezó a tocarle las tetas y de repente eran varias las manos que se las tocaban y le apretaban lo peones yo también empecé a tocarla, pero fui a la concha, la cual estaba muy mojada, le corrí la tanguita y le metí un dedo mientras sentía como las manos de algunos también estaban por ahí hasta llegamos a meterle unos cuantos dedos a la vez y tan mojados salían que uno se le metió en el culo haciendo que temblara de placer la muy puta de mi esposa, a todo esto ella nunca los miró, siempre estuvo de espaldas y mirando hacia donde estaba yo hasta que en un momento se dio vuelta y agarro al que tenía más cerca y lo besó mientras sus manos se fueron a buscar las pijas, las cuales fueron ofrecidas, así mientras los empezó a besar y le seguimos manoseado todo el cuerpo, ella se dedico a pajearlos y dejar que su cuerpo sea bañado por la leche de los flacos y la mía, las quiso en todos lados, en el culo, las tetas y hasta a mí y a otro flaco hizo que le acabaramos en la cara. Cuando terminó de sacarnos la leche, se la pasó por todo el cuerpo como si fuera crema, se acomodó la mini y se cubrió las tetas me agarró de la mano y me dijo que ya nos podíamos ir, les hizo una sonrisa a los flacos y nos fuimos a casa donde la cogi sin que se limpié los lechazos que tenía en el cuerpo, primero se la metí en la concha que estaba todavía mojada y abierta y después le hice el culo que tampoco puso demasiada resistencia pero fue casi una violacion, la cual ella disfrutó. Cuando estaba por acabar me pidió que se le diera en la boca, que quería tragar leche y así lo hice, se fue a bañar y nos fuimos a dormir.
Espero que hayan disfrutando de esta nueva experiencia que vivimos y que les conté.

3 comentarios - Manoseada en el boliche

Cachencho73
Me encantaría manosear la y tirarle leche en su cuerpo mientras nos miras