De a cuatro es mejor (Parte I)

Al regresar de España teníamos una materia pendiente, una parejita divina físicamente con la cual habíamos hablado por WhatsApp y Skype pero que nunca habíamos tenido un encuentro cara a cara. Ambos eran unos fanáticos del cuidado de sus cuerpos, ejercicio y alimentación eran clave en su vida, a veces al extremo se podría decir.

Andrés era morocho, un poco más alto que yo y fisicoculturista en sus ratos libres. Mariela era castaña, también más alta y con el mejor culo que vi en mi vida, al menos por fotos era algo que impactaba.En fin, ambos estaban para el crimen.

Aunque prácticamente no tenían experiencia en intercambios, venían fantaseando por varios años sin atreverse a dar el paso. Supuestamente Mariela se sentía atraída de igual manera por hombres y mujeres, mientras que Andrés se definía como heterosexual.

Los conocimos en un bar, nerviosos los cuatro como en cualquier primer encuentro, ahí nos contaron de sus vidas y no pararon de hacernos preguntas sobre los encuentros que habíamos tenido, especialmente en España. La verdad es que no teníamos muchas cosas en común excepto que eran fanáticos de Dragon Ball jaja. Esto último terminó de convencerme y dejé todo en manos de Ceci. Ella directamente los invitó a casa a seguir conversando y tomar algo, lo cual en su caso sería agua o algún jugo ya que no toman nada de alcohol.

Se podría decir que esa noche no pasó de un primer acercamiento, ella estaba muy nerviosa y nosotros no queríamos presionar. Con las luces bajas y algo de música comenzamos a conversar para intentar liberar la tensión. Ellos estaban en el sillón nosotros en el puf por lo que era difícil avanzar.  Por suerte Ceci es una genia en esas situaciones y se maneja con una soltura envidiable. Se acercó y directamente le comió la boca a ella mientras nosotros mirábamos desde nuestras ubicaciones preferenciales. Fueron tan solo unos minutos hasta que Ceci decidió cortar el beso y pedirle permiso a Mariela para hacer lo mismo con su novio.

Me tocaba a mi hacer algún movimiento ya que ellos no iban a tomar la iniciativa. Tomé de la mano a Mariela y la traje hacia el puf para darles un poco más de espacio a nuestras parejas. En menos de un minuto estábamos besándonos y tocándonos por todos lados. Si bien no pude avanzar demasiado ella misma llevaba mi mano a su culo y me pedía que se lo apretara,pero no un simple agarrón, ella quería que me afirmara con todas mis fuerzas hasta que sentir algo de dolor. Esa noche no pasó nada más, pero me quedó dando vueltas en la cabeza eso que me había pedido, era algo nuevo para mi y sospechaba que podía encontrarme con alguna sorpresa más. Los que seguro avanzaron un poco más fueron nuestras parejas, justo al lado nuestro, sentados en el sillón ya sin la parte de arriba de sus ropas, Ceci se subía arriba de Andrés y se deleitaba con sus abdominales mientras él también tocaba todo lo que podía. Logré llevarme un recuerdo fotográfico de ese momento en donde se puede ver en primer plano a Mariela apoyada en el sillón y más atrás el culo de Ceci directamente sentada sobre Andrés, una locura.

De a cuatro es mejor (Parte I)

Habrá pasado media hora cuando nos pidieron disculpas diciendo que esa noche no podían hacer mucho más pero que habían pasado muy bien y que en la próxima querían pasar toda la noche con nosotros. Quedamos tan calientes que una vez que se fueron a su casa terminamos garchando comolocos toda la noche.

Habíamos creado un grupo de WhatsApp por lo que los siguientes días nos dedicamos a calentarnos los cuatro por ahí. Era evidente que Mariela se la quería coger a Ceci cuanto antes y yo me moría de ganas de verlo. Además, tenía una fijación con ver ese culo en ropa interior y estaba dispuesto a cualquier cosa para hacerlo.

Tuvo que pasar bastante tiempo para poder coordinar un segundo encuentro, pero iba a valer la pena. Como a los dos meses, directamente les escribimos un WhatsApp que decía: “Tenemos la siguiente propuesta, el sábado por la noche los vamos a ir a visitar, pero van a tener que hacer lo que les digamos.  Se van a quedar en ropa interior y nos van a esperar en su cama boca abajo para una sesión de masajes en pareja. Por favor pasen la dirección y ese día dejen la puerta de su casa sin llave”.

Aceptaron inmediatamente y comenzó la espera de unos días en donde todos teníamos una calentura que volábamos. Con Ceci entramos en la rutina diaria y llegamos al día clave sin haber planificado demasiado, solo pensábamos llevar un aceite para masajes e improvisar sobre la marcha. Llegamos en nuestro auto y efectivamente la puerta estaba sin llave, se escuchaba una música tenue de fondo que provenía del cuarto de arriba. Decimos quitarnos toda la ropa y subir directamente en ropa interior, de esta forma pensábamos romper el hielo de una y poner el ambiente lo más caliente posible.

Si bien teníamos una idea de lo que encontrarnos, lo que vimos nos dejó con la boca abierta y en mi caso tuve una erección al instante. Estaban los dos boca abajo en la misma cama, Andrés solo con un bóxer y Mariela con un conjunto de ropa interior negro divino. Si bien él tenía tremendo lomo, a ambos se nos fue la mirada al culo más grande que habíamos visto en nuestra vida. No es por alardear, pero realmente hemos visto un montón de culos, aunque nada como esto, el contraste entre esa cinturita y esa masa de carne lo transformaba en un señor culo. Y si eso no fuera suficiente, tenía un bronceado perfecto y una micro tanga que desaparecía entre las nalgas. Nada mejor para ejemplificar esto que con unas fotos reales de Mariela…

De a cuatro es mejor (Parte I)



De a cuatro es mejor (Parte I)


Nos pusimos manos a la obra y cada uno comenzó a amasar primero y besar después la espalda y el culo de estos dos caballos. Ceci cada tanto abandonaba el cuerpo de Andrés y se metía de cabeza entre las nalgas de Mariela. Ya no podíamos más, ella estaba empapada y yo tuve que sacarme el bóxer para liberar mi pija porque me estaba molestando.

Cuando quise acordar mi novia estaba arriba de Andrés, frotándose como desesperada mientras le comía la boca. Me encantaba ver como la pija de él ya se salía sola y se clavaba sobre la bombacha negra de ella.

Pero yo no me quedaba atrás, tenía apoyada a Mariela al borde de la cama y le pasaba mi pija por toda la concha, ella mismase había corrido la tanga hacia un costado para que viera lo mojada que estaba. Obviamente no aguanté más y comencé a lubricar mi pija aprovechando dicha humedad.

Mariela: como mecalienta que me hagan eso, pasámela toda así por la concha dale.

Yo: así te gusta? Ceci,no sabes cómo está de empapada, es una fuente la puta madre.

Mariela: estos dos ninos escuchan, mirá como le apoya la pija por dios, la tiene bien dura.

Ceci: perdoná mi amorpero me tiene como loca, me está comiendo las tetas y apoyando esta pija divinaen la concha, en cualquier momento me la clavo.

Yo había dejado los preservativos bien a mano porque sabía que con la calentura que teníamos podíamos mandarnos cualquiera, así que agarré la caja y la tiré arriba de la cama como para dar un mensaje a todas las partes. Enseguida Mariela agarró un forro y comenzó a abrirlo como desesperada, yo pensaba que era para mi pero lo que hizo enseguida me voló la cabeza. La hija de puta, le sacó el boxer a Andrés, y agarró bien fuerte el tronco de su pija pasándoselo por la concha a mi novia. Podía ver la cabeza de la pija ya húmeda apoyada en sus labios a punto de entrar, era evidente que los cuatro nos moríamos por verla bien adentro. Aproveché que se había alejado un poco y tomé el celular para sacar una foto de la escena que vale oro..

Ellos seguían con el juego ese y yo decidí volver a entretenerme con ese culo, hundí mi cabeza y comencé a comerlo con ganas. Esto hizo que por un momento soltara la pija de su novio y se abriera ella misma las nalgas para ayudarme a llegar más adentro con mi lengua.Yo ya casi no podía respirar pero era tan divino sentir como gemía cada vez que metía un poco más mi lengua que estaba dispuesto a dejar la vida en ese culo.

Cuando ya no podía más y vi que estaba empapadale saqué la bombacha y la di vuelta de golpe. Tenía unas tetas pequeñas pero que se notaban bien puestas debajo de su corpiño, por lo que no pude aguantarme ycomencé a besar sus pechos aún sin quitar su ropa interior.

Al lado nuestro Andrés ya se había puesto el preservativo pero aún no la cogía a Ceci, se había parado con ella encima y la empotraba contra la pared aún sin penetración. Pude notar como había perdido algo de potencia su erección, seguramente por el uso del preservativo.

Yo había comenzado a masturbar suavemente a Mariela, intentaba estimular su clítoris mientras metía de a poco uno o dos dedos. En ese momento me llevé la segunda sorpresa con esta pareja.

Mariela: me encanta pero no seas tan delicado, méteme sin miedo esos dedos…

Andrés: no tengas miedo Pablo que le gusta en serio, te vas a llevar una sorpresa jaja

Yo: ok les tomo la palabra

Directamente dejé de estimular su clítoris ya que notaba que su calentura pasaba por tener algo adentro, así que le metí dos dedos de una y comencé a jugar para estimular su punto G. A los segundos era una fuente de lo mojada que estaba aunque mis dedos comenzaron a bailar en su concha, había dilatado un montón, por lo que decidí agregar un tercero.

Mariela: así que rico…más fuerte, dale metelos más adentro sin miedo, ahhhhhhh

Agregué un cuarto dedo y avancé lo más que pude, solo una vez con una ex en una situación muy caliente había metido cuatro dedos hasta el fondo, no porque mi mano sea muy larga sino porque es bastante ancha. Pero ella seguía como si nada, ya sus gemidos eran una locura y sus flujos corrían por mi muñeca y mi brazo.

Andrés y Ceci habían vuelto a la cama y él le estaba practicando sexo oral mientras ella nos miraba, se veía que se había quedado con las ganas de que se la cogieran pero igual estaba disfrutando del momento.

Mariela: ahhhhhh,siiiii, mirá como me mojo toda. Ahora méteme la mano entera, no tengas miedo que aguanto.

Yo no tenía muy claro cómo hacerlo ya que mi mano estaba lo más adentro posible, o al menos eso era lo que yo creía. Intenté cerrar el dedo pulgar que era lo que faltaba pero aún así me parecía imposible, hasta que en un momento Mariela me sujetó de la muñeca y ella misma empujó mi mano bien adentro. Una vez que safó el hueso del pulgar mi mano se introdujo directamente hasta mi muñeca en su concha.

Tanto Ceci como yo estábamos asombrados de que alguien pudiera bancarse eso, pero no era solo que se lo bancara, al cabo de unos minutos de bombeo de mi mano adentro de su concha Mariela comenzó a gritar y acabarse como loca, mojaba mi brazo y las sábanas como si nada, era un placer verla gozar así.

Mientras se reponía del orgasmo, entre jadeo y jadeo nos confesó que era fanática del fisting pero era la primera vez que lo hacía con alguien que no fuera Andrés. Yo seguía con mi mano adentro ya que no tenía claro como sacarla sin lastimarla, solo se me ocurrió mover un poco los dedos mientras ella se reponía. Esto le encantó y nuevamente comenzó a gemir dejándose llevar por el momento.

Pero Ceci estaba re caliente y quería acabarse también, sujetó la cabeza de Andrés y lo obligó a continuar con el sexo oral. La noche recién había comenzado…



Fin de primera parte.

4 comentarios - De a cuatro es mejor (Parte I)

Pervberto
Vivencia muy caliente. Ojalá pronto disfrutemos de lo que sigue.
Blues_Local1
tremendo relato, muy caliente. dejo 10 y espero la continuacion!
solsport
muy buen relato!!dejo 10