Mi madre, mi amante

Este relato es sobre algo que me sucedió hace ya tiempo con mi madre, hace un año y varios meses más o menos.
Mi madre es una mujer de muy buen cuerpo, buenos pechos, hermosa, buena cadera y piernas y un muy buen culo, aún con todo eso jamás la había llegado a ver con otros ojos, solo la veía como mi madre. La cosa es que ella y mi padre ya no son tan amorosos como antes, siento que siguen juntos solo por cuestiones legales o algo así, y tampoco ayuda el hecho de que mi padre siempre esté viajando por el trabajo.
Como dije antes, yo jamás miré a mi madre con deseo de tener sexo con ella, lo curioso es que aún así ella me llegó a sorprender varias veces con el pene erecto como por 2 ocasiones.
La primera fue en mi cuarto, yo me estaba masturbando, pues según dicen si te masturbas antes de dormir te cansas y duermes mejor, el caso es que yo no tenía puerta en ese tiempo pues ya no servía la manija, ya teniendo rato masturbandome entra mi madre con algunas sábanas, yo no supe reaccionar, pues no tenía nada a la mano con que taparme, ni siquiera me tape con las manos, ella lo vio completamente erecto, no dijo nada, solo puso las sábanas a lado mía y se fue.
La segunda vez fue al terminar de bañarme, me estaba masturbando antes de salir y noté que por la prisa (me había levantado tarde para ir a la facultad) deje mi toalla en mi cuarto, no se porque ni que estaba pensando que lo único que se me ocurrió fue salir corriendo, con el pene erecto a mi cuarto, pero la sorpresa es que mi madre estaba afuera de mi cuarto, en la sala que está enfrente mía, volteo a verme y tampoco dijo nada, pero si se volteo rápido esta vez, yo solo entre rápido al cuarto y me tape.
Ahora viene lo interesante.
Un tiempo después de eso salimos de viaje a Ciudad de México, por el trabajo de mi papá, nos tuvo que llevar a mi y a mi madre, pues iba a durar bastante ahí, lo que se me hizo raro fue que mi padre se hospedó en un hotel diferente al nuestro, pero no le tome mucha importancia sabiendo como era su relación, así que mi madre y yo teníamos una habitación para nosotros solos, claro cada quien con su respectiva cama.
A partir de esos días mi madre se empezó a comportar diferente conmigo, la noté muy extraña.
Luego un día en el hotel ya de noche yo me meti a bañar, la regadera era también parte bañera o algo así, y la puerta deslizable noté que lograba transparentar un poco lo que se veía adentro (claro, solo se veía la silueta), pues en medio de mi baño entra mi madre, y yo tengo la teoría de que noto que tenía el pene erecto (si me estaba masturbando también en este baño) porque ella entró según para recoger unas cosas, pero en realidad dejó su celular oculto para grabarme después de la ducha, para lograr ver mi verga si yo seguía masturbando fuera de la regadera. Yo lo noté, pues buscaba mi cepillo de dientes, aqui fue cuando vi un punto negro entre muchas toallas y saco el celular de mi madre, y claro, veo que está grabando.
Yo en ese momento no se porque me prendí mucho, empezaba a pensar en que mi madre quería verme la verga, o que ella quería tener sexo conmigo, no se si porque no lo había hecho en años o no se, pero me prendía, por lo que deje el celular en su sitio, dejándolo lo más parecido posible a como mi madre lo dejo y me empece a masturbar. Después salgo del baño, y me voy a mi cama a “dormir”.
Después de un rato de fingir estar dormido, noto que mi madre va al baño, claro, a recoger su celular, en el momento en que se levanto a recogerlo, me empece a masturbar debajo de la sabana, para cuando ella volviera tener mi verga erecta, para que la viera otra vez, tardo un rato en regresar, se notaba mucho que se tocó viendo el video, y por ende se dio cuenta de que noté el celular mientras me bañaba, cuando dijo su mirada a mi sabana, notando que me estaba mastrubando tire la sabana al suelo, dejando ver mi verga erecta.
Ella no lo dudo, se empezó a desnudar enfrente mía, empezando por sus sosten, dejándome ver sus hermosas tetas, y después se quitó su panty dejándome ver su vagina.
Se puso de rodillas al borde de mi cama y empezó chupármela, nadie me la había chupado tan rico y delicioso como lo había hecho mi madre esa noche, ella me dijo “que bien que heredaste la verga de tu padre, es lo poco que extraño de el”, me hizo venirme muy fuerte, saqué mucha leche para ella, pero ella no estaba satisfecha, me siguió chupando la verga y me hizo venir unas 2 o 3 veces, aún sigo pensando en cómo le hice para que mi verga pudiera aguantar semejantes mamadas.
Despues se mete a mi cama y me empieza a tocar todo el cuerpo, como si lo deseara, pero no se la pude meter, pues según ella ya se había tocado con el video que grabó, y que no sabía si mi verga aguantaría su gran culazo esa noche, a lo que nos limitamos fue a acariciarnos nuestros cuerpos, pues ella durmió desnuda en mi cama, yo le rozaba la verga ente sus nalgas y le agarraba y masajeaba sus pechos, también le daba uno que otro beso en el cuello.
Despertamos la mañana siguiente muy contentos directo a ducharnos los dos juntos en la regadera, frotando nuestros cuerpos enjabonados, y después fuimos a desayunar a la planta baja del hotel.
Y eso es todo en esta primera parte, si apoyan mucho este relato les contaré el cómo tuve sexo con mi madre y otras aventuras sexuales que he tenido recientemente.

5 comentarios - Mi madre, mi amante

Osval2233
Que bueno lo que empezo espero la segunda parte
Pitujaro
Me dejastes al palo espero con ansias la continuacion bb
perrochupa +3
Yo también quisiera que mi madre tan siquiera me dé una mamada, porque yo era igual yo solo la veía como lo que es una madre pero ahora la deseo, quiero coger con ella