Se la di a una señora mayor vestida con cuero

Ya me conocen que cuando veo una ropa de cuero, sea lo que sea, mevuelvo loco. Así sea con una señora mayor. Porque eso fue lo que me pasó díasatrás acá en Carapachay, cuando fui a la casa de una vecina de la que me hiceamigo hace poco. La mujer, aunque tiene unos 70 largos, es linda, elegante,fina, muy dulce conmigo, y encima qué: usa campera de cuero.
 
Como la señora tiene buena onda conmigo por vernos en el barrio, resolvípedirle el teléfono, llamé y arreglé para ir a visitarla y llevarle algo paramerendar. Mirá qué buena onda que la tipa se ofreció pasarme a buscar por mi depto. Bárbaro, me vestí con mi campera de cuero, pulóver, pantalón nuevo, zapatos,todo de primera aunque sea una simple visita a una vecina. Porque tanto meexcita que hasta me puse buen perfume. Y acerté, porque cuando llegó casieyaculo de la locura. La señora, castaña de pelo corto, vestía hermosa camperade cuero negra, una fina cartera de cuero y encima estaba maquillada y deperfume fuerte. Repito, de unos 70 largos. Me la quería comer cruda, pero mehice el tonto, nos saludamos con un beso y fuimos para su casa, donde meconvidó con té y sandwiches de miga que ella sabe que me encantan.
 
Pero claro, la divina ni pensaba en que yo vuelo cuando veo cueroy perfume. Y encima los de miga con mayonesa, y encima yo de cuero y perfumado.Como siempre, me tenté y le pregunté por su campera, dónde la compró, si la usamucho, si tiene más cosas. Y aunque me dijo que sólo usa la campera, igualenloquecía con ganas de entrarle. Empecé a charlar con ella de un poco de todoy tocamos el sexo, y ella dijo que es moderna, que no tiene drama, que no seescandaliza. Aproveché y le conté re loco intimidades, que me masturbo,que megusta la ropa de mujer, que me excitan las lesbianas. Pero claro, nada de decirde cuero.
 
Hasta que no pude resistir. Cuando la señora levantó las cosas dela merienda, me levanté y la seguí, y eso que sólo tenía el pulóver. Y trasguardar las cosas, cuando quiso darse vuelta me le fui encima, la abracé yacaricié simulando mimos, y simulando le di un beso en la boca, pintada de rojofuerte. La mujer se rió, me cargó, yo la seguí y le pedí un beso más. Ella medijo sí y ahí sí le enchufé lindo pico. Imaginen, me re creció el pene bajo mipantalón, la volví a sujetar, la aplasté contra la puerta de la heladera, lamanoseé toda, ella no atinó a nada de la sorpresa, loco la besé y acariciétoda, le bajé a tirones su pantalón liviano, le vi la bombacha, me enloqueciólo fina, se la bajé de una y con el pene parado y firme se lo puse bien adentrode su cola. La señora gimió de placer, se rió, gimió, jadeó y me estimuló tantoque le di con todo, adelante y atrás, atrás y adelante. Genial la mujer gimió,me excitó, le di y eyaculé tremendo espeso semen que llenó bien su cola, y ellase hizo encima de flujo.


Y al estar toda mojada, cuando terminé se dio vueltapara ir al baño a lavarse. No pudo, la agarré, la tiré en un sofá del comedor,me le senté encima y, con el pene hecho un salchichón la penetré de nuevo, mela comí a besos y manoseadas, le dije cosas fuertes, me excitoneé con su cueroy acabé un montón de buen semen en su vagina. La mujer, a sus 70 largos acabóbien y luego de que me le levantara, me felicitó y me confesó espectacular."Ah, cuánto hace que no sentía un pene, y qué pene, corazón", me decía con su vozhecha bolsa de su edad. Sí, la voz hecha bolsa. Y sus agujeros también. Pero ganasde coger, eso lo tiene intacto.
 
 

2 comentarios - Se la di a una señora mayor vestida con cuero

tenshi_5
Magnífico relato, loco.
De 10 😎👍